Revista Sensei N°8 by miguel martinez

3 EDITORIAL Moriheri Ueshiba 4 A 42 de la partida de O´Sensei comemoramos parte de su vida…

9 Reflexión El espejo suele ser el peor reflejo de la ira

11 Aikido. Laura Copello Sensei 5° dan discipula de Kenzo Miyazawa.

15 Entrevista. Raúl Tolosa 4°Dan desde Trelew un pionero del arte en la Patagonia. 22 Entrevista. Miguel Martínez desde Caleta Olivia , Santa Cruz. 27 Entrevista. A Martin Mora 3° Dan desde Rio Grande, Tierra del Fuego

Estimados Amigos Ueshiba Morihei Hemos querido en esta pretendida edición, conmemorar a O´SENSEI. Que un 26 de Abril de 1969 dejara el mundo físico, dejándonos un legado invaluable por lo que el Aikido significa, más allá del marco técnico sino, por su filosofía que a diferencia de cualquier arte marcial, la filosofía del Aikido además de plausible es aplicable, no quedando en lo mero intelectual. Decir Ueshiba es, decir de un genio del siglo XX, que como todo genio es de esperar , un hombre espiritual, soñador, contradictorio. Que no ceso en la búsqueda de la Verdad y la plasmo en una arte maravilloso que trasciende la victoria y la derrota. Y fue por el verdadero Budo que es, Detener el conflicto, paradigma que entendió y practicó… El comprender la naturaleza de las leyes del universo es, lo que le da trascendencia al Aikido, poniéndolo en un estandarte superior que lo consagra a O´SENSEI. El marco técnico del Aikido es tan fascinante que, permítaseme decir es, la danza del universo misma. Quien comprende la naturaleza de las leyes es quien puede aplicar las leyes de la naturaleza en acción y esto no es un juego de palabras. Basta ver a O´SENSEI en acción para verificar lo que expongo. Se expresa la Naturaleza a través del cuerpo humano. Del mismo modo en que se suceden las estaciones, las técnicas de AIKIDO pueden tener la dulzura de una brisa de Primavera o el rigor de una helada de Invierno. Durante las clases se produce la alternancia entre quien las ejecuta y quien las recibe. Ambos necesitan el mismo grado de concentración y entrega, ya que el espíritu del arte se centra en la conciencia de la interacción y en la sensibilidad hacia el otro. Por ello se trabaja tanto en la ejecución de las técnicas como en la sinceridad de los ataques, la identificación del propio desequilibrio, la aceptación de la caída y la fortaleza para levantarse con dignidad. Por ello, se busca un grado de maestría en la técnica tal, que permita controlar una violencia desenfrenada provocando el menor daño posible. Se trata de evitar antes que disuadir - disuadir antes que controlar - controlar antes de herir - herir antes de matar. En AIKIDO no hay lucha ni competencia. La verdadera Victoria es la que se consigue sobre sí mismo. (Masakatsu agatsu, katsuhayahi). Ueshiba Morihei O´SENSEI , Gracias por este Obsequio!

Director Miguel Martínez

Ueshiba Morihei O´SENSEI (大先生), Es sin dudas un personaje místico del Budo que con su espíritu y su aporte, el Aikido, revoluciono el mundo de las artes marciales. Su contribución que esta y va más allá de la mera técnica es lo que lo transforma en un ente Irrelevable. Y que no necesita de leyendas a interpretar. La vida de Ueshiba está en su totalidad documentada, basta leer a su biógrafo el Señor John Stevens en su libro “PAZ ABUNDANTE”. Para descubrir a Ueshiba Morihei.

Cuarto hijo y primer varón de Yoroku y Yuki Ueshiba, Morihei vio por primera vez la luz del día en la ciudad costera de Tanabe. De una salud más bien débil, Morihei era nervioso y caía a menudo enfermo. Después de pasar su infancia en la escuela de un templo (Terakoya) y tras la educación primaria en una escuela de Tanabe, entró en la escuela superior, donde su capacidad por la aritmética le permitió ser asistente del profesor. A los diecisiete años, Morihei finalizó sus estudios para trabajar en un comercio familiar, en Tokio. En esta época empieza a interesarse por los Artes Marciales, por el estudio de Ju-Jutsu y de Ken jutsu. Pero una grave enfermedad le obligó a volver a Tanabe. Una vez recuperado, se casa con Hatsu Itokawa que conocía desde su infancia. A los veinte años (en 1903) se alista como simple soldado en el 61º regimiento de infantería de Wakayama en donde su talento de combatiente llamó la atención enseguida. Destinado al 37º regimiento de la cuarta división de Osaka, aprovechaba el tiempo libre para practicar el sable de la escuela Yagyu ShinganRyu. Enviado a Manchuria, regresó en 1906 dejando ejército, y desoyendo la petición de sus superiores. Los seis años siguientes fueron para Morihei la ocasión de continuar su entrenamiento de Artes Marciales.

