Poesía Clásica
ORIENTE
CON
EMOCIÓN
Editorial Céfiro S.A. María Moliner, 6. 50018 Zaragoza. www.cefiro.es I.S.B.N: 84-88269-2-1 Depósito Legal: Z-2645-93 Coordinación: Estefanía Moreno Diseño y maquetación: Rosa León Imagen de portada: escultura de bronce de buda Impresión: Efingo Encuadernación: Efingo
ORIENTE
CON
EMOCIÓN ras
colección
Poesía Clásica
JAPÓN período período período período
Nara, 710 al 794 Heian, 794 al 1185 Muromachi, 1338 al 1573 Edo, 1600 al 1868
7 9 10 11 13
CHINA siglo XI al VI a.C. hacia el año 600 a.C. siglo V a.C. siglo II al III dinastía T´ang, 618 al 906 dinastía Song, 960 al 1279 dinastía Ming, 1368 al 1644
21 23 26 27 28 29 32 34
INDIA siglo I siglo XV al X
39 41 44
ARABIA siglo VI siglo VIII siglo XI siglo XIV
51 53 54 56 58
Miniaturas
61
Poesía Contemporánea e Influencias
JAPÓN Iaso Saiyo Taneda Santoka Hashimoto Takako Koíchi Kijaro Tamiki Jara
7 7 8 9 10 11
CHINA Jia-Ching Ling
12 12
INDIA Sujata Bhatt Margalit Matitiahu Tamil Nadu
16 16 20 21
ISRAEL Yehudah Ammijai Yonah Wollach
22 22 23
ARABIA Nizar Qabbani
24 24
Miniaturas
26
ÍNDICE
JAPÓN
período Nara, 710 al 794
I Hijo, no caviles ni pases tormento, que si es preciso, por ti pasaré el agua y el fuego. Hollaría el filo de espadas y dagas, a aunque muriera, moriría alegre, si me lo rogaras. No vas muchos días desde que te vi, y me estoy viendo loco, mas que loco, de quererte a ti.
Manyoshu
8 9
período Heian, 794 al 1185
I En esta noche sin luna no podremos encontrarnos la añoranza me despierta mi pecho bate inflamado, y el fuego consume mi corazón. II Estoy tan sola mi cuerpo es una hierba que flota segada de raíz. Si el agua me sedujera la seguiría, lo sé.
Ono no Komachi
período Muromachi, 1338 al 1573
I ¿Una flor caída volviendo a la rama? Era una mariposa. II Lirios, pensad que se halla de viaje el que os mira. III Quietud: Los cantos de la cigarra penetran en las rocas.. IV A una amapola deja sus alas una mariposa como recuerdo. V No es que atardezca es que la lluvia es noche: otoño en la ventana.
Io Sogi
10 11
período Muromachi, 1338 al 1573
LA
VELA EN EL CUARTO
¿De quién se habrá despedido la vela en el cuarto? Llora afuera sin saber que se quema adentro. La vela, como yo, no sabe que se quema adentro.
Yi Kae
RECORTO
MI CORAZÓN
Recorto mi corazón y hago la Luna. La cuelgo en lo más alto del cielo. Ilumino el camino que lleva.
Chong Ch´oi
RECORTO
UNA NOCHE LARGA
Recorto la mitad de la noche larga del invierno. La guardo bajo mi cobija de primavera. En la noche que venga mi amor, la desplegaré.
Hwang Chin-i
período Edo, 1600 al 1868
I Viajo, estoy enfermo y mi ensueño recorre los campos muertos. II ¿Es primavera? La colina sin nombre se perdió en la neblina. III El mar ya oscuro, los gritos de los patos, apenas blancos.
Matsuo Bashô
I Cada mañana ¿dónde va pensativa la primavera? II Aroma tiene su ropa sin doblar. Tarde vendrá.
Yosa Buson 12 13
período Edo, 1600 al 1868
I De no estar tú, demasiado enorme sería el bosque. II Esta primavera en mi cabaña, absolutamente nada, absolutamente todo.. III Le sobrevive, le sobrevive a todo la frialdad. IV Tú, caracol, mira bien, mira bien, tu propia sombra.
Issa Kobayashi
período Edo, 1600 al 1868
I Entre mis dedos sintiendo la seda de tu cabello II Junto a la puerta tu figura mi ansiedad III En el corazón de la noche a la luz de la luna, un barquito a la deriva, ni sacudido por la brisa, ni movido por las olas.
Anónimo
I Recogiendo una violeta, el débil corazón en primavera. II Las hojas que caen sobre otras hojas. La lluvia arrasa sobre otra lluvia.
Kato Gyodai 14 15
período Edo, 1600 al 1868
I Cada año nuevo cielo y tierra en armonía, el primer día. II ¡Qué soledad! Después de los juegos artificiales una estrella fugaz. III Ola de calor, las flores del ciruelo se dispersan por el pedregal.
Masaoka Shiki
período Edo, 1600 al 1868
Mil pequeños peces blancos Como si hirviera El color del agua.
Konishi Raizan
El espantapájaros Parece humano Cuando llueve
Natsume Seibi
Sobre la llanura ahora árida un cepillo de mujer del tiempo de hierbas en flor cambio de vestimenta. La primavera desapareció en el gran baúl.
Ihara Saikaku
16 17
perĂodo Edo, 1600 al 1868
DIGO
QUE NO PUEDE DECIRSE EL AMOR
Digo que no puede decirse el amor. El amor se come como un pan, se muerde como un labio, se bebe como un manantial. El amor se llora como a un muerto, se goza como un disfraz. El amor duele como un callo, aturde como un panal, y es sabroso como la uva de cera y como la vida es mortal. El amor no se dice con nada, ni con palabras ni con callar. Trata de decirlo el aire y lo estĂĄ ensayando el mar. Pero el amante lo tiene prendido, untado en la sangre lunar, y el amor es igual que una brasa y una espiga de sal. La mano de un manco lo puede tocar, la lengua de un mudo, los ojos de un ciego, decir y mirar. El amor no tiene remedio y sĂłlo quiere jugar.
período Edo, 1600 al 1868
CUANTO
TENGAS GANAS DE MORIRTE
Cuando tengas ganas de morirte esconde la cabeza bajo la almohada y cuenta cuatro mil borregos. Quédate dos días sin comer y veras que hermosa es la vida: carne, frijoles, pan. Quédate sin mujer: verás. cuando tengas ganas de morirte no alborotes tanto: muérete y ya.
Ogai Mori
18 19
IDENTIDAD
CORPORTIVA
CHINA
siglo XI al VI a.C.
LA
JOVEN MÁS ENCANTADORA
La muchacha más guapa del pueblo me cita en un lugar de la muralla. Pero se esconde y no la encuentro. Desesperado, voy y vengo. La joven más encantadora me obsequia su flauta, de color tan maravilloso, como la belleza de su dueña. Ella viene del prado y me trae unas flores tan preciosas y hermosas. Pero mucho más hermosa es la bella de mi corazón.
El Libro de los Cantos (Shi Jing)
22 23
siglo XI al VI a.C.
EL
JUNCAR
Verde juncar, plateado de escarcha. Al otro lado del lago, se encuentra mi bella amada. Quiero ir a verla Contra la corriente. Más el viaje es largo y dificultoso. Dejándome llevar por las olas, sólo la veo en medio del agua. Juncar lozano, perlado del rocío. En la ribera opuesta, se yergue mi hermosa amada. Quiero ir a verla contra la corriente. Más el trayecto es larguísimo, lleno de enormes obstáculos. Dejándome llevar por las olas, sólo la diviso en un islote.
siglo XI al VI a.C.
Juncar exuberante, entre el vapor del rocío. Mi hermosísima amada está más allá del agua. Quiero ir a verla contra la corriente. Más grandes dificultades se me ponen por delante. Dejándome llevar por las olas, creo vislumbrarla ahora en una isleta.
El Libro de los Cantos (Shi Jing)
24 25
hacia el año 600 a.C.
EL
LIBRO DEL CAMINO Y LA VIRTUD
XLVII Sin salir de casa se conoce el mundo. Sin asomarse a la ventana, se ve el Tao del cielo. Cuanto más se sale hacia fuera, tanto más pequeño es el conocimiento. Por eso, el sabio sin necesidad de salir, sabe todo. Sin necesidad de ver, tiene claridad. Sin necesidad de obrar, deja todo acabado. LXXVII En todo el mundo, no hay nada más blando que el agua. Pero en su forma de destruir lo duro, nada la iguala. Nada puede transformarla. Que lo débil vence a lo fuerte. Y lo blando a lo duro, es sabido por todo el mundo, más nadie se rige por ello. Así un sabio dijo: Quien toma la suciedad del reino para sí, es el señor en el ofrecimiento de sacrificios. Quien toma la infelicidad del reino para sí, es el rey del mundo.
Lao Tse
siglo V a.C.
CINCO
LIBROS CANÓNICOS
I Brilla el alba rosada sobre mi cabeza, pálidas, blancas flores de púrpura, azules y escarlatas
Confucio
26 27
siglo II al III
CUITA La luna ilumina el alto pabellón. Sus brillantes luces están deambulando. Arriba, una mujer nostálgica suspira y lamenta con gran tristeza. Es la esposa del viajero, que se marchó hace diez años. ¡Qué ausencia tan larga! ¡Qué soledad tan sufrida! Él es el polvo del camino, y ella, el barro hundido, en el estanque. ¿Cómo se podrán reunir? Desesperada, exclama: Quiero ser una suave brisa para lanzarme a sus brazos. Pero si me rechazara, ¿qué sería de mi?
Cao Zhi
dinastía T´ang, 618 al 906
SEGÚN
LA MELODÍA QIUHU
Cae la tarde. Ella aún no aparece. generoso vino y ricos manjares, todo intacto en la mesa. Nada quiero probar. Oh, pajarito, vuela y llévale mi mensaje para que venga enseguida. Me inclino para coger flores de orquídea y alzo la mano para cortar un rama de casia. Pero ¿para qué si ella no viene? ¿Dónde estará? ¿Al otro lado del océano? Oh, Dios del Mar, salúdale de mi parte y llévale estas perlas como presente. El sol enrojece el horizonte. Desesperado, fijo la mirada en la senda en lontananza. Oh, mi amor, venid deprisa, que el día se nos acaba.
