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irunE aGuirrEzabal asEsora rEGional dE participación política dE onu muJErEs
El 29 de agosto de 2016 la universidad se adhiere a la iniciativa de ONU Mujeres y lanza protocolo, y AAPAUNAM, por medio de su secretaria de Acción Social, la maestra María Eugenia Borrego Mora y la Lic. María del Consuelo Molina Arciniega entrevistan a la señora Irune Aguirrezabal, asesora regional de Participación Política de ONU Mujeres.
El incremento de liderazgo y participación de las mujeres es muy importante, ya que las mujeres están participando en la toma de decisiones en la agenda pública y política de nuestras sociedades y es un elemento fundamental de la agenda 2030.
Es importante la igualdad de géneros y que se tome en consideración el impacto que tiene cualquier medida en relación con las mujeres y las niñas.
El concepto de democracia paritaria no se puede entender hoy día sin la plena participación del hombre. Actualmente se está legislando sobre la igualdad
ENTREVISTA
MTRA. MA. EUGENIA BORREGO MORA* LIC. MARíA DEL CONSUELO MOLINA ARCINIEGA**
*Secretaria de Acción Social de la AAPAUNAM. **Comité ampliado de la AAPAUNAM y comité editorial de la Revista AAPAUNAM Academia, Ciencia y Cultura
ENTREVISTA
La Lic. María del Consuelo Molina Arciniega y la Mtra. Ma. Eugenia Borrego Mora charlando con Irune Aguirrezabal
de género en varios países de América, empezando con Argentina, desde 1991. A la fecha, 17 países han legislado en su constitución, como la reforma de la Constitución de México en 2014, es un gran paso, porque no es sólo que la participación política de la mujer y la ocupación de cargos que estén aumentando, sino que ello debe estar en la ley, pues sin esta situación la mujer todavía está en desventaja y se quiere que exista mayor paridad. Esto es un motor de la democracia.
También tenemos que trabajar en mucho más aspectos que lleven realmente a que las mujeres tengan las mismas condiciones y oportunidades de desarrollar esa carrera en los ámbitos público y político, donde deben estar ellas.
La eliminación de la violencia contra de las mujeres es de vital importancia en todo el mundo; las mujeres deben tener seguridad y libertad para vivir libres de violencia y tener capacidad de tomar decisiones en todos los ámbitos. Existe una tasa muy alta de homicidios, aun cuando se ha legislado en los últimos años y se han adoptado protocolos para apoyo a las mujeres. Tenemos datos de que una de cada cuatro mujeres sufren de violencia de sus parejas, más de 10% de mujeres sufre de violencia de otras personas, al igual que las niñas; esto es violencia intrafamiliar; este tema se ha escondido y hay que trabajarlo en casa, pues en el ámbito privado el Estado no tiene que intervenir y es el gran paso que se dio en el mundo. Se estableció el término de feminicidio, pero sigue siendo una lacra, existen muchos datos de que el fenómeno de acoso es muy alto, por lo que hay que trabajar en la prevención, ya que los hombres son victimarios y tratan a las mujeres con desprecio.
Esto también depende de la cultura. Vivimos en una sociedad anclada en lo tradicional y en los valores patriarcales, donde la mujer está muy estigmatizada. En el siglo XXI las mujeres siguen trabajando muchas horas en casa y ocupándose de toda la familia, queriendo desarrollar-
se como personas y profesionalmente y la violencia es una limitante para este desarrollo personal. Entonces ellas no pueden tener esa equidad que buscamos. Aquí es donde debemos luchar y justamente por esto surge el movimiento He For She que es un modo de partir entre líderes como puede ser el rector de la UNAM. Es un movimiento que se va extendiendo, es un llamado a los hombres para que se manifiesten por la igualdad entre los géneros, porque no es un término de mujeres, es un tema de bienestar de la sociedad, es bueno para todos y para todas y para el futuro.
Se ha desarrollado una gran labor en la participación de las mujeres en los procesos de paz y seguridad. Se ha trabajado en estos últimos años en los procesos de paz en Colombia, y en el secretariado de Naciones Unidas en la aplicación de la resolución 1525 de mujeres paz y seguridad, que adoptó el Consejo de Seguridad y después de esa resolución se ha ido revisando y reforzando y realmente plantea el rol de la mujer en los procesos de paz, procesos de conflictos y guerras.
ONU mujeres es un aliado importantísimo en la consecución de ésta y subsiguientes resoluciones. Estamos acompañando estos procesos en países como El Salvador, Guatemala, Colombia y México.
Mencionaba el proceso de Colombia por su enorme complejidad y por la dificultad que ha venido teniendo una implicación de las mujeres en el propio proceso de las negociaciones, luego el reconocimiento como víctimas y también reconocimiento en el proceso posterior. En el acuerdo de paz finalmente recoge un rol para las mujeres que será muy importante. Nosotras estamos orgullosas porque en las oficinas de las mujeres se ha tenido un rol muy importante que fue reconocido por la representante que tenemos. Es sin duda una de las áreas también fundamentales para nosotros.
Con la incorporación de igualdad de género como elemento central de la planificación de desarrollo y del presupuesto, y con los antecedentes que se tienen de las fundadoras de UNIFEM, que son los cimientos para una metodología y toda la conceptualización de cómo incluir en los presupuestos una perspectiva de género, hemos trabajado en más de 15 países de la región y tenemos una especialista incluso para generar apoyo y metodologías en los países. Ese es uno de los pilares de la transformación del Estado incluyente al que aspiramos realmente en la identificación y la elaboración de los presupuestos. Se hizo una categorización, por el impacto que tiene en las mujeres y el análisis no solamente en el gasto del presupuesto, sino a la hora de diseñar los impuestos, cuáles tienen mayor efecto para el logro de la igualdad de género y cuáles tienen mayor impacto en las propias mujeres. Creo que en este momento estamos con esas dos variantes que son muy importantes para la planificación y el desarrollo en los países.
Tal vez en el último punto sea una ventaja comparativa de México añadir la importancia de las estadísticas, que las mujeres hemos aprendido, los hombres han aprendido, ustedes que vienen de una comunidad académica “lo que no se mide no existe” y “lo que no existe no cuenta”.
Acabamos de lanzar un programa global –Hacer que cada mujer y cada niña cuente– realmente para avanzar en ciertos temas. Una de las aspectos más interesantes fue el compromiso con la UNAM, con la campaña He For She es tener un diagnóstico de cómo estaban participando las mujeres no sólo en alta dirección, sino en todas las instancias de la universidad, sindicatos, comunidad estudiantil. Esta cadena que mencionaba, las mejores estadísticas, políticas públicas, la igualdad de género cuesta también mucha más inversión en el empoderamiento en el liderazgo de las mujeres y la rendición de cuentas del monitoreo de saber dónde estamos y dónde queremos estar. Ahora ya sabemos adónde queremos llegar. Claro, lo importante es saber dónde estamos y cómo acelerar el ritmo para la igualdad; eso es un poco el mandato de las mujeres.
