RAFA:
perfiles, rasgos y rasguños.
Caricatas sencillas como caricias plenas de afecto, un brindar a la vida, y en ocasiones una protesta o una denunciada injusticia. Con finos trazos de mano que no tiembla porque es de alguien de firme carácter, hace sus rasgos y rasguños.
Rafa: perfiles, rasgos y rasguños Por: Guillermo Álvarez Este libro estaba anunciado varios años antesdeayer, pero con perenne aplazamiento debido al correcaminar del andariego. Y se tornó una fiesta en tributo al arquitecto de emociones, al profesional, al compañero, al amigo, al másquehermano. Un recreo. Un recreo cuando la edad se nos vino encima, sin carnaval ni comparsa. Fiesta colegiada que hace el ÁLBUM de bachillerato, a cincuenta años de, y recoge los pálpitos de familiares, compañeros y amigos, al son de baladas, tangos y milongas, como si una recreación Gozosa fiesta de remembranzas, compartiendo ya no tartas y tortas sino pálidas vistas y fotos envejecidas y opacas, pero enchiladas no vencidas: plegadas de sentimiento¡! Y palabras unidas al accionar amigal, terrenas palabras como limaduras de sol brotadas con fulgor por los perfiladores en sacra tributación. Enhorabuena, Bienvenidos a este cosmos sin cosmética: «Rafa: perfiles, rasgos y rasguños» Aquí encontrarás evocaciones religiosas, sátiras políticas, denunciadas corruptelas, desplantes e irónicas carcajadas del acontecer diario.
Rafa en familia
Rafa
Rafa en familia
La vida tiene su manera Por: Lina María Mejía Álvarez
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a vida tiene su manera de hacer las cosas fuera de nuestra capacidad emocional y racional. Así mismo fue que la vida después de tu muerte me regaló este viaje de duelo con el proceso de este libro que hemos titulado, Rafa: Perfiles, Rasgos y Rasguños. Rafa, pues obvio, es un homenaje a él como caricaturista. Perfiles, porque somos nostras las personas quienes lo conocimos y quisimos quienes lo perfilamos. Rasgos porque son apenas unos trazos, y rasguños porque eso hace la caricatura, rasguñar con la realidad. La primera vez que yo me vi en una de sus caricaturas de pequeña, además de que me hizo reír mucho y me parecía increíble que podía lograr plasmarme fue que entendí que el humor es uno de los poderes más grandes de la vida y que así mismo yo me podía reír de mi misma. Con un poco de escrutinio y un sentido de protección y cuidado por mi mamá y el legado de mi tío me acerque a Guillermo, amigo, cómplice y editor del proyecto empezada por mi tío y el para publicar las caricaturas hechas a lo largo de su vida. A los 10 minutos de estar sentada con Guillermo entendí que este libro había que sacarlo y que yo estaba allí para aportar a que esto sucediera. Me sentí mediadora entre mi familia y Guillermo. Pero lo que no sabía era todo lo otro que llegaba de añadidura.
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Rafa: perfiles, rasgos y rasguños.
Textos, fotos, memorias, recuerdos, nostalgia, amores, amistades y muchas caricaturas, desde antes de que naciera que me iban a llevar a mi propio pasado y el duelo más bonito que he tenido en mi vida por un ser querido, porque a nadie nos enseñan perder a un ser amado. Qué podría agregar que no hayan dicho… Yo aprendí a nadar en un curso rápido con el YMCA en la USA, pero el amor por la natación me la enseñó mi tío Rafa, como el tener amigos y parchar, el gusto por la cultura, el arte, la música. Los años de mi niñez en estados unidos con mis tíos, recién llegados, bisoños, casi sin hablar inglés, lo que significa migrar y lo que significa salir del ghetto. Yo tuve la suerte de viajar con mi tío por Europa, y una noche en París, lo lleve a un bar underground que yo ya conocía llamado The Who, como la banda, flipamos, pasamos demasiado bueno, música en vivo, manada de locos y el tan conservador y, el nada, parchado, feliz, inolvidable, mero guayabito al otro día, pero el como si nada, todo un campeón de la fiesta. Y es precisamente el regalo de vida que me deja mi tío, su capacidad de ser amado y amar, a pesar de todas las diferencias políticas, culturales, religiosas que hubieran. Un ejemplo de cómo las personas aun y a pesar de sus diferencias pueden disfrutar de lo común, del buen humor, del compartir, del paisaje, de sus tierras, de su cultura, sin importar esas diferencias. Y aunque su temperamento no fue de seda, ni mucho menos el mío, de hecho creo que es una vaina de los Álvarez, él fue un hombre generoso, lleno de vida, fuerza y alegría. Un ser que amo a su familia profundamente y en vida nos lo hizo saber y sentir.
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Rafa en familia
Rafael, hermano y compañero Rafael nació el 9 de Septiembre de 1952 en Yolombó, Antioquia. Hijo de Rafael Álvarez Tamayo y Gabriela Tobón Cárdenas, quienes formaron una familia de 10 hijos, en la que Rafael era el séptimo. Rafael Álvarez Tamayo fue un hombre trabajador, honesto, buen esposo y padre, fue una gran persona en todo el sentido de la palabra. Camino que siguió al pie de la letra Rafa el hijo. Enamorado del campo, el ganado y los caballos, Rafael heredó del ambiente campesino el amor por los pueblos, así que no paró de recorrerlos. Gabriela, su madre también fue muy trabajadora, dedicada a la costura y al bordado, le encantaba pintar y cantar, y todo lo relacionado con el arte. Mariela su tía y madre de crianza, se dedicó a la familia manejando el hogar , su habilidad era cocinar delicioso y tener todo en orden y limpio. Rafa muy apegado a ella pues compartió, cuido y mimo, después de la muerte de nuestra madre, él nos dejó la tarea a nosotros.
Rafael en su primera comunión
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Rafa: perfiles, rasgos y rasguños.
Transcripción: Hoy 17 de agosto día de mi cumpleaños, pues cumplo 13 y es el día más triste, el sol no asoma su cara solo unos minutitos, por la tarde voy a la tienda y me celebro mi cumple con una uva y un pastel y tres cubanos. Por la tarde llueve pero se calma al momento la tarde está nublada para mi es un día común. Yo desearía estar en la casa con mi familia y tener libertad. También estuve en la biblioteca pues Don Guillermo vino, estoy leyendo el libro Robinson Crusoe voy en la pag. 82 es muy bueno e interesante
Rafa de 13 años
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Rafa en familia
Transcripción: Mi madre Mi madre nació en Amalfi pero vivió casi toda su niñez en Yolombo sus hermanos son 4: Mariela, Lalo, Anibal y mi madre.
Gabriela Tobón Cardenas
Su hermana, Mariela Ines Tobón Cardenas
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Rafa: perfiles, rasgos y rasguños.
Su hermano, Lalo Tobón Cardenas
Lalo, Gabriela y Mariela
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Rafa en familia
Transcripción: Mi padre: Este nació en Carolina hacia el año de 1903, tuvo 10 hermanos como: Gilberto, Arturo, Elpidio, Favio, Enrique, Saulo, Paulo, Libardo, Otimia, Lola, Libia y mi padre.
Su padre, Rafael Álvarez Tamayo
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Rafa: perfiles, rasgos y rasguños.
Gabriela y Rafael
Gabriela, Rafael Ángel y Rafael
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Rafael y su padre.
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Transcripción: Mis hermanos: Mis hermanos son 18 y 19 conmigo hay 9 muertos y, diez vivos estos son: Nelly, Marta, Dolly, Fanny, Elpidio, Betty, Eloisa, Gilberto, Oscar y yo
Nelly, Martha, Dolly, Fanny, Elpidio, Betty, Rafael, Eloisa, Gabriela y Mariela.jpg
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Rafa: perfiles, rasgos y rasguños.
Transcripción: Nelly: La mayor de la casa trabajó y le ayudo a mi madre, trabajó tres años en la clínica de Medellín, despueś se casó el 15 de diciembre de 1960, hoy tiene dos niños: Javier Dario y Jairo Alonso, se casó con Jairo Quiceno Sanchez, Jairo nació el 1ero de diciembre y Javier el 2 de octubre. El 7 de agosto se para New York allí Jairo trabaja y les va bién. Allí viven con Hernan y Alonso y ahora el 20 de julio se fue Adiela.
Transcripción: Domingo. Empecé a leer el libro de Genoveva De Brabante y el de Tom Sawyer. Por la tarde me vino visita, Libardo mi tío y mi papá y mi mama me trajeron muchas cosas por la noche comí mucho quesito de que trae mi papa de la Pintada. Segun me conto mi mama mi hermana Nelly trabaja peinando muñecos y como que gana plata pues a mi madre como que le manda 1 dolar a mi madre todas las semanas...