Cao Pi
28 29
dinastía T´ang, 618 al 906
AÑORANDO,
BAJO LA LUNA, A MI LEJANA AMADA
Sobre el piélago se eleva la luna con resplandor. La contemplamos tú y yo desde dos extremos del país. Melancólico, lamento que la noche sea larga, y te añoro apasionado. Apago el candil. Me encanta la luz de la luna. Me cubro con la capa y salgo. La siento mojada con el rocío. Me aflige no poder recoger un puñado de luz y ofrecértelo. Regreso y me tiendo en el lecho. Ojalá te vea en el sueño.
Zhang Jiuling
dinastía T´ang, 618 al 906
MI
AMOR
Sacando mis prendas húmedas para secarlas al sol, salta a mi vista un par de zapatos, obsequio de la bellísima hija de la vecina. Aún resuena en mis oídos lo que dijo al regalármelos: Es un testimonio de mi amor. Espero que no nos separemos como estos zapatos que van siempre juntos. Desde que fui desterrado, soy una hoja que flota en el río. He recorrido leguas y leguas. Más siempre me los llevo conmigo. Ahora los miro y remiro, sumergido en la tristeza: Los zapatos siguen pareados, pero yo estoy solo, lejos de ella. Además, con las interminables lluvias, ya aparece moho en la pala de seda.
Bai Juy
30 31
dinastía T´ang, 618 al 906
I Apareces muy callada, y te vas difuminada, sin dejar huella alguna. Cuelga sobre la torre alta una luna moribunda. Se oyen tambores que anuncian el primer rayo del alba. Ha sido un sueño, una despedida, llorada, con mi amada lejana. Me pongo a escribir de prisa, con la tinta a medias lista. Débil luz de la bujía, en penumbra manta bordada. Su fragancia me despierta infinitas añoranzas. Lejos está la Isla de las Hadas. Mil veces remota, la morada de mi Diosa.
dinastía T´ang, 618 al 906
II Nos fue difícil el encuentro, y lo es aún más la despedida. El viento de la primavera ha perdido ya su vigor Y todas las flores se mustian. Mira a los gusanos de seda, Que no cesan de echar sus fibras, Mientras tengan un solo aliento. Ni las velas dejan de verter lágrimas, Mientras no se c conviertan en ceniza. De mañana, ante el espejo Temo que tu cabellera Vaya a cambiar de color. De noche, en las altas horas, Leyendo al claro de luna, Debes cuidarte del frío. La Isla de las Hadas, no es lejana. ¡Oh, pájaro azul! ¡Sé mi mensajero, Y visita con frecuencia a mi amada!
Li Shangyin
32 33
dinastía Song, 960 al 1279
MARCHÍTANSE
LAS FLORES DE LOTOS
Marchítanse las flores de lotos, y déjase sentir el otoño en la esterilla. Desabrocho despacio mi capa de seda y subo sola a la barca. ¿Quién, desde las nubes blancas, me envía estos mensajes de amor? Regresan los cisnes silvestres. El pabellón occidental se inunda de la luz lunar. Las flores caen sin remedio y el agua corre sin cesar. La nostalgia, siempre tan intensa, la compartimos mi amado y yo, separados por grandes distancias. No logro ahuyentar la cuita, que se revela en mis ojos y se apodera de mi corazón.
dinastía Song, 960 al 1279
EN
MEMORIA DE MI DIFUNTO ESPOSO
Quince años ha, bajo la luna, Me dedicaste tu poema, Improvisado entre flores. Ahora, de nuevo estoy aquí. Las flores parecen las de antes, Y la luna es siempre la misma. Mas ¡qué distinto es lo que siento!
Li Qingzhao
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Dinastía Ming, 1368 al 1644
CONTEMPLACIÓN
PRIMAVERAL
Viento rabioso y llovizna obstinada. Gélida primavera. Frente a la copa, Recuerdo nuestros días felices y también la triste despedida. Flores de pera en mano y lágrimas en los ojos, al final de la pradera, te dije adiós, mirándote desaparecer entre verdes montes. Anoche, en mi sueño, nos vimos de nuevo, pero separados por nubes negras, sin poder decirnos ni una palabra. ¡Qué pena! ¡Qué rabia! Ahora, despierta, dolorida, me doy vueltas en el lecho. El cielo, por lejos que esté, lo puedo ver yo cuando quiera. ¡Pero qué difícil es verte, mi cariño, mi corazón!
Zhu Shuzhen
Dinastía Ming, 1368 al 1644
INSEPARABLES Para que nos separáramos, el cielo debiera bajar a la tierra, y la tierra subir al cielo. Para que nos separáramos, el este y el oeste debieran invertirse, y el mandarín convertirse en vasallo. Tú no puedes dejarme, ni yo abandonarte. Inseparables en la vida, y también en la muerte, en la Fuente Amarilla.
