Pensamiento Heurístico
L
a palabra “heurístico” está definida como el arte o la técnica para tomar atajos en la resolución de problemas. Aunque parezca una facultad tentadora a desarrollar en nuestra sociedad, “la sociedad de la inmediatez”, esta dista por mucho de beneficiar nuestra libertad individual y social. Como ejemplo de nuestra necesidad de “respuestas inmediatas” está la manera en que nos buscamos aliviar de una jaqueca, en lugar de visitar al doctor y realizar algunos exámenes para identificar la fuente del mal, elegimos la solución inmediata, la aspirina. Siendo que nuestra naturaleza humana tiende a simplificar los procesos y reducir los esfuerzos utilizados, la manera en que tomamos nuestras decisiones y emitimos críticas es a través de atajos fundados en el mito, sugeridos por la tendencia mediática. De tal manera que el lugar en que comemos, la bebida con la que nos quitamos la sed, la vestimenta que preferimos, el “status” social al que aspiramos, la música que escuchamos, los programas de televisión que disfrutamos, los candidatos que elegimos para gobernarnos y la indiferencia social, son resultado de permitir que se nos simplifique la tarea de observar, verificar, racionalizar y experimentar, es decir, suprimiendo el pensamiento científico. Giovanny Sartori en su libro “El Homo Videns”, dejó claro que la inteligencia en el ser humano no se mide por la capacidad de obtener un beneficio sin esfuerzo del uso racional o la dedicación. Esta “inteligencia” la comparó con la estrategia que prepara un león para cazar a su presa, una demostración de astucia animal, no de capacidad lógica – racional. El ser racional se caracteriza por
la capacidad de ver el alcance de cada una de sus decisiones y decidir coherentemente el rumbo de su vida. Cuesta creer que muchos de nosotros sabiendo que el consumo de bebidas con alto contenido de azucares son una de las causa de una de las enfermedades más destructivas y costosas de nuestro país, la diabetes mellitus, seguimos consumiendo este tipo de productos. Si nuestro criterio está sugestionado por otros, ahora imaginemos nuestro futuro, el de nuestra familia, nuestra nación, ¿en manos de quién quieres que esté? Por Rabí Hernández