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Transcripción: Me vinieron a visitar mi papá y mi mama con mi hermanito menor Oscar Alonso. Nelly según me contó mi mamá nos mandó de New York regalos a todos, a mi me regaló una camiseta y un estilógrafo con el cual escribo.
Nelly Álvarez, Betty Álvarez, Javier Quiceno, Patricia Quiceno, Gloria Molina, Vicky Vélez, Irene Álvarez, Rafael Ramos, Miguel Gonzalez, Jairo Quiceno y Robby Quiceno
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Transcripción: Recordando el tío Rafa de sus sobrinos Jairo Alonso Quiceno Javier Quiceno Patricia Quiceno de Rivera Y Alexander Quiceno - Recordamos mucho el tío en especial cuando vivió Con nosotros en New Jersey. Mi tío dormía en el Sótano teníamos 3 camas Para Rafa, Jairo y Javier Mi tío Rafa hablaba en su Sueño - Yo, Roncaba - Y Javier caminaba Como nos reíamos El puso un aviso en la puerta que decia. El cuarto (Ronque, Anda, Habla)
Siempre te recordaremos tío Rafa, aunque no estés presente nosotros no olvidaremos lo buen tío que fuiste con nosotros y como nos hacías reír.
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Alexander, Melissa, Gabriela y Darien
Rafa, un gran hijo, hermano, y tío. Tu amor por la vida, tu alegría en hacernos reír y tu voluntad por ayudar a otros siempre vivirá en nuestros recuerdos y corazones. Te extrañaremos siempre.
Transcripción: Marta: Marta la segunda con 21 años. Es una muchacha seria y trabajadora, trabaja ahora en muebles Hermes de secretaria y ayuda a la casa. (No ha tenido novio)
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Sandra, Roberto, Martha, Joaquin y Carolina
Martha, Eloisa y Rafa
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Transcripción: Dolly: La tercera (20 años) Era una muchacha avispada, cantaba en el coro de la iglesia de Itagüí, le gustaba el bailes, tenía novio, dibujaba, etc. ingreso en la legión de María del colegio donde estudia en Itagui (la presentación) ayudo a hacer el museo de este la hermana Aura Rosa prima de nosotros para que aprendiera enfermería pues ella estaba en la clínica occidental de Cali el 17 de Mayo vino con el ajuar de religiosa y sin nosotros darle nada. El 19 de Marzo ingresó en el noviciado de las capuchinas de Belén, el 2 de Julio de 1964 profesó y hoy es religiosa y enseña kinder en Armenia, es avispada y risueña.
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Dolly, Hernan, Gabriela, Gloria y Jorge Hernan
“si hubiera un premio para el tío o hermano más alcahueta y generoso, Rafa se lo ganaría con creces, siempre pendiente de todos, tan familiar y divertido; siempre dispuesto ayudar; extrañaremos mucho sus chistes, sus ocurrencias y sus atenciones, nos quedan muchos recuerdos felices para recordarlo y en honor a su recuerdo seguir siendo una familia unida como el siempre lo quiso”
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Transcripción: Caminó… corrió y corrió hasta que nos dejó el Artista de la casa. Sus trazos y líneas al plasmar el cuerpo humano eran perfectos, su buen gusto por la música era de admirar, su espíritu de colaboración y solidaridad se reflejó siempre con los campesinos, y personas que necesitaron ayuda. Gracias, Rafa por todos los detalles que tuviste con nuestra mamá en sus últimos años al igual que con Mariela que gastó toda su vida por nosotros.
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Fanny: la cuarta (18 años) estudio en el colegio la presentación y hizo allí su grado de comercio lo mismo que Nelly, Marta y Betty a los 17 años se casó con el Abogado Jairo Velez V. el 26 de diciembre de 1963 vive en Bogotá muy bien y cómodamente.
Gracias Tío Rafael
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scribir esta nota no es nada fácil pues se vienen a la memoria muchos recuerdos que tengo como hermana y como sobrinos todo lo que nos enseñaste con tu forma de vivir. Te damos las gracias por enseñarnos a ser luchadores, por esas ganas de vivir, nunca estabas mal, te preguntamos cómo amaneces y la respuesta era siempre estoy muy bien aunque te sentías mal y te dolía todo. Gracias por enseñarnos el valor de la amistad que se ve reflejado en tus compañeros de estudio. Gracias por esa alegría que sentías al tener a la familia reunida especialmente los diciembres, esos que nunca se nos olvidaran y que llevaremos en nuestra memoria por siempre.
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Rafa en familia
Gracias por encontrar familia en todos los pueblos de Antioquia, por todos esos paisajes que nos describías cuando recorrías a caballo, en mula, los rincones más apartados de nuestra geografía. Gracias por el gran cuidado para mi abuela y mi tía Mariela y por ser un tío alcahueta con sus sobrinos por celebrar las victorias del nacional aunque eras del Medellín, por los recorridos por Sabaneta, Itagüí, envigado que hacíamos para tomarnos unos tragos, cervezas y bailar un poco cuando llegaban los sobrinos del exterior. Gracias tío siempre te recordaremos y te llevaremos en nuestro corazón lo mismo que a mis abuelos y tíos que ya están junto a ti.
Jairo, Dolly, Fanny. Elpidio, Rafael, Eloisa y Mariela
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Miguel, Camila, Andres, Jairo, Fanny, Estella, Beatriz y Vicky
Transcripción: Elpidio: El hombre mayor (17 años) estudió hasta 3ero de bachillerato y se salió ahora trabaja en Invatex ayudante de un químico.
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Rafa en familia
Rafa, el tío, el hermano, el amigo. Te recordaremos siempre con una sonrisa enorme, por esa forma de hacernos reír con tus chistes únicos en contraste con tu carácter. Gracias por todas tus anécdotas y tu compañía en los paseos, los juegos de cartas, las navidades con el arbolito repleto de regalos porque con tu forma de ser las hiciste inolvidables. Boleros y tangos, la música que tanto amabas, que aprendimos a cantar de tanto oírlas de ti. Nos mostraste con tu ejemplo, una persona trabajadora y con una determinación digna de admirar. Pero sobre todo con un gran corazón que siempre pensaba en la familia, como un genealogista, nos mostraste y nos llenaste de orgullo de las generaciones pasadas. Hiciste que casi todo un pueblo te amara, dejaste una huella en los corazones que te conocieron y hoy aunque nos duele tu partida, nos abraza el recuerdo de todo lo que nos enseñaste.
Foto 1. Elpidio y Vilma. Foto 2. Rafael. Foto 3. Oscar, Mauricio, Adriana, Juan Carlos
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Transcripción: Betty: (Seria) tiene 16 años está en cuarto de bachillerato y este año saca grados es muy buena maestra, pero muy dada a trabajar para la casa.
“ Recordando al Tio Rafa : Con todos tus dibujos vamos a recordar tu habilidad de buscar el humor en la vida. Tu inspiración y talento siguen viviendo en nuestra familia. “
(Betty, Rafael, Monica, Annie, Evelyn, Tyler y Cora)
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Transcripción: Eloisa: la menor de las mujeres tiene 15 años dotada de grandes cualidades, está en 3ero de bachillerato y piensa estudiar hasta 4to para hacer dos años de arquitectura lineal
Recuerdos del viaje con Rafa por Europa. Viaje que él disfrutó al máximo, siempre quiso volver. Uno de los días íbamos a Montmartre, un lugar lleno de cultura, pintores y artistas famosos. En el bus le tocó ir de pie y decidió hacerse cerca de la puerta de salida. De repente empezó a sonar el timbre del bus, el conductor paró, pero nadie se bajo. Así pasó varias veces, el conductor paraba, pero nadie se bajaba, hasta que una señora dijo en francés que cada vez que Rafa se recostaba hundía el timbre. Nos reímos demasiado y lo mejor fue que ni nos cobraron el pasaje. Mientras que desayunábamos o íbamos en el bus, Rafa se ponía a pintar. En una de esas empezó a pintar a un grupo de mexicanas y al conductor. Cuando ya era el momento de despedirnos él les entregó a cada una su caricatura, unas pobres medio feitas no quedaron muy contentas, pero otras sí quedaron encantadas. A Rafa le encantaba mecatear, como decimos los paisas, en la casa nunca faltaban desde las solteritas hasta las algarrobas. Todo le gustaba, nada le parecía mal. Los domingos siempre le hacíamos salpicón; tremendo salpicón que llevaba hasta trece frutas. Yo terminaba de cama de tanto picar y cortar, pero él lo disfrutaba mucho y eso me brindaba alegría verlo contento con su salpicón. Había días que cambiábamos por arroz con leche. Le encantaban también las crispetas, cuando veíamos
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Rafa: perfiles, rasgos y rasguños.