Feng Menglong
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INDIA
siglo I
LA
NUBE MENSAJERA
Nube, tú que estás al abrigo del tiempo, tú, que eres libre, lleva noticias mías a mi esposa, de quien los dioses irritados me han separado. Ve a la ciudad de Alaka, donde viven los yakshas; es una ciudad cuyos palacios son blancos bajo la luna resplandeciente. Las mujeres que encuentres en tu camino, nube, levantarán hacia ti las cabezas adornadas de hermosas trenzas y te verán recorriendo el camino del viento. De pronto, soplará una suave brisa que hará susurrar las ramas de los árboles. Mira, los pájaros te rinden homenaje, nube magnífica; te consideran la reina de los aires. Cuando llegues a Avanti, párate sobre esa ciudad parecida a un pedazo de cielo en la tierra; allí soplan brisas perfumadas llenas del canto de los pájaros que alegran los sentidos y vuelven a las mujeres lánguidas..
40 41
siglo I
En esta ciudad verás bazares espléndidos atestados de joyas, diamantes enormes circundados de perlas, esmeraldas del color del mar, y miles de pedazos de coral que han dejado al océano vacío de piedras preciosas. Luego llegarás a la ciudad de Alaka a cuyos pies el Ganges se extiende como un tapiz de lapislázulli y que está cubierta de nubes oscuras de las que cae lluvia como las perlas desprendidas del cabello de una mujer. En el palacio de Alaka las mujeres llevan lotos en las manos Y en los cabellos flores recién cortadas. Allí las tinieblas no existen porque la luna brilla para siempre. Allí nube, verás mi casa, bajo unos árboles cargados de flores cerca de un estanque al que conduce una escalera de piedras preciosas, cubierto de lotos de oro y rodeado de aves llamadas flamencos que te esperan como a un amigo. Allí verás a mi esposa, joven y bella, de mirada triste y pechos prominentes. Ha sido dada al mundo por Brahman como modelo de las otras mujeres.
siglo I
La verás como una flor abandonada, solitaria y triste, porque su esposo no está con ella. Sus ojos están llenos de lágrimas, y su rostro, escondido entre sus cabellos despeinados será como la luna cuando la oscureces con tu masa negruzca. Entonces, nube, transmítele mi mensaje, la hallarás, en su lecho, tendida, llorando, enflaquecida, como la luna menguante suspirando y buscando el sueño, imaginando que recibe mis besos. Al verla derramarás gotas que serán tus lágrimas, y verás entonces cómo tu presencia abre sus ojos, parecidos a las flores de loto. Si duerme, acércate a ella, nube, y respeta su sueño, no interrumpas su ilusión, en la que tal vez, cree apoyar su cabeza entre mis brazos. pero en cuanto despierte con la brisa dulce de las gotas de agua, déjala oír los susurros que serán tus palabras, y dile: tu esposo no ha muerto. Vive en una ermita y piensa en ti todo el tiempo.
Kalidasa 41 43
siglo XV al XVI
CÁNTICOS
A LA ESENCIA
I Cuéntame, oh cisne, tu antigua historia. ¿De qué tierra vienes, oh cisne, y a qué orilla vas? Oh cisne, ¿en qué playa reposarás y qué es lo que buscas? ¡Oh cisne, despierta ya, levántate y sígueme! Hay un país donde no existe sufrimiento ni duda, donde no se conoce el terror de la muerte. Allí los bosques están siempre en primavera y el viento trae la fragancia de Su aroma: Él soy Yo. Allí la abeja del corazón Está profundamente sumergida y no desea otra alegría.
siglo XV al XVI
II Cuando estoy lejos de mi Amado, mi corazón se sume en el dolor. No tengo reposo durante el día ni duermo por las noches. Oscura está la noche; las horas se suceden una tras otra, mi Señor está ausente, y yo tiemblo de miedo. Kabir dice: ¡Escucha, amigo! No hay otra satisfacción que el encuentro con el Amado. III Kabir dice: Soy el más mísero de todos; todo el mundo es bueno menos yo, el que así se vea a sí mismo, ese es mi amigo".
Kakir
43 45
siglo XV al XVI
I ¿Cómo escribirte una carta? Mis dedos tiemblan cuando trato de escribirte, mis ojos parpadean llenos de lágrimas. Balbuceo Al tratar de hablar. Tengo miedo. Has contemplado mi agonía. Ve y dile a Hari: El Señor de Mira es Girdhar Nagar. Ella busca refugio en sus pies de loto.
II Este amor errante es la raíz de todo sufrimiento. Cuando viene a cortejarme dice cosas que luego olvida fácilmente. Coger una flor o romper una promesa tardan idéntico tiempo. Cuando Tú estás ausente hay una espina en mi corazón
siglo XV al XVI
III Mi amor se ha ido. No puedo dormir. Sufro la agonía de Su ausencia. El fuego de Su amor me hace peregrinar. En Su ausencia el templo está sombrío y solitario, no hay luz alguna que pueda encender. En mi cama yazco sola: Toda la noche estaré despierta. IV Entra en mi morada, mi amor. El mundo se aflige por tu ausencia. Mi cuerpo, mi alma, mi todo están a tu disposición. Todos mis himnos cantan Tus glorias. Tú eres océanos de virtud, yo los oscuros campos de pecado. Ni un ápice de bondad hay en mí, sin embargo Tú me has soportado. Mira se pregunta cuándo volverás. Contemplando el vacío, mis ojos sufren.
