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CULTURA
The Omni Homestead
En invierno, primavera, verano y otoño, siempre habrá algo que descubrir sin importar la estación del año, en este idílico e histórico resort, desde aventuras al aire libre hasta relajantes días de spa. Les garantizamos una escapada perfecta.
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Fotografías FUENTE EXTERNA
El Omni Homestead es un resort de lujo ubicado en Hot Springs, Virginia, Estados Unidos, en medio de las Montañas Allegheny. Alrededor de este maravilloso lugar se encuentran las aguas termales más grandes de la comunidad, y el complejo también es conocido por sus campos de golf de campeonato, que han sido sede de varios torneos nacionales. El resort incluye una estación de esquí alpino; Homestead fue fundado en el año 1959, por lo que es catalogado el más antiguo de Virginia. Su edificación ha sido designada Monumento
Histórico Nacional. Su historia se extiende por más de dos siglos y medio. Omni Homestead
Resort es miembro de Historic Hotels of America, el programa oficial del National Trust for Historic
Preservation. En 1766, Thomas Bullitt construyó una casa de campo aquí, la cual se consideraba como la fundación de The Homestead. En 1832, el Dr. Thomas Goode compró el terreno a la familia Bullitt y amplió las terapias médicas, estableciendo un estilo europeo de tratamiento de spa e hidroterapia. Desde entonces, ha recibido a turistas de todo el mundo, príncipes, personalidades relevantes de todas las áreas a nivel local e internacional, incluidos veintitrés presidentes de los Estados Unidos.
El complejo moderno data de 1888 a 1892, cuando un grupo de inversionistas encabezado por J. P. Morgan compró el negocio y comenzó a reconstruirlo desde cero. Los edificios originales del hotel se quemaron en 1901 a causa de un incendio en la panadería. El hotel principal de Homestead se construyó después, un ala al año, y el vestíbulo principal se reconstruyó en 1902. Este impresionante edificio está perfectamente ubicado en una cadena montañosa de Allegheny, en donde podemos encontrar el mejor lugar para experimentar la dicotomía de la historia y belleza natural de Virginia. El Omni Homestead Resort and Spa es una estructura de ladrillo imponente y dominante que parece surgir de un valle rodeado de montañas. Este Resort, histórico por demás, tiene más de 250 años, increíblemente, es más antiguo que los Estados Unidos. Los poderes curativos de las aguas descubiertas debajo de la tierra hacen de este lugar, un espacio maravilloso, mágico y muy interesante. Este resort no necesita ofrecer mucho más para atraer huéspedes, sin embargo, hay un sinfín de actividades disponibles tanto para adultos como para niños. Para ser francos, una estadía de fin de semana aquí no será suficiente. Vale la pena el viaje a través del campo de Virginia, llegar a Homestead es adentrarse a estos paisajes
impresionantes que nos dejan sin palabras; aunque solo se encuentra a poco más de una hora en automóvil desde Charlottesville, y a unas tres horas desde Washington D.C. El viaje por carretera está lleno de vistas espectaculares, es una aventura en sí misma. En esta parte del país, la naturaleza y los espacios abiertos son la norma y mientras seguimos un río pintoresco, podemos imaginar los trenes que una vez transportaron a la élite adinerada de Washington a principios de siglo.
Columnas georgianas altísimas y el leve tintineo de un piano en vivo nos dan la bienvenida en el vestíbulo. Instantáneamente, recordamos a los ex dignatarios que se han hospedado aquí con el objetivo de encontrar una cura para sus dolencias. Incluso en 1766, la gente estaba en búsqueda de descubrir el rejuvenecimiento y una mejor salud. Thomas Jefferson estuvo aquí en 1819, para curar su reumatismo y decidió quedarse por espacio de veintidós días. Otros
presidentes como, por ejemplo, Richard Nixon, Ronald Reagan, Woodrow Wilson, Dwight Eisenhower, William Taft, James Madison y James McKinley, Franklin D. Roosevelt, entre otros, recibieron terapias y tratamientos de salud y bienestar en este prestigioso resort y spa. Su decoración es típicamente sureña y el ambiente es formal pero relajado, con detalles clásicos, muebles suntuosos, y, sensibilidades europeas, percibimos en cada rincón. Nos impresionó a primera vista, la rica paleta de colores y la variedad de texturas y patrones en sus habitaciones. Recomendamos sus suites con vista al campo de golf y a la piscina, ambas cuentan con una vista hacia su paisaje impresionante. El complejo es conocido por su excepcional servicio y hospitalidad. En el pasado, los huéspedes se quedaban al menos dos semanas y muchas familias durante todo el verano.
