5 minute read

ARTE

Next Article
REDES

REDES

FEDERICO GOMEZ El amanecer de los árboles

Esculturas su taller

Advertisement

Desde tiempos inmemorables la naturaleza y el arte han estado ligados al ser humano. El árbol ha sido siempre un símbolo ancestral que representa la regeneración de la vida en constante evolución. Ellos Surgen de la tierra a través de las semillas y sufren transformaciones, dan el verdor al mundo y son la energía vital de la tierra.

El árbol y su conjunto, el bosque, tienen un papel muy importante como símbolos sagrados para las diferentes culturas y etnias de la humanidad y han permitido al humano conectar y reencontrarse con los mundos superior e inferior. Federico Gómez es un artista polifacético, maestro, poeta, fotógrafo y principalmente escultor. Conocido por sus esculturas biológicas. Es experimentador de olores, colores, tactos y sonidos en los bosques. La fuente de inspiración en su obra es la naturaleza en general y el árbol en particular.

En los bosques se reencuentra consigo mismo utilizando la energía del entorno natural para crear su obra y en un acto de poesía da a los árboles ya muertos una segunda oportunidad de vida, a través del arte, dotándoles de un espíritu nuevo. Federico centra su atención en árboles muertos (semillas, raíces, troncos y hojas) realizando una serie de esculturas trabajadas principalmente en madera.

Cuando un árbol muere, el artista, le da un nuevo significado a través del arte, porque nada es tan bello como las ruinas de algo hermoso. A través de la observación y contemplación en silencio de la naturaleza, fuente de inspiración, el artista conecta con su energía, y crea su obra con el objeto de transmitirnos un mensaje para su entendimiento y comprensión, el mensaje de la naturaleza, del Todo.

En su obra de una gran sensibilidad nos transmite este mensaje claro que habla sobre la grandeza del árbol como elemento básico de la tierra y de la vida, estableciendo un diálogo directo, surgiendo así la idea de recargar la memoria, ver lo invisible, recrear vida.

Federico y el nogal de las escuelas en Bustarviejo

Nogal en escuelas de bustarviejo

Nogal en escuelas de Bustarviejo

Nacido en Madrid en 1956, reside en el municipio de Bustarviejo, en la Sierra Norte de Madrid en donde trabaja rodeado de bosques desde donde encuentra su inspiración. Es en este municipio, y más concretamente en las antiguas escuelas, donde realizó una intervención site-specific sobre un viejo nogal al que treparon generaciones enteras. “El nogal de las antiguas escuelas”. En el jardín de las antiguas escuelas yacía un viejo nogal que algún maestro o maestra plantó en algún momento de su vida y que durante muchos años fue testigo de juegos de cientos de niños y niñas, dando hermosa sombra y ricas nueces a maestros y alumnos. Ese nogal murió en algún momento y Federico, con el objetivo de darle una nueva vida, talló una impresionante escultura de gran tamaño en donde habitan figuras de metal simulando ser niños y niñas. Esta hermosa escultura que donó al pueblo es un homenaje a los maestros y maestras, a los árboles y a los escolares que bajo su sombra se sentaron, corretearon y jugaron. Actualmente las antiguas escuelas sigue siendo un espacio sociocultural, así que ahora el árbol ha adquirido un nuevo espíritu de vida y sigue siendo testigo de actividades y personas interesadas en la naturaleza y la cultura. El significado de esta obra está así complementado por el entorno que le rodea.

Federico Gomez ha participado en una treintena de exposiciones colectivas y alrededor de veinte exposiciones individuales. De sus exposiciones individuales destacamos “La segunda vida de los árboles” de una gran sensibilidad donde expresa de una manera poética y de gran creatividad la inmortalidad y grandeza de la naturaleza a través de sus árboles esculturas, infundiéndoles una segunda oportunidad de vida a árboles ya muertos. Sus “Naturlaismos” son joyas de pequeños formatos que la naturaleza nos ofrece, recordándonos lo grande que puede ser algo minúsculo; todo ello sustentado por manos artificiales, creadas por los humanos, clonadas unas de otras, previsibles frente a la diversidad y lo imprevisible de la naturaleza.

Magnificos son sus árboles marinos en los que el papel del sol y de la luz tienen un rol fundamental en el crecimiento de los seres vivos. De lo alto es donde toman vida y de abajo es donde se esfuerzan en hacerla penetrar. Asombrosos y llenos de significado son también sus “Árboles huecos” que representan la regeneración de la vida. Antiguas costumbres ancestrales consistian en enterrar al ser humano fallecido dentro de un árbol hueco, dónde era devuelto a la madre naturaleza para ser de nuevo engendrado.

Actualmente podemos visitar su exposición “Arboles del principio al fin” que tiene lugar en el Monasterio del Paular y donde podremos observar piezas realizadas con semillas, raíces y troncos de árboles recogidos en las playas, pertenecientes a la serie de “Árboles viajeros”. Obras que nos harán reflexionar y no nos dejarán impasibles. La exposición se prolongará hasta finales de este verano debido a la situación actual de confinamiento.

https://www.monasteriodeelpaular.com/ El mismo afirma en su blog personal sobre los procesos creativos: “El bosque es un templo donde los árboles gozan de protagonismo…El amanecer: “el comienzo de una vida y para otros, para los que nos dejan, también es un comienzo…, el de otra vida”. Más información sobre el artista: Blog personal: http://fhol.blogspot.com/ https://www.facebook.com/federico.gomez.967 https://instagram.com/federico_g_esculturas?igshid=za48fd4e5ldd Os invito a conocer más sobre su magnífica e interesante obra:

“Porque verde es el color principal del mundo y a partir del cual surge la hermosura” Calderón de la Barca

This article is from: