Revista Vanguardia Femenina Edición #4 by Revista Vanguardia Femenina

Edicion Nº 4 Noviembre 2015

Love

Illustraciòn Jessica Cano

ANGUARDIA femenina

EDICIÓN 4 NOVIEMBRE 2015

10 - 11

4-5

EDITORIAL

Susana Molina “ Las Rutas del Amor”

6-9

Mónica Ospina “ Presentación Camacho de Gómez””

Directora General y Diseño

Mary Torres Avila Colaboradoras

Susana Molina Catalina Orozco Juana Arango Contacto Editorial

vanguardiafemenina@gmail.com

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“ Jó

óvenes Escritoras”

12 - 13

PRPGRAMACIÓN Artística y Cultural de la ciudad

Sara García “ FOTOREPORTAJE ”

ANGUARDIA

femenina

Es una revista li teraria y cultural de la ciudad de Medellín, enfocada en resaltar el trabajo de las mujeres de la ciudad de Medellín en diferentes áreas como Teatro, Danza, Literatura, Música, Deporte, entre otros. Invitamos a todos y a todas a conocer mas sobre este proyecto innovador para la ciudad

Las Rutas

¿Cuál es tu límite? Ir hasta el fin del mundo.

Una luz de lámpara amaril a pega en todo su rostro, dibuja una extraña mirada en su piel, los vendedores ambulantes, los borrachos pervertidos, los punkeros consumiendo droga, ella y yo nos encontramos en el parque periodista en la ciudad de Medellín, hablando sobre la vida, aunque un bostezo grande y unos ojos ya dormilones declaman en ella un cuerpo cansado. -Necesito un lugar para descansar, ¿conoces un lugar barato aquí en Medellín? - Me mira a los ojos como medio drogada y me pregunta otra vez ¿quieres comprarme algo? -Le contestó. Será un placer, obvio quería comprarle aquel a pluma, la que me había acercado a ella. Mientras buscaba el arete, me fijo en cómo se mueve, sus delicadas manos describen un ser muy particular, l eno de vida, su sonrisa blanca cálida y su forma tan amable de comportarse conmigo, “Las rutas del amor” pienso en mi mente; un cabello largo esponjado, un cuerpo delgado, mostrando la mala alimentación que ha tenido. - He pasado mucha hambre y pena, pero siempre busco la forma de conseguir comida, me la rebusco

todo el tiempo y aun así, hay días muy duros. Comienza a ventear, un aire fresco arrollador pasa por todo su cuerpo. A Celeste la acompaña un collar de diente de tigre, una hombre con rastas, ojos verdes, cara sonrojada y un piel bastante pálida. Su nombre es Lucas viene de Argentina y es la pareja de Celeste, se conocieron en Perú, cerca de Machu Picchu y por cosas del destino tenían una ruta similar y un encuentro inesperado hacia el amor. Llevan dos años juntos recorriendo Colombia, Perú y Bolivia, sobreviviendo de experiencias únicas. Este era el sueño de Celeste, conocer el mundo a través de sus pasos. Un tal Lucas, ese es el nombre de un libro de Julio Cortázar, la historia relata la vida de un joven, absurda y l ena de giros, donde el personaje se mueve de un lado para el otro; quizás nuestro Lucas no sea tan absurdo pero si tiene demasiado mundo que contar, historias que parecen ficción y relatos l enos de artistas viajeros, que se transportan por el asfalto de las grandes y pequeñas ciudades, pasando por los lugar más inhóspitos, pero l enos de poesía, de magia y vida; Mostrándonos así una sonrisa a cada dificulta que la vida les presente. Tranquila con buena onda, así se define ella,