Mira Bai
46 47
siglo XV al XVI
VAISAKHI Hermoso Vaisakhi, cuando los arbustos se visten de nuevo y la esposa espera la vuelta de su Señor. Mi amor, sólo contigo puedo cruzar las turbulentas aguas de la ilusión. Ten compasión de mí y vuelve a mi lado, pues sin ti no poseo ningún valor. Mírame con agrado y deja que nuestros ojos se encuentren: Sólo entonces será saciado mi anhelo. Oh Nanak, ¿Dónde buscaste al Señor? ¿A quién esperaste? No tiene que ir lejos, pues el Señor está dentro de ti. En tu cuerpo está su morada. Si tu corazón anhela al Señor, Él te amará y Vaisakhi será hermoso.
siglo XV al XVI
I Por su voluntad todo fue creado, todas las formas, todas las cosas; sin embargo, su voluntad jamás podrá ser explicada. Por su voluntad unos son ensalzados y otros humillados. por su voluntad unos gozan y otros sufren; unos son liberados y otros se pierden en reencarnaciones sin fin. ¡Oh Nanak! Si los hombres comprendieran su voluntad, no hablarían con orgullo. II No depende de ti vivir o morir, enriquecerte o dominar; tampoco depende de ti pensar o razonar, alejarte del mundo o volar. El orgulloso, que lo intente y lo sabrá. ¡Oh Nanak! Ante Dios no existen diferencias.
Guru Nanar
48 49
ARABIA
siglo VI
I Duerme el despreocupado, pero yo no palpo mi sueño, la angustia está junto a mí, junto a mi almohada. No tengo ninguna enfermedad, pero me asalta una angustia a la que veo alcanzar mi corazón. Por los avatares, tú el que no tiene padre, a mí me ha golpeado la tierra poniéndome barreras. No puedo descansar en ella en ningún lugar elevado, que se halle entre el Iraq y la tierra de Murad. Sé, sin que tú me lo anuncies, que el camino es el camino de la muerte. II Los vientos azotaron el lugar de sus moradas, como si ellos tuvieran una cita inapelable, con la muerte, a pesar de que habían gozado de una vida muelle, a la sombra de un reino bien asentado. Ellos se habían establecido en Anqira, donde fluye el agua del Eúfrates, que desciende de los montes, pero el placer y todo aquello que da gozo un día deviene pérdida y desaparición.
Al-Aswad Ibn Ya´Far
52 53
siglo VIII
LOS
ENAMORADOS
¿Hasta cuándo vivirá el enamorado en su amor? ¡Dios tenga a bien corregirlo, y por otra parte cuidarlo! Los enamorados aman pecando por ignorancia, pues al amar no pueden remediar morir. Aquél que la gloria busca para establecerse en ella, debe saber que la gloria del hombre es la piedad.
OLVIDO Cuando mi parte de tiempo haya transcurrido no me bastarán los lamentos de las lloronas. Abandonarán mi recuerdo; mi afecto olvidado al amigo dará un amigo.
Abu-L-Atahiya
siglo VIII
LOS BIENES
DE ESTE MUNDO
Los hombres no son más que un montón de muertos que están vivos, engendrados por otros vivos que están muertos. Quien tenga un linaje fértil en héroes se enriquece en huesos podridos. Y el hombre inteligente, si examina bien los bienes de este mundo, verá claramente que son un ardiente enemigo disfrazado de amigo.
AMOR Porque el amor es nube, sobre mí, y torrentes, debajo. Y me hunde los pies, o me cae cual diluvio. Como una ciudad, como una tribu, me envuelve la pasión; encuentra la nostalgia su albergue y su descanso aquí en mi corazón. Y en torno mío, tan sólo, hay vientos circulando.
Abu Nuwas 54 55
siglo XI
EL
TEMPLO EXTERIOR E INTERIOR
Observa vigilante el estado De tu propia mente. El Amor de Dios comienza En la mansedumbre. Sabe que el Profeta construyó una Kaaba extrema De arcilla y agua, Y una Kaaba interna en la vida y el corazón. La Kaaba externa la construyó Abraham el Santo; La interior es santificada por la gloria Del mismo Dios. En la senda de Dios Dos lugares de culto señalan los estados, El templo material, Y el templo del corazón, Procura adorar En el templo del corazón. Oh pordiosero, el paraíso Es sólo un aliciente; El verdadero objetivo Es la casa del propio Dios.
siglo XI
Ayunar es sólo ahorrar pan. La plegaria formal es asunto De ancianos. Peregrinar es un placer del mundo. Conquista el corazón, Dominarlo es en verdad un triunfo. Aunque pudieras caminar sobre el agua, No serías mejor que una paja. Aunque pudieras volar por el aire, No serías mejor que una mosca. Conquista tu corazón Para que puedas ser alguien. Un hombre puede estudiar durante setenta años Y no encender la luz. Otro puede no haber aprendido nada en toda su vida Pero oye una palabra Y ésta le consume. En esta senda la discusión de nada sirve; Busca y quizás encuentres la verdad.
