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NADA PARA EL BURRO
Hace un par de semanas, en México corrió el rumor que el tirano de Cuba estaría en el balcón del grito de independencia. Aunque haya sido solo la intención, es una afrenta a los mexicanos que señala el descaro de las intervenciones de fuerzas obscuras del exterior en los asuntos del país, como lo han hecho por todo el mundo en su proceso de saquearlos y pregunto ¿Qué está pasando? Vuelvo la mirada a los años 90 cuando Salinas iniciaba la liberación de México que luego se conocería como Salinostroika, y arremetía con sus reformas que provocaran lo que llamarían “el milagro mexicano”. Lo seguirían las revoluciones primaverales de Europa Oriental para liberarse del marxismo de la Unión Soviética. Vendrían también otros reformadores de AL, Fujimori en Perú, la nueva versión de Carlos Andrés Pérez en Venezuela, Menem en Argentina etc. Una ola que se reflejaba en las excelentes calificaciones de sus avances en libertad económica. Se hablaba sin miedo de mercados, libre comercio, privatizaciones de empresas públicas. ¡Pero era solo una trampa! Autores como Paul Craig Roberts, Larry Kudlow, ex jefe de asesores económicos del presidente Trump, publicaban grandes odas a estos nuevos revolucionarios que hablaban de competir en los mercados globales, más participación al mercado y menos al Estado, monedas fuertes, sanidad en las finanzas públicas, combate frontal a la inflación. Es decir, en nuestro infierno centenario se daban pistas de convertirse en el paraíso que, como la interminable jornada de Moisés, habíamos transitado durante tanto tiempo y estábamos a punto de llegar a ese destino. La empresa de asesoría económica, Polyconomics, le entregaba a México el mapa con pasos específicos para finalmente llegar a la tierra prometida. México celebraba que lo declararan el tigre de AL. Se desintegraba la Unión Soviética y, en EU, Reagan lograba se olvidara la pesadilla Carter cuando provocara su famosa malaise. Mike Milken sacudía los mercados con sus herramientas para atacar corporaciones mal manejadas por sus lideres, que no asumían su responsabilidad de presentar cuentas y, cortesía de Milken, productividad, ganancias y el valor de las acciones de los negocios crecían. En Europa un electricista llamado Lech Walesa cimbraba el mundo y provocaba que Rusia, con Gorbachov al frente, iniciara Perestroika como receta para enterrar el comunismo. Y, como el tiro de gracia, Francis Fukuyama publicaba su libro, “El fin de la Historia y el Último Hombre”, el epitafio para esa pesadilla mundial que alguien describiera como “la más grande aberración económica, política y moral del siglo 20. ¡El mundo sonreía! Pero, en estos momentos regreso al presente para comprobar la certeza de lo que, hace 30 años, nos provocara vibrar de júbilo ante el bello panorama que se nos dibujaba y, en especial, que fuera realidad de lo que habíamos soñado. Y, ¿Qué es lo que encontramos? Los tres países de Norte América están bajo la tiranía de gobiernos socialistas que han provocado el desplome de sus índices de libertad económica y sus economías. Chile, el pionero y gran ejemplo de AL, como afirmara Yoghi Berra, deja vu all over, de nuevo están a punto de caer en el marxismo destruyendo lo que se había logrado. Pero, la situación de EU la describe mejor un veterano de la guerra de Viet Nam: “Hace 40 años combatíamos a los comunistas en tierras lejanas. Pero ahora los tenemos en casa, en el gobierno, y nadie los combate”. En México, en estos 30 años tuvimos cinco presidentes y comparando su ingreso per cápita de 1980 con el de 2021, en valor de dólares actuales, el ingreso del 2021 es más bajo que el de hace 40 años y más de 5 millones han emigrado a EU. En estos últimos 30 años de liberación, el mundo ha llegado a acumular una impagable deuda de $250 trillones de dólares (TDD) que equivale al 350% del PIB global. La libertad económica de los países se ha derrumbado al mismo ritmo que sus economías. EU Invadió Irak y Afganistán, donde el costo ha sido de trillones que han ido a las arcas del Complexo Militar-Industrial y casi 1,000 bases militares alrededor del mundo. Al inicio de este siglo, se reportaban perdidos $4TDD de las arcas del gobierno de EU. De los cuales, el Departamento de Defensa aportaba más de $3TDD. En el Departamento de Vivienda se extraviaron $59 billones.
También en el Departamento de Defensa en 2016 se encontraron ajustes no documentados de $9.3TDD, que se especula fueron a engrosar las arcas del Complexo Militar-Industrial. En el Departamento de Estado con Hillary al frente, se extraviaron $6 billones. En estos años las elites han recibido rescates por $27 Trillones de dólares. Es decir, en estos 30 años de “liberación global”, el gobierno de EU se convirtió en la pila de agua bendita de una corrupción inimaginable provocando que, técnicamente, este gobierno esté quebrado y, lo más grave, sin solución a la vista porque no la tiene. El EP ha logrado el control total del gobierno, de Wall Street, de toda Europa con su UE, de Silicon Valley, y en estos momentos negocia su entrega a China. Esto es un fascismo especial de un matrimonio entre burócratas del gobierno, los gatos gordos corporativos y toda la comunidad de inteligencia. Los responsables de este saqueo saben que tienen una espada de Damocles sobre sus cabezas y eso los ha obligado a operar bajo un estado de pánico porque, además, la única solución para desaparecer las evidencias es solo rogar por otro milagro como el del avión que se estrelló el 2000/11 en la zona del pentágono donde se mantenían todos esos récords.
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• Ricardo Valenzuela chero@refugioliberal.net chero.itesm@live.com