del Amor aunque han habido situaciones muy incómodas l enas de discriminación, relatando entonces -Una vez un padre iba caminando por Bolivia con unos niños, nos mira y le dice a ellos; son mochileros, cuando los veas no lo saludes, lo l amó a él y le digo, padre, ¿por qué les enseñas eso a tus hermanos si eso es de ignorantes? Se ríe contándome la historia. “Libertad pura es la que se siente cuando tu vida te cabe en una mochila” Él es de Argentina, es mochilero y artesano. Lucas viene de la Zona Azul que queda a dos horas de Buenos Aires, hace dos años emprendió su viaje, ha recorrido Bolivia, Perú, Ecuador y ahora está en Colombia, en Antioquia, en Medellín, en el parque periodista; con su artesanía única, l ena de manil as, collares, aretes, construidos con hojas de diversas plantas y plumas, trata de ganarse el pan, el hospedaje y las herramientas para seguir construyéndose.

han superado muchas adversidades. La familia y sus amigos son de gran apoyo para ambos. El límite como pareja es conseguir un pedazo de tierra y allí poder sembrar, vivir relajados; pero eso sí, no quedarse a vivir en un mismo lugar. Celeste: Ser mochilera no es una decisión fácil ya que la calle es un escenario poco común en donde las cosas no te dejan de sorprender. La vida es muy dura; a veces no hemos tenido plata, la comida se nos escasea, nos toca dormir en la calle, pero hay que seguir, esta libertad es única, las ganas de hacer las cosas bien, conocer y ver el mundo es lo que nos inspira cada día a seguir amándonos y compartiendo esta gran aventura que es vivir. Las rutas del amor, es difícil descifrar el destino, pero cuando dos almas se encuentran para perseguir sus sueños, el amor es el pilar más importante, las ganas de estar con el otro, la otra, es lo que refuerza todos los problemas encontrados. A las viajeras, amantes, que intentan cada día vivir experiencias nuevas espero volverlas a encontrar, quizás en otro país, o continente ya que estos son los giros inesperados de la vida.

En dos años de vida te pasan muchas cosas y más aún cuando estas en la calle. Lucas y Celeste han vivido cosas extremas como estar en la cárcel, pasar por fronteras donde la vida de ellos ha estado en peligro, pero afirman que gracias al amor que se tienen Susana Molina Restrepo

Por: Mónica Ospina Gómez Aunque las monedas de un peso deja- liares y amigos acortaron bajo el apodo ron de circular hace muchos años, Pre- de Pepa. sentación Camacho recuerda con exactitud como lucía aquella moneda, pues en Creció en una familia numerosa con su la memoria permanece esa vez que su papá Fideligno, su mamá Emelina y sus papá Fideligno la mandó a la tienda por once hermanos María Antonia, Paulina, una caja de fósforos con la famosa mone- Emperatriz, Emilia, Mariana, Primitivo, da de un peso y ella no pudo resistirse a Pedro, Bentura, Fideligno, Rodolfo, en la gastar la devuelta en una mogolla chicha- finca La Cabaña, ubicada en el corregirrona de las que hacía Trinita, el olor de miento de Cite en Santander. Allí de vez la panadería y la tentación de la devuelta en cuando empacaban chocolate en unas en su mano le jugaron una botellas que llevaban cerca mala pasada. de un árbol muy grande, Para ella, cada hijo, cada nieto y cada bisnieto tienen donde pasaban una cuerda Al llegar a casa, su papá un sitio muy especial en su por una de las ramas y hapreguntó por la devuelta y corazón, gracias a su verra- cían un columpio que debía quera santandereana con Presentación no tuvo más ser usado por turnos, pues sabor paisa ha podido supealternativa que contar con todos querían montar. vergüenza y algunas lágri- rar los obstáculos de la vida mas en sus ojos lo ocurri- y llegar a sus 92 años con Con tantos hermanos y una lucidez envidiable, opido, Fideligno no la castigo una economía estable pero nando y tomando decisiones y tampoco la regañó, solacomplicada, a Pepa sólo cuando hay que hacerlo. mente le dijo unas palabras le daban un huevo para el que hasta el día de hoy la desayuno cada ocho días, han acompañado, y las cuales repite “uno pero ella prefería usarlo como tratamiento no se puede gastar la plata que no es de para el cabello en vez de comérselo, inuno”. cluso ahora con 92 años de edad no pierde oportunidad para explicarle a las nietas Como nació el día de la presentación del que si usan esta receta casera, el pelo se niño Jesús en el templo, el 3 de mayo, su les pondría, en sus palabras, insuperable. nombre se eligió bajo la antigua costumbre de usar el calendario religioso para En una ocasión fue con su familia al Río bautizar a los hijos, por eso le correspon- Suarez cerca de la unión con el Río Huadió en suerte el nombre de Presentación sa, estaba nadando con sus hermanos y Camacho, el cual con el tiempo sus fami- por poco se ahoga, recuerda que los oí-