Familia Eloisa
películas en la tarde. Claro que solo cuando lograba cuadrar el televisor porque para la tecnología si no fue muy destacado. Hasta sus últimos días iba al parque a comprar ingredientes, mercado y mecato; él era feliz comprando, la empleada Nora siempre le decía: “Don Rafa, no me cabe mas en esta nevera”. En navidad, acompañado o así fuera solo, de iba a comprar regalos de navidad, y a todos nos acertaba con las tallas y los gustos. Llenaba la casa de luces y hacia su árbol de Navidad y el pesebre, este año lo hicimos nosotros en su honor, pero nada que ver de como le quedaba a él de hermoso y festivo. Siempre fue muy querendón con todos los hermanos y sobrinos. A mi mamá y tía Mariela siempre les mandaba unos ramos de rosas hermosos para sus cumpleaños o día de madres. Siempre las consintió mucho. A mi mamá siempre le regalaba su tiempo, la sacaba a caminar y a recibir el sol. Le daban la vuelta al barrio y la pobre llegaba exhausta pero feliz. A Mariela la sacaba al antejardín. Rafa siempre le rindió mucho el tiempo, pero claro que siempre era volado y a mil. Había que hablarle rapidito, claro y conciso. En cada pueblo encontraba familiares lejanos, los que relacionaba hasta con el tatarabuelo. Claro que solo los más bien presentaditos. La familia Álvarez no tenía límites con la parentela.
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Rafa en familia
Rafael, hermano, tío, amigo, compañero…
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uien tuvo el placer de conocerlo, da fe de que fue un hombre incansable y trabajador, prodigio de la caricatura como de la arquitectura, dibujó tantas caricaturas como edificios, parques, iglesias... Le encantaba la piscina, nadaba y buceaba. Buen compañero de la pista de baile, alegre y eso si le gustaba contar chistes hasta el amanecer. Mi tío Rafa, como tuve el placer de quererlo y conocerlo, fue un hombre incansable. Trabajador hasta que ya no daba más. Un prodigio de la arquitectura que aún en medio de su enfermedad logró en un año construir más de 50 edificios. Era un hombre lleno de emprendimiento, enamorado de las tradiciones y los pueblos antioqueños. Entre todos, Granada fue donde su legado se siente más ferviente; un pueblo que en medio de guerra y dificultad, encontró en mi tío un hijo que luchó por su desarrollo y bienestar como si él fuese granadino. Rafael era un hombre lleno de amor por su familia y amigos. Consentidor desbordado, sabía lo que le gustaba a cada uno y siempre nos tenía detalles para demostrarnos su cariño. Se encargó de darnos a todos memorias que no se borrarán con el tiempo. Nos regaló viajes y paseos; y su generosidad y ganas de disfrutar nos dejaron aventuras muy hermosas. Se me viene a la mente un paseo a Don Matías donde casi nos vamos por un barranco, jaja. Mi tío llenaba cada lugar con risas y chistes. Tenía un sentido del humor y una capacidad de reír dignos de admirar. ¡Y ni hablar de sus caricaturas! A todos nos ha dibujado. Sus caricaturas las han mostrado en periódicos e inclusive hay un libro donde compilaron algunas de las mejores. Él plasmaba siempre la versión más divertida de cada persona que viera o conociera, así fuese en una servilleta..
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Rafa: perfiles, rasgos y rasguños.
Mi tío tenía la ilusión de superar la enfermedad y luchó con ganas y esperanza hasta que su cuerpo no pudo resistir más. Un hombre valiente que no mostró cobardía ni desgano y que siempre le dio su mejor cara a la adversidad. Rafael se quedará siempre en los recuerdos y corazones de todo aquel que tuvo la oportunidad de conocerlo.
Transcripción: Gilberto: Mono travieso y guapo y avispado está en tercero de primaria perdió 2do le gusta el fútbol y es aficionado a todos los juegos Oscar: El niño de la casa estudia en el kinder tiene 6 años y es muy inteligente le hicieron un uniforme muy lindo, y piensa estudiar.
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Gilberto Álvarez Tobón
Oscar Álvarez Tobón
Rafael Álvarez Tobón
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Rafael, Monica, Oscar, Sandra, Martha, Carolina, Mariela y Gabriela
Rafael, Gilberto, Rafael, Oscar, Monica, Annie, Betty, Eloisa y Lina
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Rafa en familia
Como dije nací en Yolombo, a la edad de 2 ½ años nos vinimos a vivir a Medellín hice mi primera comunión en Itagüí a manos del Padre Alfonso el 15 de Agosto de 1959 y entre a estudiar en este mismo año. Mis estudios: El primer año de escuela lo hice en la Diego Echavarria con la señorita Nelly Cano C. y el segundo en esta misma con la señorita Marta Gallego. El tercero en el colegio el Rosario con el profesor Don Anibal, el cuarto en la escuela Diego Echavarria con Don Carlos Vallejo. El quinto en el Colegio la Salle #1 con el hermano Itanasio Norberto. Hacia el 31 de enero de 1965 ingrese en el Seminario M Medellín con los siguientes profesores: Aritmética, Padre Fabio. Prehistoria, Padre Flavio, Castellano, ciencia, Canto: Don Guillermo L. Valencia
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Anécdotas de Vicky y Gloria Vicky: Jajaja! A patadas que nos ganamos Fanu y yo cuando llamaban a la casa las muchachas y preguntaban por el, Fanu y yo, ni cortas ni perezosas les preguntamos, cuál Rafa? el grande o el chiquito? Ahhh, quiere hablar con mi tío, no con mi abuelito! Ya se lo paso, y gritabamos: tiooooo.... Nos ganábamos la patada y la advertencia: no me pueden decir tío, me llaman Rafa niñas! Ja ja ja así era las patitorcidas nos llamaba y a la virgen la carisucia la que tienen encima de la alacena de la cocina que casi se quema del todo con una veladora Gloria: Íbamos varios de los sobrinos en el carro con mi tío Rafa manejando y él nos metió por toda la Oriental en contra vía, éramos, yo, Oscar, Andres y Tela, jajaja que risas. No sé cómo o no nos chocamos pero sí que ganamos muchos madrazos, veníamos de la vuelta a Oriente en el Jeep que que se había comprado. Vicky: jajaja, yo no me acuerdo de esa, y a mi no me toco gracias a Dios, pero si me acuerdo cuando nos tocó rescatarlos del accidente por el estadio, a todos los sobrinos con el tío Rafa a la cabrilla, le fue mejor montando a caballo por las montañas. Pero muy bacano, siempre tan pendiente de alcahuetear a todos sus sobrinos
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Rafa Arquitecto
COMO ARQUITECTO Arquitecto de la Universidad Nacional de Colombia, amó y disfrutó su profesión, se graduó y empezó a trabajar desde joven, liderando un proyecto llamado El plan terraza, junto a sus compañeras Gloria y Miriam. Con este proyecto ayudaron a muchas personas a construir el segundo piso de su casa con apoyo del banco. Siempre dispuesto, no le importaba viajar a donde fuera por su trabajo, a caballo, en lancha o caminando, iba a medir escuelas, hospitales, casas y edificios para hacer después los diseños. Dejó su huella en muchos pueblos, parques, iglesias y gente. Profesional increíble y trabajador tenaz, lo vimos hasta el último momento al pie de su computador. Su gran actividad le ayudó a vivir hasta que su cuerpo no resistió más.
Y SE NOS FUE.
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Amigas de la familia La hermana Teresa
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gradezco a Dios por la vida de Rafa; tuve la oportunidad de conocer su familia, a quienes admiro mucho. Fue un hombre solidario y comprometido con los demás. Disfrutó su trabajo y con mucha pasión ponia al servicio de los demás su profesión y sus talentos, dones que Dios le regaló y los supo multiplicar. Fue una persona positiva, emprendedora herencia que adquirió de sus padres lo cual se refleja también en sus hermanos.
