PONTIFICIA UNIVERSIDAD CATÓLICA DEL ECUADOR SEDE SANTO DOMINGO
Dirección de Postgrados DOLOR HUMANO. VIVENCIAS DE ENFERMEROS EN UCI DURANTE LA PANDEMIA COVID-19. HUMAN PAIN. EXPERIENCES OF NURSES IN ICU DURING THE COVID-19 PANDEMIC
Articulo profesional previo a la obtención del título de Magíster en Gestión del Cuidado con mención en Unidades de Emergencia y Unidades de Cuidados Intensivos
Línea de Investigación: Salud y grupos vulnerables.
Autoría:
MÓNICA PATRICIA BERREZUETA BERREZUETA ANDREA PAOLA ANDRANGO SÁNCHEZ
Dirección:
Dr. JUAN PABLO MINCHALA AVILA
Santo Domingo – Ecuador Septiembre, 2021
PONTIFICIA UNIVERSIDAD CATÓLICA DEL ECUADOR SEDE SANTO DOMINGO
Dirección de Postgrados
HOJA DE APROBACIÓN DOLOR HUMANO. VIVENCIAS DE ENFERMEROS EN UCI DURANTE LA PANDEMIA COVID-19. HUMAN PAIN. EXPERIENCES OF NURSES IN ICU DURING THE COVID-19 PANDEMIC Línea de Investigación: Salud y grupos vulnerables.
Autoría:
MÓNICA PATRICIA BERREZUETA BERREZUETA ANDREA PAOLA ANDRANGO SÁNCHEZ
Juan Pablo Minchala Ávila,Mg. DIRECTOR DE TRABAJO DE TITULACIÓN Maricelys, Jimenez Barrera Mg. CALIFICADORA Verónica Karina Arias Salvador,Mg. f._____________________
CALIFICADORA Yullio Cano De La Cruz, PhD.
f._____________________
DIRECTOR DE POS TGRADOS
Santo Domingo – Ecuador Septiembre, 2021
iii
DECLARACIÓN DE AUTENTICIDAD Y RESPONSABILIDAD Yo, MÓNICA PATRICIA BERREZUETA BERREZUETA portador de la cédula de ciudadanía No.172547373-8 y ANDREA PAOLA ANDRANGO SANCHEZ con CI 171932003-6 declaramos que los resultados obtenidos en la investigación que presentamos como informe final, previo la obtención del Título de Magíster en Gestión del Cuidado con mención en Unidades de Emergencia y Unidades de Cuidados Intensivos son absolutamente originales, auténticos y personales. En tal virtud, declaro que el contenido, las conclusiones y los efectos legales y académicos que se desprenden del trabajo propuesto de investigación y luego de la redacción de este documento son y serán de mi sola y exclusiva responsabilidad legal y académica. Igualmente declaramos que todo resultado académico que se desprenda de esta investigación y que se difunda, tendrá como filiación la Pontificia Universidad Católica del Ecuador, Sede Santo Domingo, reconociendo en las autorías al director del Trabajo de Titulación y demás profesores que amerita. Estas publicaciones presentarán el siguiente orden de aparición en cuanto a los autores y coautores: en primer lugar, a los estudiantes autores de la investigación; en segundo lugar, al director del trabajo de titulación y, por último, siempre que se justifique, otros colaboradores en la publicación y trabajo de titulación.
Mónica Patricia Berrezueta Berrezueta C.I. 172547373-8
|
Andrea Paola Andrango Sánchez CI. 1719320036
iv
INFORME DE TRABAJO DE TITULACIÓN ESCRITO DE POSTGRADO Yullio Cano De La Cruz, PhD. Dirección de Postgrados Pontificia Universidad Católica del Ecuador Sede Santo Domingo De mi consideración, Por medio del presente informe en calidad del director/a del Trabajo de Titulación de Postgrado de MAESTRÍA EN GESTIÓN DEL CUIDADO CON MENCIÓN EN UNIDADES DE EMERGENCIA Y UNIDADES DE CUIDADOS INTENISVOS,
titulado “DOLOR HUMANO.
VIVENVIAS DE ENFERMEROS EN UCI DURANTE LA PANDEMIA COVID-19” realizado por el/la maestrante: Mónica Patricia Berrezueta Berrezueta C.I. 172547373-8, Andrea Paola Andrango Sánchez, con CI 1719320036 previo a la obtención del Título de Magíster en Gestión del Cuidado con mención en Unidades de Emergencia y Unidades de Cuidados Intensivos, informo que el presente trabajo de titulación escrito se encuentra finalizado conforme a la guía y el formato de la Sede vigente. Santo Domingo, 29 de septiembre del 2021 Atentamente
Juan Pablo Minchala Ávila, Dr Profesor Titular Principal II
v
AGRADECIMIENTO Agradecemos en primera instancia a Dios por darnos la vida y la oportunidad de seguir cumpliendo nuestros sueños, a nuestra madre del cielo la virgencita de la Nube por interceder y colmarnos de bendiciones en todo momento. Así también agradecemos a nuestros padres, abuelitas, hermanas, demás familiares y amigos por el apoyo incondicional ya que el trabajar y el estudiar ha sido un gran reto por conseguir nuestra superación personal y profesional que lo hemos superado con felicidad. A nuestros tutores Lic. Meilyn Parcon y Dr. Juan Minchala, por ser nuestros guías en el desarrollo y finalización de nuestro trabajo de titulación. Autoras: Mónica Berrezueta Andrea Andrango
vi DEDICATORIA Dedicamos este trabajo de titulación a nuestros padres por apoyarnos y aconsejarnos ya sea de forma presencial o a la distancia, así también por inculcarnos la valentía y coraje de mejorar cada día tanto en nuestra vida personal y profesional los llevamos en nuestro corazón. Así también este trabajo lo dedicamos a nuestras hermanas por ser el soporte y ayuda en este trascurso de preparación profesional, que sin ellas no lo hubiéramos logrado Autoras: Mónica Berrezueta Andrea Andrango
vii
RESUMEN El dolor humano es aquel sentimiento real, sentido o percibido únicamente por la persona que lo padece. La presente investigación trata de describir el dolor humano en base a las vivencias de las enfermeras en las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) en tiempos de pandemia debido al Covid-19. Ciertamente, dentro de las UCI de los hospitales, se ha recibido una gran cantidad de pacientes diagnosticados con Covid-19, muchos de los cuales han fallecido, lo que ha generado una experiencia de sufrimiento y dolor para el personal de enfermería al ser de los llamados primera línea. En este sentido, este estudio intenta describir la experiencia del dolor humano usando una metodología descriptiva y trasversal, a través de encuestas diseñadas por las autoras y aplicadas a 28 profesionales de enfermería de la UCI. Los resultados que se obtuvieron en las encuestas demostraron que en 17 enfermeras predominó el sentimiento de miedo y en 16 el sentimiento de tristeza que surgen ante situaciones de muerte, situaciones críticas en pacientes jóvenes y por proceso de intubación por Covid-19. La mayoría del personal encuestado refirió que estos sentimientos han sido afrontados a través de la fe, así como también, las percepciones de valoración a sus familias y a su propia vida, lo que ha su vez ha motivado a que modifiquen favorablemente aspectos personales y profesionales. Por otro lado, en este estudio se identificó que los profesionales de enfermería conocen la diferencia entre el sufrimiento y el dolor humano, ya que son sentimientos diferentes y que uno surge después del otro a pesar de que están presentes en todo momento Palabras clave: valor; dolor; sufrimiento; covid-19.
viii
Abstract Human pain is a real felling felt or perceived only by the person who suffers it. The present research tries to describe the human pain based on the experiences of nurses in the Intensive Care Unit (ICU) in times of Covid-19 pandemic. Surely, within the ICU in the hospitals, A large number of patients have been received for a diagnosis of Covid-19, many of whom died. Being an experience of suffering and pain for the nursing staff for being called first line. In that sense, this study attemps to describe the experience of human pain using a descriptive and cross-sectional methodology through surveys designed by the authors and applied to 28 ICU nursing professionals. The results obtained from the surveys, showed that in 17 nurses the feeling of fear predominated and in 16 the feeling of sadness that arise in situations of death, critical situations in young patients and the process of intubation due to Covid-19. Most of the staff surveyed reported that these feelings have been faced through faith or valuing their family or the meaning of their life more because it has allowed them to favorably modify in personal or professional aspects. On the other hand, in this research it was identified that nursing staff knows the difference between suffering in relation to human pain, since they are different feelings, the ones appear after the other even though they are present at all times.
Keywords: value; pain; suffering; Covid-19
ix
ÍNDICE DE CONTENIDOS
1.
Introducción........................................................................................................ 1
2.
Revisión de Literatuta...................................................................................... 10
3.
Materiales y Métodos ....................................................................................... 31
4.
Resultados ......................................................................................................... 34
5.
Discución ........................................................................................................... 40
6.
Conclusiones ..................................................................................................... 42
7.
Referencias Bibliográficas ............................................................................... 43
8.
Anexos ............................................................................................................... 50
1 1.
INTRODUCCIÓN
A lo largo de la vida se presentan diversas situaciones que son complejas de afrontar, tal como el dolor, sufrimiento y muerte, las cuales desde la perspectiva de salud y analizadas desde el contexto de enfermería se concentran en la proporción de los cuidados necesarios para prolongar la salud e incidir en la mejora de la calidad de vida, en la que se considera que dichos profesionales conviven a diario con el dolor humano, y este pasa a reflexionar como una de las experiencias de mayor impacto en su desempeño profesional (Santiago, 2020). En diciembre de 2019 se produjo en China un brote infeccioso provocado por un nuevo tipo de coronavirus (SARS-CoV-2) que posteriormente la Organización Mundial de la Salud denominó enfermedad de covid-19. Este nuevo patógeno se propagó rápidamente a otros países, provocando una pandemia mundial con graves consecuencias sanitarias y sociales. El foco principal de esta enfermedad se trasladó rápidamente a Europa, siendo Italia y España inicialmente los países más afectados, con gran número de casos y muertos. En pocas semanas, entre los meses de marzo y mayo de 2020, el número de contagiados y fallecidos en todo el mundo desbordó los sistemas de salud, por lo cual pasó a declararse como pandemia (Maguiña, Gastelo, & Tequen, 2020). En este contexto, el colectivo de profesionales sanitarios, como elementos principales de la lucha contra esta enfermedad, llevó a cabo una labor fundamental, aunque desafortunadamente, junto con las personas mayores o con patologías crónicas, se han convertido en el foco principal de la pandemia. Varios profesionales de primera línea han sacrificado su propio bienestar, y el contagiarse, y saber de la muerte de compañeros les ha causado una gran presión psicológica y causante de dolor humano en estos profesionales.