En 1912 Morihei partió con un grupo de cincuenta y cuatro familias de Tanabe hasta el condado de Monbetsu, Hokkaido, donde fundaron el pueblo de Shirataki. El origen de esta emigración fue una idea gubernamental para repoblar el condado de Hokkaido, que buscaba voluntarios capaces de instalarse en esta isla de clima riguroso. Después de una larga lucha contra las tempestades y la nieve que devastaba los cultivos, los colonos consiguieron al cabo de dos largos años recoger sus primeras cosechas. Su esposa y su hija de poca edad se reunieron con ellos en este momento. En 1915, gracias a un periodista local, encuentra a Sokaku Takeda, maestro de Daito Ju-Jutsu. Durante un mes, Morihei recorre el camino de un día a caballo que le separaba de Engaru para seguir la enseñanza de Takeda Sensei. Morihei consigue convencer a su profesor para que vaya a instalarse a Shirataki. En noviembre de 1919, Morihei recibe un telegrama informándole del estado crítico de salud de su padre. Dejando sus tierras y la mayoría de sus bienes como regalo a Takeda Sensei, se puso en camino sin demora. Sin embargo, a pesar de todo, hizo un rodeo por Ayabe (cerca de Kyoto) porque había oído hablar de un tal Onisaburo Degushi, maestro de la secta Omoto, inspirado de la religión Shinto. Su encuentro marcó profundamente a Morihei que esperaba obtener la curación de su padre gracias a sus plegarias. Cuando llegó a Tanabe, Morihei se enteró de la muerte de su padre y pasó los meses siguientes meditando y rezando. Después se fue con Hatsu, que acababa de dar a luz, y sus dos hijas hacia Ayabe con el fin de encontrar junto al reverendo Degushi, la paz interior gracias a una vida religiosa. Los siete años siguientes permitieron a Morihei desarrollar su concepto espiritual de la vida. Esta concepción espiritual de la unidad del cuerpo, del alma y del espíritu fue el origen de la creación del Aikido al mismo tiempo que el estudio de Dayto Ryu. Animado por el reverendo , Morihei fundó el Dojo (el

"Ueshiba Juku") donde se beneficiaron de su enseñanza los miembros de la secta. Pasaba el resto del tiempo entre el cultivo de la tierra y la plegaria. Así nació el Aiki Bujutsu. A principios de 1924, acompañó al reverendo Degushi a Manchuria, con el fin

de establecer un centro espiritual, pero el pequeño grupo fue detenido y condenado a muerte. Gracias al gobierno japonés, fueron salvados y pudieron proseguir la vida tranquila que llevaban en Ayabe.En esta época, ciertos oficiales de la marina imperial, miembros de la secta Omoto y que frecuentaban el Dojo Ueshiba, hablaron del maestro Ueshiba a sus conocidos. Es así como el almirante Isamu Takeshita descubrió el Aikido y más tarde hizo todo lo posible para promoverlo. De 1927 a 1931 el número de alumnos aumentó tanto que el apoyo financiero permitió establecer un Dojo permanente en abril de 1931 en Tokio. El "Kobukan" acogía así a los pioneros del Aikido tales como Gozo Shioda y otros más... En 1932, se creó la organización Budo Senyokai bajo la iniciativa del reverendo Degushi a fin de promover el Aikido a nivel nacional, lo que provocó un

