Revista Digital Noviembre 2024

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Opteon™ XL41: el refrigerante que redefine la sustentabilidad en la industria HVAC

En la industria de la climatización, la preocupación por el impacto ambiental de los refrigerantes ha llevado a buscar alternativas de menor potencial de calentamiento global (GWP, por sus siglas en inglés). El R-410A, uno de los refrigerantes más comunes, está en el centro de esta problemática debido a su contribución a las emisiones de gases de efecto invernadero.

En respuesta a las regulaciones globales como el Protocolo de Montreal y la Enmienda de Kigali, que impulsan la reducción del uso de estos compuestos, la industria busca soluciones más sostenibles que también ofrezcan un alto rendimiento.

Ante esta necesidad de refrigerantes más ecológicos en el mercado, Chemours presenta Opteon™ XL41 (R-454B), un lanzamiento innovador que establece un nuevo estándar de sustentabilidad en el sector HVAC. Este refrigerante, formulado para reemplazar al R-410A en equipos nuevos , es ideal para una variedad de aplicaciones de climatización, incluyendo aire acondicionado de expansión directa, bombas de calor y chillers. Su versatilidad permite utilizarlo en sistemas residenciales, comerciales ligeros y comerciales. Es compatible con unidades de ventana, portátiles, mini splits, multi splits y sistemas divididos, adaptándose a las necesidades de diversos tipos de equipos. Además, Opteon™ XL41 está diseñado específicamente para equipos construidos para R-410A, lo cual facilita su adopción sin la necesidad de rediseños complejos.

Opteon™ XL41 representa una opción eficiente y ambientalmente responsable, ofreciendo una reducción del 78% en GWP en comparación con el R-410A, lo cual disminuye considerablemente el impacto ambiental de los sistemas HVAC. A diferencia de otras alternativas, este refrigerante mantiene una capacidad y eficiencia comparables a las del R-410A, asegurando un excelente desempeño, incluso en condiciones de temperaturas elevadas.

La facilidad de transición es otro de sus beneficios clave, pues Opteon™ XL41 trabaja con presiones y temperaturas similares al R-410A, lo que permite que los fabricantes, técnicos y contratistas puedan adaptarse a su uso sin grandes modificaciones. Además, su compatibilidad con lubricantes POE y su bajo deslizamiento contribuyen a que el cambio sea sencillo y accesible para la industria, optimizando la inversión en equipos y herramientas.

El lanzamiento Opteon™ XL41 representa un paso firme hacia la reducción de la huella ambiental en sistemas de climatización, ofreciendo a fabricantes y técnicos una alternativa que combina eficiencia, rendimiento y responsabilidad ambiental.

EL FUTURO Y CRECIMIENTO de la refrigeración sostenible en

AMÉRICA LATINA

Siendo ingeniero mecánico y con más de 30 años de experiencia en el sector de refrigeración y aire acondicionado, Fernando Llopart ha liderado importantes transformaciones dentro de Copeland. En esta conversación, nos comparte su trayectoria profesional, los desafíos que ha enfrentado en su rol como vicepresidente, las estrategias para adaptarse a las diversas realidades de América Latina, y su visión del futuro para la empresa en la región.

Redacción

Mundo HVAC&R (MH): ¿Qué te motivó a elegir una carrera en el sector industrial y cómo llegaste a ser vicepresidente de Copeland?

Fernando Llopart (FLl): Bueno, desde pequeño, fue algo natural para mí entrar en el sector de refrigeración y aire acondicionado. Mi ciudad tenía una escuela secundaria técnica que ofrecía una carrera en refrigeración y aire acondicionado, y fue ahí donde comencé. Terminé mi educación secundaria como técnico en refrigeración y aire acondicionado, y luego decidí continuar con la ingeniería mecánica. Mi experiencia en el área técnica me llevó naturalmente a involucrarme en la industria de refrigeración, lo cual me permitió entrar al mercado y empezar a crecer profesionalmente.

Comencé como ingeniero de ventas en otra empresa, en el sur de Brasil. Con el tiempo, fui adquiriendo más experiencia y formación, lo que me permitió avanzar en mi carrera. Fui desarrollando habilidades en la parte técnica y comercial, lo que me llevó a ocupar puestos de mayor responsabilidad. Viví en diferentes países, como Perú y Estados Unidos, y en 2006 ingresé a Copeland, donde empecé liderando la línea de productos electrónicos para América Latina. Más tarde, en 2015, me asignaron también los compresores, lo que consolidó mi rol en la empresa.

Tras varios años de trabajo y dedicación, fi nalmente fui nombrado vicepresidente de ventas para Europa, lo que me llevó a vivir en Alemania durante unos años. Luego, regresé como vicepresidente general de América Latina, que

FERNANDO LLOPART

es mi posición actual. En resumen, fue un camino largo, con más de 30 años de trabajo, estudio y esfuerzo, pero sin duda valió la pena.

MH: ¿Cuáles fueron los principales desafíos cuando llegaste a la vicepresidencia de Copeland en América Latina?

FLl: El mayor desafío fue la transición de Copeland a convertirse en una empresa independiente. Este cambio significó crear una nueva cultura corporativa, ajustar procesos internos y mantener la excelencia que siempre hemos buscado. Además, llegué justo después de la pandemia, y uno de los principales retos fue manejar los problemas en la cadena de suministros y asegurar que los productos llegaran a nuestros clientes. Enfrentamos problemas globales de entrega, pero también nos enfocamos en mantener el crecimiento continuo de la empresa en la región, lo cual sigue siendo un desafío importante.

Otro reto fue la adaptación de nuestros equipos y clientes al nuevo contexto de Copeland como una compañía independiente. Para algunas personas, los cambios son oportunidades, pero para otras pueden ser incómodos, por lo que gestionar estos sentimientos y mantener un enfoque positivo ha sido clave.

MH: América Latina tiene muchas peculiaridades en cuanto a clima e infraestructura. ¿Cómo se adaptan las estrategias de Copeland a las necesidades de cada país en la región?

FLl: Adaptarse a las particularidades de cada país en América Latina es siempre un desafío. La región tiene una gran diversidad en cuanto a regulaciones, voltajes, frecuencias eléctricas, entre otros factores. Por ejemplo, algunos países operan con 60 Hz, mientras que otros lo hacen con 50 Hz. También existen diferencias en el voltaje, que puede ser de 220 V o 380 V, lo que nos obliga a ajustar nuestros productos a las necesidades locales.

Para enfrentar estos desafíos, trabajamos muy de cerca con nuestras fábricas y equipos de ingeniería para desarrollar productos específicos para el mercado latinoamericano. El crecimiento sostenido que hemos tenido en la región nos ha permitido tener más credibilidad y una mejor comunicación con las fábricas para asegurar que obtengamos los productos adecuados.

MH: ¿Qué países consideras fortalezas para Copeland en la región y cuáles representan un mayor reto?

FLl: Sin duda, México es nuestra mayor fortaleza en la región. Contamos con cinco fábricas en el país, lo que refuerza nuestra presencia.

En cuanto a los retos, Argentina es un país complicado debido a su situación económica. La volatilidad en términos de inflación y políticas económicas hace que sea difícil operar de manera estable. Sin embargo, contamos con un equipo local muy capacitado que entiende bien el mercado y sabe cómo navegar en estas condiciones. Aunque es un reto, Argentina sigue siendo un mercado importante para nosotros.

MH: La sostenibilidad y la eficiencia energética son tendencias clave en el sector. ¿Cómo visualizas el papel de Copeland en la transición hacia nuevas tecnologías que respondan a estos desafíos?

FLl: Copeland tiene un papel central en esta transición. Hemos estado en la vanguardia de la tecnología durante más de 100 años. El compresor Scroll, por ejemplo, fue una invención nuestra. Ahora, con los cambios en los refrigerantes, como el CO 2 y el propano, estamos desarrollando

tecnologías que son esenciales para el futuro de la sostenibilidad en la industria. Nuestra visión es estar a la cabeza de esta transformación. Ya estamos trabajando en nuevas soluciones para gases refrigerantes con bajo impacto ambiental, y continuaremos invirtiendo en tecnologías que contribuyan a la eficiencia energética. Creemos que esta es la dirección correcta, no sólo por las regulaciones que se vienen, sino también porque es lo correcto para el planeta.