2 El dolor está acompañado del sufrimiento y este por la ansiedad, el miedo y la preocupación por la pérdida de personas con covid-19 en una unidad de cuidados intensivos, también nos referimos a las condiciones laborales que están expuestos el personal de enfermería como es la elevada presión asistencial, colapso del sistema sanitario, el no existir garantías de bioseguridad, estrés y preocupación permanente en sus familias (Baeza y Ragni, 2020). Esto considerando que ciertamente el dolor es uno de los principales estresores que influye en el desempeño del personal de enfermería, ya que estos juegan un papel relevante en la pandemia en el cuidado directo de pacientes con covid-19, dejando a un lado el distanciamiento ante la imposibilidad de contacto con el fin de hacer frente a la situación actual. Por lo cual, la pandemia actual por covid-19 ha evidenciado la necesidad de que se disponga de personal profesional de salud preparado física y emocionalmente en torno al cuidado y manejo de dolor, esto ha generado la necesidad de que se desarrolle el presente trabajo de investigación, de manera que se describe la percepción del dolor humano desde la experiencia del personal de enfermería, de manera que se permita conocer la calidad del cuidado y la incidencia de este dentro de las actividades de trabajo y otros inconvenientes derivados que puedan afectar el desempeño del personal de enfermería. Esto es de suma importancia ya que mediante este se realiza una valoración del dolor desde el ingreso a la UCI, y el manejo que lleva el personal de enfermería ante el dolor, lo cual se apoya en el conocimiento de los mismos y capacidad de enfrentamientos de las situaciones que se derivan en los pacientes por el covid-19 de forma que se mitigue el dolor de forma general.
3
Antecedentes El dolor se considera como unos elementos el cual es percibido y comprendido por parte de las personas que lo atraviesan, para ellos es importante que este sea afrontado con madurez y seriedad, ya que es parte del recorrido de la vida. El dolor en ciertos casos puede considerarse como un obstáculo en las metas y proyectos, lo cual no representa una incidencia negativa en las actividades diarias, sino mas bien se traduce como un aspecto esencial para que la persona logre tener un afrontamiento más efectivo y a su vez alcance la realización profesional, personal e inclusive mejore el desempeño de sus actividades (Gálvez y Naranjo, 2017). Actualmente en la sociedad el dolor se ha mantenido como una visión general dentro del mundo, al cual le asignan un valor positivo o negativo, además de un espacio en el cual se realicen acciones voluntarias y espirituales a favor de otras con la intención de minimizar su sufrimiento, lo cual se considera como un fin valioso de manera general. En el ámbito religioso, el dolor es visto desde el contexto espiritual, por lo cual se basa muchas veces en la religión, tal es el caso del judaísmo, en el cual este se considera como un mal que no tiene explicación para la persona que lo está atravesando y se toma como un castigo propio el cual se relaciona con la culpa. Desde el punto de vista musulmán, el dolor es visto como una prueba de que Alá no permite que las personas escapen de su realidad y afronten las consecuencias de sus acciones. Por otra parte, en las culturas orientales, como el budismo e hinduismo, el dolor es merecido por la condición humana y se elimina una vez que se haya cultivado la sabiduría y espiritualidad personal (Gálvez y Naranjo, 2017). En la actualidad Gamboa (2011) afirma que el dolor se considera como una experiencia sensorial y emocional en la cual se genera una experiencia para los individuos que en
4 ocasiones se parte del aspecto social y cultural (p 671). Ciertamente se puede hacer una reflexión y afirma que el dolor es distinto al sufrimiento, puesto que es una función de alarma en la que en diversas ocasiones se busca una escapatoria ya que se tiene miedo de la amenaza; el dolor de esta manera proviene del sufrimiento el cual nace debido al debilitamiento de la vida, el dolor pasa a ser como un aspecto arbitrario en el cual no se tiene la capacidad de darle un sentido, por lo que este genera conductas desde la parte psicológica, social y espiritual de la persona (Pro, 2020). A lo largo de la pandemia por covid-19 el personal de enfermería se ha visto vulnerable en torno a los sentimientos de angustia, temor, preocupación, ansiedad, depresión, por la misma muerte y entre otros, por lo que vivir en la actualidad ya es un proceso de dolor, el cual se va incrementando debido al miedo y al sufrimiento mismo. Para (Pro Velasco, 2020) la incidencia en el dolor se centra en diversos factores, por ejemplo, el quedarse sin empleo y no tener lo necesario para llevar una vida digna, tener una dolencia concreta o el presentar síntomas determinados como pueden ser los propios de la enfermedad del coronavirus, o el ingresar a una área de cuidados intensivos para brindar cuidado directo a pacientes graves con diagnóstico de covid-19, y el dolor de ver que las personas fallecen o que este personal de salud a futuro no conoce si se contagió de dicha enfermedad, esto se le denomina perspectiva negativa o incierta del futuro que conlleva a un sufrimiento actual. Dicho dolor se encuentra asociado al manejo del sufrimiento, el cual puede invadir a las personas y generar un sentimiento aún más grande el cual afecta a la persona que está sufriendo (Bejarano, 2016). Montero (2020) menciona que, para los profesionales de la salud se ha trabajado en diversas situaciones externas, las cuales generalmente hoy en día son las personas afectadas por covid-19, de sus familias y de nuestros propios compañeros, en un escenario en el cual la
5 experiencia los hace tener mayores temores que se relacionan con las dudas y las debilidades de los seres humanos como tal, y por tanto desde el punto de vista profesional se refiere a un dolor desde su visión en el que se tiene que adaptar al entorno de sus actividades de forma general (Baeza y Ragni, 2020).
Delimitación del problema El dolor humano es un sentimiento que va de la mano de la experiencia sensorial y emocional, durante esta pandemia el personal de enfermería ha experimentado diversas emociones como ver morir a pacientes con covid-19 y de familiares quebrantarse de dolor ante la pérdida de un ser querido, y más aún el temor de contagiarse y contagiar a sus familias de esta enfermedad o el tener que después de un turno ir algún lugar lejos de sus familias por protección y miedo a la vez. El dolor subjetivo se refleja en las reacciones o emociones por parte del personal de enfermería frente a la situación que se vive en el mundo actual, en un estudio cualitativo expresaron “Al llegar al turno me notificaron que por la contingencia debía cambiarme de servicio a donde están los pacientes con covid-19, no tenía idea de cómo colocar y retirar las prendas de protección, pero aprendí, bañarse varias veces durante el turno, me mudé al albergue por protección de mi familia, para no contagiarlos. Todos los días llego al trabajo con una sonrisa y sin miedo a demostrar mis conocimientos y a pedirle a Dios que pase pronto” (Minchala, 2020). Durante la crisis de covid-19 el personal de salud ha sentido miedo, rechazo social, ansiedad, ha presenciado la muerte por esta enfermedad, es así que se ha destacado el dolor subjetivo ante estas adversidades (Montero, 2020).
6 En China se pudo evidenciar factores asociados a salud mental en trabajadores de salud expuestos al virus, detalla que el personal de enfermería de nivel técnico tuvo mayores síntomas de depresión (50.4%), ansiedad (44.6%), insomnio (34%) y angustia (71%). La depresión severa entre médicos y enfermeras fue de 4.9% y 7.1%, entre hombres y mujeres de 3.4% y 5.8%, el insomnio severo fue mayor en trabajadores de primera línea, que en los de segunda línea. En un estudio cualitativo, los profesionales de enfermería pudieron expresar su salud personal, miedos y escasez de equipos de protección: (“Espero no ser infectado por el virus”; “Hay escasez de equipo de protección personal… Me siento realmente ansioso y asustado”), contagiar a sus familiares (“Me quedo en un hotel… tengo miedo de enfermar a mi familia”); además expresaron necesidades de existencia (Gutiérrez M et al., 2020). En Wuhan, se pudo evidenciar que alrededor del 30% de las enfermeras y de los médicos sufrieron algún tipo de trastorno mental moderado o severo, accediendo el 50 % a diferentes recursos de salud mental. Así mismo, el 36.3 % recurrió a materiales de salud mental como libros; el 50.4 % utilizó métodos de autoayuda disponibles en medios de comunicación, y el 17.5 % tuvo la oportunidad de una intervención individual (López, 2021). Según en el estudio hecho por el Instituto Nacional de Salud del Salvador menciona que el personal de salud mexicano expuesto a enfermos con covid-19, han presentado episodios de ansiedad e insomnio. Gutiérrez M et al., (2020) en su artículo científico afirma “Empecé a tener episodios de ansiedad, de insomnio”, “He tenido momentos de ansiedad bastante altos, al grado de que siento la necesidad de salir corriendo. El hecho de portar el equipo (de protección) durante ocho horas es de verdad algo muy complicado”.