aumento de trabajo para el fundador el cual ofreció numerosas demostraciones en todo el país. En diciembre de 1935, un incidente ocasionó la disolución de la secta Omoto. A Ueshiba Sensei, que enseñaba en diversas organizaciones oficiales, como la Escuela Naval, La Universidad Militar y las escuela militares de Toyama y Nakano no le molestaron. En 1937 la guerra contra la China forzó a muchos uchi-deshi a incorporarse al ejército. Después, en 1942 la guerra del Pacífico vació un poco más los Dojos... Con su mujer Hatsu, decidió dejar la capital y retirarse a Iwama donde construyó un Dojo, verdadero santuario del Aikido donde pasó la mayor parte de los siguiente doce años. Durante este periodo continuó trabajando y perfeccionando su técnica, creando así el concepto de "Takemusu Aiki" que hace hincapié en la ejecución espontánea de las técnicas sin una forma impuesta. Al principio de los años cincuenta, gracias a la voluntad y al esfuerzo de los practicantes más antiguos como Gozo Shioda, Koichi Tohei, ( Primer jefe de instructores), y también del hijo del Fundador, Kisshomaru, y otros más recientes como Morihiro Saito y otros más, el Aikido renació. La enseñanza de OSensei atravesó incluso los mares y empezó a expandirse por todas partes como una respuesta a un mundo que buscaba cada vez más la facilidad y el confort material. Tampoco hay que olvidar a todas las personas, anónimas o no, que en un momento dado ayudaron al Aikido a convertirse en lo que hoy en día es. El 26 de Abril de 1969, Morihei Ueshiba Sensei se apagó, legando al mundo un tesoro de Amor y Armonía.

"Cerca de Tokio vivía un gran samurái, ya anciano, del que se decía aún poseía una técnica infalible capaz de derrotar a cualquier adversario. Cierto día, se hizo eco la noticia de que andaba por el distrito un guerrero conocido por su falta de escrúpulos y mala educación, famoso por sus provocaciones a la hora de combatir. Él utilizaba esta técnica para hacer despertar la rabia en el rival, que se lanzaba con un ataque encolerizado, y así contra-atacar con una fulminante técnica que había entrenado durante varios años gracias a sus extraordinarios reflejos. Se decía que jamás había perdido una batalla. Sabiendo de la fama del anciano samurái, se dirigió al dojo para retarle en un duelo, vencerle, y así lograr aumentar su reputación. Cuando llegó, a pesar de la negativa de los alumnos, el maestro aceptó el duelo. Ambos permanecieron preparados, en posición, con la mano rozando la empuñadura del sable, cuando el guerrero comenzó a vociferar todo tipo de insultos. Durante horas permaneció lanzando improperios, e incluso mentando a los ancestros del samurái. Incluso arrojó algunos restos que llevaba encima en su dirección. Sin embargo, el anciano permaneció impasible. Al final de la tarde, sintiéndose exhausto y humillado por tal reacción, el guerrero se retiró cabizbajo. Los alumnos, desilusionados por que su maestro aceptara tantos insultos y provocaciones sin mediar palabra, le preguntaron: - Maestro, ¿Cómo pudo soportar esa falta de dignidad? ¿Por qué no usó su espada, aún a sabiendas de poder ser derrotado, en vez de mostrarse cobarde ante su rival? A lo que el maestro, preguntó respondiendo: - Si alguien llegara a vosotros con un obsequio que no aceptáis, ¿a quién le pertenece finalmente ese regalo? - Pues... a quién intentó entregarlo. - Respondió uno de los alumnos. - Lo mismo vale para la envidia, la rabia o los insultos. Cuando no se aceptan, continúan perteneciendo a quien los llevaba consigo."

Entrevista:

Hoy SENSEI 5° Dan. Ella pertenece a la Asociación Argentina de Aikido, lleva más de 30 años practicándolo y fue discípula del fallecido Maestro Kenzo Miyazawa introductor del arte en la argentina. Integra la comisión de Aikikai Argentina, es Vicepresidente y está en forma permanente dictando clínicas y seminarios con el único propósito de ayudar a quien ama el Aikido… –Ver http://www.aikikai.org.ar/–.

RS. Como llega usted al Aikido? Mi llegada al Aikido fue, podría decirse, por casualidad. Por el año 1974, cuando yo tenía 14 años, tenía ganas de practicar un arte marcial. En esa época yo sólo había visto algo de Judo y Karate. Alguien le comentó a mi mamá que cerca de nuestra casa había un profesor japonés que enseñaba artes marciales y allí fui a ver de qué se trataba. Presencié una clase dada por Miyazawa Sensei y me gustó mucho, así que al otro día comencé la práctica y desde entonces practico este maravilloso arte, siempre bajo la dirección de Miyazawa Sensei hasta su muerte, y ahora continuando su escuela tratando de trasmitir lo que aprendí con él. RS. Cuál fue la etapa que guarda en su retina de sus comienzos? Quizás los primeros años de práctica son los que me traen mejores recuerdos, el haber tenido la suerte de recibir las enseñanzas directas de Miyazawa Sensei en todas las clases y haber tenido la oportunidad de apreciar sus notables condiciones para este arte, como así también su humildad y sencillez como persona.

