Roxana Álvarez Arredondo
24 de Febrero de 2016
LOS CONTENIDOS ¿Qué son los contenidos? Son “el conjunto de saberes o formas culturales cuya asimilación y apropiación por parte de los alumnos, se considera esencial para su desarrollo personal y social”. Son herramientas para la comprensión del mundo y abarca conceptos, procedimientos, valores y actitudes. Se plantean en las diferentes instancias curriculares. Los contenidos conceptuales: Abarcan hechos, conceptos, ideas, interacciones, secuencias, principios, etc. son la base primordial para lograr que el niño se acerque al conocimiento del mundo que lo rodea, para que pueda ampliarlo en forma gradual y prograsiva, a través de la construcción de conceptos. Se diferencian en: Datos: informaciones que son necesarias para poder formar las ideas y arribar al conocimiento que se desea. Hechos: se refiere a cosas que ocurren, acontecimientos, sucesos. Los datos y los hechos permiten la construcción de los conceptos. Conceptos: ideas o representaciones mentales que abarcan e incluyen en una misma clase, propiedades y características esenciales, de seres u objetos (reales o virtuales) de hechos, fenómenos etc. Los contenidos procedimentales: Incluyen
estrategias,
técnicas,
habilidades,
destrezas,
y
se
aprenden
conjuntamente con los contenidos conceptuales Tiene que ver con el saber – hacer. El procedimiento:
Roxana Álvarez Arredondo
Es destreza, habilidad, técnica que queremos que el niño construya. No es recursos o estrategias didácticas que utiliza el docente para dar desarrollo a los aprendizajes del grupo de alumnos. Los contenidos actitudinales: Comprenden valores,
actitudes,
normas.
Estos contenidos se
aprenden
integradamente con los otros dos. Tres definiciones distintas de diferentes autores sobre actitud:
“Una organización duradera de procesos motivacionales, emocionales, preceptúales y cognitivos con respecto de algún aspecto del mundo del individuo” (Krech y Crutchfield)
“Una tendencia o predisposición del individuo para evaluar un objeto o el símbolo de ese objeto” (katz y Stotland)
“Una predisposición relativamente estable de la conducta en relación con un objeto o sector de la realidad” (Castillejo)
De acuerdo con estas definiciones, si el componente motivacional no estuviera presente, no podríamos hablar de actitud. Son contenidos referentes al interés, al valor, la responsabilidad. “Las actitudes se constituyen en la base del sistema de valores, que el sujeto construye y comparte. Convertir las actitudes en contenidos educativos es crear la posibilidad de definir con claridad los valores y las normas que la escuela debe transmitir…” ¿Cómo se pueden organizar los contenidos? Categorías: este tipo de organización de contenidos se basa en la similitud de las características o de relación entre los diferentes elementos. Algunos contenidos tienen una estructura plana, es decir, no existe ninguna jerarquía, secuencia y todos los temas tienen un nivel de dificultad similar.
Roxana Álvarez Arredondo
Como por ejemplo:
Los colores y las figuras geométricas
Los animales y las plantas
Orden de importancia: Organizar el contenido en orden de importancia es una manera muy subjetiva de hacerlo, por lo tanto, debe tener cuidado en cómo lo hace. Existen tres opciones para elegir:
Colocar el contenido más importante en el inicio y al final
Partir del contenido más importante al menos importante
Partir del contenido menos importante al más importante
Tome en cuenta que los estudiantes suelen prestar más atención al principio y al final de un tema, por lo cual tiene bastantes opciones para organizar el contenido, sólo debe analizar su información para elegir el más adecuado. Causa y efecto: Una gran manera de conseguir que los alumnos se enganchen del contenido, organizarlo por causa y efecto es recomendado. Especialmente cuando la información incluye problemas y soluciones fragmentarla de esta manera es muy apropiado. Hay tres formas de hacerlo:
Analizar un solo acontecimiento y examinar sus múltiples causas.
Mirar los múltiples efectos de una sola causa.
Revisar una cadena de causas y efectos que comienza con un evento y sigue la reacción en cadena de los resultados finales.
Secuencial: Cuando usted está presentando un proceso o procedimiento, resulta más eficaz estructurar el contenido en una serie de pasos. La estructura de contenido secuencial proporciona enlaces para que los alumnos recuerden lo pasos del procedimiento. Para aprovechar esta técnica y hacerla aún más interactiva, se puede evaluar a los estudiantes, mostrando los pasos de un proceso (revisados anteriormente en
Roxana Álvarez Arredondo
el curso) dispersos a través de la pantalla y ellos tendrán que ordenarlos en el orden correcto. Orden cronológico: sin duda, la cronología es una de las maneras más sencillas de organizar el contenido en un curso. Es un hecho que cuando las cosas están dispuestas en cierto orden, podemos trabajar con ellas más fácilmente. Por lo tanto, mediante al presentar el contenido en el orden que sucedió, los estudiantes pueden comprender fácilmente el concepto. Una idea para hacer esto aún más interactivo es crear una línea de tiempo, donde el estudiante pueda navegar para conocer hitos o reconocimientos. Los estudiantes son capaces de hacer clic en momentos específicos del tiempo y una serie de recursos de esa época están disponibles para ellos (videos, noticias, etc.) Equipo de cuatro personas: Organiza los contenidos de un campo formativo partiendo de Preescolar, hasta segundo de primaria.