7 La tristeza, la depresión, la ansiedad y el miedo que generan el sufrimiento y la muerte de un paciente son algunas de las reacciones más comunes en el personal de salud y en algunas ocasiones un sentimiento de culpa y autorreproche, constituyen un sentimiento de sufrimiento Por tanto, aunque el fenómeno de dolor es importante para todas las personas, es especialmente relevante para el personal de enfermería, dado que, este sentimiento se encuentra muchas veces presente en su ámbito de trabajo. Esta situación tensa se hace más plausible en las enfermeras, ya que la muerte de un paciente les hace tomar conciencia de su propia finitud y de las pérdidas que han sufrido. Generando en este sentido conductas de evitación y altos niveles de ansiedad que pueden derivar en conflictos emocionales que impidan o dificulten la labor de estos profesionales. Es así que, las enfermeras, ante la pandemia por Covid-19, deben enfrentarse por un lado al dolor, sufrimiento y muerte del enfermo, y por otro, a sus propios miedos con respecto a este tema. Puesto que, el contacto con el dolor, la agonía y la muerte es particularmente frecuente en el profesional de Enfermería que, por lo general, es quien mantiene una relación más estrecha con el paciente y la familia durante el proceso de cuidado y en últimos casos de muerte. Es por ello que se busca desarrollar la presente investigación, de manera que se conozca la percepción del dolor del personal de enfermería desde su experiencia en la atención de pacientes contagiados por Covid-19 y que se encuentran dentro de la UCI.
Formulación y sistematización del problema 1.1.1. Formulación del problema.
Como se describe el dolor humano en el personal de enfermería en uci durante la pandemia covid-19
8 1.1.2. Sistematización del problema. Preguntas específicas.
¿Cuál es la diferencia entre el dolor humano y el sufrimiento?
¿Cuáles son los factores que desencadenan el miedo, sufrimiento y dolor?
¿Cómo afronta el dolor humano el personal de enfermería en la terapia intensiva durante la pandemia de covid-19?
Justificación de la investigación El cuidado de las personas supone un gran desafío para el personal de enfermería, considerando que los profesionales de esta rama tienen como objetivo el cuidado de la salud de cada una de las personas existentes dentro de la comunidad a lo largo de toda su vida, lo cual permite que la profesión tenga un sentido más amplio, transmita emociones y vivencias que posibiliten la satisfacción de las necesidades más fundamentales mediante dicha acción (Guedes & Santa, 2016). El dolor es reconocido como una experiencia sensorial y emocional desagradable, que para el personal de enfermería a sido una experiencia subjetiva que puede evaluarse por la declaración de quien lo sufre, empleando instrumentos que estén en función de la situación de cada uno de los pacientes (Marrero & García, 2019). Además de que este se considera como uno de los primeros factores de estrés que inciden en el bienestar del personal de enfermería , por lo cual es prioritario conocer la percepción del dolor, de manera que se reconoce la incidencia del mismo en la salud mental como uno de los factores muy importantes, para así poder establecer acciones que contribuyan en asegurar condiciones laborales óptimas y, no solo para calmar los efectos del actual problema, sino también en preparación para futuros episodios para los cuales aún no se está preparado.
9 El identificar e intervenir en la percepción del dolor humano en el personal de enfermería se hace necesario para mejorar la calidad de vida. Además de que es fundamental que se consideren las percepciones de dicho personal con respecto al dolor como resultado de la pandemia por covid-19, analizando distintos escenarios en los cuales están inmersos.
Objetivos de la investigación 1.1.3. Objetivo general.
Describir el dolor humano mediante las vivencias de enfermeros en UCI durante la pandemia covid-19.
1.1.4. Objetivos específicos.
Conocer la diferencia entre el dolor humano y sufrimiento
Identificar los factores que desencadenan el miedo, sufrimiento y dolor.
Identificar la forma de enfrentar el dolor por parte del personal de enfermería
Hipótesis El personal de enfermería experimenta el dolor humano a través de sus vivencias en la UCI en tiempos de covid-19. En la práctica diaria surgen sentimientos de miedo, angustia, sufrimiento, pérdida entre otros.
10 2.
REVISIÓN DE LA LITERATURA
Antecedentes Dentro de los antecedentes investigativos se analiza el tema; El desempeño del personal de enfermería durante la pandemia del covid-19, dicho estudio fue realizado por la autora; Yaritza Lahite, en la que se plantea como objetivo general de ofrecer un referente teórico en relación a los cuidados de enfermería, durante la atención a pacientes que sufrieron de esta pandemia De igual forma la metodología que se empleó en el estudio está relacionada con el método de revisión bibliográfica, en la que se interpreta varios estudios, de este modo conocer la relación del covid-19, en el desempeño del área de enfermería, mediante el cual se logra obtener un documento eficiente para diferentes estudios. También se concluye que el desempeño de la enfermería es importante para combatir la pandemia, por lo que el profesional médico esta presto a cubrir una labor social. (Lahite, 2020 , pág. 2). El estudio antes mencionado permite conocer ciertos parámetros de servicio de salud, que es esencial contar con personal médico y de enfermería comprometido con la labor social para combatir la pandemia del covid-19, pese a no contar con todas las medias de bioseguridad que no es otorgado de una manera adecuada por el Ministerio de Salud Pública, por falta de presupuesto.
11
Enfermería: Visión desde la perspectiva de cuidado Desde la visión de la enfermería, es fundamental que se conozca que la persona cuidada es como una entidad única, la cual tiene atributos: conciencia, intelecto, dignidad, emociones, sentimientos y saberes, por lo cual, el cuidado de enfermería se contextualiza desde la dimensión humanista y la comprensión de cada persona, en el cual se estructuran vivencias, sentimientos, emocione si razonamientos empleados para entender las necesidades de los pacientes. 2.1.1. Humanización del cuidado El humanismo es un término en el cual el hombre se convierte en un individuo espiritual y se hace creador de su propia vida y experiencias. Ciertamente los cuidados durante los periodos de enfermedad, se generan de forma especial dentro de las instituciones de salud, los cuales se crean con la finalidad de dar atención a las personas que lo necesitan, y que responden a las necesidades que se organicen y planifiquen las actividades en la cual se responda a la enfermedad de manera efectiva. La preservación y el mantenimiento de la vida del hombre, requiere de personas que mantengan costumbres y hábitos que se vinculan en el mantenimiento de la salud, mismos que deben estar ligados al cuidado y la curación de enfermedades ya sea dentro del hogar o del ámbito hospitalario. Estos tipos de cuidados se vinculan al papel de la enfermería el cual se establece como un servicio prevaleciente a lo largo de la historia (Mena, González, Cervera, Salas, & Orts, 2016). El concepto del cuidado de la enfermería en tiempos antiguos no significaba lo mismo que en la a actualidad por lo cual la vocación de esta profesión se concentraba totalmente en los cuidados de la salud. La forma de este personal, conlleva un aserie de tradiciones, las cuales
12 tienen la responsabilidad de mostrar su docilidad, su vocación de servicio; de esta manera el personal médico en primera instancia reconoce su trabajo como una de las pautas esenciales para contribuir en la mejora de la salud. La humanización del cuidado, tiene su esencial en la atención de los servicios de salud, ciertamente en la actualidad se hace mención a la calidad institucional por lo cual este se convierte en un criterio institucional fundamental. Es primordial que sea expresado de forma concreta en los principios del quehacer de acuerdo a la institución. (Moreno, 2013) La humanización como tal se refiere al ser humano, que este es un todo relativo el cual se encuentra caracterizado por ser único y trascendental, mismos que están inmersos en el contexto familiar y social; además de que tienen la capacidad de introspección y por ello una visión de vida particular. Ciertamente cada ser humano posee atributos que los diferencian de los demás, haciendo esencial que se reivindique la importancia de la visión subjetiva de las personas en torno a los problemas de salud. Desde la perspectiva de la enfermería, la humanización como referente de la calidad se encuentra inmersa en la razón social, es decir que los conceptos centrales de este comprenden desde el individuo, la familia y los grupos sociales, los cuales requieren de los cuidados de enfermería. Es así que la humanización del cuidado desde el punto de vista de la enfermería reduce a la ampliación del conocimiento en el cuidado de la salud como un fenómeno de interés dentro de este ámbito, reconociéndose como una infección estructural, la cual responde a las necesidades de brindar una atención de calidad.
13
El dolor humano 2.1.2. El dolor humano El dolor se conoce desde tiempos antiguos, el cual se considera como uno de los más grandes retos para el desarrollo profesional, ya que se ha considerado siempre como una de las ramas más complejas para los profesionales inmersos en el ámbito de la salud. La experiencia del dolor empieza desde la infancia cuando el organismo es atacado o se lesiona. Aprendemos a utilizar la palabra dolor para expresarlo. Pero el aprendizaje también lleva a utilizar la misma palabra ante experiencias que no tienen una causa externa, atribuyendo su origen a una causa interna del organismo. De esta manera más práctica y clínica se define como una experiencia relacionada con la sensibilidad y los sentimientos, la cual es poco agradable y va acompañada de una respuesta efectiva, motora, vegetativa e, incluso, de la personalidad (IASP, 2016). Antiguamente el dolor era conocido como uno de los factores más importantes en la exacerbación de la virilidad, por lo cual los elementos que motivaron un verdadero menosprecio del dolor, fue hasta la edad en que los hombres no estaban contemplados a sentir dolor, es decir a manifestarlo. De igual manera, el galenismo mantenía una posición en la cual se establecía una reacción ante todas las partes de la medicina, en la cual era complicado realizar un análisis de los fragmentos recomendados para su uso. Lo que se reconoció es la esencialidad de los elementos como tierra, fuego, aire y agua, además de los cuatro humores: Sangre, bilis, bilis negra y flema, para de esta manera dar a conocer el funcionamiento del cuerpo de manera general (López, 2016).
14 Es por ello que, se establece que el cuadro humoral está en completa relación con la influencia del dolor en torno a los cambios de la calidad que se genera en los humores, o por la solución de continuidad o ruptura de las divisiones. 2.1.3. Las causas del dolor Las causas más comunes del dolor se describen a continuación:
Creencias: Las creencias son las principales causas de las personas para experimentar el dolor, ya que depende de su perspectiva ante el dolor, denotan así su capacidad para afrontarlo y tener un discernimiento sobre este, las creencias de dolor se generan principalmente en los pacientes que se encuentran relacionados con las estrategias de afrontamiento el dolor, ya que desde su visión este maneja la perspectiva cognitiva, por lo tanto, su ánimo cambia y son incapaces de responder ante él (Esquinas, Hidalgo, & Nieto, 2016).
