5 minute read

ESPECIAL - COMPETITIVIDAD DE LA BANCA

Next Article
ESPECIAL ABOGADOS

ESPECIAL ABOGADOS

COMPETITIVIDAD DE LA BANCA

¿CÓMO SE PUEDE SER COMPETITIVO CON LAS FINANZAS? EN ESTE ESPECIAL, EXPERTOS EN TEMAS FINANCIEROS RESPONDERÁN A ESTA Y OTRAS INTERROGANTES, PARA CONOCER CUÁLES SON LOS ASPECTOS QUE SE TOMAN EN CUENTA PARA INCREMENTAR LA COMPETITIVIDAD DE LOS SERVICIOS BANCARIOS EN NUESTROS PAÍSES.

Reinvención constante

Por Arturo Castro Barrantes.

Los parámetros para medir la competitividad de los servicios financieros cambian de acuerdo a las necesidades, los gustos e intereses de sus clientes, y a factores propios del entorno. Por esa razón, las instituciones bancarias y financieras trabajan de manera continua para competir en un mercado global, cada vez más interconectado y exigente.

Las definiciones de competitividad son muchas y muy distintas, lo único invariable es su importancia para el desarrollo de los pueblos. Para el Foro Económico Mundial, el aumento de la competitividad significa un incremento de la prosperidad y aseguran que “las economías competitivas son aquellas con más probabilidad de crecer de forma sustentable e inclusiva”, lo que constituye una mayor probabilidad de que todos los miembros de la sociedad se beneficien con los frutos del crecimiento económico.

Para el secretario general de la Federación Latinoamericana de Bancos (Felaban), Giorgio Trettenero Castro, la competitividad es un tema “nuevo y mutante en el tiempo”.

“Lo que hace unos pocos años se decía que era una fuente de competitividad, hoy puede cambiar rápidamente, por efectos de cambios en el entorno, en la tecnología y en los hábitos del público”, Giorgio Trettenero.

“Lo que hace unos pocos años se decía que era una fuente de competitividad, hoy puede cambiar rápidamente, por efectos de cambios en el entorno, en la tecnología y en los hábitos del público. Por eso, es imposible hablar de una definición estática. La competitividad en general tiene que ver con identificar en el tiempo aquellos factores que permiten que una industria tenga ventajas, oportunidades, medios y modos de producción a costos razonables para desplegar su actividad en periodos de tiempo. En esto último, también debo decir que hay cambios permanentes, ya que las ventanas de tiempo en el mundo de las finanzas son cada vez más exigentes, amplias y con demandas de inmedia- tez”, dice Trettenero.

El experto asegura que los parámetros de medición de la competitividad, por consecuencia, son esquemas cambiantes y que hoy grandes programas evalúan la competitividad, la competencia y la solidez de un sector.

“Para el mundo financiero, como un todo, se incluyen temas como los precios de los servicios financieros, la disposición de los mismos al público de una economía, el acceso al crédito, la innovación de los servicios, el acceso de las empresas al mercado de bonos corporativos, la existencia de otros actores como los fondos de capital de riesgo e inversionistas ángeles, la solidez patrimonial de las empresas, la calidad de la regulación y los derechos de propiedad claros (según la metodología del World Competitiviness Report). De acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, se observarían temas como la profundidad financiera, el acceso al financiamiento en los mercados internacionales, la regulación y la calidad del mercado FX (Foreing Exchange) y los servicios disponibles para financiar el comercio internacional, la infraestructura disponible para que los mercados funcionen correctamente y las estructuras de gobernabilidad interna de las instituciones financieras” dice Trettenero.

Por una banca más competitiva

El secretario general de Felaban dice que, desde el punto de vista microeconómico, en la industria de las finanzas se puede ser competitivo a través de diferentes factores, como la formación del talento humano, entender mejor las necesidades del cliente, atenderlo a la mayor velocidad posible, diseñar productos financieros a la medida del consumidor, tener un acervo de tecnología física disponible, generar productos propios y diseñados en casa que los diferencien de los demás para competir por servicio y diferenciación.

