VIDA
IRMA NÉLIDA JORGE
Y el olvido quiere ser oda para que el corazón lo cante con excusas, sin zozobras. Y el olvido se resiste a la elegía, no quiere ser llanto quiere ser alegría.
Pero su esencia su matriz es la entrega sin medida.
Irma Nélida Jorge. Algo de mí. Un villancico a los 6 años por pedido de la maestra de música de primer grado sería la ventana que se abría para entender que ese sería parte del destino. Luego vendrían las producciones de la adolescencia cuando hasta la admiración por un profesor sería materia para poetizar… Como docente más de una oportunidad para escribir y publicar en la página literaria de la Revista Presencia. Luego los diarios Locales. Y los encuentros de escritores a los que asisto para aprender además de experimentar el disfrute que engalana el alma. Pero…el lugar que marcaría un inicio y donde se podrían socializar con gusto personal los versos sería las Fiestas de la Poesía que anualmente por ley se llevan a cabo en Entre Ríos para promocionar a los autores regionales. La Antología 2010 cuenta con el poema: Reloj. Ya no hay retorno en este camino iniciado que completa mi plenitud y que me permite abrir el corazón desde la rima.
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arte: Ileana Mulet - Cuba
Alegría de saber que la vida, siendo vida retiene, esconde, retacea, arrebata, quita…
Quiero vivir 100 años
QUIERO
VIVIR CIEN AÑOS
Quiero vivir cien años encontrarme con la muerte cara a cara esperarla mansamente… y que después del guiño a elevarme de mi lecho me ayudara. Quiero vivir cien años Y antes del último suspiro que el aire pues me alcance para pronunciar también yo en tus manos mi espíritu encomiendo. Quiero vivir cien años con un centenar de arrugas acunando mi sonrisa calando mi rostro con el cincel de horas vividas. Quiero vivir cien años con un centenar de lunas durmiendo sobre mis canas. Quiero vivir cien años y exhalar a conciencia el perfume del laurel de la rosa y de la albahaca. Quiero vivir cien años con las mismas ganas andar, caminar
correr y cabalgar quitando frenos a la esperanza Y a los miedos, sus lazos para que huyan de mi cuerpo y de mi alma. Quiero vivir cien años Y con el mismo ímpetu abrir las puertas a la alegría para que corra sin temores desbocada. Quiero vivir cien años con las mismas ganas de sembrar, de bailar de eternizar con la pluma alguna que otra palabra.
ME
QUEDO
Me quedo con tu melancolía para trocarla por el beso que nos cambie a los dos la vida. Me quedo con tu silencio para encender en palabra que eternice algún: te quiero. Me quedo con tu mirada cuando tus ojos en los míos exalten de mi pecho sus latidos Me quedo con tu sonrisa esa que reconozco mía en el instante fugaz que puede transformar mi día.
ALAS Cuando quise hallar la respuesta debí encontrar tu mirada. Allí el interrogante trocado en silencio matador de palabras. La pregunta batallando en el alma se ha escondido en la garganta para que tus ojos hablen, me lo digan todo y le pongan a las dudas, alas.