Actitudes; Ante la existencia de dolor, la persona puede desarrollar distintas maneras de afrontarlo, o a su vez ocasiona un sufrimiento que se deriva de este generalmente, dando paz interior. (Calzadilla, 2016)
Emociones; Las emociones durante el proceso del dolor refleja miedo o tristeza, las cuales posteriormente generan transformaciones cognitivas, conductuales y fisiológicas que se encuentran caracterizadas por la depresión. Esto da paso a que este sea expresado de distintas maneras y que requiera de apoyo social y emocional para minimizarlo y que se mejore la condición (González, 2016).
Comportamiento: La mayoría de comportamientos se aprenden o son influencias por las emisiones y cogniciones, pero de manera directa, teniendo consecuencias que se generan a través del medio social, de ahí la importancia de que se aprenda a atronar el
15 dolor y se realizan varias acciones pensando y teniendo un criterio más formado para lograr una estabilidad (Olivares & Cuzado, 2016). Las causas establecidas anteriormente son las más comunes en torno a la presencia y afrontamiento del dolor humano, considerando que dichos rasgos permiten determinar la personalidad de las personas como tal ante una situación en la cual están atravesando un sentimiento complejo, mismo que puede tener distintas formas de afrontamiento y que en ciertos casos requiere de ayuda profesional para poder ser sobrellevado. 2.1.4. La actitud ante el dolor La actitud ante el dolor cuenta con una gran influencia en los pacientes, considerando que esta puede variar significativamente la forma en cómo estos van evolucionando dentro de su tratamiento, por lo cual tiende a retrasar la recuperación de los mismos. En base a esto, es importante que el dolor se maneje a través de una manera adecuada por parte del personal de enfermería, de manera que se preserve la mayor parte de sus funciones fisiológicas para que se contrarresten los efectos secundarios perjudiciales. Ciertamente para el personal de enfermería, el desarrollo de sus actividades profesionales es fundamental, considerando que son quienes se encargan de cuidar la mayor parte del tiempo a los pacientes, jugando así un papel imprescindible en la actitud de los pacientes y de ellos mismos ante el dolor (Gómez, 2016). En este sentido, la actitud ante el dolor se encarna en un contexto que tiene una amplia relevancia, ya que se constituye como un eje fundamental en el cual el tiempo de permanencia dentro de las instituciones de salud por parte de los pacientes sea mínimo, al igual que los costos y la satisfacción que se deriva para el mismo.
16 2.1.5. Cuidado paliativo El cuidado paliativo es importante dentro de la enfermería, considerando que este se centra en recoger, y recopilar datos, de manera que se puedan planificar las intervenciones con el objetivo de que se prevengan, minimicen o eliminen el dolor. Este implica en si in proceso en el cual se considera la influencia y dificulta de la evaluación del mismo entre los que destacan factores como genética, el sexo, la edad, el nivel cognitivo, aspectos emocionales como temor o ansiedad, experiencias dolorosas anteriores, factores familiares y culturales o factores del entorno. Para ello es esencial que se emplee desde la parte de enfermería una herramienta, la cual contribuya a valorar el dolor, confirme la presente y moda la intensidad y gravedad del dolor, de forma que este se ajuste a la eficacia del tratamiento y en base a ello se pueda establecer la analgesia adecuado y en valor del tratamiento, en el caso de ser necesario es esencial que se evite la experiencia de dolor puesto que esta viene acompañada por miedo y rechazo que no permiten que la atención sea satisfactoria y de calidad. (Nursing, 2019) Ciertamente existen diversos métodos que contribuyen a la valoración de este los cuales se centran en rasgos físicos, conductuales y auto valorativos o subjetivos. Por lo cual, la actitud que exprese el personal de enfermería ante ello puede brindar un valor distinto a lo que se registra a simple vista por el paciente, permitiéndole estar más cómodo y que a su vez la atención mejore al máximo.
17
Sufrimiento humano 2.1.6. Definición El sufrimiento se encuentra definido como el padecimiento o dolor que experimentan los seres humanos, por lo cual la experiencia puede ser reflejada de modo consciente y a su vez de forma exclusiva por parte de los seres humanos (Spaemann, 2016). Ciertamente el sufrimiento se encuentra establecido como el malestar severo, el cual se vincula a diversas situaciones que amenazan la integridad de las personas. En este sentido, se establece que los cuerpos son vulnerables al sufrimiento y al dolor como tal. De igual manera, el sufrimiento se reconoce como una parte de la conciencia fundamental, la cual se expone con una condición necesaria para que se reflexione sobre las condiciones en las cuales únicamente interviene la conciencia desde una perspectiva propia, en la cual obviamente el dolor, principalmente el físico está considerando dentro del mundo animal. Pero es característico de los seres humanos el sufrimiento como tal, ya que no se encuentra una respuesta satisfactoria para este. Por lo tanto, es imperante que no se confunda el sufrimiento con el dolor, puesto que la definición del dolor mantiene una aceptación más amplia, pues se reconoce como una experiencia sensorial y emocional la cuan se vincula a una posible lesión que se describe de maneras diferentes. Así mismo otra definición reconoce al dolor como “Una experiencia sensorial y emocional desagradable asociada con una lesión presente o potencial o descrita en términos de la misma, y si persiste, sin remedio disponible para alterar su causa o manifestaciones, una enfermedad por sí misma” (Ibarra, 2017).
18 Es así que el sufrimiento desde la ´perspectiva de la enfermería se reconoce como un sufrimiento moral y emocional, en el cual no solo se considera la parte física sino también la espiritual, dividiéndolo así en los siguientes tipos:
Sufrimiento espiritual: Es aquel estado en el cual el sufrimiento proviene del deterioro de la habilidad para que se experimente el sentido de la vida mediante distintas conexiones superiores (Muñoz, Morales, Bermejo, & González, 2020).
Sufrimiento moral: Este tipo de sufrimiento se caracteriza por la incapacidad de ejecutar decisiones o acciones de carácter moral, las cuales son seleccionadas (Dalmolin, 2018) .
Ciertamente el sufrimiento, en muchos casos es generado por acciones de su mismo ser, por lo cual es quien hace mal uso de la libertad, la cual se forman en torno lo que lo rodea y por ende lo atormenta posteriormente. Es decir, en este sentido se considera como un mal moral, el cual se refleja en las distintas formas desde aquellas que son imperceptibles hasta aquellas que generan alteraciones significativas como la falta de atención al prójimo, falta de humildad o la desatención hacia los necesitados, entre otras. Ciertamente, el sufrimiento moral se encuentra en un punto en que solo cierto valor humano podría mejorar la sensación de sufrimiento como tal.
El sufrimiento generalmente afecta con mayor incidencia a los hombres, puesto que antes o posterior a cualquier motivo, todas las personas atraviesan en algún momento el sufrimiento, a pesar de que en ciertos casos este puede disimularse en otros casos es difícil eliminarlo y no dejar que incide en el estado de ánimo de las personas.
19 2.1.7. Causas del sufrimiento Si bien es cierto el alivio del dolor físico puede aliviarse a través de tratamientos medicinales en la mayor parte de los casos, sin embargo, el sufrimiento es complicado de paliar, ya que las causas de este tienen diversas variaciones, las cuales se vinculan al aspecto íntimo de la persona. Además, es fundamental que se menciona que existen diferentes factores que contribuyen al surgimiento del sufrimiento, mismos que se detallan a continuación:
Desconocimiento de la enfermedad: Es fundamental que se reconoce que quien no conoce de su padecimiento es la persona más afectada, considerando que el conocimiento de la patología por grave que sea requiere de un tratamiento el cual genera en los pacientes diversas sanciones relacionadas con el sufrimiento (Jordán, 2020).
Comunicación: La persona que padece alguna enfermedad es aquella que experimenta mayor sensación de dolor y comunicación al momento de contarles a las personas la situación que está atravesando. Es así como tanto la familia como los profesionales de enfermería, pueden generar comunicación con la persona de manera que esta no se aislé ni se sienta sola, ya que estos son los principales factores por los cuales los pacientes atraviesan difíciles situaciones de sufrimiento. Por tanto, el personal de enfermería debe tener la capacidad de comprender y escuchar, abarcando a través de su cuidado todo el ser del paciente y brindándole información para que este se sienta más seguro y cuidado (Archury & Pinilla, 2016).
Tratamientos exagerados: Conforme la tecnología ha ido avanzando a lo largo de los últimos años, es evidente que se puede dejar en abandono al paciente con ayuda
20 de las máquinas, tubos y fármacos que muestran a los pacientes el lado cruel del tratamiento que reciben por parte del personal (Palacios & Villegas, 2014).
Espiritualidad: Ciertamente la falta de consideración de este aspecto en los seres humanos, genera que se cree un dolor complicado de sobrellevar, considerando que la espiritualidad es una esfera brutal en la que todas las personas en un punto clave de su vida atraviesan algún tipo de enfermedad. Cuando se limita al paciente del cuidado espiritual es cuando la persona tiende a perder la esencia del cuidado en torno al enfermo y hace que la recuperación del mismo sea más lenta y menos satisfactoria (Galvis & Pérez, 2017).
Familia: En el ámbito de la familia encontramos muchas situaciones que llevan al sufrimiento. En muchos pacientes encontramos un sentimiento de carga o peso familiar, que, aun no siendo real, es motivo para sufrir. Por otro lado, algunos enfermos se sienten abandonados en el hospital, en la residencia o en su hogar, la suma de esta sensación de abandono, la enfermedad o la invalidez, es un motor para el sufrimiento. Asimismo, el miedo a dejar un viudo/a, un huérfano o una familia normalmente necesitada, acrecienta el sufrimiento de los pacientes (Fernández Pascual , et al, 2015).