Un recuerdo inolvidable de esa época, fue el haber estado en el año 1978, en las clases que dictaron Doshu Kishomaru Ueshiba y Yamaguchi Sensei en lo que hoy es Dojo central de la Asociación Argentina de Aikido, durante la primera visita a la Argentina del hijo del Fundador. A diferencia de hoy, donde las clases son muy concurridas cuando viene algún maestro de gran jerarquía, en ese momento, las clases en el dojo, fueron con un grupo pequeño de alumnos, lo que permitió un contacto directo con los sensei y poder apreciar de muy cerca la calidad y dominio que tenían de este arte. Fue una gran experiencia. RS. El privilegio de haber estado al lado de Miyazawa Sensei, además de la experiencia. Que fue lo que él, siente usted, le dejo como enseñanza inolvidable? Además de toda la enseñanza técnica, lo que a mi me transmitió, fue el sentido de la disciplina, la constancia y dedicación que es necesario tener, no sólo en Aikido, sino también en cualquier otra actividad de la vida, para poder mejorar y perfeccionarse, y que esto nunca termina, no importa cuántos años uno tenga de práctica, siempre estamos aprendiendo. RS. Cómo es Laura Copello como Sensei? Soy una persona simple, que ha elegido al Aikido como su forma de vida, que trato de transmitir lo mejor posible las enseñanzas recibidas de mi maestro; que no me considera una Sensei, sino solamente alguien que tiene un poco más de conocimientos que los que recién empiezan este camino y, a su vez, tengo claro que me falta mucho más por aprender en Aikido y en la vida.

RS. Dentro del maravilloso mundo del Aikido que ve usted en él, como para decirle a la gente que se sumen?

Le diría a la gente que con el Aikido va a encontrar no sólo un arte de defensa personal muy eficiente, sino que también va a encontrar un camino que le va a permitir el crecimiento y desarrollo personal y un medio para superarse a sí mismo. RS. Una reflexión de O Sensei? Me gusta mucho este pensamiento que leí en “El arte de la Paz”, porque creo que muestra la profundidad del Aikido y que no es sólo un conjunto de técnicas de defensa personal. “El Arte de la Paz comienza contigo. Trabaja en ti mismo y en tu tarea destinada en el Arte de la Paz. Todo el mundo tiene un espíritu que puede ser refinado, un cuerpo que puede ser entrenado de cierta manera, un camino adecuado el cual seguir. Tú estás aquí sin ningún otro propósito que comprender tu divinidad interna y manifestar iluminación innata. Crear paz en tu propia vida y luego aplicar el Arte a todo lo que encuentres. RS. Cuáles son sus proyectos para este 2011? Continuar dando clases como siempre, en el Dojo Central y en el Instituto Potencia, viajar a las provincias donde hay dojos de la Asociación Argentina de Aikido para dictar clases allí y, hacia fin de año, participar en la organización de la nueva visita de Sensei Tissier a Argentina, quien dictará un seminario los días 8 y 9 de diciembre en Bs.As.

Entrevista:

Hoy SENSEI 4° Dan, vive en la ciudad de Trelew, Chubut, lleva más de 36 años en la enseñanza y difusión de este arte. Más de la mitad de su vida abocado a la enseñanza del arte de la "no violencia". Con 68 años, es casado, jubilado, tiene dos hijas y un hijo, tres nietas y un nieto por nacer. La mayor de las hijas y su hijo son 2° dan de Aikido, pese a su entusiasmo por razones de familia (hijos), han tenido que dejar de practicar. Le cabe el honor que su hija fue la primer cinturón negro del país y su hijo el primer segundo dan menor de edad, (17 años) de Latino América quien los examinara, fue nada más y nada menos que el Gran Maestro Yoshimitsu Yamada en uno de sus viajes a Argentina. Decir del Maestro Tolosa es decir; Amigo, generosidad, entrega, Humildad, es decir persona de buena entraña, sin dobleces. Sereno y exigente como SENSEI, el Aikido en él lo hace parecer simple y sobretodo efectivo, el Aikido en él es un arte marcial no una danza… Los invito a que conozcan a un Gran SENSEI y una maravillosa persona.

