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Arce Hernández

Ana Lydia Valdés

“CCHes una ventana que te abre al mundo; te da la libertad de decidir lo que quieres hacer y qué camino tomar”

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Días atrás, Sebastián Arce Hernández, Generación 2016, volvió a su alma mater para mostrar su título profesional. El flamante arquitecto egresado de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Acatlán miraba con nostalgia los cambios en las instalaciones del Plantel y lleno de emociones platicó sus logros.

“Me siento muy contento y feliz de regresar a mi alma mater”, dijo en entrevista. Uno regresa siempre a donde fue feliz, dice la sabiduría popular. Volver a mi Plantel es un placer, es recordar y recordar es vivir. Visitar la escuela después de años te permite revivir las experiencias que tuviste en una de las etapas más importantes de la vida: la adolescencia, aquélla en que dejas de ser niño con cierta inocencia y comienzas la transición para convertirte en adulto. El cambio hacia la Facultad es enorme. En CCH experimentas, haces amigos, conoces gente que no olvidas nunca y que en un futuro podría estar trabajando contigo o te casas con alguna de ellas y a otros los mantienes como amigos por toda la vida. Todo esto en la Facultad no es igual. “CCH es una ventana que te abre al mundo, porque te da la libertad de decidir lo que quieres hacer y qué camino tomar…”.

Arquitectura, la carrera de mis sueños

Cuando ingresé no sabía qué estudiar y cuando salí seguía igual. Pero a raíz de circunstancias no planeadas tomé la decisión de elegir la carrera de Arquitectura. Una asignatura que no tiene nada que ver con mi carrera incidió en mi decisión: Taller de Comunicación. Recuerdo que para fortalecer la campaña de reciclaje propuse la construcción de un contenedor colosal de cuatro metros de altura en forma de botella de refresco, que al final quedó forrada de envases vacíos de plástico PET. Aquella botella colosal formó parte del proyecto de UNAMosPET, cuyo objetivo era fortalecer la campaña de reciclaje. Su significado era evidente y de esta manera un llamativo visual para que la comunidad cecehachera se sintiera motivada a colocar las botellas de PET en su lugar.

Fue uno de los proyectos que más motivó mi estancia en CCHN, pues me permitió descubrir cosas de mi mismo que no conocía y tratar con personas de mantenimiento del Plantel que no había visto antes. A su vez, compart í con mis compañeros una responsabilidad como si hubiera sido en el mundo profesional. Yo era quien daba instrucciones, entendía las necesidades de los compañeros que colaboraron conmigo y dirigí el proyecto mientras estudiaba. Tuve que cumplir con un presupuesto y fui yo el que planeó todo lo que había que hacer para poder dar el resultado esperado en tiempo y forma. Aquella primera experiencia formó parte de lo que es mi carrera actual, por eso me encantó. Fue un proyecto escolar, pero algo fundamental que me llevó a decidir estudiar Arquitectura. Esto es precisamente el CCH, una institución educativa que te permite observar el mundo de manera global. No es sólo un conjunto de asignaturas, sino que te enseña a ver de todo, te abre la mente para todas las áreas y eso nos permite crecer.

CCH me dio valores

El Colegio me dejó responsabilidad, honestidad, libertad de expresión, libertad para decidir y el impulso para seguir objetivos y no parar, de ser firme a la hora de tomar decisiones y sobre todo cumplir mis sueños. Además de la carrera de Arquitectura, cuento con un diplomado en Diseño Arquitectónico e Interiorismo y es probable que continúe con una maestría en Interiorismo. Esta especialidad va más allá de la decoración de interiores, es analizar un proyecto y su funcionamiento para poder determinar espacios óptimos para que el ser humano pueda vivir bien. Es un área creativa pero que te hace pensar en el ser humano que habita un inmueble y eso es lo que más me gusta. Siempre será grato regresar como docente y devolver a la Universidad lo que me ha dado. Directivos, profesores, compañeros y amigos, todos son la Universidad y en su conjunto te ofrecen algo bueno. Compartir el aprendizaje que obtuviste como alumno y después a nivel profesional con jóvenes que apenas inician el camino a su carrera futura será gratificante.

Diseñaré la escuela del futuro

Mi sueño es crecer como persona y como arquitecto me gustaría diseñar auditorios, centros comerciales, incluso una escuela, y hacer de esos inmuebles una obra magna, bien ejecutada, con ética y responsabilidad social. Para mí es muy importante construir de manera responsable. “La infraestructura de las escuelas tiene que cambiar y volverse más dinámica”. Estar a la vanguardia tecnológica es indispensable, lo vimos durante el encierro. Tuvimos que adaptarnos de inmediato, pero también mantener lo que ha dado buenos resultados para seguir siendo humanos. A todos aquellos que padecieron por la pandemia de COVID-19 les diría que la vida continúa y que siempre habrá subidas y bajadas pero el ser humano tiene la capacidad para sobreponerse a todas esas circunstancias. A todos nos afectó la pandemia, pero hay que verla como una buena razón para tomar fuerza y sobresalir.

Gracias UNAM

Deseo agradecer a mis profesores del plantel Naucalpan y a usted por ser una profesora de excelente calidad humana, que nos dio las herramientas necesarias y el impulso para poder salir adelante. Ya conseguí lo que más anhelaba que era el título profesional, una gran parte de mi vida ha sido satisfecha y todo ha sido gracias a la UNIVERSIDAD.

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