En este sentido, se reconoce que el sufrimiento se considera como uno de los factores más importantes e íntimos a los cuales es complicado llegar en plena confianza, considerando que si el sufrimiento es profundo para la persona, esté transmitirá su trascendencia; de este modo, dando a conocer desde la perspectiva más doliente la intensidad y causa del sufrimiento del mismo, de forma que se tiende a ver desde una perspectiva diferente el sentir de la persona y hace que generalmente se le trate de brindar una ayuda que no resulta efectúa para el mismo, por ende es esencial que este sea analizado y manejado desde la perspectiva profesional.
21 2.1.8. El sentido del sufrimiento En el camino de la búsqueda del sentido del sufrimiento, es esencial que se menciona que la evaluación de la incertidumbre ante una enfermedad, se reconoce como una incapacidad, en la cual es complicado que se conozca el significado de lo que acontece en relación a la enfermedad, por ende, esto genera una incapacidad en la definición de los valores de afectación y relación de enfermedad en torno a los hechos, lo cual demuestra una capacidad única para difundir los resultados. De acuerdo con esta afirmación, dicha incapacidad se genera principalmente debido a los escases de información en relación al tema, además del desconocimiento en torno a la enfermedad, dando paso así a que se derive una incertidumbre entre la que se citan los siguientes supuestos:
La incertidumbre desde un estado cognitivo en el cual se establece la existencia de una función en la cual se ayuda al paciente a interpretar los hechos y el surgimiento de los mismos, de manera que este tenga una comprensión absoluta en torno al tema (Augusto, 2017).
La incertidumbre desde la experiencia, la cual se reconoce como neutra intrínseca, en la cual no se deprecia el valor de alguna u otra manera (Aimar, 2018).
La adaptación por su parte se reconoce como una conducta continua en la cual los individuos constituyen diversos esfuerzos para realizar un afrontamiento más efecto, con la finalidad de que se reduzca la incertidumbre, la cual es vista como un factor de peligro y si bien es cierto en casos se ve como una oportunidad para causar un cambio en la actitud y comportamiento del paciente (Pérez, 2016).
22
La relación existente entre la enfermedad, la incertidumbre, la valoración, los sistemas de afrontamiento y la adaptación es lineal y unidireccional, y va de las situaciones de incertidumbre a la adaptación (Torres & Sanhueza, 2019).
De esta manera encontrarle el sentido al sufrimiento no es una acción sencilla, considerando que únicamente permite que se adapte la situación a lo desconocido. Si bien es cierto cada persona responde al sufrimiento de manera diferente y con actitudes distintas a lo largo de su vida, por lo cual es fundamental que se busque el sentido común de lo que muchos niegan. Es así como un recorrido negativo y otro positivo que pasan ambos por las siguientes etapas: El primero, desde la perspectiva negativa se enfoca en el abatimiento, el miedo uy el aislamiento. El segundo está enfocado en el sentido del sufrimiento desde la conciencia ya que en este los factores que inciden son la aceptación, el encuentro del sentido en sí mismo y el compartir éste, puesto que sólo si es aceptado, podrá ser compartido. Dentro de estas etapas es notorio ver cómo las personas que están sufriendo se dejan llevar por el sufrimiento en ciertos casos mientras que en otros sirve como inspiración para el alcance de las metas personales. Para que se le encuentre sentido en cuanto al sufrimiento, es importante que se considere la pluridimensionalidad y no sólo su dimensión terapéutica en forma de dolor físico. Ciertamente el sufrimiento tiene una visión más amplia que la enfermedad misma, puesto que este tiene mayor complejidad y se centra de manera específica en los seres humanos. Es importante enfatizar que el sufrimiento no es un bien como tal, sino por el contrario es un mal en el cual la grandeza moral y los valores del hombre pueden convertirse en fuentes de enriquecimiento personal en base al sufrimiento de otra persona. Si bien es cierto, este no es una vivencia interior netamente, sino que más bien es un factor que tiene alta influencia en la
23 construcción de un ser social, y que puede ayudarle a crecer como destruirlo si no se recibe la ayuda acechada (Córdoba, 2020). De esta comprensión es partícipe también el núcleo familiar, considerando que esta también acompaña al paciente en el proceso de sufrimiento, por lo cual es esencial que estos sean empáticos ante la situación de la persona que está enferma, además de que tenga la capacidad de conmoverse y compadecerse, de sufrir el dolor del otro. Este por su parte, se considera como un acto que no es obligatorio en sí, pero que demuestra los sentimientos que tiene la persona hacia el paciente y que quiere contribuir a aliviar prontamente su sufrimiento basándose en valores como: el amor, la solidaridad, la dignidad, el cariño, el cuidado o el con padecimiento que se suscita en aquellos que acompañan al que sufre. 2.1.9. Actitud ante el sufrimiento Tras la exposición de las decisiones que toma la persona que esta subiendo es fundamental que se trate desde la actitud de quien lo acompaña y lo cuida, pues es quien más centrado está en sufrimiento del apaciente. De acuerdo a esto, se menciona que las tres actitudes más centrales para afrontar el sufrimiento son:
Abandono: Ante la persona que padece, la actitud que puede parecer más cómoda es apartar la mirada y no asumir una responsabilidad, e invertir tiempo, esfuerzos e incluso recursos en beneficio de otra persona. Este abandono tiene una etiología mayoritariamente fundada en el miedo. No significa necesariamente un desapego o una falta de cariño hacia la persona que sufre, sino una incapacidad para asumir el dolor ajeno e incorporarlo en la propia persona (Casado, 2019).
24 En el caso de los profesionales de la salud esta actitud de huida, puede ser debida a la incapacidad para reconocer la propia falta de posibilidades para resolver la situación que representa un fracaso “en el combate con la muerte”. “Si uno se ve sobrepasado porque se trata realmente de una situación sin salida, a menudo termina abandonando al enfermo y su familia porque `ya no hay nada que hacer´, olvidando que, mientras menos haya que hacer en el terreno de los tratamientos de cualquier tipo, mayor será la necesidad de prodigar cuidados”.
Lucha: Es la actitud completamente opuesta. El mismo miedo que justifica el abandono, da lugar a una guerra contra el sufrimiento, que intenta suprimirlo de modo exagerado incluso cuando es evidente que con las medidas terapéuticas no cabe esperar resultados favorables sobre la evolución de la enfermedad. Esta actitud, justificada como se ha visto por el miedo y por las ganas de recuperación del otro, puede derivar en una lucha desproporcionada, tanto en los objetivos que se pretenden como en los medios que se emplean para conseguirlos. Es lo que se conoce como ensañamiento o encarnizamiento terapéutico o distanasia; de la que hablaremos más adelante. La lucha es un modo de huida hacia delante que realmente lucha contra la persona, puesto que el sufrimiento es inseparable de aquél que sufre y por tanto si luchamos contra el segundo, luchamos contra el primero (Casado, 2019).
Acompañamiento: Esta actitud implica no sólo un “estar” al lado del enfermo, no es hacer compañía sin más, sino que conlleva implicación en los cuidados del enfermo, escucha, paciencia, empatía, comprensión, compasión y control de sintomatología. Es sin duda una obra de amor (Casado, 2019).
25 Este tipo de acompañamiento se establece en base a las actitudes expuestas anteriormente, considerando que es evidente que el abandono ante el surgimiento es incompatible, considerando que en torno a las constantes batallas esta se considera como una obstinación terapéutica, la cual no permite que se genere un verdadero acompañamiento hacia la persona que esta sufriendo. Ciertamente el acompañamiento es la única actitud que las personas que están padeciendo transmiten de forma incesante y que pretenden que este sea visto desde el punto de vista integral, de forma que se toma la decisión correcta en base a los medios requeridos para que se vean las necesidades de que este nunca este solo. Ante el sufrimiento de las otras personas, la actitud de quien los rodea debe ser de acompañamiento, puesto que no se debe extremar las acciones para que la persona es se sienta mal y se le genere un daño emocional más grande. Pero para acompañar a una persona que está atravesando esta situación es fundamental que se tenga fortaleza, porque caso contrario no se mostrará la actitud necesaria para reconfortar al paciente. Es así que la actitud ante el sufrimiento depende en gran medida del significado que se le brinde tanto al paciente como a la calidad de vida del mismo, teniendo en cuenta siempre que su estado de salud va primero.
COVID-19 2.1.10. Intervención del personal de enfermería ante el COVID-19 El COVID-19 ha tenido un nivel de afectación a nivel mundial, causando la muerte de millones de persona, lo cual se ha traducido como uno de los mayores retos sanitarios hasta la actualidad, puesto que su declaración de pandemia ha derivado que se incremente la demanda de cuidados de la salud, en los que el desempeño del personal de enfermería ha jugado un papel de suma importancia.
26 Si bien es cierto el desempeño de enfermeras, es esencial para que se mejore la calidad de la salud de la población en diferentes tiempos, reconociéndose como una de las bases más importantes dentro de la profesión de enfermería. Posterior a ello, el personal de enfermería responde a un llamado en el cual protagonizan diversas complicaciones y que jugaron un papel esencial en otros sucesos tales como: la gripe española de 1918, la gripe por el virus de la influenza A H1N1, de esta manera el síndrome respiratorio agudo severo y el síndrome respiratorio del Medio Oriente, el ébola (Savón, 2020). Según el Consejo Internacional de Enfermeras, durante la COVID-19 se ha reconocido que la mayor parte de las enfermeras tiene un riesgo persistente, en el cual tanto para las enfermeras con para los enfermeros se establecen todos los escenarios posibles para hacerle frente al COVID-19, razón por la cual las organizaciones internacionales de enfermería establecen que es fundamental que se realizan acciones informativas las cuales enfatizan el accionar de dicho personal ante los diversos escenarios. La preocupación por riesgo de infección por el virus SARS-CoV-2 se considera exponencialmente alta, a pesar de ello, no son suficientes quienes reconocen la importancia del papel de la enfermería y los cuidados que proporciona dicho personal a los contagiados a lo largo de la pandemia. Si bien es cierto el cuidado de enfermería es uno de los ejes esenciales en torno a las actividades humanas, por lo cual los individuos tienen la capacidad de cuidarse en algún punto de sus vidas, a pesar de ello hay casos en que otras personas requieren de cuidados, pues esta actitud es parte de los valores y acciones actitudinales que se centra en la influencia de la cultura y tradición social, lo que se ha convertido en un aspecto primordial para que todos contribuyan en prevenir la infección por el virus SAR-CoV-2 y a promover, mantener o recuperar su salud (Ferreres, 2017).
