Jaguar lleva años intentando recuperar la esencia del Type E, pero todavía no lo ha conseguido. Cuando a finales de los años setenta se buscó un sustituto satisfactorio para el genial deportivo británico apareció el XJS, un coche demasiado “GT” como para suceder a su ágil ancestro.
trabajaron para crear un nuevo vehículo deportivo de dos plazas capaz de devolver a la marca a su antigua gloria. El proyecto se llamaba F-Type y comenzaba en 1980 como un deportivo tremendamente estilizado, cuya estética acabaría influenciando al XJ220.
El F-Type se cobraría demasiados Cuando en la casa del felino se dieron años en desarrollo, y cambiaría demacuenta, y vieron sus pobres ventas, siado en sus formas y concepto. De
deportivo ligero biplaza pasaría a un pesado GT con demasiada tecnología como para ser viable comercialmente, y llegaría Ford para comprar Jaguar y Aston Martin a finales de los 80, pasando el proyecto a la casa Aston y convirtiéndose en el DB7.
deportivo “pesado”, orientado hacia el confort por encima de la diversión de conducción.
El XK resultaría un éxito, y mejoraría mucho con su segunda generación, pero entre tanto Ford volvería a mostrar otro F-Type de nuevo en los Así las cosas nacía por entonces el XK albores del nuevo siglo para olvidarlo como deportivo GT de Jaguar, herede- rápidamente antes de abandonar la ro del concepto XJS, es decir, lujoso compañía Jaguar a manos de Tata.
Contada la historia, ahora es cuando toca la parte del nuevo XE. Jaguar tenía claro que quería un deportivo de acceso, con carrocerías abierta y cerrada con el que plantar cara a los más equipados SLK y Z4 alemanes, así como una alternativa situada a medio camino entre el BoxsterCayman y el 911.
extrusión de aluminio, que han de servir tanto para la versión abierta como para la cerrada.
Con esta plataforma recortada se partió para crear este coche que, se mire por donde se mire, es simple y llanamente precioso. Cierto es que por dentro tal vez peque de conservador, pero es elegante El nuevo coche había de ser fiel a la idea a la par que precioso, y es un digno Jadel Type E, es decir, un deportivo ligero y guar, que eso es mucho decir. compacto, rápido, ágil y divertido de conducir. En Frankfurt veremos la unidad que decora estas páginas, que oficialmente es un Obviamente había un problema de pla- prototipo, pero es tan cercano a la serie taformas, pues para un coche de nicho que poco o nada cambiará. Su calandra como este Jaguar no podía darse el lujo delantera ovalada huye sabiamente de de optar por una plataforma de desarrollo los XF y XJ, para ser más pareja a la del propio, así que optó por crear un coche a Type E original, como sus ojos rasgados partir de la base de la próxima y todavía a lo largo, y no a lo ancho. Tal vez sea no-nata generación XK, con dos larguísi- menos agresivo que el XF, pero también mos y gruesos perfiles longitudinales en es más personal y dinámico.
Las proporciones de capó largo, cortos voladizos, y gran batalla le confieren un aspecto delicado, deportivo, atlético, diría incluso pornográfico, como sugieren sus caderas marcadas sobre las ruedas traseras, antes de coronar en una línea recta por encima de los agresivos grupos ópticos posteriores.
de aplicar un extra de 95 CV y 235 Nm de par a modo de KERS, accionado por un botón que cae sobre nuestro pulgar derecho. ¿Lo veremos en el modelo de producción? No lo sé, pero en cierto modo, lo dudo. Con estos dos sistemas, el coche es capaz de rodar como híbrido eléctrico, bueno, concretamente como eléctrico puro, en ciudad, durante cortos recorridos, sin emitir un gramo de CO2, y además homologa un consumo medio de sólo 5,7 litros, mientras que es capaz de acelerar hasta los 100 por hora en sólo 4,4 segundos camino de los 300 por hora que tiene de punta.
El apartado mecánico es, por el momento, un V6 de inyección directa y sobrealimentación que proporciona 380 caballos para tres litros de cilindrada, con 450 Nm de par. Traslada su potencia a través de un árbol desde su posición delantera-central hasta una caja ZF automática de ocho velocidades con accionamiento por levas manual, y que lleva acoplado un motor eléctrico que Su gran pega es su peso, de 1.650 kilogradurante diez segundos, no más, es capaz mos, a todas luces excesivo, más sabiendo
que se trata de un coche con chasis de aluminio, y que sin el motor eléctrico sólo adelgazará unos cincuenta. Un nueve once de nueva generación anda por los 1.400. Según hemos podido averiguar, el coche está capacitado para montar motores V8 y cuatro en línea, por lo que se nos ocurren muchas variantes potenciales para decorar una genial gama de cupés y descapotables que costarán a partir de unos 75.000€.
si se quiere algo más racing, descuida, que el XE (que por el momento se llama como concepto C-X16) tendrá variantes aligeradas deportivas con las que plantar cara a un 911 GT3. Esto promete, y mucho. Tanto que ya estamos salivando sólo con imaginarnos cómo debe ser ponerse al volante de esta belleza británica.
En Frankfurt se podrá ver en vivo la semana Si lo piensas y lo miras bien, la posición es- próxima, y se comenzará a vender, si todo tratégica en cuanto a precio es genial. Está va bien, a finales de 2012. ¿Aguantaremos por debajo de un 911 básico, pero le igua- la tensa espera? la en prestaciones, confort, diseño... Si se quiere algo más grande, con cuatro plazas y maletero, estará el XK para convencernos, y