ACADEMIA
LA POLÍTICA DEL MIEDO:
ESTRATEGIA DE LA REELECCIÓN PRESIDENCIAL DE MACRON
L
POR
DR. MIGUEL RUJANA QUINTERO
Director de Investigaciones Universidad del Sinú – Extensión Bogotá.
Los gobiernos franceses de los últimos tiempos ya han olvidado los principios de la revolución de 1789: libertad, fraternidad e igualdad. La realidad reciente demuestra que son xenófobos, islamófobos y discriminan1. ¡Ahora se ahogan en sus laureles!
o que se inició como discriminación social y cultural contra los inmigrantes que vinieron del Medio Oriente a reconstruir a Europa, después de la Segunda Guerra Mundial, se convirtió rápidamente en una hostil islamofobia a partir de los años ochenta. La piedra de la discordia, las publicaciones satíricas contra el profeta Mahoma, entre otras ofensas. Esta ideología cobra fuerza a partir de 1988, cuando el novelista indio nacionalizado británico, Salman Rusdhi, publicó los Versos Satánicos, ridiculizando a las esposas del profeta Mahoma. El hecho, considerado blasfemo por los seguidores de esta religión, causó escándalos en el ámbito mundial con amenazas y boicot por parte de las naciones musulmanas contra los países de Occidente. Cobra fuerza la islamofobia en 2003, cuando el periódico Jyllasn Posten, de más amplia difusión en Dinamarca, realizó una campaña de largo aliento contra los inmigrantes, publicando editoriales en los que insinuaba que el islam es incompatible con la democracia y que es imposible que los musulmanes se integren a la sociedad danesa. Recientemente esta nación ha convocado a los países de Europa para una cruzada contra los inmigrantes: cerrarles las fronteras y toda ayuda humanitaria2. En 2005 el periódico danés contrató un nuevo ilustrador para diseñar las caricaturas sobre Mahoma, debido a que los empleados se negaron a hacerlo por temor a ofender el sentimiento religioso de esta confesión. Una vez publicadas se hicieron sentir las reacciones y protestas de organizaciones musulmanas, árabes, civiles y religiosas, por considerar ofensivas las caricaturas. Once embajadores reunidos en Copenhague se sumaron a las protestas.
REVISTA [34] MOMENTOS