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Carta de Miryam Tabares
Transcripción: A mi gran amigo del alma Rafael Gracias, gracias, gracias por permitirme entrar en tu vida. Conocerte a ti y a tu familia Álvarez Tobón ha sido uno de los regalos más maravillosos que he recibido. Me enseñaste a sentir que la vida es para ser feliz, no es para otra cosa, ella está llena de contrastes pero siempre tu con tu buen estilo de humor lograste
Rafa y Miriam
sacarme una risa loca a pesar de tantos desplantes a la hora de un compromiso más formal ya que ante todo estaba por delante tu pasión al trabajo que inclusive hasta el final de estos últimos años de tu crisis supiste enfrentar con esa alma de guerrero valiente tu enfermedad hasta el final. Aun así, mi querido monono, mi corazón no estaba listo para verte partir. -Miriam Tabares-Perez
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Semblanza Granadina
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Chucho, Rafa, alcalde y Lorenzo Echeverri
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Compañeras y Compañeros EVE 70’s
Perfiles y álbum bachilleres EVE 70¨s
A nuestro compañero de colegio Rafael Álvarez Por: Jairo González Trujillo
Rafa: Llegaste al “E.V.E.” en plena adolescencia donde compartimos en las aulas sueños juveniles, Mostraste tu dominio de la línea y el trazo sacándonos de apuros en las clases de dibujo, -ironías de la vidaEl profesor Portillo premiaba a tus pupilos a quienes en horas antes hacías sus bosquejos, siempre conservaste: tu risa, tu alegría y tu chispa, este año en la finca de Luis Eduardo planeamos un encuentro para celebrar el quintuagésimo aniversario de bachilleres, el destino nos cambió los planes y a otro sitio te llevó con Carlos dejándonos tu alegría y tus mejores recuerdos.
Rafael Álvarez Tobón
L
legó al Liceo Departamental “ENRIQUE VÉLEZ ESCOBAR” “E.VE.” después de la Semana Santa del año 1966 al grupo Segundo C, siendo el director del grupo Alberto Londoño, profesor de Geografía y Cooperativismo. Había iniciado sus estudios secundarios en el Seminario Menor de Medellín, donde permaneció por término de 15 meses. Al poco tiempo todos los compañeros nos dimos cuenta de su habilidad para el dibujo , y fue la salivación para quienes adolecemos de esta aptitud. Se graduó como Arquitecto de la Universidad Nacional, teniendo un excelente desempeño profesional. Después de una larga enfermedad, partió para el viaje eterno, dejándonos muchos y gratos recuerdos. Q.P.D.
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Rafa: perfiles, rasgos y rasguños.
Perfil humano de un amigo Por: Hugo Toro Escobar
A
nuestro querido Rafa, un pequeño mensaje de reconocimiento a su calidad humana y profesional.
Gratos momentos vivimos con Rafa, quien de manera espontánea y sencilla, entregó todo su ser al servicio de las personas y muy particularmente, a quienes tuvimos el honor de compartir con él etapas muy importantes de su vida. De él, aprendimos su alegría, su capacidad para hacer del día a día, un maravilloso momento para compartir, su espontáneo sentido de colaboración, su inteligencia sagaz para comprender el momento y sacar el mejor provecho de las circunstancias, unas buenas otras no tanto, pero que requerían mirar la vida de una manera simple, sencilla, amable, buscando siempre la solución y sin quedarse en el problema. Ese era Rafael, eso aprendimos de él. Transcurrían los años 60, nuestra época de juventud, nuestros años de estudio. El Liceo fue parte importante de nuestra vida y por supuesto allí, tantos amigos y amigas que hoy recordamos y a quienes mucho de lo que somos y aprendimos, hoy debemos agradecer. Rafael, uno de ellos, inigualable por su estilo, humano como pocos, servicial a toda prueba…….el hombre, el artista, el arquitecto……..sus dibujos y caricaturas no podemos olvidar……..en cuantos de nuestros cuadernos de la época……quizás…….hay un trazo hecho por él, para poder resolver en un momento en que la academia nos pedía hacer algo que tal vez no teníamos por habilidad, pero que él, con sentido de apoyo como siempre, elaboró para todos nosotros…..seguramente lo hizo para que pudiéramos colorear y presentar como propio, aunque todo mundo sabía por sus trazos, cuál era el verdadero autor, así de fácil se podía identificar. Como olvidar sus chistes cortos, su forma de reír cuando los contaba, sus anécdotas en las reuniones y encuentros, los paseos y hasta las actividades de gimnasia o las tardes de piscina.
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Perfiles y álbum bachilleres EVE 70¨s
Un paisa a todo dar, un hombre de valores, sentido de familia y amistad. Cuantas veces compartimos con él y su familia, cuanto admirábamos su responsabilidad con los suyos y cómo disfrutaba del equipo que hacía con Eloísa, con quien compartía el sentido de lo estético y la gracia de hacer de ello, algo diferente que nosotros solo podíamos admirar. Aún recuerdo a sus padres en la casa de Belén o su viaje a los Estados Unidos, cuando quiso construir un proyecto, que en el tiempo, le hizo entender que su tierra era más importante para él…… su familia, sus amigos, su entorno……. eran más importantes que cualquier otra cosa interesante que la vida, le pudiera ofrecer en otro país. Jamás le vi enfadado, siempre dispuesto a escuchar en qué podía ayudarnos a todos, cuando algo le solicitábamos……esa, su capacidad de escucha, era sencillamente algo poco común…….él no hacía diferencia entre las personas, bien por empatía o alguna otra condición……era único, ejemplar y capaz de dejar huella en quienes tuvimos el gusto de conocerle y disfrutar de su amistad. Aún es difícil de aceptar que no se encuentre entre nosotros, la época de colegio, la universidad, la laboral y hasta ésta de adultos, estuvo siempre llena de gratos momentos con Rafael. Un ser humano de aquellos que siempre estarán presentes entre nosotros por su capacidad de llegar y permanecer en el tiempo. Es bonito compartir, pero Rafa supo enseñarnos que vale la pena estar siempre presentes transmitiendo el entusiasmo de disfrutar cada momento, como él bien lo sabía hacer. Extrañaremos al amigo, al compañero, al ser humano que a través de sus trazos, supo pincelar un legado, que condensados en éste libro, nos hará recordarle y sentir, que está presente. Compañero y amigo
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Rafa, todos te extrañamos Por Gabriela Restrepo
Rafa todos los compañeros te extrañamos mucho porque tu eras uno de los que nos alegraba cuando hacíamos los encuentros con tus cuentos y chistes. Descansa en paz .
Hoy es un día especial para los egresados de la promoción EVE 70. El motivo es doble: celebramos 50 años de graduados, y seguimos unidos. Gracias al sacrificio de nuestros profesores y directivas, esta promoción proporcionó a la sociedad profesionales de diferente índole, pero, ante todo, hombres de bien. A pesar del tiempo transcurrido, que no ha sido poco, y de los obstáculos inherentes a la cotidianidad, recuerdo uno a uno a mis queridos profesores y compañeros de los que tanto aprendí en mis años juveniles; a todos doy gracias por enriquecer mi contemporaneidad, por ser también maestros de vida. No solo llevo en el alma a los presentes; también a los que ya no están. Llegará el momento en que volvamos a disfrutar unidos y en que celebraremos la vida y sus regalos. Hoy, con un gran abrazo virtual, extendido a todos aquellos que marcaron las huellas de los senderos que hoy recorremos, que Dios los bendiga. Felicitaciones por sus triunfos, por tener bonitas familias y, sobre todo, por la dignidad, la unión y la fraternidad. ¡Hasta siempre!
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Hola Rafa! Por: Myriam Saldarriaga Naranjo
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a semana pasada soñé contigo, estábamos en Grecia y al saludar me dijiste: “hola India”. No recordaba que me dabas ese apelativo; sí recuerdo el de “fiera” o “fierecita” que me decías cuando estabas muy contento, que era casi siempre. Ese sueño me llevó a recordar cuando nos conocimos, contigo y con toda la “vieja e interminable barra”, barra de amigos “viejos pero buenos”, según tú decías, y yo corroboraba, claro está. Eso me lo escribiste en una caricatura que me hiciste junto con una cédula laminada cuando cumplí 21 años, y que, para fortuna mía, aún conservo como un tesoro invaluable junto a la que me hiciste cuando cumplí 50: “para la fierecita que cumplas otros 50”. Desde que te conocí, cuando con solo 16 años ingresé a 5B en el E.V.E, percibí tus sobresalientes dotes de caricaturista y dibujante, sobre todo de mujeres desnudas. Para mi fortuna, entonces en el salón de clase te sentabas a mi derecha, y toda caricatura que hacías me la pasabas para que luego recorriera por los otros alumnos, y cada uno de ellos miraba al aludido en la caricatura y soltaba la carcajada. Con tus dibujos me gané muchos 5.0 del profesor Portillita mientras que tú sacabas 4.0 o 4.5, porque, claro, la artista era yo. Rafa o “Manuel Pacho” (no recuerdo porque te puse ese sobrenombre), tus dotes artísticas fueron el inicio de una amistad; siempre estabas ahí, en las buenas y en las
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malas, que afortunadamente estas últimas fueron muy pocas. Todos éramos una piña y el problema de uno era el de todos. Cuando pasamos a 6B tú estabas en el primer puesto de adelante, al pie del profesor, y yo en el que seguía hacia atrás; no sé cuál de los dos perseguía al otro, el caso es que siempre estábamos ahí, el uno para el otro, y no solo eras así conmigo, sino con todos los que te rodeaban. Transcurrió el tiempo encontrándonos sin un peso en “Abelino con Saldarriaga” para salir de caminadas, pero lo realmente importante era pasarla juntos. Ante la falta de dinero, Albeiro era el encargado de robar frutas en las fincas, que nosotros aparábamos al otro lado del alambrado; eso sí, si se aparecía el celador, corríamos dejando al pobre en el árbol a expensas del vigilante. Los años no cambiaron nuestra relación, recuerdo cuando te ibas de desparche para mi casa a tauriar y te dejaba “barrido”. Entonces me decías: préstame para el pasaje, y luego: plata de juego no se paga. Todo eso lo compartiste muchos años después con mis hijos en la finca La Gabriela: para integrarlos en las actividades primero les enseñaste el “puto UNO” y luego diferentes juegos de cartas. Siempre lograbas ser el centro de la reunión con tus dinámicas y chistes; cuando Rafa llegaba a una reunión, de las que organizábamos con alguna disculpa solo para compartir, ya el programa tenía la garantía de ser un éxito, tú solo te encargabas de hacernos reír TODO el tiempo. Por último, no puedo olvidar lo orgulloso que te sentías de tus ancestros, «Rafael Ángel Álvarez, “del Pino y no del Pantano”, Tobón»; y siempre terminabas preguntando por los apellidos de los reunidos, y eso se convertía en tema frecuente de conversación para rematar refiriéndote a mí: esta “chusma” tiene apellidos como bonitos. Rafa, eres, fuiste y serás parte muy importante de mi vida y de la de los que me rodean; sin importar las circunstancias, tú permanecerás con nosotros hasta el día en él que abandonemos este estado y pasemos a otro quizás mucho mejor… “TE QUICE, TE QUIERO Y TE QUERRE” MIRYAM.
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Inmensamente ricos. Por: Luis Eduardo Gil
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afa, más que amigos éramos hermanos: compartimos juntos 55 años, estudiamos juntos el bachillerato y la carrera de arquitectura, y en la universidad nunca perdimos el contacto. Nuestras primeras aventuras fueron de caminadas largas, donde cantábamos juntos con todo el grupo, y nuestra primera gran empresa en conjunto fue la compra de una carpa Calé para seis personas entre 7 compañeros, y ahí nos acomodábamos los siete. La carpa murió en el festival de Ancón. Descubrimos y tomamos como nuestro un lugar paradisiaco en Sofía al lado de un suribio con una quebrada de ensueño. Los paseos allá se repitieron y en una ocasión el dueño del lugar fue a conocernos y a averiguar quiénes éramos nosotros, pero nunca más volvió ni nos molestó para nada. El paseo era de por sí una aventura. Cuando íbamos a ir, nos encontrábamos en la estación de Cisneros a las 6 a.m. para coger el tren y el corazón se nos quería salir.
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Siempre compartíamos todo y nadie recateaba quien aportaba más o menos. Cada uno daba lo que tenía, no había alardes, ni menosprecios, ni envidias, ni competencia; eso era verdadera amistad. Éramos igualmente pobres, o igualmente ricos, dependiendo de la lupa con que se mire, pero yo creo que éramos inmensamente ricos. Recorríamos caminos y veredas, pueblos y montañas. Conocimos por primera vez el mar en una excursión de tercero bachillerato en el EVE, y nos pellizcábamos porque no lo creíamos. Nos queríamos comer el mundo y, la verdad, sí le pegamos su buena mordida. Tuvimos un grupo que nunca perdió el contacto y en muchas ocasiones nos tomábamos los tragos, oíamos tangos, y después bailábamos en el Málaga. Éramos Guillermo Álvarez, Fabio Cardona, Norberto, Rafa y yo. En los últimos años, por iniciativa de Rafa, estuvimos Fabio, Norber, él y yo recorriendo municipios para ver fincas y comprar una entre los cuatro, pero creo que esa era solo su disculpa para que paseáramos juntos como en los tiempos del bachillerato, eso pienso yo. Hablábamos, reíamos, cantábamos, bailábamos, siempre felices. La regla era nunca hablar de política ni de religión; eso sí es amistad. Fueron tantas y tantas las vivencias que es difícil y duro recordarlas. Se me forma un nudo en la garganta y se me aguan los ojos.
¡Adiós, mi buen amigo!
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Mi muy querido y leal amigo Rafael Por: Rosmira Saldarriaga
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s tarea complicada referirse a las virtudes de cualquier persona, más aun, cuando se trata de un amigo que ostenta cualidades difíciles de expresar mediante el uso del lenguaje humano, tan limitado e incompleto para definir la realidad. Pero solo tenemos las palabras, y con ellas trataré de justipreciar las virtudes de mi muy querido leal amigo, Rafael Álvarez. Rafa, como cariñosamente lo llamamos siempre, se caracterizó como un ser humilde cuya alegría y entrega permeaban la existencia de todos aquellos que tuvimos la suerte de interactuar con él, cuya bondad se extendía como una mano protectora que cubría, sin distinción alguna, a quien lo necesitaba. Un amigo siempre dispuesto, desde los días del ‘Liceo’, a atender y a servir a sus amigos, a quienes entregaba lo mejor de su humanidad, que nunca fue poca. Transparente como un cristal de roca y sincero como el que más, sus dibujos siempre acompañaron y llenaron de contento las reuniones donde compartimos tantas cosas. A pesar de sus carencias de salud, nunca se doblegó ante ellas y nunca opacaron su brillo y deseos de vivir y compartir intensamente. Por eso, y por mucho más, para mí fue siempre el amigo ideal, ante quien las penas se rendían, y la cercanía a la felicidad -tan esquiva- se hacía más próxima. Por todo aquello que nos diste querido rafa, te llevaremos en la memoria y en el alma, hasta que un día -si es que lo hay-, podamos de nuevo disfrutar de tu leal y cercana amistad, compañero del alma, tan querido.
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Me uno a sus felicitaciones Por: Javier Alzate
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ran soporte para todos bonito recuerdo y sinceros sentimientos que nos han permitido mantener y superar las dificultades a nivel inividual pero que tambien en el caso en que nos hayamos cruzado por el camino de la vida, siempre prestos a solidarizarnos.¡ De verdad este es un feliz aniversario de egresados “eve” 1970 para todos mis queridos amigos! Ustedes han creado durante todos estos años confianza, cariño, aprecio y respeto, lo que les ha permitido mantenerse unidos para disfrutar a plenitud de su sincera amistad. ¡Feliz aniversario amigos eve 1970! Han representado un mancomunado grupo digno de admirar, con sabiduría han sabido mantenerse vencedores ante las adversidades que tiene la vida y han mantenido intacta su promesa de compañía sincera ¡felicidades amigos egredasos “eve” 1970! Pdt: a mis compañeros que ya han partido, simplemente finiquitaron esta vida terrena primero que nosotros, ese es el final. Eso del + alla es un mito, lo + importante es que por sus actuaciones nobles sinceras los recuerdo muy gratamente.
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¡Quién es Rafael! Por: Dora Eunice Rendón Jiménez
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afael es el que vive en nuestros corazones. Es la persona amble con la que compartimos ambientes de clase, momentos de amistad, instantes de sentirnos acompañados, queridos, aceptados y partícipes de una vida llena de buenas intenciones, traducidas en magníficas acciones hacia los demás. Rafael es la persona que aún ocupa el corazón de su familia, a la que amaba con intensidad y generosidad, comprometido con su servicio al prójimo, haciendo un gran derroche de su nobleza. Rafael es el hijo de una querida familia a la que he vivido unida desde muy joven. Era un excelente estudiante y tenía la vena creadora para la caricatura, ejemplo de lo cual les comparto: ¡Era nuestro 46 aniversario de bachilleres! ¡Que el Señor le dé el diploma de Ángel, y lo tenga en su gloria intercediendo por todas las personas por las que vivió, y que tanto lo quieren, lo recuerdan, y lo confían en sus oraciones! Noviembre 14 de 2020 Gracias por tu especialidad. La Virgen te proteja de todo mal y peligro.