27 De esta manera, el personal de enfermería es fundamental al momento de aplicar los cuidados a un paciente dentro de las instituciones de salud, mucho más en el caso del COVID19, ya que su trabajo está enfocado en prevenir y detectar complicaciones tempranas y colaborar con el equipo clínico, de manera que se genere una respuesta más efectiva y el paciente tenga una pronta recuperación ante el coronavirus.
La perspectiva del personal de salud ante el dolor La analgesia es reconocida como una de las actividades de mayor discusión dentro de la medicina, a pesar de que de ninguna forma se priva a los pacientes de ella; si bien es cierto el terapeuta del dolor propone acciones para contribuir al alivio del paciente, es decir, que es importante que se ofrezca al paciente la posibilidad de mejorar en mayor medida la analgesia, lo se traduce en la búsqueda de medios eficaces y de menos riesgo para tratar el dolor, los cuales beneficien eficazmente a los pacientes. La perspectiva que tiene el personal de salud ante el dolor incluye más bien la perspectiva familiar, ya que si bien es cierto la familia requiere que se empleen prácticas que mejoren rápidamente al paciente, a pesar de que en muchos de los casos la medicina tradicional no puede dar una respuesta efectiva en el alcance de dicho objetivo, de esta manera se plantea que es legítimo utilizar terapias de alto riesgo siempre y cuando:
Falta de alternativas a la sobredosis
El nivel de dolor del paciente sea intolerable
La posibilidad de eficacia analgésica sea alta
Exista concordancia con la expresión del paciente o su legítimo representante
El paciente padece una enfermedad terminal.
28 Esta última instancia de manera particular toma relevancia, ya que si bien es cierto las patólogas terminales son un tanto más complejas de tratar ya que generan miedos, desesperanza y mucho dolor principalmente en etapas terminales. Es por ello, que el personal de enfermería requiere de una capacidad de afrontamiento alta, de manera que no se vea afectado por la situación que está atravesando el paciente, siempre manteniendo empatía y entregando una atención de calidad para que de esta manera el paciente se sienta mejor y más satisfecho en todos los aspectos. No existe ninguna razón para provocar dolor, a no ser que el paciente dé su consentimiento y este sea para beneficiarlo. Son inaceptables las maniobras médicas y de enfermería que producen dolor y de las cuales el paciente no ha sido advertido, o preparado. ¿Cuántas veces un niño pequeño es intubado sin siquiera ponerle anestesia o sedarlo?, la urgencia por salvarle la vida es prioritaria por sobre evitarle el dolor. Se le punciona una y mil veces para obtener la preciada muestra de sangre que va a ir a análisis, en muchas oportunidades diariamente, y a veces sin siquiera ser tan relevante para tomar una determinación diagnóstica o terapéutica, sino solo por rutina (Collao & Behn, 2017). Lo dicho es muy valedero, para los que estamos formando profesionales sean médicos o enfermeras que necesitan practicar sus diagnósticos, tratamientos o procedimientos. Debemos tener claro que aun cuando se tenga la consideración de preparar al paciente, igual se le provoca dolor cuando manos inexpertas intentan procedimientos dolorosos y a veces difíciles de llevar a efecto. Como profesores guías de experiencias clínicas se trata de generar grandes beneficios directos para que el personal de enfermería logre afrontar dichas situaciones de manera efectiva y que estos a su vez logren mantener una situación segura y cómoda para la paciente alejada del sufrimiento tanto de este como de quienes lo acompañan.
29 No ser maleficente significa que el profesional no debe ser negligente, imperito, ignorante o imprudente, algunas de estas características las trae el futuro profesional como bagaje de lo que le ha entregado, como valores primordiales, su familia y el medio donde se ha desarrollado. Otras, sin embargo, deben propiciar su adquisición la universidad, con curricular tendientes a valorar a las personas en forma holística y no solo especializarse en la patología o la técnica.
Manejo del dolor en el personal de enfermería La educación centrada en los posibles efectos del dolor era un elemento central del programa. Se clasificó las consecuencias del dolor en tres categorías:
El dolor se asocia con una reducción de la capacidad física y de la salud mental. La investigación ha descubierto que el dolor tiene un efecto significativo en las actividades cotidianas y en la movilidad de los pacientes (Aviles, 2018).
El dolor se asocia con caídas. Por ejemplo, los investigadores notificaron que el dolor, la rigidez de las rodillas y la menor fuerza muscular limitan las capacidades físicas de los pacientes y aumentan el riesgo de caída (Aviles, 2018).
El dolor se asocia con depresión. La investigación ha demostrado que el dolor persistente tiene efectos negativos en la salud mental, en su estado emocional y funcional (Aviles, 2018).
Los conocimientos del personal de enfermería sobre manejo del dolor crecieron y la práctica clínica por ende permite que estos mantengan un mejor manejo del dolor, puesto que si bien es cierto para los profesionales es importante que se siga la línea a fin de que el personal se instruye en cómo formar a la plantilla en la evaluación de la administración de cuidados para
30 que sus pacientes se sientan satisfechos ante cualquier situación que están afrontando y que el sufrimiento y dolor en general sean más reducidos en todos los aspectos posibles.
31 3.
MATERIALES Y MÉTODOS
Enfoque, diseño y tipo de investigación La investigación científica es un conjunto de procesos sistemáticos y empíricos que se aplican al estudio de un fenómeno; es dinámica, cambiante y evolutiva. Se puede manifestar de tres formas: cuantitativa, cualitativa y mixta. Esta última implica combinar las dos primeras. Cada una es importante, valiosa y respetable por igual (Hernández et al., 2014). 3.1.1. Enfoque cuantitativo. El presente estudio de investigación se utilizó un enfoque cuantitativo, puesto que busca conocer el dolor humano a través de las percepciones o vivencias del personal de enfermería que labora en el Hospital Enrique Garcés, lo cual permitió examinar los datos obtenidos a través de la encuesta. 3.1.2. Diseño. Se empleó el diseño de corte transversal, porque permite recolectar datos y situar el objeto de estudio en un único periodo de tiempo. En el presente proyecto de investigación se utilizó un tipo de estudio descriptivo.
Población y muestra 3.1.3. Población. La población en el presente estudio fue de 28 profesionales de enfermería que laboran en la UCI de un hospital de la ciudad de Quito.
32 3.1.4. Muestra En la presente investigación por tratarse de una población pequeña se trabajó con el 100% de la población seleccionada que fueron 28 profesionales de enfermería que laboran específicamente en la UCI de un hospital de la ciudad de Quito. 3.1.4.1.
Criterios de inclusión. Previo consentimiento informado, personas que acepten participar en la investigación.
3.1.4.2.
Personal de enfermería que laboran en la UCI de un hospital de la ciudad de Quito Los criterios de exclusión. Personal médico, auxiliar de enfermería que laboran en la UCI de un hospital de la ciudad de Quito
Personal de salud que labora en otros servicios de un hospital de la ciudad de Quito
Personal de enfermería que estén de vacaciones, con permiso por maternidad o enfermedad.
Personal de enfermería que realizan trabajo administrativo de un hospital de la ciudad de Quito
No dar el consentimiento informado para la participación en la investigación.
Personal de enfermería que firmaron el consentimiento informado, pero que se retiran a mitad del estudio.
33
Técnicas e instrumentos de recogida de datos 3.1.5. Técnica de la encuesta. Para la recolección de datos en la presente investigación, se utilizó una encuesta elaborada por las autoras (ver anexo 1) que incluyen preguntas cerradas y abiertas, orientadas a conocer las experiencias y emociones del personal de enfermería que labora en estos tiempos de pandemia. 3.1.6. Técnicas de análisis de datos Previo consentimiento informado de manera voluntaria, se realizó la tabulación de datos y el análisis estadísticos el mismo que se realizó mediante la utilización de una hoja de cálculo Excel Microsoft, facilitando de esta manera la tabulación y organización de los resultados.
34 4.
RESULTADOS
Género. Gráfico1.
Fuente: Encuesta. Unidad de terapia intensiva, hospital de la ciudad de Quito, 2021 Análisis: Gran parte del personal de enfermería que labora en la unidad de cuidados intensivos es de género femenino que comprende el 75% personales de enfermería relación género masculino el 27%. 1. Tiempo que labora en el servicio de cuidados intensivos con pacientes covid19 Gráfico 2.
35 Fuente: Encuesta. Unidad de terapia intensiva, hospital de la ciudad de Quito, 2021 Análisis: el tiempo del personal de enfermería que trabaja con pacientes covi-19 en la unidad cuidados intensivos comprende un 60.7% personas trabajan ya más de un año, un 25% trabajan un año, un 7.1 % personas trabajan de 6-9 meses, y menos de 3 meses. Interpretación: desde que inició la pandemia por covid-19, gran parte del personal de enfermería del servicio de unidad de cuidados intensivos ha estado en el cuidado de pacientes covid-19, así también hay casos de 6-9 meses o menos de 3 meses que laboran en este servicio porque son personal nuevo o que han sido rotados de otro servicio a este. 2. ¿Cuál de las siguientes experiencias del dolor humano ha sentido usted durante la atención de pacientes con covid-19? Grafico 3.