MH: Me mencionabas que uno de los mayores retos que enfrentaste al llegar como vicepresidente fue la pandemia. ¿Qué habilidades adquiridas a lo largo de tu carrera te ayudaron a superar esos desafíos?

FLl: Sin duda, una de las cosas que más me ayudó fue haber construido una red sólida de contactos dentro de Copeland a lo largo de mis 18 años en la compañía. Copeland es una empresa global con más de 18 mil colaboradores, y conocer a las personas adecuadas y saber cómo moverme dentro de la organización fue clave para enfrentar la pandemia. Mantener una buena comunicación y gestionar de manera eficiente los recursos fue esencial para poder seguir adelante. Durante la pandemia, hubo muchos problemas relacionados con la cadena de suministro. Sin embargo, gracias a la experiencia adquirida y a la capacidad de movilizar los recursos correctos, logramos entregar los productos necesarios y cumplir con las expectativas de nuestros clientes. La pandemia fue un momento difícil para todas las empresas, pero creo que las habilidades de liderazgo, la experiencia en gestión de crisis y el trabajo en equipo fueron determinantes para superar esos retos.

MH: ¿Cuáles son tus expectativas y visión para el crecimiento de Copeland en América Latina en los próximos años?

FLl: Tenemos expectativas de crecimiento muy fuertes para la región. Durante la Convención de Distribuidores de NOLA 2024, compartimos nuestros planes para México y el norte de América Latina, y todos nuestros

Los gobiernos y las empresas están exigiendo soluciones que no sólo reduzcan el consumo de energía, sino que también contribuyan a un menor impacto ambiental

proyectos están alineados con un crecimiento sostenido. En los últimos años hemos crecido a doble dígito y queremos mantener ese ritmo en los próximos años. Creo firmemente en el potencial de América Latina. Es una región en la que me gusta trabajar y en la que confío mucho. Además, el enfoque en sostenibilidad es una tendencia imparable, y nuestras soluciones energéticamente eficientes y ambientalmente responsables jugarán un papel central en ese futuro. Estamos muy emocionados por lo que viene y confiamos en que seguiremos creciendo de manera significativa en la región.

MH: Actualmente tienen presencia en seis países de América Latina. ¿Qué tan importante es esa cobertura para Copeland y cómo gestionan la atención a los mercados donde no tienen personal permanente?

FLl: Tenemos una presencia física con personal en seis países: México, Brasil, Argentina, Chile, Colombia y Perú. Sin embargo, eso no significa que sólo operemos en esos mercados. Atendemos toda América Latina desde estos centros y a través de una red bien estructurada de distribuidores y centros de logística.

Por ejemplo, aunque no tenemos personal en Ecuador o Uruguay, gestionamos esos mercados desde nuestros equipos en Chile y Argentina, respectivamente. Esto nos permite mantener una cobertura integral de toda la región, optimizando los recursos disponibles y asegurando que nuestros productos lleguen a todos los clientes.

Además, contamos con centros de distribución clave en Argentina, Brasil, Chile y México, que nos permiten asegurar la disponibilidad de productos para toda la región. También invertimos en centros de capacitación, como el que recientemente reinauguramos en México, lo cual refuerza nuestro compromiso con el desarrollo de la industria y el soporte a nuestros clientes.

MH: Hablando de mercados, ¿hay alguna área específica en la que les gustaría expandirse o donde vean oportunidades de crecimiento a corto plazo?

FLl: Siempre estamos buscando oportunidades para expandirnos. En este momento, uno de los mercados en los que vemos un gran potencial es Perú. Hace apenas tres meses incorporamos a un ingeniero local, lo que marca el inicio de una inversión importante en el país. Estamos convencidos de que Perú es un mercado en crecimiento y esperamos que nuestra presencia ahí aumente significativamente en los próximos años. Dicho esto, no es sólo en Perú donde vemos oportunidades. Nuestra visión es crecer en todos los países donde operamos, y aunque en algunos lugares ya tenemos una presencia muy sólida, siempre hay espacio para mejorar y ganar más participación de mercado. También estamos abiertos a nuevas inversiones en mercados donde hoy no tenemos una gran cobertura, pero siempre de forma estratégica y alineada con nuestras metas de expansión.

MH: ¿Cuáles son las prioridades de Copeland en términos de desarrollo de productos para América Latina?

FLl: En cuanto a productos, tenemos varias prioridades alineadas con las tendencias globales, pero también con las necesidades específicas de América Latina. La transición hacia refrigerantes más sostenibles, como el CO2 y el propano, es una de nuestras principales áreas de enfoque. Queremos asegurarnos de que Copeland esté

a la vanguardia en el desarrollo de tecnologías para estos nuevos refrigerantes, que no sólo son más amigables con el medio ambiente, sino también más eficientes.

También estamos trabajando en expandir nuestra gama de productos que cumplen con las normativas de eficiencia energética en la región. Los gobiernos y las empresas están exigiendo soluciones que no sólo reduzcan el consumo de energía, sino que también contribuyan a un menor impacto ambiental. Copeland ha estado desarrollando productos innovadores para estos fines, y continuaremos haciéndolo para satisfacer las demandas del mercado latinoamericano.

MH: En términos de sostenibilidad, Europa está muy avanzada en cuanto a tecnología y normativas. ¿Cómo visualizas que ese avance se refleje en América Latina?

FLl: Europa ciertamente está muy adelantada en términos de sostenibilidad y conciencia medioambiental. Es una cuestión cultural fuerte en la región, donde las personas están muy comprometidas con la protección del medio ambiente. Nosotros hemos estado desarrollando muchas soluciones para el mercado europeo, como el compresor Scroll para CO2 , que es un producto de última generación diseñado para cumplir con las estrictas normativas de sostenibilidad en Europa. Nuestra ventaja es que podemos aprovechar estas innovaciones y traerlas a América Latina. Los gobiernos y las empresas latinoamericanas están adoptando políticas más estrictas en cuanto a sostenibilidad. Es sólo cuestión de tiempo para que la demanda de este tipo de productos crezca en nuestra región, y nosotros ya estamos preparados para liderar esa transición.

MH: Finalmente, ¿qué consejo le darías a quienes están empezando en la industria de la refrigeración y aire acondicionado?

FLl: La industria de la refrigeración y aire acondicionado es apasionante, y es un sector del que es difícil salir una vez que entras. Mi consejo para aquellos que están comenzando es que trabajen duro y mantengan siempre una ética de trabajo sólida. Los valores fundamentales como la responsabilidad, el respeto y la ética son clave para avanzar en este campo.

También creo que es importante estar dispuesto a aprender constantemente. Cuando yo comencé, tenía conocimientos de ingeniería, pero no mucha experiencia. Con el tiempo, aprendí mucho tanto en el trabajo como a través de la formación continua. Estudiar y ganar experiencia es fundamental para crecer. Y, por último, esta es una industria que está cambiando constantemente, especialmente con los avances en sostenibilidad. Estamos haciendo algo más que sólo negocios; estamos contribuyendo a cuidar el planeta, lo que la hace aún más emocionante.

La visión de Fernando Llopart para Copeland y la industria de la refrigeración y aire acondicionado en América Latina es ambiciosa y prometedora. Con un enfoque en la sostenibilidad, la innovación tecnológica y la expansión estratégica en la región, Copeland sigue siendo un jugador clave en el mercado. Los desafíos que ha enfrentado Fernando a lo largo de su carrera, desde la pandemia hasta la transición de Copeland a una empresa independiente, le han permitido adquirir valiosas lecciones que ahora aplica para guiar a la empresa hacia un futuro brillante. Sin duda, América Latina jugará un papel crucial en ese futuro, con México liderando el camino como una fortaleza clave en la región.

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