Giorgio Trettenero Castro, secretario general de la Federación Latinoamericana de Bancos (Felaban).

“Todos pueden tener acceso a los mismos tipos de tecnologías, pero les falta aplicarlos para todos los clientes. Necesariamente, hay elecciones que determinan qué tipo de producto ofrezco, con qué tecnología y a qué grupo de clientes se atienden”, asegura Trettenero.

Nuevas tecnologías y competitividad

La sinergia entre los servicios de pagos digitales de la banca con las plataformas digitales de fácil suscripción de las empresas de servicios logísticos de entrega han permitido responder a una gran parte de los retos que presentó la pandemia ocasionada por el COVID-19 y les permitió ser competitivos, tanto a bancos, como a los negocios, ante semejante desafío.

“La banca se encuentra diseñando e implementado productos para el acceso a financiamientos de forma totalmente digital, incorporando tecnologías de inteligencia artificial, analítica de datos y machine learning, que permiten modelar procesos simplificados y con tiempos de respuesta muy cortos, que permitan atender la necesidad del pequeño empresario, que en varias ocasiones necesita el capital de trabajo de forma ágil para cumplir con sus compromisos del día a día”, asegura Carlos Hernández, gerente del área de Transformación de Negocios de EY Centroamérica y República Dominicana.

“LA COMPETITIVIDAD TIENE QUE VER CON IDENTIFICAR EN EL TIEMPO AQUELLOS FACTORES QUE PERMITEN QUE UNA INDUSTRIA TENGA VENTAJAS, OPORTUNIDADES, MEDIOS Y MODOS DE PRODUCCIÓN A COSTOS RAZONABLES PARA DESPLEGAR SU ACTIVIDAD”, GIORGIO TRETTENERO

“Es inequívoco decir que las herramientas que evitan la presencialidad, en especial las digitales, se han acelerado. En Felaban, estimamos que, en América Latina, los canales digitales han crecido a una tasa media anual del 144% en la década 2009-2019. Estimamos que, en los años 2020 y 2021, este crecimiento puede ser del orden de al menos el 50% adicional. Estos mecanismos reducen el contacto físico, permiten registro y trazabilidad, reducen los costos de transacción e incorporan más públicos a las corrientes formales de pago. Trabajos académicos recientes muestran la correlación entre más inclusión financiera y menor desigualdad de ingreso”, dice Trettenero.

Ronald Xirinachs, socio de Asesoría Financiera de Deloitte Spanish Latin America, asegura que las pymes han utilizado el comercio electrónico para generar negocio adicional durante la pandemia, facilitado en parte por las plataformas de entrega.

“Sin las facilidades de pago electrónico, aportadas por bancos, apps y las mismas plataformas, las pymes hubiesen quedado aisladas del impulso que experimentó el comercio electrónico durante la pandemia”, dice Xirinachs.

Durante la pandemia, los servicios virtuales y el financiamiento a las pymes influyeron en la competitividad de las distintas entidades bancarias.

Como lo afirma Trettenero, la tecnología ha acompañado siempre al quehacer y trasegar de la industria bancaria. El telégrafo, el fax, el internet, la tecnología digital, la inteligencia artificial y las llamadas Learning Machines son tan solo algunos de los insumos con los cuales los servicios financieros se promocionan, se otorgan/ pagan/ cobran/ monitorean, tanto de parte de los oferentes, como de los demandantes de servicios financieros.

“La tecnología siempre ha jugado un papel importante y siempre lo hará, lo importante es que las decisiones empresariales que se tomen sean armónicas, tanto con la vocación de las firmas, como con los objetivos. Hoy, en medio de esta amplia pandemia, la tecnología cobra una importancia capital, ya que es mucha la demanda por prestación de servicios mediante canales virtuales”, dice el secretario general de Felaban.

En este interminable camino de mantener la competitividad, las entidades financieras deben adaptarse a las necesidades de sus clientes, al entorno imperante y a las nuevas tecnologías que facilitan la prestación de sus servicios.

This article is from: