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una elección
Mariela Alvarado Coach de Amor Propio Especialista en el Empoderamiento desde el Amor Propio
Entre el Cuido y el Des-Cuido Personal… hay una elección
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o hay una sola mujer que no desee cuidar de sí misma. Todas sabemos cómo cuidar de nosotras mismas… leemos libros, aprendemos posturas de yoga, comemos nuestras frutas y verduras. Fijamos intenciones, hacemos resoluciones de Año Nuevo e incluso, hacemos promesas a nosotras mismas, sin embargo, todas luchamos o hemos luchado con el tema del Auto-Cuidado. La mayoría de nosotras tenemos “grandes momentos” de Auto-Cuidado: durante nuestras vacaciones, un momento de inspiración y alimentación saludable, de merecido descanso, de ejercicio físico, de tiempo de inactividad mental o de una buena dosis de realización espiritual. Pero, muy frecuentemente éste “gran momento” se convierte en algo efímero debido a nuestras abrumadoras vidas; mientras lidiamos con nuestros quehaceres y las necesidades de todos los demás. La razón por la que luchamos tanto, aún, cuando tan clara y firmemente queremos cuidar de nosotras mismas, se resume en dos hechos: mala programación y una deficiente creencia N
de Amor Propio. ¿A qué me refiero con mala programación? Mala programación del mundo que te rodea, lo cual, desvió tus creencias de Amor Propio. Es decir, cuando pensás que tenés que elegir entre cuidarte a vos misma o cuidar de los demás, cuando sentís que el encargarte de vos misma equivale a ser egoísta (en lugar de Auto-Amorosa) o cuando considerás que debés “dar” antes de “recibir”. Añadí a esto un sistema social que valora un estilo de vida de dale-hasta-el-cansancio; ocupaciones, trabajo, deberes sobre salud, auto-cuidado y felicidad. ¡Por supuesto que ha sido difícil para vos, el cuidar consistentemente de vos misma! El mundo y tu mente han estado trabajando en contra tuyo. Si tu mente te indica que descansar, relajarse o entrenar puede realizarse únicamente luego de trabajar muy duro, es un hecho que no elegirás auto-cuidado por encima de tus obligaciones. En su lugar, tu mente te enviará descargas de miedos, resistencias y auto-sabotajes en forma
de excusas como la siguiente: “la gente va a pensar que soy egoísta si cuido de mí misma por una hora durante mi día, en lugar de cuidar a mi familia” o “no tengo tiempo para cuidar de mí misma; tengo mucho que hacer” o “si dejo de hacer mis deberes fracasaré y moriré de hambre “. Por excusas como éstas, muchas veces elegimos la autonegligencia sobre el auto-cuidado y el Amor Propio. Pero, la gran verdad es que no tenés que elegir entre el cuidado de los demás y cuidar de vos misma. Podés hacer ambas cosas a la vez. Cuanto más te cuidés a vos misma, más capacidad, tiempo y disposición tendrás para cuidar a tus queridos seres y quehaceres. Detente por un momento y volvé a leer la frase anterior en voz alta. ¡Leela de nuevo! Pero ésta vez en primera persona: Cuanto más me cuide a mi misma, más capacidad, tiempo y disposición tendré para cuidar a mis queridos seres y quehaceres. Mucho mejor que “tengo que cuidar de todo el mundo y todo lo demás antes de cuidar de mi misma” Dale… aceptalo con auto-honestidad. Permitíme preguntarte… ¿Que
pasaría si realmente creyeras que esto es verdad y actuaras como tal? Es probable que no sepás cómo tener una vida donde te das todo lo necesario para cuidar de vos misma sin dejar de cuidar de todas las personas y actividades que dependen de vos…y eso está bien, es normal. Por ahora necesitás solamente estar consciente de esa opción y creer que es posible ¿Podés hacer eso? ¿Estás dispuesta a dar un paso a la vez hacia esa nueva meta de auto-cuidado? ¡Excelente! Entonces… detente un segundo ahora mismo y respondé la siguiente pregunta: “¿Qué es lo que exactamente necesito ahora mismo, qué, yo podría darme o regalarme?” Literalmente te estás preguntando a vos misma si necesitás algo. ¿Cuándo fue la última vez que hiciste esto? Éste es un buen acto de autocuidado, el cual, podría convertirse en un nuevo hábito a partir de ahora. A ver… si quisieras cuidar a personas que amás ¿cuál sería la primera acción que tomarías? ¡Preguntarles qué necesitan por supuesto! No hay manera de
saber lo que una persona necesita sin preguntarlo antes. Y aunque el poder de leer mentes es relativo… y podrías abogar a tu intuición. Desde mi punto de vista personal ¡es mucho más efectivo preguntar de frente! Así que dejá de tratar de leer tu propia mente y comenzá a crear canales y espacios para preguntar directamente a vos misma lo que tu corazón, alma, cuerpo y espíritu necesitan. Es el momento de aumentar los canales de comunicación con vos misma. La habilidad de cuidar de vos misma requiere de un profundo conocimiento e interés por tus necesidades específicas así como un compromiso absoluto de satisfacerlas. Lo que brote -en un sentimiento, algunas palabras un conocimiento interno, o una visión- es lo que tu sabiduría interior te está pidiendo. Repetí la respuesta que recibás, percibás o sintás en voz alta para generar auto-consciencia y realmente adueñarte de la misma. ¡Eso que necesitás! Será tu próxima acción de auto-cuidado para vos misma. ¡Repetí esta frase en voz alta! Tomá ésta acción dentro de las próximas 48 horas.