dos le zumbaban y cuando la lograron sacar la tuvieron que envolver en cobijas de lana y darle caldo caliente. Pepa era la que más ayudaba a su papá en las labores de la finca y para él recompensarla le regalo una novillona, la que ella cuidó por un tiempo, pero un día le dijo a su papá que quería venderla para seguir estudiando, y así logro llegar hasta tercero de bachillerato en una época en que no todas las mujeres tenían la posibilidad de asistir a la escuela en compañía de sus únicas dos amigas y primas, Carmen Rosa Pinzón y Beatriz Pinzón, aprendió a bailar pasillos, vals y torbellinos. Allá estaba un día estudiando cuando un señor que recién se había casado le dijo que iba para Puente Nacional por negocios, y le preguntó qué quería que le trajera, Pepa no lo dudo y entre chiste y chanza le dijo que un muchacho bien bonito y se rio. Pasaron varios meses y cuando el señor regresó trajo con él a un trabajador y le dijo a Pepa, ahí está el encargo. Ella lo miró y otras muchachas del curso también, pues estaban en el patio jugando a rebotar la pelota, el muchacho se animó y se puso a jugar con ellas, pero ese día todas las jóvenes salieron bravas, pues Alfredo únicamente le pasaba la pelota a Pepa.

Para premiar el buen comportamiento de los alumnos, dos profesores que eran también esposos decidieron hacer una revista deportiva y organizaron un evento grande al que asistieron jóvenes de los lugares aledaños, y durante el baile un muchacho invitaba constantemente a Pepa a la pista, sin embargo ella trataba de no aceptar porque si le contaban a Alfredo no se vería bien. Por esa misma época su hermana Paulina se trasladó a Puente Nacional a aprender costura donde Pepa la acompañó por unos días, allá de sorpresa le llegó un telegrama deseándole una feliz navidad y un próspero año de parte de Alfredo. Ella se sorprendió mucho y le preguntó a su hermana qué debía hacer, Paulina le dijo que era una descortesía no responder y la acompañó al telégrafo. La cocina ha sido una de sus virtudes, aprendió desde que estaba pequeña a hacer las delicias propias de su tierra como los envueltos de maíz y de pelao con chicharrón, los sudados de pollo, las arepas en varias modalidades, la sopa de mute y de cebada, que aprendido a hacer con las recetas de su mamá Emelina, quien se dedicó por completo a cuidar de la familia. En la finca tenían sembrados que les proporcionaban lo necesario para la alimentación y de vez en cuando salían con canastos para recoger la siembra.

Su mamá era una persona muy dedicada a su esposo y a sus hijos y tenía una buena tierra, sembrada de todo lo que necesitan para alimentar a esa familia tan numerosa, recuerda Pepa frecuentemente que salían con su mamá y sus hermanas y cada una cogía su canasto para llenarlo de las delicias de su tierra y preparar unas suculentas comidas. Toda la familia iba desde la finca hasta el Parque de Cite para asistir a la misa, dar una vuelta y hacer visitas, de regreso a casa recorrían de varios kilómetros a pie acompañados de su papá Fideligno quien iba a caballo. Cuando llevaba poco de casada estaba haciendo el almuerzo y echó cuanto ingrediente encontró en una sopa de verdura, la zanahoria picadita, habichuela, sustancia de cerdo, papa criolla picada, papa blanca en cuadritos y alverja, pero cuando fue a tapar la olla, se le había pegado la caja de fósforos y completa cayó al caldo y dañó toda la sopa. Con una sonrisa en el rostro y mientras recuerda épocas pasadas, Pepa dice que cuando uno se casa es que le salen los novios, pues una vez que necesitaba tomarse unas fotografías acudió donde un fotógrafo, él le sacó varias tomas y le dijo que ella era muy bonita, que si le daba permiso para él ampliar uno de los negativos y ponerla en la entrada del local como publicidad. Ella no lo dudó y aceptó, pero luego Alfredo, quien ya era su esposo, obligó al fotógrafo a retirar la imagen porque se puso celoso. Pepa no trabajó por fuera de su casa, siempre estuvo dedicada a sus hijos y al

hogar, que no les faltara nada para comer, la ropa limpia, las camas hechas, entre otros oficios, pero en una ocasión cuando vivían en Bucaramanga vio la oportunidad de tener una tienda en la casa para ayudar con los gastos. En la tienda todos colaboraban recuerda Pepa mientras sonríe, pero aclara que lo hacían en diferentes formas pues siempre después del almuerzo sus hijos Guillermo y Alejandro le decían que tomara la siesta que ellos cuidaban el negocio, al principio pensó que ellos eran muy considerados, pero un día le dio por ir a ver cómo atendían a la gente, y los encontró tomándose la leche y los ponqués Ramo de la tienda. Pasaron varios años y cuando llegaron a Medellín por el último traslado de su esposo en el ejército, fue insistente en la necesidad de tener una casa propia, un techo que los albergara a todos, pues tenía con ella el cuidado de once hijos y un esposo, luego de buscarla llegaron a Guayabal, un sector cercano al Zoológico y allí se establecieron en una casa de dos pisos con solar y patio. Cuando la casa estuvo lista luego del trasteo y las cosas marchaban con normalidad, averiguó por los colegios cercanos y llegó a la Institución Educativa Santo Ángel, pidió hablar con la rectora y le explicó su situación, le dijo que tenía 7 hijas en edad de estudiar y que venían de otra ciudad además no las podía dejar en la casa porque el estudio era muy importante y la rectora más que ella lo sabía. La rectora le intentó explicar que el año ya había empezado hace mucho tiempo y que no las podía recibir así quisiera porque no tenía cupo. Pepa no aflojó en su intensión y tras un momento más de conversación con la

hermana salió con la sonrisa del deber cumplido. Llegaba el fin de semana y se supone que con ello el tiempo para dormir hasta tarde, pero Pepa no pensaba de igual manera, desde muy temprano empezaba a llamar a sus hijos para que llevaran al patio la ropa sucia, separada entre blanca y de color, pues la señora que la ayudaba a lavar la ropa en platones ya iba a empezar el trabajo. Además aprovechaba para pedirles la respectiva ayuda en las labores que ella ya estaba cansada de hacer: lavar los baños, barrer, trapear, entre otros oficios.

trata, vuelve a tener la visión de antes y diferencia con nitidez si la muestra es de oros, bastos, espadas o copas, sus preferidas porque siempre hace buen juego con ellas A propósito de la Baraja Española Pepa no pierde oportunidad para invitar a jugar Torturito a quienes la visitan, y eso sí, aunque el “hijuepuerca” burro no le salga bueno siempre está atenta a tomarlo, pues lo que más la emociona en el juego es hacer el inmortal. Hay días que amanece muy cansada, con dolores en las piernas y con pocos alientos, esos días en especial le recuerda a Dios que ella está acá, que cree haber hecho todo lo que tenía que hacer y que no tiene nada pendiente, pero otros días amanece con ganas de caminar, de mercar y de dirigir actividades de la cocina como cerciorarse que las ollas son lavadas antes de cocinar o que el aceite esté completamente limpio antes de freír. Otros días recuerda la vez que un cura la miró fijo en la frente y le dijo, entre otras cosas, usted va a vivir hasta los 105 años, cada vez que esas palabras vuelven a su memoria, se da la bendición y repite, que se haga la voluntad de Dios.

Cada seis meses, por lo general, va a la cita de chequeo con el Dr. Velásquez, su cardiólogo hace más de 20 años, quien siempre se sorprende por la claridad en que Pepa le cuenta las novedades y la forma como enumera una por una las pastillas que toma en la mañana y en la noche para controlar sus enfermedades relacionadas con la presión alta y la diabetes. Agradece la ayuda cuando sus hijas le organizan las pastillas, pero no depende de nadie para tomarse los medicamentes, con 92 años sigue siendo tan independiente como cuando su esposo Por: Mónica Ospina Gómez partió y tuvo que hacerse cargo del hogar. Ella es mi abuela Presentación Camacho de Gómez, Pepita A veces le duelen y le pican los ojos, a veces no ve bien porque la cirugía que se practicó hace algunos años para mejorar la visión no salió tan bien como se esperaba, pero cuando de jugar con la baraja española se

como cariñosamente la recuerdan en Puente Nacional, Cite, Barbosa, Bucaramanga, Vélez, Bogotá y Medellín donde tiene familiares y tuvo amigos. La esposa de Alfredo, la mamá de Gloria Lucy, Luis Alejandro, Carlos Guillermo, Martha Inés, Ana Beatriz, Esperanza, Sonia Consuelo, Alfredo, Fanny, Jaime Alberto y Ángela Patricia; la abuela de Luis Alberto, Oscar Javier, Rafael Antonio, Carlos Mauricio, Juan Guillermo, Mario Alejandro, Jorge Esteban, Mario Andrés, Marcela, Manuela, Mónica, Carlos Eduardo, Paula Andrea, Carolina, Elizabeth, Juliana, Alexandra, Ana Lucía, Katherine, Juan David y Angélica; además de la bisabuela de Manuel Santiago y Samuel.

Mariana Atehortua Álvarez, 16 años, Institución Educativa Samuel Barrientos

#1 Sin titulo Expresar lo que sientes es realmente abrumador, se puede considerar como una de las más grandes odiseas, no sé porque he de temerle, quizá por un momento he creído que no es necesario, pero viendo hacia donde van las personas, prefiero escribir tal siento, como la letras brotan de mí y yacen cerca del más puro edén, ver que todo puede ser y que en un mundo de color oscuro, el primer rayo de luz sea porque decidí abrir mi alma y junto a ella, lo maravilloso de la vida.

J O V E N E S

Por: Valentina González, 17 años, Institución Educativa Samuel Barrientos

#2 Sin título un Antes estuve por la vida en medio de eña pequ una ve retu doloroso amor. Antes la página de cuarzo clavándome los ojos en vida. la Compré bondad, estuve en el mercado de de as sord más codicia, respiré las aguas masde la envidia, la inhumana hostilidad carás y seres. que Viví en un mundo de ciénaga marina en en raba la flor, de pronto azucena, me devo pie su temblor de espuma, y donde puse el del as adur dent las a resbaló mi alma haci ihost las de abismo, así nació mi poesía, casgas empuñadas, sobre la soledad como más tigo y en el jardín de la impudicia su la. secreta flor hasta enterrar Aislando así como el agua sombría que vive en sus profundos corredores, de corrí de mano en mano, al aislamiento cada ser, el odio cotidiano. d Supe que así se vivían escondiendo la mita año de los seres, como peces del más extr , ades nsid inme mar, y en las más fangosas encontré la muerte.