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Hello!!!, hola Rafa, como has estado? Gloria Havoutis
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an pasado muchos fines de semana y con ellos los recuerdos y anhelos de llamarte y saber de ti, recordar gratos momentos que tuvimos con Fabio, LuisEdo y Rodrigo Piedrahita en la terraza de mis padres en Envigado, te acuerdas? Claro que si, como olvidar ese chocolate caliente con arepita y quesito que tu mamá nos subía con una sonrisa de sincera amistad, también recuerdo cuando nos reuníamos a preparar exámenes finales con los mismitos del grupo, siempre quise saber la razón del gran amor tu mamá hacía todos nosotros, Rafa, se me olvidaba comentarte las trampas que hacíamos en clase de dibujo con aquellos que no tenían actitud para el arte, claro que tú eras más rápido que yo, la verdad que siempre he sido de mucho detalle y esto me toma tiempo para concluir mis ideas y visualización, siempre admiré tu agilidad con el lápiz, un gran don Dios te ha otorgado. Y, dime como está Eloísa? Solo pregunto por ella ya que es la única con la cual tuve un poco de roce en aquellos tiempos de juventud y poder, nos creíamos súper héroes porque nadie nos detenía con el objetivo y camino ya trazado. Hay tanto para charlar, para recordar y para reconocer que nuestro grupo de bachillerato fue compuesto de estudiantes muy privilegiados, con una característica a lo que llamo: Verdadera amistad, me preguntas por que? Imagínate, han transcurrido más de 40 años y aún estamos juntos, hablando a carcajadas unas veces, otras resolviendo problemas ajenos y ahora, disfrutando la madurez y los valores aprendidos a través de nuestro caminar. Ups!!!, me olvidaba preguntarte si recuerdas el paseo que hicimos a Barbosa, creo
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Ruth Margarita, Fabio y LuisEdo estaban, por supuesto Rodrigo Piedrahita y mis hermanas, una vez llegada la tarde anduvimos un buen trayecto de regreso pero, nos detuvimos en un convento, donde nos dieron de comer y vimos una película muy miedosa, si no estoy mal se llamaba “ Drácula regresa de la Tumba”, seguro fue muy miedosa!!! En fin, creo que necesitamos otra vida para completar nuestras memorias de juventud y como si fuese poco acabo de recordar nuestros encuentros del grupo en Itagüí, “ La Karla”, rinconcito de Amor para algunos, terapia física para los rendidos de cansancio, para otros un éxtasis de libertad mental para embriagar los pensamientos con CocaCola y para unos picos fortalecer el pincel y lápiz para impregnar a nuestros compañeros en un papel ligero, unas veces arrugado pero al final las notas musicales y los susurros alrededor fueron inspiración para una obra majestral, como era todo lo que dibujabas. Tremendas expresiones talladas con Alegría, tristeza, desasosiego, inconformismo quizás con muchos de nuestros profesores, yo qué sé. Nunca olvidare el tiempo compartido en “ Karla”, aún más, recuerdas cuando llagaba Albeiro Raigoza? Con sus acusadas expresiones hacia Ruth Margarita y yo? Que pena, su eco viajó en el aire sin ser reconocido. Buen Amigo, si hablas con el resto del grupo...diles que: “ En mi corazón hay un espacio para cada uno hasta la consumición de nuestro respirar”.
Con el transcurso de los años y las lesiones que la vida nos da en base a nuestras decisiones y hago mi recuento y memoria a mi gran y muy llegado amigo Rafael, por medio del cual aprendí a delinear mi sonrisa, a suavizar mi espíritu y compartir alegría y sincera amistad. Mi buen amigo Rafael extendió su positivo y contagioso humor hasta mis padres y hermanas con las que compartió gratos momentos. Es difícil ignorar sus amenos chistes, sus expresivas caricaturas y sus grandes diseños arquitectónicos al correr de su destino, con orgullo comparto la variedad de facetas por él realizadas, y saben cómo lo logro? Con la esencia del vivir: “ Actitud positiva para observar la Vida”
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Ráfagas de luz Por: Ruth Margarita Benítez Cardeño.
Ráfagas de luz Asomaban Fáciles A tus ojos En momentos Luminosos... y tu con
Amor y humor, Leías rostros que Vertiginosamente pintabas Aleteando tu pincel como Rayo veloz de Escritura creativa inolvidable Zagal
Rafa, el arquitecto de emociones. Por: Marta Elena Londoño Giraldo
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afa, el gran arquitecto de emociones bellas, reflejadas en sus caricaturas, las que conocí, fue a través de las publicaciones que Rafa hizo en la Revista Ciudad, me hacía reflexionar de cómo podía percibir mi entorno social. “Nunca morirás mientras estés en nuestros corazones” Gracias por compartir momentos maravillosos.
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Soneto a Rafal (Rafaelangel) Por: Javier Arroyave Aguirre
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iajaba todos los días, de Campo Amor a SanPío, buscando conocimiento, como si brotara de un río, es un Ángel decía su madre, éste es hijo mío, quien lo cubrió con su manto, antes que aguantara frío. Fue muy buen estudiante, aunque no sobresaliente, pero observado por todos, siempre estaba entre la gente, nunca lo vi enojado, siempre de mirada y cara sonriente, fue un Rafael soñador, de una capacidad sorprendente. Estudió en el Seminario, lugar donde veía nieve, luego tomó la decisión, de matricularse en el EVE. Allí para mostrar cualidades, en caricaturas se atreve, las hacía todos los días y con un motivo adrede. Nos deja muchos recuerdos, este gran compañero Rafael Álvarez Tobón, un hombre siempre sincero, ahora está en el lugar, buscando ser el primero, dejándonos la lección, como la imagen del pionero.
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Se nos fue Rafa Por: Fabio Cardona
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no nunca acepta que nuestros amigos se vayan antes que uno y menos si son amigos de corazón que sentimos siempre tenerlos cerca. Nuestra amistad de más de cincuenta años sin peleas, sin ofensas, solo desacuerdos un poco, por la forma de ver la vida, nunca fue suficiente para separarnos. Nos unía el tango, la música de los setentas, el gusto por salir al campo, el deseo por disfrutar en compañía de otros compañeros, de la búsqueda del anhelado terruño para los cuatro : Rafa, Luis, Norber y yo. Nunca lo encontramos, ese sueño fue fallido. Siempre creímos que la vida nos alcanzaría… Como profesional vivió para el trabajo, sin él se sentía perdido. Por eso trabajó hasta su final, pero en sus últimos años más parecía una disculpa para ir a los pueblos a visitarlos y relacionar con la gente. Esa era su dicha. Pero Rafa me quedó debiendo mi caricatura, de la que no le llegó la inspiración. Te recordaremos siempre. Fuiste honesto, decente, buen amigo y eso es lo único que se lleva uno hasta la eternidad
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Ahí va el Rafa recuerdo Por: Cristina Álvarez
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hí va el de Rafa recuerdo cuando nos quedábamos toda una noche escuchándola los chistes, tomando tinto y fumando las caminatas que hicimos en la noche a por la loma del escombro cuando se podía salir cuando fuimos al retiro caminando a ver los alumbrados que estábamos como unos camiones, fueron momentos muy lindos de un gran amigo de la familia lo recuerdo con mucho cariño, bien los paseos en Sopetran que tiempos tan lindos la ultima vez que lo vi fue cuando le hicieron a mi un homenaje en el paraninfo siempre tan amable y sencillo, Rafa se que estas en la gloria del señor oro porque así sea chao
Cuando la amistad perdura. Por: Deysi Corral
Al revivir ese ayer, van apareciendo imágenes de personas que siempre estarán presentes impidiendo un olvido. Rafa con su alegría y sentido pícaro de la vida logró mantener despierto el verdadero valor de una hermandad de muchos, muchos años y desde ese lugar donde goza de paz y tranquilidad, nos acompañará por siempre. Te recordare.
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Rafael Álvarez. También se nos fue. Por: Jaime Ovidio Giraldo García
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l tiempo de vida se le agotó, y su existencia vital concluyó un día donde su lápiz lo seguía esperando para derramar su magia, diseñando bocetos para dejar su impronta como un recuerdo que el tiempo no ha de borrar. Con su pluma caricaturizó momentos donde las sonrizas fueron el aplauso a su talentosa forma de mostrarnos la realidad de otra manera. En sus diversas actividades y proyectos dejó huellas, donde sus deseos, intereses y creencias, no fueron limitantes y barreras para interactuar con calidez humana, con quienes compartió su vida su conducta social le granjearon el aprecio de quienes compartieron pedazos de su existencia. En sus labores como profesional del diseño arquitectónico, plasmó con sus trazos, la armónica conexión entre su mente creadora y el milagro de convertir la luz natural y los espacios en confortables estructuras. Es difícil en pocas lineas describir un catálogo de sus valores, fue un ser humano con gran sensibilidad social y sus asombros los dibujo con magistrales lineas congelando en el tiempo momentos de la existencia.
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No fue un hombre codicioso y menos ambicionaba reconocimientos que reventaran su ego, su mejor patrimonio fue ejercer el oficio de la amistad sin condiciones ni contraprestaciones, con fino humor recreó momentos donde la risa destencionaba la rigidez del momento. Rafael Álvarez se fue para quedarse en el recuerdo de la conciencia colectiva de quienes lo conocimos y compartimos momentos gratos de la vida porque su personalidad y profesionalismo le permitían moverse con facilidad en diversos ambientes, fue un hombre de su tiempo y a destiempo se nos fue.
