Desde pequeĂąo me ronda por la cabeza una pregunta: ÂżPor quĂŠ un animal tan fuerte como el elefante del circo permite que lo mantengan atado a la estaca?
Para hablar en familia
Para saber quĂŠ es la felicidad hay que hablar con Selma
Los libros nos dan las palabras para ponerle nombre a lo que no sabemos definir, o palabras para lo que no nos atrevemos a decir o para reconocernos en cada una de ellas. Las ilustraciones dan cuerpo a esas palabras ocultas que aparecen luminosas al leer el libro. Este libro es una declaraci贸n de amor o de amistad para regalar a alguien que necesite nuestras palabras.
Para hablar con los mayores de la casa de sentimientos.
Penguin se levanta una mañana con una idea metida en la cabeza: quiere volar, pero aún no sabe que los pingüinos no pueden hacerlo. Junto a su amigo Pingüino buscarán la manera de hacer realidad el sueño de Penguin y descubrirán que un par de pingüinos pueden conseguir todo aquello que se propongan. Sólo tendrán que usar la imaginación. Si te gusta el tema, al final del libro amplían el conocimiento sobre los pingüinos.
Para hablar con los más pequeños de que “si quieres, puedes”
El león pierde su corona de rey de la selva, que va a parar a manos de la tortuga. Los animales del bosque no están de acuerdo, y cada uno de ellos argumenta que para ser rey a los demás les falta una cualidad que ellos sí tienen. Un cuento que habla sobre los celos y los deseos de mandar.
Para hablar de las ganas de destacar por encima de los demás.
Lucas siempre está de mal humor y quejándose de todo, y es que no valora nada de cuanto le rodea.
Para leer con los más pequeños y hablar de la felicidad.
Bego単a Ibarrola lleva muchos a単os trabajando el tema de las emociones en la infancia. Es autora de numerosos libros y cuentos para los m叩s peque単os.
Para iniciarse en el tema.
La primera guía para educar en la felicidad con ejercicios sencillos y propuestas prácticas.
Para enseñar a valorar lo que tienen, a querer y respetar a las personas que les rodean, a perdonar, a aceptar que las cosas no siempre son como ellos quieren…