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REPORTAJE

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CEO CLUB

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Por Angie López Arias

Colegios de excelencia brindan educación integral

Al momento de elegir un centro educativo para sus hijos es importante considerar las instalaciones, los idiomas y los contenidos que ofrece, así como uno que brinde una enseñanza más profunda.

Elegir un centro educativo para sus hijos es una tarea que requiere tiempo, paciencia y un análisis minucioso, pues es usual preferir un lugar con instalaciones de primera, que enseñe un segundo o hasta un tercer idioma y que las metodologías que impartan sean innovadoras. Sin embargo, la excelencia educativa está más allá de esos elementos.

Por supuesto que es importante tomar en consideración cómo es el lugar al que irán los hijos y lo que instruirán en él, pero hay otros factores a investigar como por ejemplo conocer al cuerpo docente, saber las formas en que desarrollan la creatividad de los alumnos o las maneras en las que fomentan ciertas habilidades y sentimientos.

Para Luis Manuel Martínez, doctor en Pedagogía, licenciado en Filosofía y Ciencias de la Educación y coordinador del Grupo de Investigación FER- SE (Fundamentos de la Educación y Responsabilidad Social Educativa) del departamento de Ciencias de la Educación de la Universidad Rey Juan Carlos de España, el mejor centro educativo es aquel que le ofrece instalarse en su propio hogar interior.

Afirma que el ambiente lo dan las personas: “aceptación, aprecio, pertenencia, confianza, posibilidad de desplegar la propia competencia y posibilidad de contribuir en la vida del centro. Las instalaciones, mientras sean dignas, valen cualquiera” (ver entrevista completa en el recuadro: Enseñanza con vocación).

A partir de la pandemia, los centros educativos deberán enfocarse aún más en las necesidades de los estudiantes.

Rommel Porras, director general de Kamuk School y vicepresidente de la Asociación de Centros Educativos Privados de Costa Rica (ACEP), comenta que la responsabilidad de un centro educativo es más que la enseñanza del conocimiento duro, es también propiciar en el estudiante el desarrollo de competencias que le permitan una sana y efectiva incorporación a la sociedad.

Para Porras, las instalaciones de un centro educativo deben constituirse en el entorno que propicie el aprendizaje, así, entre más responda el entorno al enfoque educativo – metodológico que ofrece el centro educativo, mayor será la posibilidad de desarrollo que tenga el estudiante.

“En un mundo ideal, las instalaciones de un centro educativo deberían propiciar la creatividad, la innovación, el desarrollo de habilidades y destrezas deportivas, culturales y musicales. Deben brindarle al estudiante un espacio de cercanía con la naturaleza”, explica el experto.

Es así como la elección del centro educativo es una misión sensible porque en ella se pondrá el futuro de los hijos.

DE PRIMERA

El mejor centro educativo es:

• El que atrae por su espíritu.

• El que con sus contenidos hace que el estudiante saque su creatividad por el desarrollo de sus competencias y su carácter con sensibilidad.

• El que enseña a mostrarse con autenticidad y a cada uno se le quiere por quién es.

• En el que las familias, más que consumidores, son servidores en equipo con los docentes, colaborando en unidad, comprometiéndose y exigiéndose mutuamente.

• En el que se le hace al estudiante ser el dueño de su propio corazón y desplegar su propia originalidad que es lo que ofrece al mundo y con eso se hace feliz, allí donde esté, formando un “nosotros-maduro”.

• Aquel que le ofrece instalarse en su propio hogar interior y contactar con su originalidad para desplegarla en un “nosotros maduro”.

• El que trata a cada estudiante según su propia sensibilidad, sabiendo que cada alumno, cada familia y cada docente son diferentes.

Fuente: Luis Manuel Martínez, doctor en Pedagogía, Licenciado en Filosofía y Ciencias de la Educación y coordinador del Grupo de Investigación FERSE del departamento de Ciencias de la Educación de la Universidad Rey Juan Carlos de España.

LA FAMILIA Y EL ESTUDIANTE DEBEN SENTIRSE A GUSTO CON EL CENTRO EDUCATIVO EN SU OFERTA ACADÉMICA, ENTORNO, INSTALACIONES, AMBIENTE, UBICACIÓN Y METODOLOGÍA

TODO SUMA

Es imposible elegir un centro educativo por un único factor, pues es necesario analizar todos y cada uno de los detalles. Analice estos otros elementos:

• Costos. Valore todos los costos: matrícula, mensualidad, lista de útiles, libros, uniforme, transporte, alimentación y actividades extracurriculares, entre otros.

• Ubicación. Entre más cerca mejor, pero si el centro educativo queda lejos analice si es factible viajar, si puede pagar transporte y si realmente vale la pena.