Fuente: Encuesta. Unidad de terapia intensiva, hospital de la ciudad de Quito, 2021
36 Análisis: De las siguientes expresiones del dolor humano, 17 manifestaron que tienen miedo, seguido de la tristeza (16), ansiedad e impotencia (14), angustia (12), alteración en el patrón sueño (5) y enojo/ira (3). Interpretación: en esta pregunta el encuestado tiene la facultad de elegir más de una opción y que se sienta identificado con estas experiencias del dolor humano, por lo tanto, podemos decir que entre estas emociones lo que más predomina en el personal de enfermería es el miedo seguido de la tristeza durante la atención de pacientes con covid-19. 3.
¿En qué situaciones ha empezado a sentir estos sentimientos? Nos puede explicar.
Gráfico 4.
Fuente: Encuesta. Unidad de terapia intensiva, hospital de la ciudad de Quito, 2021 Análisis: El personal de enfermería ha empezado a sentir estos sentimientos en diferentes situaciones, 16 indican que es en la muerte del paciente, 13 en pacientes jóvenes en situaciones críticas, 10
37 en proceso de intubación por covid-19, 9 en pacientes en cuidados paliativos y limitación de esfuerzo terapéutico. Así también un mínimo número (1) mencionaron que se debe al exceso de pacientes Interpretación: en esta pregunta el encuestado tiene la facultad de elegir más de una opción en la que se sienta identificado es así que podemos decir que la situación que más predomina estos sentimientos de miedo, tristeza es en la muerte de los pacientes por covid-19
4. ¿Cómo ha enfrentado usted estos sentimientos? Gráfico 5.
Fuente: Encuesta. Unidad de terapia intensiva, hospital de la ciudad de Quito, 2021 Análisis: El personal de enfermería ha enfrentado estos sentimientos de diferentes formas, 21 de ellos mencionan que es la fe, 15 valorando más la familia, 6 y 5a través de la música y el deporte respectivamente, 1 menciona que a través del descanso
38 Interpretación: en esta pregunta el encuestado tiene la facultad de elegir más de una opción en la que se sienta identificado es así que podemos decir que el personal de enfermería enfrenta estos sentimientos a través de la fe independientemente de la religión o creencias que practiquen, y valoración más a la familia. 5. Usted considera que el dolor humano difiere del sufrimiento Gráfico 6.
Fuente: Encuesta. Unidad de terapia intensiva, hospital de la ciudad de Quito, 2021 Análisis: El personal de enfermería considera que el dolor humano es diferente del sufrimiento 21 de ellos están de acuerdo, en comparación a 7 que consideran que no es diferente Interpretación: el personal de enfermería considera que el sufrimiento es diferente del dolor humano, porque el sufrimiento va más allá donde implica una afectación en ciertas dimensiones emocionales y espirituales.
39 6. Ha modificado de alguna forma favorable estos sentimientos en su vida personal o profesional. Gráfico 7.
Fuente: Encuesta. Unidad de terapia intensiva, hospital de la ciudad de Quito, 2021 Análisis: estos sentimientos anteriormente manifestados por el personal de enfermería han modificado favorablemente su vida personal o profesional así lo consideran 23 de 5 encuestados.
40 5.
DISCUSIÓN
En estudios anteriores se ha podido demostrar que, durante la pandemia las enfermeras no toman en cuenta sus propias necesidades participando activamente en la atención a sus pacientes, ya que sobre ellas y ellos prevalece su seguridad, responsabilidad moral y profesional. Ante la situación de la emergencia sanitaria las enfermeras han estado con mucho estrés físico y mental, impotentes frente a las amenazas de su salud y la necesidad de cumplir con la presión del trabajo. (O'Boyle C,2017). Otros estudios demostraron que las enfermeras que han estado en contacto con pacientes con enfermedades infecciosas similares, aunque de menor magnitud que la covid-19, sufrieron soledad, ansiedad, miedo, fatiga, trastornos del sueño y otros problemas de salud física y mental. Así también, algunos estudios también muestran que han tenido experiencias positivas y un crecimiento personal al aportar su esfuerzo (Schiavo,2018) Los hallazgos encontrados en nuestro estudio sobre las vivencias del personal de enfermería en tiempos de pandemia por covid-19 se identificó que las experiencias del dolor humano manifestados por el personal son el miedo, tristeza, ansiedad, impotencia angustia y alteración del patrón sueño en la atención de dichos pacientes que surgen por diferentes situaciones, ya sea por casos de muerte o limitaciones terapéuticas en casos extremos, estos sentimientos expresados han sido superados a través de la fe y de cierta forma ha permitido en el crecimiento profesional y personal del personal de enfermería Covid-19 al ser una enfermedad nueva, afectado a muchas personas en diversos países, y siendo la causante de muchas muertes, sin importar diferentes culturas, sistemas sanitarios, por lo que creemos que es necesario realizar más investigaciones, sobre las vivencias y emociones de las enfermeras que atienden a pacientes enfermos de covid-19. La mayoría de los estudios publicados hasta el momento, se basan en la enfermedad y sus características
41 clínicas, siendo muy pocos los que se enfocan y analizan las vivencias y la afectación emocional que provoca y que ha provocado en el personal de enfermería que ha estado en primeria línea con la atención a pacientes con Covid-19. Este estudio cuantitativo nos ha permitido darnos cuenta la importancia que tiene la parte emocional, como factor prioritario dentro de lo que vive una enfermera ante el cuidado de un paciente en la UCI por Covid-19.
42 6.
CONCLUSIONES
En este estudio realizado en un hospital de la ciudad de Quito se identificó que el personal de enfermería describe su dolor humano a través de diferentes expresiones como es el miedo, la tristeza, ansiedad e impotencia, angustia, alteración en el patrón sueño y enojo e ira. Así también podemos decir que si conocen cual es la diferencia del dolor del sufrimiento, a pesar de que son sentimientos muy similares uno preside después del otro. Los factores o situaciones que desencadenan estos sentimientos del dolor humano son en la muerte del paciente, jóvenes en situaciones críticas, en proceso de intubación por covid-19, pacientes en cuidados paliativos y limitación de esfuerzo terapéutico. Así también mencionaron que se debe por el exceso de pacientes. La forma de enfrentar el dolor humano por parte del personal de enfermería en el cuidado a pacientes con covid-19 fue a través de la fe independientemente de la religión que practiquen, valorando más la familia y su propia vida, a través de la música y el deporte. Así también mencionaron, que a través del descanso.
43
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
7.
Aimar, Á. N. (2018). El cuidado de la incertidumbre en la vida cotidiana de las personas . Index de Enfermería, vol.18 no.2. Archury, D. M., & Pinilla, M. (2016). La Comunicación con la familia del paciente se encuentra al final de la vida. Enfermeria Universitaria , Vol.13 no.1. Augusto, B. M. (2017). El Planteamiento Cientifíco. Revista Cubana de Salud Pública, 43. Aviles, C. G. (2018). Equipo de salud. sentimientos y manejo del dolor: Reflejos de un modelo. Gaceta Médica Espirituan a , Vol.3 no.2. Cabero, L. (2012). Tratado de Ginecologia y Obstetricia. Madrid: Panamericana S.A. Caldas, L. C. (2008). Creencias, prácticas y actitudes de mujeres embarazadas frente a las infecciones urinarias. 183-196. Calzadilla,
A.
d.
(14
de
08
de
2016).
Alzheimer
Universal.
Obtenido
de
https://www.alzheimeruniversal.eu/2013/08/14/actitud-ante-el-sufrimiento-y-dolor/ Carvajal, J., & Ralph, C. (2015). Casado, M. S. (2019). Cuidado en cercanía de la muerte. Cuidado en cercanía de la muerte. APORTACIONES DESDE LA TEORÍA FUNDAMENTADA. España: UNIVERSITAT ROVIRA I VIRGIL. Collao, C., & Behn, V. (2017). El dolor en el niño desde una perspectiva ética . Revista Cubana de Enfermería, V.19 n. 2.
44 Córdoba, L. F. (2020). Logoterapia con personas que experimentan dolor, sufrimiento y perdida del sentido de la vida . Revista CES Psicologia , Vol. 2 no. 295-105. Dalmolin, G. (2018). Sufrimiento Moral y Sindrome de Burnout. Latino-Am. Enfermagen, 22(1). Decherney, A., Laufer, N., Nathan, L., & Roman, A. (2014). Diagnóstico y Tratamiento Ginecoobstétricos. Esquinas, M., Hidalgo, A., & Nieto, B. (2016). Creencias de los pacientes acerca del Dolor. Creencias de los pacientes acerca del Dolor. España: Grupo Aran. Fernández Pascual , M. C., Ignacio Cerro, M. C., Cervantes Estévez, L., Jiménez Carrascosa, M. A., Medina Torres , M., & García Pozo , A. M. (2015). Cuestionario para evaluar la importancia de la familia en los cuidados de enfermería. Validación de la versión española (FINC-NA). Anales del Sistema Sanitario de Navarra , Vol.38 no.1. Ferreres, L. M. (07 de 2017). La presencia de los valores en la práctica enfermera. La presencia de los valores en la práctica enfermera. España: UIC Barcelona. Galvis, M., & Pérez, B. (2017). Revisión de la literatura sobre el concepto "Epiritualidad" aplicado a la práctica de enfermería. Enfermeria 21, Vol 3 no.3. Gómez, M. I. (2016). El Cuidado de Enfermería a los Grupos Humanos . Revista de la Universidad Industrial de Santander. Salud, Vol.47 no.2 . González, M. (2016). Dolor Crónico y Psicología. Revista Médica Clínica Las Condes, 610617.