Mis reconocimientos. Por: Rubén Morales
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afael: mis reconocimientos son bastantes y demasiados. La calidad de persona que nos entregaste no se olvida y se reconoce siempre. Haces mucha falta en éste grupo. Ni frente a Don Ántimo ni a la señora dejaste de entregar tus trazos. Gracias por los diseños básicos y detallados de mi Sombrío Son 569 m2 y más desarrollados que haré que te recuerden hasta que mis compañeros EVE 70 compartan lo que Rafael entregó para el disfrute de los suyo. Gracias, miles de agradecimientos por permitirnos y compartit contigo Rafael tantos y tan buenos momentos y...todas tus caricatas Siempre en mis mejores recuerdos.
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Rafa: perfiles, rasgos y rasguños.
De Medellín a Hades Por: Bernardo López Sánchez
“En Medellín, su pueblo y el mio, han muerto como un rayo, Rafa, Manuel, Pacho, a quienes tanto quisimos” Nació Rafa, para mis recuerdos, en1965 en Los Polveros de Itagüí, finca La Navarra, sede del Liceo Departamental Enrique Vélez Escobar, grupo 2C, que fue la génesis de un grupo de compañeros que llegaron a ser hermanos. Comenzó desde allí a demostrar sus aptitudes para el dibujo, con preferencia la caricatura, generando la alegría de todos por sus trazos fáciles y punzantes. En esos cinco años de bachillerato en el EVE, primero en La Navarra y luego en Santa María, vivimos un periodo especial, que nos preparó adecuadamente para enfrentar los desafíos del futuro, pero también para gozarnos aquel presente. Los recuerdos se suceden como una película a alta velocidad: 2C con los partidos de futbol, Luis Eduardo como flecha veloz por la punta izquierda, Rafa por la punta derecha; lanzamiento de tenis, tizas y frutas de un salón a otro. 3B con el club literario, Echavarría no preparó una poesía pero iba a cantar una canción de Leo Dan y el profe “ Leo Dan se sienta con cero”. 4B ya en Santa María con un ambiente mas encerrado pero una mente mas amplia. 5B nos graduó como grupo más contestatario y gozador, los enfrentamientos con los profesores, con el rector Don Gustavo, que tuvo como consecuencia la separación del grupo entre 6A y 6B y así llegamos a los exámenes finales para obtener el titulo de bachiller, con la recordada anécdota
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de la obtención de los puntos de alguna prueba y el drama que se generó antes y después de exámenes. Un capitulo aparte merece Karla, la heladería donde nos reuníamos a cultivar nuestra amistad y el pedido común era: cuente cabezas y traiga tintos con cigarrillos pielroja, luego a escuchar y cantar las canciones de culto: ayer aun de Aznavour, ella ya me olvidó de Leonardo Favio, mediterráneo de Serrat y tantas otras que nos hacían sentir vivos. Y cómo olvidar el club unión juventud dinámica donde pasamos tantas veladas gratas y nos dio la risueña en nuestro debut con la maracachafa. Se acabó la gozadera y ahora si a ponernos serios, cada cual escogió la profesión preferida y nos separamos, unos mas que otros, pero siempre nos reuníamos los mas íntimos para charlar, qué se yo, y para caminar o acampar. Una de las caminadas que más recuerdo fue de La Estrella a Angelopolis, de noche, y nos perdimos en el cerro El Romeral, nos quedamos estáticos ante una culebra que se atravesó en el camino resultando ser solo una rama de una arbusto movida por el viento; y suba y baje, ruedese por precipicios, llueve y, hace frío, hacemos ejercicios para no dejarnos congelar, nos salvo el fiambre que había llevado Rafa pues el guaro se había congelado; por fin amaneció y vimos la salida a diez pasos y regresamos con la cola entre las piernas y más asustados con los comentarios de los lugareños de que allí habían animales peligrosos. Otro día hicimos el mismo recorrido de día y llegamos a Angelopolis sin novedad. No puedo pasar por alto el gusto de Rafa por toda la música, con énfasis en la música vieja y montañera, los tangos (Corsini, Magaldi, Gardel, Pepe Aguirre) y Serrat, canciones que entonábamos a pleno pulmón en cualquier ocasión, acompañados por un guaro, un ron o una cerveza. En fin, son 55 años de haber conocido a Rafa, el hermano, para recordar tan poco, pero permitanme una última para recrear uno de sus pucheros: en sus recorridos por Antioquia conoció a la Lily la enfermera en Anori ,se enamoró y nos contaba embelesado sus encantos y no recuerdo si fue Augusto Román o Héctor Villa que le acotan: recuerda Rafa que enfermera o maestra, la que no lo da, lo presta. Saludos Rafa, sigue cantando en el hades que yo te haré la segunda.
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Rafa delineador de sonrisas Por: Guillermo Álvarez
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mí la Navidad no me atañe, pero a Rafa sí le concierne, como me concernía a mi cuando, como él, tuve ímpetus de santidad y andares seminariles, pero opté por el sacerdocio en el laboratorio del cuerpo, y ser un viajero en el afuera, mientras él un andariego arquitecto de sonrisas que hace arquitectura puebliando, y en cada pueblo, en cada esquina saborea con gusto los frijoles con arepa y chicharrón al humor de sus chistes e historias contadas dejándo una estela de risas con los mojones de su obra. Su mirada escrutadora y esquiva no hace reverencias pero escudriña el alma para plasmar con su lápiz el retrato y la caricatura.
Caricatas sencillas como caricias plenas de afecto, un brindar a la vida, y en ocasiones una protesta o una denunciada injusticia. Con finos trazos de mano que no tiembla porque es de alguien de firme carácter, hace sus rasgos y rasguños. Hombre recio que pareciera un poliedro de mil caras, por ello abundaron y abundan sus perfiles con sus chistes y sus risas, hasta siempre.
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Rafaeliando de pueblo en pueblo Por: Guillermo Álvarez
Santa Elena, El fin del afán.
Rafael, basta ver los Anuncios de tu Festejada cabalgata Andariega, para Entonces, con bríos Lubricar la
Rumbo Al olvido, sí, pero no Fenecerá tu obra. Adónde quieras Estará tu semblante Luminario y centelleante
Andadura sin Negaciones y con Guisos embriagantes Exquisitos y a Lomo de caballo.
Alimentando sueños Nocturnales, con musicas Guitarristas Entonando tangos Lunfardos y milongas. Alegre caminante del Lupanar mundo Viajero sin tregua Andariego de mil Rumbos, pereene Emprendedor Zanjando encumbradas
Así como ardes en Llamarada y fuego al Viento Armonioso Rebosante de Energía que hace Zumbar el alma Tan intensamente como Orbitando al cosmos Bienaventuradas Órdenes vitales Naturales y terrenas
Trochas y caminos y con Ojo avizor cuidando en Buen vivir la alegría Ojalá por siempre un Nacer, un renacer, jamás olvido.
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A Rafa, el hermano que se nos fue Por: Norberto Gómez Ramírez.
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ún siendo primíparos universitarios, a Rafael y a mí la vida nos encaminó por diferentes rumbos, y solo nos volvió a reunir unos veinticinco años después; sin embargo, mi sensación en el momento del reencuentro fue la de habernos despedido, como en el día a día de nuestros tiempos colegiales, la noche anterior en la heladería Karla. Ese encuentro después de tantos años me enseñó que para la existencia del afecto y la amistad lo vital no es la relación presencial sino la afinidad esencial, y que, si esta existe, a aquellos no los toca ni el distanciamiento ni el tiempo. Dicho reencuentro ocurrió hace veinticinco años; es decir, durante más de diez lustros los dos compartimos una amistad que, más que amistad, fue una verdadera hermandad. Yo estudié en el EVE solo el último año de bachillerato, lo cual para mí fue un hecho muy afortunado dado que allí encontré un incomparable grupo de amigos, entre quienes se contaba Rafa, con quien resultamos tener gran afinidad. Amante de Antioquia, de sus montañas, de sus pueblos y de sus gentes, en la juventud temprana realizamos con él, en grupos de amigos, alegres recorridos de buena parte de esas, nuestras montañas. Entre tantos recuerdos de arraigo montañero, también son para mí muy gratos los de los días que compartíamos en la hacienda Túnez de La Pintada con don Rafael, su padre, que administraba ese mayorazgo.
