UN VÍNCULO A LA EXCELENCIA EMPRESARIAL

La certificación ISO es un estándar global que utilizan millones de empresas en diversas industrias para demostrar que están comprometidas con los principios de gestión de la calidad.

Para obtener la certificación ISO, las empresas deben cumplir con ciertos requisitos desarrollados por la Organización Internacional de Normalización (ISO) y que se utilizan para garantizar la calidad, seguridad y eficiencia de los productos, servicios y sistemas. Esencialmente, las certificaciones ISO son una prueba de que una empresa se adhiere a ciertos estándares y se comporta con un alto nivel. Es decir, aseguran que los procesos comerciales estén en línea con los procesos de prácticas internacionales aceptadas y permiten una mejor gestión de riesgos.

Cada certificación tiene su propio conjunto de estándares y requisitos. Algunos de los tipos más comunes de certificación ISO son:

ISO 9000: una de las certificaciones más comunes es la ISO 9000, un grupo de normas que se relaciona con los sistemas de gestión de calidad (SGC) y ayuda a las empresas a satisfacer las necesidades de los clientes y otras partes interesadas. Es la forma más básica de lo que la ISO se ha propuesto lograr.

ISO 9001: Las empresas eligen ISO 9001 para establecer la conformidad del producto con los requisitos estandarizados. En este caso, el producto también se refiere a los servicios, materiales, hardware y software, y esta certificación se relaciona más con el producto que proporciona una empresa que con la entidad en sí.

ISO 13485: Una certificación específica del sector para la industria automotriz . Describe los estándares que los fabricantes y distribuidores de automóviles deben mantener en cuanto a calidad y eficiencia, que son especialmente útiles en relación con el envío internacional de vehículos.

ISO 14001: En relación con los requisitos para un sistema de gestión ambiental, la norma ISO 14001 es cada vez más frecuente debido a las opiniones de los consumidores sobre el impacto de las corporaciones en el medio ambiente. Las entidades con esta certificación controlan los efectos de sus actividades generales tanto en la flora como en la fauna.