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Iluminación Museo Nacional de Altamira
from Lumínica 42
Sylvania Lighting
Las salas de exposición del Museo Nacional de Altamira constan ya de la tecnología LED para la iluminación de las obras de arte. Esta tecnología mejora notablemente la calidad de la iluminación en las salas, contribuye a la conservación de las obras de arte, facilita el mantenimiento y el proceso de instalación de las exposiciones y reduce en un 90% el consumo eléctrico.
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«Nos sentimos muy afortunados de poder implementar nuestra más novedosa tecnología LED en un museo tan importante como es el Museo de Altamira. Realzando los colores y conservando las obras con una iluminación uniforme y de acento gracias a nuestros proyectores Beacon Muse» comenta Daniel Carrasco, responsable del proyecto en Sylvania.
La proyección de luz de excelente calidad y la uniformidad del baño de luz en las obras de gran altura y su propia regulación onboard son precisamente alguna de las características más destacadas de estos proyectores profesionales de iluminación de Concord by Sylvania.
El proyecto para implantar la tecnología LED en el Museo Nacional de Altamira de Santillana del Mar se puso en marcha en 2021. El objetivo era la sustitución progresiva de las luminarias halógenas por las LED y para ello, se adjudicó la contratación de estos equipos a Sylvania, empresa especializada del sector que ha firmado la iluminación de otros museos nacionales como el Museo Nacional Thyssen-Bornemisza en Madrid, la Colección del Museo Ruso en Málaga, las salas expositoras del Círculo de Bellas Artes de Madrid.
En los últimos meses se ha finalizado la instalación de los 56 equipos Beacon Muse II con regulación on-board LED en las dos principales salas y en los próximos meses se establecerán en las otras dos salas de exposición temporal.
La implantación de la tecnología LED para la iluminación de las obras de arte es un paso más en la apuesta del Museo Nacional de Altamira por mejorar la experiencia estética de los visitantes y por la sostenibilidad; de hecho, una vez completada la instalación de esta tecnología, se estima una reducción considerable de la huella de carbono del Museo, evitándose la emisión a la atmósfera de unas 234 toneladas de CO2 cada año.