El Color de la Vida

Por: Karla Beatriz Velázquez

Transito en un mundo incoloro, lleno de dudas, de prisas, nadie escucha, nadie comunica, todo transcurre como una cámara rápida, quisiera detener el tiempo -¿qué es lo que esclaviza?.

Camino por calles que han perdido su color, me encuentro con gente que ha olvidado sonreír me encuentro que el respeto es de pocos conocido y la empatía como viejo amigo olvidado por la mayoría sigo mi camino y me es difícil comunicar nadie detiene su andar para escuchar, nadie se detiene a disfrutar, parece que los días pasan iguales para todos, todo se convierte en rutina.

Se ha perdido el asombro por un nuevo amanecer. Se ha perdido el asombro por la creciente crueldad. La esperanza y el amor parecen ser algo que existió. La gente ha cerrado su corazón por envidias y ambición. Puedo ver la esperanza disminuida en los corazones, el desánimo, el hastió, un mundo donde los niños ya no lo son más, que ven

su inocencia interrumpida por hambre, guerra y perversión.

Transito en un mundo en el cual muchos han perdido la fe más en mi camino recorro senderos que aun guardan ilusión me encuentro con héroes que no buscan reflectores aún hay quienes valoran la sabiduría de un anciano, aun confió en la bondad, aunque algunas personas no entiendan él porque sé que mi sentir no es único en este recorrido.

Sé que aún hay gente que quiere un mundo mejor y cree que la inocencia se puede conservar mi pensar no es exclusivo el cansancio por la inseguridad, por el desempleo merman el sentir más cuando volteas a ver a tus seres queridos ves que cada gota de sudor, que cada lagrima derramada, que cada día en que no pierdes la esperanza de continuar vale la pena. Recorro un mundo incoloro en el que puedo ver la luz de otros que como yo quieren una vida plena la indiferencia se apodare cada día de más personas, pero aún somos más los que deseamos hacer el bien.

No calles tu voz, este mundo es tuyo, de quienes valoran la vida, de quienes saben amar, perdonar, reír, llorar, apoyar, de quienes tienden su mano al que los necesita.

Este mundo es de ustedes que están cansados de tanta violencia.

Ya no calles tu voz regrésale el color al mundo, regrésale el color a tu vida, la paz a tu interior, ¿en qué mundo deseas vivir?

Conformarse con lo que hay porque no me siento merecedor de algo más es despreciar la vida"