45 Guedes, E., & Santa, D. (2016). Vivencia de las enfermeras ante los cuidados en el proceso de muerte. Index de Enfermería, 1-2. Herráiz, e. a. (2005). Herráiz, M. H. (2005). Herráiz, M., Hernández, A., Asenjo , E., & Herráiz, I. (2005). IASP. (2016). Definicion del Dolor. Internacional Association for the Study of Pain. Estados Unidos. Ibarra, E. (2017). Una Nueva Definición de Dolor. Un Imperativo de Nuestros Días . Revista de la Sociedad Española del Dolor , vol.13 no.2. Jordán, R. (02 de 03 de 2020). Efectos del desconocimiento de la enfermedad, la estigmatización social del diagnóstico y el tratamiento en el malestar subjetivo de los pacientes con enfermedades catastróficas más frecuentes, que recibieron atención psicológica en el área de emergencias. Efectos del desconocimiento de la enfermedad, la estigmatización social del diagnóstico y el tratamiento en el malestar subjetivo de los pacientes con enfermedades catastróficas más frecuentes. Ecuador: Universidad Católica de Santiago de Guayaquil. Lahite, Y. (2020 ). El desempeño del personal de enfermeria durante la pandemia de la COVID19. Scielo , 1-5. López, N. (17 de 10 de 2016). La Teoría Hipocrática de los Humores. Obtenido de Gomeres: Salud, Historia, Cultura y Pensamiento: http://index-f.com/gomeres/?p=1990
46 Maguiña, C., Gastelo, R., & Tequen, A. (2020). El nuevo Coronavirus y la pandemia del Covid19. Revista Medica Herediana, 31-39. Marrero, C., & García, A. (2019). Vivencias de las enfermeras ante la muerte. Una revisión. Revista Ene, 21. Mena, D., González, V., Cervera, Á., Salas, P., & Orts, M. (2016). Cuidados básicos de enfermería. Cuidados básicos de enfermería. España: Publicacions de la Universitat Jaume I. Ministerio de Salud Pública. (2013). Infeccion de vias urinarias en el embarazo. Moreno, M. (2013). Humanización del cuidado. Humanizacion del Cuidado: Una meta enraizada en la escencia de enfermería. Colombia: Aquichan. MSP. (2013). Infección de vias urinarias en el embarazo. Muhammed, M. (2015). Urinary Tract Infections Amongst Pregnant Women Attending A Medical Centre In Keduna, Nigeria. African Journal Of Clinical And Experimental Microbiology, 7-11. Muñoz, A., Morales, I., Bermejo, J., & González, J. (2020). La Enfermería y los Cuidados del Sufrimiento Espiritual. Index de Enfermeria, Vol.23 no.3. Nursing. (12 de 02 de 2019). ELSEVIER. Obtenido de https://www.elsevier.com/eses/connect/enfermeria/proceso-enfermeria-manejo-del-dolor Olivares, E., & Cuzado, J. (2016). Evaluación Psicologica del Dolor. Clínica y Salud, Vol.19 no.3.
47 Palacios, C., & Villegas, M. (2014). Tecnicas y Procedimientos para el Cuidado de Enfermería. Tecnicas y Procedimientos para el Cuidado de Enfermería. Mexico: ECORFAN. Pérez, A. M. (2016). EL sindrome de Burnout. Evolucion Conceptual y Estado Actual de la Cuestión . VivatAcademia, 42-80. Pineda, E., & de Alvarado, E. (2008). Metodología de la investigación. Roche , M., Pérez, A., Garcia , M., & Martínez, I. (2009). Patología médica y embarazo. trastornos respiratorios, urológicos, infecciosos y endocrinológicos. Rodríguez Piqueras , J. A., Ramos Linares , V., Martínez González , A., & Oblitas Guadalupe , L. (2017). Emociones Negativas y su Impacto en la Salud Mental y Física . Suma Psicologica, Vol. 16 no.2 pp. 85-112. Santiago, A. (2020). Calidad del cuidado de enfermería desde el enfoque de donabedian en pacientes hospitalizados con dolor. Revista Ciencia y enfermería, 16. Savón, Y. L. (2020). El desempeño del personal de Enfermería durante la pandemia de la COVID-19. Revista Información Científica , Voll.99 no.5. Sociedad Española de Ginecologia y Obstetricia. (2013). Sociedad Española DeGinecología y Obstetricia. (2013). Spaemann, R. (06 de 12 de 2016). Universidad Austral Capellanía. Obtenido de https://www.austral.edu.ar/capellania/mas-info/textos-espirituales/el-sentido-delsufrimiento-distintas-actitudes-ante-el-dolor-humano/ Thomas M Hooton, M. G. (2016). Urinary tract infections and asymptomatic bacteriuria in pregnancy. UpToDate.
48 Torrejano, M. C. (2012). Factores asociados a la infección de vias urinarias en gestantes. Revista Facultad de Salud. Torres, A., & Sanhueza, O. (2019). Modelo Estructural de enfermeria de Calidad e Incertidumbre Frente a la Enfermedad. Ciencia y Enfermeía, 9-17. Baeza, M., y Ragni Vargas, M. (2020). Las enfermeras en la pandemia Covid -19. Revista Enfermería, 154, 4–49. https://enfermeriachl.files.wordpress.com/2020/05/revista-enfermerianro.-154-mayo-2020.pdf%0Ahttp://files/399/revista-enfermeria-nro.-154-mayo-2020.pdf Bejarano, P. (2016). Reflexiones alrededor del dolor como experiencia personal y profesional.
ARS
MEDICA
Revista
de
Ciencias
Médicas.
https://doi.org/10.11565/arsmed.v29i2.334 Campoy, T., y Gómes, E. (2013). Técnicas e instrumentos cualitativos de recogida de datos. Manual Básico Para La Realización de Tesinas, Tesis y Trabajos de Investigación, 273–300. Gálvez, C., y Naranjo, V. (2017). El dolor humano: una respuesta de las ciencias de la salud y una reflexión del dolor espiritual para la formación de los cuidadores paliativos. Escritos / Medellín-Colombia,
25(ISSN
0120-1263
/
ISSN:
2390-0032),
419–436.
http://dx.doi.org/10.18566/escr.v25n55.a04 Gamboa, F. (2011). Ética médica y dolor. Elsevier España, 136(15), 671–673. https://doi.org/10.1016/j.medcli.2011.01.004. Gómez, R. (2016). Universidad Autónoma del Estado de México. Población y Muestra, 1, 1–134.
49 Gutiérrez, M., Zelaya, S., Castellanos, E., y Dominguez, R . (2020). “Acciones Realizadas En Latinoamérica y El Mundo Sobre Salud Mental En El Marco Del COVID-19.” Instituto Nacional de Salud Del Gobierno de El Salvador (Cdc):1–17. Hernández, R., Fernandez, C., y Baptista, M. (2014). Metodología de la Investigación. Distrito Federal.México. McGrew Hill Education. Minchala, R., Estrella, M., y Prieto, E. (2020). “Vivencias y Emociones Del Personal de Enfermería Con Pacientes Covid-19. Cuenca – Ecuador, 2020.” Ocronos. Revista Médica y de Enfermería 1(Mayo). Montero, A. (2020). LAS UNIDADES DEL DOLOR EN LA ERA COVID-19. Revista de La Sociedad Espanola Del Dolor. https://doi.org/10.20986/resed.2020.3823/2020 Navarro, M., y Peña, M. (2020). “Experiencias de La Enfermería En La Unidad de Cuidados Intensivos Del Hospital Universitario Clínico San Cecilio Durante El Inicio de La Pandemia COVID-19.” GARNATA 91 1(1):1–6. Pro, M., (2020). Reflexiones sobre el sentido del dolor, el sufrimiento y la muerte. Cuadernos de Bioetica : Revista Oficial de La Asociacion Española de Bioetica y Etica Medica, 31(103), 377–386. https://doi.org/10.30444/CB.77.
50 8.
ANEXOS
ENCUESTA Esta investigación de estudio tiene como objetivo conocer la descripción del dolor humano desde la perspectiva o vivencias del personal de enfermería que labora en la UCI de un Hospital de la ciudad de Quito en la atención o cuidado a pacientes con covid-19 en época de pandemia; además el propósito de estudio es conocer cómo afecta de manera positiva este dolor humano desde el punto de vista personal y profesional. 8.1.1. PREGUNTAS Genero
Masculino
Femenino
Tiempo que labora en el servicio de cuidados intensivos con pacientes covid-19
Menos de 3 meses
6-9 meses
1 año
Más de un año
¿De las siguientes experiencias del dolor humano ha experimentado usted durante la atención de pacientes con covid-19 en la UCI, indique cuáles?
Miedo
Angustia
Depresión
51
Ansiedad
Tristeza
Enojo/ Ira
Impotencia
Alteración en el patrón del sueño
¿En qué situaciones ha empezado a sentir estos sentimientos? nos puede explicar.
Muerte del paciente
Proceso de intubación por covid-19
Paciente en cuidados paliativos
Limitación de esfuerzo terapéutico
Pacientes jóvenes en situaciones criticas
Otras
¿Cómo ha enfrentado usted estos sentimientos?
Fe
Valorando más la Familia
Música
Deporte
Otras… (mencione cual)
Usted considera que el dolor humano difiere del sufrimiento
Si
No
52 Han modificado de alguna forma favorable estos sentimientos en su vida personal o profesional.
Si
No
53
Consentimiento informado. Fecha: _______ Hora: ______ Yo ______________________________________________, con el número de cédula de identidad _________________, y domicilio______________________________________, He tomado la decisión de participar de manera consiente y libremente en la investigación “DOLOR HUMANO. VIVENCIAS DE ENFERMEROS EN UCI DURANTE LA PANDEMIA COVID-19”, de manera voluntaria y en el pleno uso de mis facultades físicas y mentales; se me ha explicado de forma clara en que consiste la encuesta y sus beneficios. He escuchado, leído y comprendido la información recibida y se me ha manifestado la oportunidad de preguntar sobre la investigación a realizar. Además, que la información obtenida de la presente investigación será utilizada únicamente con fines académicos. También conozco que puedo retirar mi consentimiento cuando lo estime oportuno.