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Desde los primeros días de conocerlo, Rafa me impresionó con sus extraordinarias dotes innatas de dibujante. Mi hermana Clara Inés aún conserva la magnífica caricatura que él le hiciera en tiempos de bachillerato representándola como una secretaria, cuando, siendo casi una niña, ella alcanzó su grado en esa especialidad. Y ahora, mientras voy contándole al papel mis recuerdos de Rafa, me van asaltando a borbotones otros muchos en los que él siempre es protagonista: uno, de cuando varios amigos le compramos un lote en las playas de El Totumo, en el golfo de Urabá, a un tío de Augusto Román, y el costo del desplazamiento de los propietarios hasta allí, que se prolongaba 24 horas por la Trocha al Mar en bus de escalera, era mayor que el precio de la propiedad; y a esto se sumaba que la casa de la “hacienda” de nuestro “feudo” era la carpa “Calé” que también habíamos comprado en gavilla y que debíamos llevar desde Medellín en cada paseo. Inolvidable el viaje en autoferro por el Magdalena Medio Antioqueño, durante el cual el “Chato” Velásquez, tomando Wiski, se ufanaba de haber sido el único árbitro en el mundo que había expulsado a Pelé de una cancha de fútbol. En aquella ocasión veníamos de Barrancabermeja, donde el sofocante calor, y la carga de mugre de varios días sin bañarnos, nos hizo invertir el poco dinero que teníamos en tomar un cuarto de hotel solo para ducharnos. Igualmente inolvidable fue un viaje en tren, pero esta vez acostados sobre arrumes de ladrillos encarrados muy ordenadamente pero sueltos en un vagón de los llamados góndolas, descubiertos y semejantes a un gran compartimiento de carga de volqueta, durante el que los ladrillos nos torturaron todo el trayecto dándonos de continuo grandes pellizcos al compás de su balanceo con el vaivén del tren. Memorable también el día que llegamos a Sonsón cansados, muertos de hambre y sin pasaje para retornar a Medellín, y Albeiro, experimentado en pedir auxilio a clérigos, nos sacó del aprieto con los curas de la sede episcopal; y cómo olvidar al secretario de gobierno de Villavicencio que dejó consignados en un acta oficial a cuatro de los nuestros como “faltos de solemnidad”, para justificar el auxilio que nos concedió con el mismo fin de la aventura anterior. Solo podemos guardar agradecimiento para con el señor Romero, quien vivía frente al teatro Caribe de Itagüí, que en Armenia Mantequilla nos disuadió de caminar en
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la noche desde esa localidad hasta Titiribí porque, nos dijo él, “por esos cañones la escopeta es muy fértil”; y que, además, nos llevó a dormir esa noche en la oficina de su casa, donde Albeiro, siempre inquieto, esculcando el escritorio de rigor encontró en uno de los cajones un revólver cargado, entre un reguero de balas adicionales. Esto, que para nosotros fue un exceso de confianza, una franca temeridad, de parte del señor, para él no era más que la actitud normal en un pueblo donde en esos tiempos en las viviendas no cerraban en las noches las puertas a la calle. A diferencia de la magnanimidad del señor Romero, don Primitivo Cañola nos sacó corriendo de un potrero donde acampábamos en su finca de Sopetrán, porque, según él, “las pisadas humanas arruinan las pasturas”. Tampoco puedo dejar de hablar del susto que pasamos en una caminata hacia Amagá, cuando en una medianoche oscura nos espantó la aparición, en medio de la nada, de una mujer aindiada, de pelo negro muy largo, vestida de negro de pies a cabeza, cargando una mochila negra y un bebé recién nacido envuelto en pañales también negros, para, al fin, aclarar que era una señora que en semana pedía limosna en Medellín y se iba a pasar los fines de semana en su pueblo… caminando en la noche para aprovechar la frescura y economizarse el pasaje y el polvero que en el día levantaban los numerosos vehículos que transitaban por esa carretera en tierra. Entretanto, Miryam, inseparable nuestra, solo participaba en las caminadas diurnas, pero nunca de los paseos de más de un día; supongo que, habida cuenta de la época, esto sucedía porque ella era mujer. Así era la vida de nuestras niñas. Son tantas y tan sentidas las vivencias de nuestro trasegar juvenil con Rafael que no caben en estas notas, y sí darían para completar un grueso tomo. Después vinieron los largos años de ausencia. Viajé a Rusia, donde permanecí siete navidades hasta alcanzar mi grado universitario, y donde la comunicación con mis cercanos en Colombia se me fue diluyendo: el lapso entre el envío de una carta y el recibo de su respuesta era de unos tres meses; y la otra posibilidad de contactarse que entonces se tenía, la telefónica, era complicada, de pésima calidad, controlada e impagable para un estudiante; los lazos físicos se fueron estirando y debilitando, pero los afectivos no. Cuando regresé al país trabajé añales en muchas de sus regiones, de La Guajira al Putumayo, pero nunca en Antioquia ni en sus departamentos
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vecinos, y cuando por fin logré entrar en contacto con algunos de nuestros compañeros de secundaria, con Miryam Saldarriaga y Luis Eduardo Gil inicialmente, Rafael vivía en los Estados Unidos. Al reencontrarnos Rafa y yo, un cuarto de siglo después de aquellas excursiones colegiales, lo hallé de nuevo recorriendo a Antioquia, pero ahora en calidad de arquitecto dedicado con admirable entrega al mejoramiento de vivienda y edificaciones institucionales campesinas y pueblanas. En ello él encontraba su realización: no solo había conservado su arraigo juvenil por la Antioquia profunda, sino que lo había tornado en amor y mística por este, su terruño. Para mí, él siempre asumió su trabajo más como un apostolado que como una simple actividad económica. Y a semejanza de las lejanas épocas estudiantiles, Luis Eduardo, Fabio y yo, compañeros y amigos cercanos suyos de toda la vida, con frecuencia nos uníamos a sus correrías. De nuevo con él desandamos pueblos, ríos, llanos y montañas hasta el día en que, por más que se esforzara, su enfermedad ya no le concedió los vigores necesarios para continuarlas; pero nuestra excepcional amistad sí perduró hasta sus últimos momentos: dos días antes de partir, y cuando yo me abstenía de telefonearle para no agotarlo haciéndole hablar, fue él quien me llamó para saludarme y enterarse de cómo estaba capoteando yo la pandemia. Hablamos diez o veinte palabras, su debilidad no le permitió más: pero no hacían falta más palabras, porque de las pocas que pudimos cruzar conseguí entender claramente que él ya se nos iba, y que con él también se iba un pedazo muy grande de nuestras propias vidas.
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Rafa: perfiles, rasgos y rasguños.
BACHILLERES 70s
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Perfiles y álbum bachilleres EVE 70¨s
CLASE DE COOPERATIVISMO
El Rafa futbolero
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Rafa: perfiles, rasgos y rasguños.
Gabriela, Rafa y Luis
Guillermo, Rafa, Luis Edo y compañera, Gloria e Ivon. en el Rinconcitomusical Envigado -2018
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Perfiles y álbum bachilleres EVE 70¨s
Hugo, Gloria Ibarra, Rafa , Luis, Gustavo López
Rafael a caballo
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Rafa: perfiles, rasgos y rasguños.
RECREO EN EL EVE
RECREO EN EL EVE
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La vida tiene su manera Por: Lina María Mejía Álvarez La vida tiene su manera de hacer las cosas fuera de nuestra capacidad emocional y racional. Así mismo fue que la vida después de tu muerte me regaló este viaje de duelo con el proceso de este libro que hemos titulado, Rafa: Perfiles, Rasgos y Rasguños. Rafa, pues obvio, es un homenaje a él como caricaturista. Perfiles, porque somos nostras las personas quienes lo conocimos y quisimos quienes lo perfilamos. Rasgos porque son apenas unos trazos, y rasguños porque eso hace la caricatura, rasguñar con la realidad. La primera vez que yo me vi en una de sus caricaturas de pequeña, además de que me hizo reír mucho y me parecía increíble que podía lograr plasmarme fue que entendí que el humor es uno de los poderes más grandes de la vida y que así mismo yo me podía reír de mi misma. Con un poco de escrutinio y un sentido de protección y cuidado por mi mamá y el legado de mi tío me acerque a Guillermo, amigo, cómplice y editor del proyecto empezado por mi tío y el para publicar las caricaturas hechas a lo largo de su vida. A los 10 minutos de estar sentada con Guillermo entendí que este libro había que sacarlo y que yo estaba allí para aportar a que esto sucediera.
RAFA:
perfiles, rasgos y rasguños. Dirección editorial: Luis Guillermo Álvarez Álvarez Corrección de textos: Eloisa Álvarez de Mejía y Lina María Mejía Álvarez Diseño y diagramación : Imago Fotodiseño Editorial: Corporación Ciudad Whatsapp 3017874829 Edición: Enero de 2021