The Homestead es más que un hotel, era y sigue siendo hoy en día, una especie de campamento de lujo donde podemos participar en actividades al aire libre durante todo el año. También es conocido por sus campos de golf de campeonato que han sido escenario de varios torneos nacionales. Para los padres que necesitan un descanso de sus hijos, el complejo ofrece servicio de niñera y un club infantil. Su tradición se mantiene viva en Homestead, donde el restaurante central de la propiedad se llama apropiadamente el “Comedor”. El ambiente es de hecho, formal, con invitados vestidos de punta en blanco y música en vivo, completa con un arpa y un vocalista. La comida es de origen local y cuenta con truchas frescas de Allegheny Mountain y carne de res alimentada con pasto de Virginia. Las comidas adicionales incluyen los restaurantes Jefferson’s y Casino, asegúrese de no perderse el té de la tarde que se sirve con pastel, en su majestuoso vestíbulo, donde un pianista le dará una serenata junto a una chimenea de leña, que alberga un toque romántico y cálido a la vez.
Unas vacaciones en The Omni Homestead se distinguen por el ambiente histórico, las ricas tradiciones y una variedad aparentemente interminable de actividades interiores y exteriores, que incluyen dos campos de golf de campeonato, tenis, club de tiro, equitación, senderismo, pesca con mosca, tiro con arco, cetrería, ciclismo de montaña, y paseos en carruajes. El spa fue renovado y ahora cuenta con Aqua Thermal Suites y un exclusivo Serenity Garden solo para adultos. Las actividades de invierno incluyen esquí, tubing, patinaje sobre hielo, snowboard y mini motos de nieve.
De hecho, no hay nada como el distintivo Omni Homestead Resort and Spa, los huéspedes han regresado aquí durante generaciones, no solo por el esplendor y la grandeza, sino también por la oportunidad de reunirse con la naturaleza y dejar de lado el ajetreo y el bullicio de la vida cotidiana en las grandes ciudades. Para comprender completamente lo que los fundadores del resort tenían como objetivo y misión de establecer, debemos planificar al menos unos días adicionales de placer, relajación y bienestar, es la única manera de disfrutar al máximo las bondades que nos ofrece.
Después de leer sobre los beneficios de las aguas terapéuticas, decidimos darnos un baño, luego un masaje indescriptible, y posteriormente, tuvimos acceso a la piscina de aguas termales minerales naturales, y a la suite termal acuática en el jardín del spa, durante el resto del día.
La piscina geotérmica abierta todo el año es alimentada por dos manantiales ricos en magnesio, potasio y calcio, con una temperatura de 97 grados, y apenas entramos, nos sentimos tranquilos y relajados. Los beneficios curativos todavía se debaten hoy en día, pero ¿quién no se sentiría mejor después de un día en este oasis?
En la actualidad, el legendario resort y Monumento Histórico Nacional continúa brindando una hospitalidad sin igual y un encanto sureño en un entorno de 2,300 acres que se distingue además por un espléndido clima de cuatro estaciones. El Omni Homestead Resort es el lugar de nacimiento de la hospitalidad sureña, por lo que se ha convertido en un patrimonio estatal y nacional. Monumento Histórico que dio la bienvenida a sus primeros huéspedes una década antes de la Revolución Americana. The Omni Homestead Resort and Spa, continúa ofreciendo un servicio amable, alojamiento elegante y un encanto sureño distintivo. El complejo ofrece 483 habitaciones, incluidas 88 amplias suites junto con una variedad de restaurantes informales y elegantes que reflejan el legado histórico del resort. Allegheny Springs, un área de agua de dos acres, ideal para familias, cuenta con dos toboganes de agua de cien pies, un río lento de cuatrocientos pies, piscina familiar, jacuzzi y zona de juegos acuáticos. The Mini Cascades, un campo de golf en miniatura, abrió sus puertas en la primavera de 2013.
Desde diciembre de 1941 hasta junio de 1942, luego de la entrada de Estados Unidos en la Segunda Guerra Mundial, Homestead sirvió como un campo de internamiento de alto nivel para 785 diplomáticos japoneses y sus familias, hasta que pudieran ser intercambiados a través de canales neutrales por sus contrapartes estadounidenses. Posteriormente, los diplomáticos fueron trasladados al hotel Greenbrier en Virginia Occidental.
En 1943, durante la Segunda Guerra Mundial, The Homestead fue sede de una conferencia muy importante de las Naciones Unidas en la que se implementó la fundación de la Organización para la Agricultura y la
Alimentación. En 1993, The Homestead fue comprado por Club Resorts, la misma empresa propietaria de Pinehurst Resort en Carolina del Norte. En 2006, Club Resorts y su empresa matriz ClubCorp, Inc. fueron adquiridas por un grupo de capital privado liderado por KSL Capital Partners; KSL Resorts asumió la administración de The Homestead en ese momento.
KSL vendió el complejo a Omni Hotels en 2013 y pasó a llamarse The Omni Homestead Resort. Fue designado Monumento Histórico Nacional en 1991. Asociados con The Homestead están los Homestead Dairy Barns, incluidos en el Registro Nacional de Lugares Históricos en 2007. The Homestead cuenta con dos campos de golf. El club a veces se conoce como Virginia Hot Springs Golf & Tennis Club. El área produjo un ganador de 82 veces en el PGA Tour en el difunto Sam Snead. El Old Course comenzó como un diseño de seis hoyos en 1892, y el primer tee es el más antiguo en uso continuo en los Estados Unidos. Se amplió a 18 hoyos en 1901 y Donald Ross lo rediseñó en 1913.
Desde entonces, el campo ha sido modificado varias veces, y el campo actual tiene seis pares 5 y seis pares 3. El campo Cascades es el más famoso de los dos y suele estar clasificado entre los 100 mejores campos de Estados Unidos, por
Golf Digest y Golf Magazine. The Cascades es el campo que se utiliza cuando se organizan torneos nacionales, incluidos siete campeonatos de la Asociación de Golf de los Estados Unidos. Fue diseñado por William S. Flynn (quien también fue el arquitecto principal de Shinnecock Hills) y se inauguró en 1923.
Anteriormente había un tercer campo, Lower Cascades, que fue diseñado por Robert Trent Jones Sr. en 1963. Albergó rondas de clasificación para el torneo amateur de Estados Unidos. Fue cerrado después de la temporada 2012. El famoso campeón del PGA Tour, Sam Snead, vivió en o cerca de Hot Springs toda su vida y se desempeñó durante décadas como profesional de golf de Homestead.
El complejo cuenta con una gran área de spa (60,000 pies cuadrados). También hay una serie de opciones gastronómicas formales e informales disponibles en las instalaciones. El área de esquí en The Homestead se abrió en 1959; es la estación de esquí más antigua de Virginia. La pendiente principal y única orientada al noroeste del complejo cuenta con tres ascensores, incluido un telesilla doble que accede al terreno intermedio y avanzado en la cima de la colina, y dos ascensores de superficie que sirven al terreno para principiantes en la parte inferior y en la colina de tubing.
El telesilla dispone de una estación de bajada en media montaña que accede a terrenos intermedios. El complejo ofrece una variedad de otras actividades de invierno, incluido el snow tubing. El complejo originalmente presentaba una pista de patinaje de tamaño olímpico que cerró cuando el Zamboni quedó inutilizable. En 2008, Homestead construyó una nueva pista de patinaje sobre hielo de 30 X 20 pies, a tiempo para la temporada de invierno 2008-2009. En 2013, la pista de hielo se trasladó a Allegheny Springs, junto a la piscina al aire libre.
Una escapada única e interesante para los amantes de lo diferente, así lo experimentamos y así lo recomendamos, en donde la historia, el lujo, los deportes y la belleza de la naturaleza juegan un papel protagónico, por lo que a la valoración sobre nuestra estadía a este impresionante resort, le damos un 10 de 10, digno de ser visitado una y otra vez.