Por: Valentina González, 17 años, Institución Educativa Samuel Barrientos #1 Sin titulo Cundo te veo no puedo evitar sonreír. Será que me alegra verte. Será que me alegra su sonrisa al verme. Será su belleza que me conmueve. Será que me gusta su misterio. Será que me gustan sus retos. Será que me gusta. Será que tus labios dicen cosas. Será que su pecho salta con el mío. Será que ningún alma es tan sincera. Tú te miras al espejo y reniegas Yo en cambio te encuentro perfecto de pies a cabeza y de adentro hacia afuera. Se mira a los ojos y habla consigo ¿Qué cosas se dirá? Yo te observo en aquel monologo mental y pienso que no hay belleza como la suya. Dices que guarde silencio, pero el arte requiere concentración. Eres arte, no estética, Arte. Hace sentir, hace pensar, trasmite. Vive arte.

P R O M E S A

Valentina Marín Echeverría, 17 años, Institución Educativa Samuel Barrientos

#1, Sin titulo El amor es inherente lo vital, es decir, en lo que goza de vida. Es una euforia que puede provocar desaire, desasosiego. Quizá sea una venda ocular o una visión fantástica, puesto que genera mariposas en el alma. Existen diversos amores, el amor fraternal, amor a una criaturas de cuatro patas, amor a las alas de mi mascota, amor a pachamama y la necesidad de conservarla linda. Aroma a bosque. El amor hacia una persona ingrata equivale a las rupturas del ser y el llanto del palpitar. El amor es plural, es universal, cósmico, flameante, y es un sentir muy muy propio, tanto así que quema.

FOTO REPORTAJE Sara García

Hace 20 años Maryuri vive de las flores, su negocio está situado en una de las ceras de “La 68”, barrio Castilla, comuna 5 de Medellín.

De lunes a viernes a las 4 de la mañana sale para la placita de Flórez y compra el surtido del día, los fines de semana espera los carros que llegan de Santa Elena desde la 1 o 2 de la mañana, depende la época de año y las celebraciones.

Flores tradicionales, rosas, margaritas, astromelias y eucalipto decoran día a día esta esquina de Castilla

Maryuri quiere lo que hace, no le gustaría cambiar de oficio porque es parte de lo ella sabe, de flores y de negocio.

PROGRAMACIÓN ARTÍSTICA Y CULTURAL Noviembre/ 2015 TEATRO

TEATRO EL TRUEQUE KARAVANA TEATRO

28 de Noviembre Obra: Don Diciembre Hora: 8:00 p.m. Info: 2172605

Of. Central de los Sueños Del 26 al 28 de Nov. Obra: Jodorowsky Hora: 8:00 p.m. Info: 2394179

MANICOMIO DE MUÑECOS Del 26 de nov. al 13 de Dic. Obra: Cuento de Navidad Info: 4 131 131

INVITACIÓN ESPECIAL

TEATRIADOS Obra: Comedía Sanlvaje Hora: 8:00 p.m. Info: 254 52 41

Revista

ANGUARDIA

femenina

Agradecimientos a: Sara García: fotografía María Fernanda Hernández: Fotografía Jessica Cano: ilustración Escritos: Mónica Ospina Gómez Susana Molina Mariana Atehortua Álvarez Valentina González Valentina Marín Echeverría Manicomio de Muñecos Juana Pérez Gloria Agudelo Curso periodismo y medios alternativos

Fotógrafa: María Fernanda Hernández http://mafhernandez.wix.com

El Visitante / 2015

...mientras débil y cansado, en tristes reflexiones embebido, inclinado sobre un viejo y raro libro de olvidada ciencia, cabeceando, casi dormido, oyóse de súbito un leve golpe, como si suavemente tocaran, tocaran a la puerta de mi cuarto. “Es -dije musitando- un visitante tocando quedo a la puerta de mi cuarto. Eso es todo, y nada más...”