LAS PREBENDAS E IMPUNIDAD

El PRI está en la antesala de su extinción, como sucedió con los dinosaurios, el animal más comparado con este legendario partido, al que su actual dirigente, Alejandro Moreno, le prepara su fosa con las mismas siglas alteradas: RIP. Todos sospechan que ALITO acordó con AMLO su libertad a cambio de apoyo en San Lázaro, para formalizar la militarización del país. La pregunta que se plantean muchos mexicanos es si el actual presidente del PRI se manda solo.

¿Quién es el dueño o dueños del PRI? Buena pregunta. Antes lo era el presidente de la República. Claro, si era de origen priista. Quizá si los ex presidentes se juntan podrían formar un gran consejo. Todo es posible. Pero algo deben hacer si no quieren ser aniquilados. Antes de caer a manos de ALITO. El PRI está en crisis, sin duda. Y no hay que olvidar las grandes reformas que ha vivido el PRI a lo largo de su historia se aplicaron en medio de crisis. Hoy el viejo partido está sumido en una crisis, otra más en su ya larga historia. En este escenario debemos recordar que la “crisis se produce cuando lo viejo no acaba de morir y cuando lo nuevo no acaba de nacer”. Así está el PRI en su versión 2022. Desde el fracaso de Roberto Madrazo no se veía a un PRI tan débil y dividido a nivel nacional.

En Sonora, el PRI anda por las mismas: Débil, dividido, a punto de su extinción. Indudablemente sería interesante experimentar un proyecto reformador desde la tierra del fundador del PRI, heredero del PNR de 1929, que impulsó la pacificación del país. Obviamente será difícil observar una revolución priista. Por desgracia vemos que el ritual luce inalterable: Los intereses de los políticos profesionales es prioridad. Para ello están dispuestos a vender todo, empezando por su supuesta ideología y compromisos partidistas. Lo importante es emular a Tarzán y pasar a la siguiente liana. Así ha sido siempre en la política. Y seguirá vigente mientras un aguantador pueblo soporte este tipo de jugadas de políticos profesionales que en realidad son semi - profesionales o amateur. Pero saben venderse como la última coca en el desierto. Claro, llenando con saliva tambos de 200 litros de capacidad. De las ideologías, olvídese. No existen. Solo hay intereses. Si le hablan de izquierda, derecha o centro inclinado hacia esos extremos, es pura demagogia. Por eso la política es el arte de seducir. Bueno, hay seductores buenos, regulares y francamente malos. Ejemplos hay muchos. Es cuestión de analizar personajes en cada bando. Hágalo. Podría ser un entretenido ejercicio para depurar la mente.

El gobierno de Durazo premia y castiga. La administración del gobernador Alfonso Durazo está por cumplir un año, sin entregar obras a la población y sin oposición al frente. Hasta el momento ha sido una gestión tranquila. Nadie cuestiona. Nadie pelea. Pareciera que los actores políticos están comprometidos con el poder en turno. Reflejan que ahorita sirven de comparsa pero que en el pasado aportaron su granito de arena para el triunfo electoral del hoy mandatario.

Varios priistas alzaron su voz cuando fueron borrados del mapa electoral, ubicando en primer lugar de los que poco o nada hicieron por la causa tricolor a la propia gobernadora, Claudia Pavlovich, en cuyo selecto entorno figuraba Natalia Rivera Grijalva, hoy diputada local por Movimiento Ciudadano, luego de renunciar al PRI junto con Ernesto de Lucas Hopkins. En una campaña a la gubernatura, de las que pueden ganar, hay intereses de todo tipo. Por supuesto predominan lealtades y deslealtades, acuerdos a futuro y promesas de un buen porvenir. En ese contexto llama la atención una empresa: Publitecnia Agencia de Publicidad, S.A. de C.V., propiedad de Abraham Mijael Rivera Grijalva, hermano de la mencionada congresista. Constituida en 2008, esta empresa comenzó en este año 2022 a recibir adjudicaciones directas por parte del ISSSTESON, con contratos oscilantes de 11 mil a 40 mil pesos mensuales. El monto acumulado suma 479 mil 578 pesos. Usted, caro lector, tiene la mejor opinión.