Ansari
56 57
siglo XIV
GACELES
Y
RUBAYAT I Ufánase los necios y alardean llenos de orgullo y altivez, de una insulsa libertad, tedios y yerma. Orgulloso yo estoy, por el contrario, de ser de una tirana encantadora, el más sumiso y venturoso esclavo. II Cuando de tu belleza, amada mía, por todo el cielo un rayo se corrió, incendiándolo en áureos resplandores, una nueva deidad surgió, el amor. Y el nuevo dios su antorcha llameante paseó por el cielo, más al ver que los ángeles no se conmovían, con rabia bajó de él. Y descendió a la tierra; y en el fondo del pecho de los hombres fuerte hundió su antorcha, y en seguida surgió un fuego ¡que aún sigue ardiendo inextinguible, atroz! III Quise arrojar una piedra para espantar al amor; pero también de la piedra un fuego de amor brotó.
siglo XIV
IV Pensáis que es harto breve nuestra vid; que el placer es fugaz. ¡Os engañáis! Yo puedo convenceros en seguida. Cuando mi amada suelta su cabello y mi mano recorre la infinita escala de sus rizos largos, suaves, en peregrinación lenta, exquisita… ¿qué por hacer me queda en este mundo, después de esa delicia? La vida se me hace interminable, tan vulgar y aburrida, que os digo la verdad: por puro tedio yo me la quitaría. V Soy blanda cera en tus manos; Me moldeas a tu capricho. De defenderme no trato. De sufrir no soy amigo; Pero me gusta azotarme Con la fusta de tus rizos.
Hafiz
58 59
Maruyama Okyo
Pintura bundi
Utamaro
Pintura bundi
Utamaro Riza Abbasi
Seshuhu Bihzad
Anónimo Solimán Eitoku
Fan K´uan
60 61
ras
colecci贸n
Poesía Contemporánea e Influencias
ORIENTE
CON
EMOCIÓN
Editorial Céfiro S.A. María Moliner, 6. 50018 Zaragoza. www.cefiro.es I.S.B.N: 84-88269-2-1 Depósito Legal: Z-2645-93 Coordinación: Estefanía Moreno Diseño y maquetación: Rosa León Imagen de portada: Namiko Kitaura Impresión: Efingo Encuadernación: Efingo
ORIENTE
CON
EMOCIÓN ras
colección
Poesía Clásica
JAPÓN período período período período
Nara, 710 al 794 Heian, 794 al 1185 Muromachi, 1338 al 1573 Edo, 1600 al 1868
7 9 10 11 13
CHINA siglo XI al VI a.C. hacia el año 600 a.C. siglo V a.C. siglo II al III dinastía T´ang, 618 al 906 dinastía Song, 960 al 1279 dinastía Ming, 1368 al 1644
21 23 26 27 28 29 32 34
INDIA siglo I siglo XV al X
39 41 44
ARABIA siglo VI siglo VIII siglo XI siglo XIV
51 53 54 56 58
Miniaturas
61
Poesía Contemporánea e Influencias
JAPÓN Iaso Saiyo Taneda Santoka Hashimoto Takako Koíchi Kijaro Tamiki Jara
7 7 8 9 10 11
CHINA Jia-Ching Ling
12 12
INDIA Sujata Bhatt Margalit Matitiahu Tamil Nadu
16 16 20 21
ISRAEL Yehudah Ammijai Yonah Wollach
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ARABIA Nizar Qabbani
24 24
Miniaturas
26
ÍNDICE
Jap贸n
Iaso Saiyo
No est谩is encerrados dentro de vuestros cuerpos ni confinados en casas o campos. Porque lo que s贸is vosotros habita en las onta帽as y vag a c on el v i e n t o .
M
Japón
Taneda Santoka
Un buen silencio me hace imaginar tu rostro tibio.
Un pajarito cantará nuestra historia a todo pulmón.
Para mis manos regálame tu cuerpo y un atardecer.
Todos los días comparto un ataúd con los extraños. Clavando de prisa mi propio ataúd, me dirijo a la ciudad para ser enterrado vivo.
Japón
Hashimoto Takako
Pasó la guerra, y en las cuerdas de mi koto tan sólo el viento.
Oh amapolas, sólo soledad brota en mi cabello.
Blancas palabras, pero mi corazón seguirá cerrado.
Lago helado, la luna d e a rr m a
su luz lejana.
8 9
Japón
Koíchi Kijara Hacia allá
¿De dónde vienes? Desde una piedra ciega, del interior del capullo de una rosa. ¿Dónde estás ahora? Frente a un espejo que refleja aquellos que van a morir y aquellos que van a nacer. ¿A dónde vas? A un sitio. Donde las alas de los pájaros no pueden llegar, donde los peces del mar no pueden vivir.
Jap贸n
Tamiki Jara Esto es un ser humano
Esto es un ser humano. Mirad en lo que la bomba at贸mica lo ha convertido y c贸mo hombres y mujeres son reducidos a una sola forma. !AUxilio隆 Quiere decir ese grito apagado que se escapa de los labios hinchados. Este horrible y calcinado caos que supura es un ser humano, esto es el rostro de un hombre.
10 11
China
Jia-Ching Lin Nostalgias
Cuando no estás a mi lado me siento una h o r m i g a naufragada en la mar, ingenuo insecto melancólico que no se quiere ahogar. Me siento humano y no tengo vida sólo la mínima para respirar, me siento humano y no tengo vida sólo la mínima para soñar. Soy como un muerto moviendo los brazos acostado en su última cama, buscando tu cintura en el aire para calmar contigo sus ansias. Soy inútil como un lápiz sin punta en el enorme basurero azul, de una escuela donde los niños ya se han ido todos en bus. Se me nota demasiado que estoy vacío como una copa de vino.
China
Me sé terco como un viejo árbol que está a punto de enfermar, con las ramas marchitas de hojas más con raíces de E T E R N I D
A D.
Acostado en mi cama me siento resignado como un barco pesquero abandonado sin capitán sin redes tan sólo arrullado en el mar. Sin poderme mirar en tus ojos soy como una pizca de polvo solitaria en un rincón sensaciones extrañas que me causa este amor.
12 13
China
Jia-Ching Lin Ternuras I
Piensa que bonito sería la primavera en la luna flores silvestres gardeñas y rosas serían el deleite de lunares mariposas. Como después del beso, tu sonrisa hermosa de los cráteres muertos nacerían frutales con frutos deliciosos de mil colores y formas Y del espacio inabarcable vendrían a visitar la luna marcianos extraños criaturas universales. Y todos juntos en las praderas lunares rendirían tributo a la princesa más bella mi inquieta Gabriela, la que sueña con estrellas, la que tiene en sus labios la semilla de la primavera.
China
Jia-Ching Lin Ternuras II
Habitando en una semillita tú y yo, juntitos nos dejaríamos llevar por el viento a lugares bonitos. Volaríamos con la brisa en la semilla abrazaditos seguros de estar por el cielo y nuestro amor bien protegidos. Frágilmente en una sábana al lado del camino nuestra semillita caería acostada haciendo beso yocontigo. Con el tiempo sin darnos cuenta un gran árbol habrá crecido de nuestro amor como semilla bajo el amparo divino. Y en sus frondosas ramas los pájaros harán nidos y por las mañanas nos despertarán musicales trinos.
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India
Sujata Bhatt Jane y Tarzán
¿Por qué dije que tenía que partir? Por qué me voy si sé que cuando recibas esta carta habré regresado. Has cambiado ya mi lenguaje mi sueño. Al principio pensé que te enseñaría inglés. Pero has cambiado los sonidos que escucho los sonidos que quiero conservar junto a mí. Has cambiado ya mi dormir. Has cambiado la oscuridad en el interior de mis sueños. Has cambiado ya mis párpados mis oídos mi cuello.
India
Cazador seductor más que eso eres con tu rudo hablar me has sometido. Con tu rudo hablar has modificado mi modo de mirar los árboles de coger una piedra los frutos que como. El sol es tan blanco al mediodía blanco como las cicatrices que cruzan tus brazos. Sé como esperar la oscuridad en el interior del bostezo del tigre. La tierra natal esta siempre verde. La tierra natal hermosas palabras para ejercitar tu bostezo. Has cambiado ya la piel sobre mis muslos mis caderas los huesos de debajo de mi cara.
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India
Has cambiado ya mi mi mi mi
sueño lenguaje boca modo de devolverte el beso.
Todavía nos acechamos el uno al otro recelosos de nuestras necesidades recelosos de nuestros significados las palabras que conozco no me sirven. Todas mis células se abrieron con tu amor. Me dolían las piernas casi entumecidas movimiento. pero en latido de tantomovimiento. movimiento. Plumas piel garras de esto carecemos. Astas pezuñas piel que ha sido lamida
y lamida hasta quedar limpia.
Pero tú puedes improvisar tú con tu rudo discurso. Cazador has cambiado mi olor y mi sudor y sí mi piel que duerme en el lenguaje.
India
Todas mis células se abrieron con tu amor. Arde hiere tan bien, estoy desmayada, es este dolor sin fin que ansío, su sujetante rizo, las imposibles posturas a las que me empujas. Chita león mono serpiente ¿Quién sois? ¿Qué sabéis? ¿Cómo pudistéis cómo pudistéis cambiar mi lenguaje mi sueño? ¿Cómo pudistéis hacerme desear cambiarme a mí misma? Chita león mono serpiente Os conozco. Estáis entre mis pies, Y el músculo que quiero,
Sois míos. entre mis manos. vuestro corazón.
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India
Margalit Matitiahu En el bosque
Despierto dentro de un bosque, rayos de luz encienden árboles y ramas las hojas pintan sobre la tierra un colage de oro.
silencio Salgo al bosque. Un río se junta al lago, traspasa realidades exactas más que la realidad, verdades se penetran en la agua con claridad mística que lleva la estabilidad temporánea de la luz. Sigo mis pensamientos, sigo mi imaginación, coro de la natura que reina en la luz en la oscuridad en los árboles en las colores en la tierra en el agua en el ilencio
s
Pienso en la ruidosa corriente que viene tras el silencio. Como es el murmullo de mi tempestad como es el grito que corre en mi cuerpo.