• Metodología: Hay muchas metodologías, así como colegios con valores religiosos, por lo que debe analizar qué objetivo persigue.

• Propuesta educativa: Conozca si tiene un norte en su propuesta formativa; si solo apuesta a la simple transmisión de conocimiento o incluye desarrollo competencial.

• Instalaciones. El centro educativo es un lugar en el que los alumnos pasarán muchas horas diarias, de ahí que deba ser agradable, seguro, moderno y amplio.

• Tecnología e idiomas. Es importante que incorpore procesos tecnológicos como robótica, programación, ofimática, y enseñe uno o varios idiomas.

• Calidad. Investigue el desempeño de estudiantes del centro educativo que desea en pruebas importantes, así como la promoción en diferentes niveles.

• Actividades extracurriculares. Complementan el proceso formativo. Actividades deportivas, culturales, artísticas, refuerzan el desarrollo de habilidades socioemocionales.

• Protocolos. La pandemia por CO- VID-19 continúa, es importante conocer los protocolos de prevención de los centros educativos para minimizar riesgos.

ENSEÑANZA CON VOCACIÓN

Para Luis Manuel Martínez, doctor en Pedagogía, Licenciado en Filosofía y Ciencias de la Educación, uno de los factores principales que los padres de familia deben tomar en cuenta al momento de elegir un centro educativo para sus hijos es el cuerpo docente.

Considera que estos deben estar muy lejos de ser mercenarios de la educación y tener vocación, ideales humanos y quizá religiosos, pues ello garantiza que serán capaces de amar al estudiante de manera genuina, más allá del dinero que cobran.

“Recomiendo que elijan un centro en el que los docentes tengan calidad de vida. Si a los docentes se les cuida, esos docentes estarán en mejores condiciones para cuidar a los hijos. Que los padres “vayan a la puerta trasera” y vean cómo viven los docentes”.

¿Cómo un centro educativo de excelencia desarrolla la creatividad, la inspiración y la innovación en los alumnos? La creatividad es algo que sale de dentro hacia fuera. Si un centro apuesta por las pantallas, las tabletas, los celulares e Internet, ese centro difícilmente será capaz de sacar la creatividad. La creatividad se saca con el juego, con el arte, con la música, con la inspiración que ofrece la lectura, con la invención tecnológica a partir del trabajo en equipo, con la expresión y debates de corazón, cuestionándolo todo.

¿Cómo un centro educativo debe preparar al profesional del mañana, en cuanto a habilidades blandas, tecnología, idiomas, etc? El principal idioma que tienen que aprender es el simbólico; el idioma universal del corazón. El idioma del espíritu y hoy el analfabetismo espiritual es clamoroso.

Los niños saben leer y escribir en diferentes lenguas, pero desconocen leer y expresarse con su corazón, tampoco saben comprender lo que expresan los demás de corazón: es una gran incomunicación existencial, una gran soledad emocional.

Luego es fundamental saber el idioma materno con profundidad. Claro que estoy a favor de aprender idiomas, pero primero hay que aprender a pensar en un idioma y hay que aprender el idioma universal de los símbolos que nos permite comprender quién soy y quién debo ser.

Luis Manuel Martínez, doctor en Pedagogía, Licenciado en Filosofía y Ciencias de la Educación

¿Cómo un centro educativo de primera involucra a los padres de familia en el desarrollo de los niños y adolescentes? Los padres deben ser como un presidente de un equipo deportivo, los directivos y docentes son como el entrenador.

Un centro es más educativo en la medida que se parece más a una familia funcional. Quererse unos a otros, ayudarse, comprenderse, perdonarse, agradecerse, decirse las cosas con deseo de ayudar, sin recriminar.

Yo le diría a los padres: “trata al profesor de tu hijo como quieres que ese profesor trate a tu hijo”.

Y, por otro lado, es clave que los padres se formen constantemente.

A partir de los impactos causados por la pandemia por COVID-19 ¿En qué deben enfocarse los centros educativos para el desarrollo integral de sus alumnos? En principio es necesario un reconocimiento de daños: lagunas de conocimientos, refuerzos educativos, planes especiales y también, más tutorías personales, diálogo entre tutor y alumno, ayudar a que el estudiante muestre las heridas de su corazón, sus problemas de autoconcepto, su sensación de rechazo, sus problemas de autoestima, de identidad, su sensación de baja autoeficacia, su impresión de falta de talento, y ayudarle a reconocer sus talentos, su sensibilidad, su posibilidad de ayudar a otros con su empatía, su grandeza que le hace sentirse pequeño, mientras otros por su rudeza se sienten grandes.

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