El estres que genera despedir a alguien y como manejarlo, Por: Adriana Castro

EL ESTRÉS QUE GENERA DESPEDIR A ALGUIEN y comó manejarlo.

Por: Adriana Castro

Ser una mujer empresaria es sin duda un reto, hay que tomar muchas decisiones y sobretodo hay que tomar acción para que tu empresa avance dentro de un mercado tan competitivo.

Estar a cargo de una empresa es todo un arte, entre otras cosas, hay que encargarse de situaciones que generan mucho estrés.

En esta ocasión, abordaremos lo estresante que es notificarle a alguien que será despedido. Emocionalmente es sumamente desgastante. Te sientes entre la espada y la pared, por un lado es necesario cuidar los intereses de tu empresa, pero por otro, sabes que estás cambiando abruptamente la vida y los planes de alguien.

Siempre es difícil dar malas noticias, decirle a un colaborador que debe abandonar su cargo es sin duda una tarea desagradable y dolorosa. No me refiero a situaciones en las que la persona ha incurrido en un acto horrendo, me refiero a los momentos desafortunados en los que es obvio que una persona falla una y otra vez.

Como empresaria probablemente te sea difícil tomar la decisión respecto a ¿Cuál es el nivel en el que es inaceptable el desempeño? ¿Cómo saber si se ha hecho lo suficiente para ayudar, con capacitación, motivación, sistemas de apoyo o alianzas complementarias? ¿Cómo hay que expresarse cuando llegue el momento del despido?

En lo personal, me parecen valiosos los planteamientos que propone el Enfoque Basado en Fortalezas. Este enfoque está sustentado de manera científica en la teoría de los investigadores Estadounidenses Martin Seligman y Christopher Peterson que pertenecen a la corriente de la Psicología Positiva (Character Strengths and Virtues, 2004).

Este enfoque plantea que ante la incertidumbre sobre si es momento de despedir a alguien o no, deberá aplicarse -la firmeza con amor-. (Sí, sí, ya sé que suena a telenovela, pero sigue leyendo, esto tiene un sustento científico). La firmeza en el amor se refiere a apegarnos a una mentalidad en la cual se combinan la fijación por la excelencia y una auténtica necesidad de interesarse por el otro. Es una mentalidad que propone enfrentar el mal desempeño a tiempo y mantener intacta la relación con el colaborador.

¿Qué es entonces la firmeza con amor? ¿Cómo opera? La “firmeza” es fácil de explicar puesto que para el Enfoque Basado en Fortalezas la excelencia es el marco de referencia. Entonces te preguntarás “¿En qué nivel se considera inaceptable el desempeño?” La respuesta es: en el nivel en el que el desempeño sea inferior al promedio sin indicios de mejorar. En otras palabras, si después de poco tiempo no hay un desempeño de excelencia, hay que poner fin a ello.

En cuanto al “amor” es un poco más sutil. Se refiere a enfrentar el mal desempeño a tiempo, pero haciéndolo de manera que toda la amargura y la mala voluntad se desvanezcan. Para ello, partamos de que para este enfoque todo emana del concepto de talento.

Como empresaria el hecho de reconocer el talento, es decir, que cada persona posee patrones perdurables de pensamiento, sentimiento y comportamiento, te libera enormemente al momento de enfrentar el mal desempeño. ¿Por qué? Porque te libera de tener que culpar a tu colaborador.

Las empresarias convencionales creen que con suficiente fuerza de voluntad y determinación se puede modificar prácticamente cualquier comportamiento. Para ese tipo de empresarias, todos los casos de mal desempeño son culpa de sus empleados. Es común escucharlas “le he advertido mucho y todavía no mejora. Si se esforzara más, su mal desempeño ya habría desaparecido”. El Enfoque Basado en Fortalezas sugiere que si después de retirar todos los obstáculos para esquivar las faltas de talento, el desempeño del colaborador no mejora, la explicación más probable es que sus talentos no concuerdan con su función.

Cuando es obvio que una persona está en un cargo que no le corresponde, lo más recomendable es alentarla a aprovechar su paso en falso para aprender un poco más sobre sus talentos y vacíos.

“Ok” pensarás “Y ahora ¿Cómo se lo planteo?” Puedes utilizar planteamientos como “Esto no es para ti, hablemos de las razones” o “Necesitas encontrar un cargo que se adapte mejor a tus fortalezas naturales .

¿Cuál crees que pueda ser ese cargo?” Si utilizas esta clase de lenguaje no estarías suavizando las malas noticias, simplemente estarías diciendo la verdad. Ese es el elemento de “amor” dentro de la firmeza con amor. Interésate verdaderamente por cada una de las personas de tu equipo.

Interesarte significa hacer lo necesario para encaminar a la persona hacia el éxito, tener el deseo que encuentre el cargo donde tenga la oportunidad de sobresalir. Algo importante a considerar es que probablemente la reacción de la persona sea de enojo, dolor o miedo. Recibir la noticia de un despido es algo que requiere tiempo para asimilarse y es natural que las primeras reacciones sean emociones negativas.

Es importante permitirle a tu colaborador que se exprese, también si desea retirarse repentinamente de tu oficina, hay que respetar su decisión. Poco a poco con el tiempo, las aguas se irán calmando.

Este tipo de situaciones es una buena oportunidad para que consideres incluir en la descripción de puestos de tu empresa, ¿cuáles son las fortalezas que el cargo requiere? Así, al momento de contratar a alguien se podrá verificar que sí posea las fortalezas que se necesitan.

Seligman y Peterson crearon una evaluación de fortalezas validadas científicamente, con la que cualquier persona puede identificar cuáles son sus fortalezas. La evaluación es gratuita y está permanentemente en esta liga. www.viacharacter.org Tomate el tiempo para identificar tus fortalezas. Es un ejercicio totalmente recomendable para el autoconocimiento.