India
Tamil Nadu
Sin mí, sin mi testigo, nada de lo que sucede permanece. Sin mí, que te comento y te corrijo los poemas inéditos que escribes. Quedarán ocultos sin vida y sin objeto. Sin mí, que a tu lado recojo lo dulce y lo ácido del carácter humano. Todo se volvería nulo, aburrido. Así me dices cada vez, siempre desde la antigüedad. De todas tus promesas así siempre me repites. Hasta que me convences con su repetición. Sin ti no tiene objeto nada de lo que vivo. Poema éste pequeño y grande en contenido, donde la forma toma el lugar del fondo para tratar de llegar al ánimo del que escucha al poeta y es su testigo. Si, él encierra en mi interior todo lo que deseo y dejo al corazón seguir su curso sin gracia ni alabanza. 20 21
Israel
Yehudah Ammijai Boletín meteorológico
Estará nublado. Lloverá. Seremos y moriremos. Estarás despierto. Habrá brisas dormidas. Te veré con emoción primera y dura. Tú me verás, como la lluvia que cae en tu rostro levantado hacia mí. Hará frío. Habrá subidas y bajadas. Y ¿a quién hablaremos si no existiremos ya? Habrá buenas condiciones para los amantes. De los cuatro puntos cardinales de mi vida vendrá el viento. Estará oscuro. Habrá olas. No habrá término medio. Habrá una nube. Habrá un arco iris en tu cuerpo. Hará frío. No existiremos mañana. Habrá niebla en los valles. N o s
d i s p e r s a r e m o s .
Israel
Yonah Wollach Cuando vengas a acostarte conmigo como Dios
Ven a acostarte conmigo como dios sólo en Tortúrame todo lo que puedas sé siempre Déjame sufriendo. Estaré en las aguas profundas no llegaré a la playa nunca.
espíritu inalcanzable
Ni con la mirada. Ni con el sentimiento. O en un diluvio. Agua abajo y arriba. Nunca cielo. Espacio abierto. El sitio abierto más cerrado del mundo. Un lugar siempre cerrado abierto que nunca me parezca ver desde arriba todo, sé sólo espiritual. Un dolor limpio y sólo como un tañido de dolor. Que nunca toque. Que nunca sepa. Que nunca sienta realmente. Nunca realmente.
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Arabia
Nizar Qabbani Lección de dibujo
Mi hijo coloca frente a mí su caja de pintura y me pide que le dibuje un pájaro. Sumerjo el pincel en color gris y dibujo un cuadrado con cerraduras y barrotes. El asombro llena sus ojos: ...Pero ésta es una prisión, padre, ¿no sabes cómo dibujar un pájaro? Hijo, perdóname. He olvidado la forma de los pájaros. Mi hijo coloca frente a mí su cuaderno de dibujo y me pide que le dibuje una espiga de trigo. Sostengo la pluma y dibujo una pistola. Mi hijo se burla de mi ignorancia y exclama: ¿Acaso no conoces, padre, la diferencia entre una espiga de trigo y una pistola? Hijo, solía conocer las formas de las espigas de trigo, la forma de la hogaza, la forma de la rosa, pero en estos duros tiempos los árboles del bosque se han unido a la milicia y la rosa padece obtusas fatigas
Arabia
en este tiempo de
espigas armadas, de pájaros armados, de cultura armada y religión armada, no puedes comprar una hogaza de pan sin encontrar una pistola dentro, no puedes coger una rosa en el campo sin que te clave sus espinas en el rostro, no puedes comprar un libro que no explote en tus manos. Mi hijo se sienta al borde de mi cama y me pide que le recite un poema, una lágrima cae de mis ojos a la almohada. Mi hijo la prueba, asombrado, diciendo: ¡Pero ésta es una lágrima, padre,no un poema! Hijo mío, cuando crezcas, y leas el divan de poesía árabe, descubrirás que la palabra y la lágrima son hermanas y el poema árabe no es más que una lágrima llorada por los dedos que escriben. Mi hijo pone sus plumas, su caja de crayones frente a mí y me pide que le dibuje una patria. El pincel tiembla en mi manos y me sumo en llanto.
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Influwnxias
Benedetti
Si en el crep煤sculo el sol era memoria ya no me acuerdo.
Lo peor del eco es que dice las mismas barbaridades.
Josep Turull
Por mucho correr no adelantas el tiempo, s贸lo te cansas.
Aprende a sorber poco a poco de tu amor para que dure.
Influencias
Gustavo Scarone
Desorientado. En vez de caminos, bifurcaciones.
En tus manos Un puñado de nueces Para mí, cáscaras.
David Collazos
Un hombre va por la neblina, es Luego es neblina.
…hay otras huellas. Ya no me pertenece este camino. 26 27
Mariko Mori
Amarita Shergil
Namiko Kitaura Felix Nussbaum
He Jikani
Saed Meshki
Amarita Shergil
Paul Binnie
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ras
colecci贸n