RS. Con quien comienza el camino del Aikido? Comienzo el camino del Aikido con un grupo de entusiastas de ésta ciudad en una época que aquí no se practicaba ningún tipo de arte marcial. RS. Cuando introduce el Aikido en la Patagonia? Como dije anteriormente el grupo se formó allá por el año 1970, pero ya en 1973 nos contactamos con el maestro Kenzo Miyazawa (fallecido) y concretamos una o dos venidas por año para darnos clases. Además por razones de mi trabajo viajaba casi mensualmente a Buenos Aires y también he tomado clases con los maestros Kasutosi Kurata , Masafumi Sakanashi y Juan Tolone.

RS. Cómo fueron esos comienzos. Porque además, algo Puerto Madryn puede contar de su hacer?

Los comienzos como todo fueron difíciles, con un grupo de amigos entre ellos un maestro de Kenpo Contac, con quien luego compartiríamos el Dojo, tratábamos de conseguir algún lugar acorde para la práctica, hasta que lo logramos, pero luego había que adaptarlo, (tatami, vestuarios, baños, recepción, etc.) esto nos llevó tiempo, trabajo y dinero. Por suerte arranqué con gran cantidad de alumnos, (niños y adultos). En puerto Madryn fue más difícil, realmente una odisea, como no conseguía local un seguidor nos consiguió un permiso en la Cooperativa Eléctrica para que armáramos y diera clases en un local de oficinas de la misma, para lo cual viajaba todos los sábados a la tarde junto con dos grandes amigos aikidocas Carlos R. Mc.Gough (fallecido) y Kurt Seitz , llevando 11 colchones de dos plazas y un cobertor para armar el tatami, para ello debíamos correr todos los escritorios y sillas y resto de mobiliario. Daba la clase y luego desarmar el tatami y volver todo a su lugar, regresar a Trelew y descargar. Terminábamos la tarea entre las 24 y 1 de la mañana. Al cabo de algunos meses ya conseguimos local y pudimos instalar en forma fija nuestro tatami. Di Aikido alrededor de ocho años a niños y adultos en aquella ciudad, viajando todos los martes y jueves, sin haber faltado un solo día.

RS. Cuantas veces ha estado en Japón visitando a maestros memorables? A Japón viajé solo una vez pero fue algo inolvidable, visité el Hombu Dojo donde tuve la suerte,( hasta ahora no me explico las razones ) me recibió personalmente Doshu Kishomaru Weshiba (10° Dan), quien me invitó a su oficina privada a conversar y tomar un té, luego me obsequió un libro de su autoría autografiado, que hoy conservo como una joya y luego me invitó a que participara de una clase del gran maestro Seigo Yamaguchi (9° Dan), terminada la misma éste me invitó a una confitería cercana a tomar un café junto a un Argentino radicado en Tokio Roberto Flores (hoy 6° Dan) donde departimos durante una hora, luego volvimos a una nueva clase del Maestro. También he participado en seminarios internacionales en Uruguay, Chile, Perú, Brasil, Méjico, Estados Unidos y nuestro país, con grandes maestros como: Yoshimitsu Yamada Sensei (8° Dan), Nabuyoshi Tamura Sensei (8° Dan), Osawa Sensei (8° Dan), Mitsunari Kanay Sensei (8° Dan), N. Iwagaki Sensei (7° Dan), Reishin Kawai Sensei (7° Dan), Shibata Sensei (7° Dan), E. Horie Sensei 6° Dan, y con el propio hijo del creador Doshu Kishomaru Ueshiba (10°Dan) y con no japoneses como Donovan Waite Sensei (7° Dan) EEUU, Claude Berthiaume Sensei (6° Dan) Canadá, Peter Bernarth Sensei (7° Dan) EEUU, Matsafumi Sakanashi Sensei (6° Dan) Argentina, Juan Tolone Sensei (6° Dan) Argentina, Wagner Bull Sensei (6° Dan) Brasil, Manuel Cela Sensei (6°Dan) Uruguay. RS. Siempre ha entregado todo por el Aikido. Una travesía que marca ello fue, traer a la Patagonia al Sensei Yoshimitsu Yamada en la década de los 90´ tarea nada fácil? Así es, he dejado muchas cosas de lado por el Aikido y lo sigo haciendo, el 29 de Noviembre de 1993 pude organizar el primer seminario Internacional en Trelew trayendo nada menos que al gran maestro Yoshimitsu Yamada quien permaneció por dos días en ésta ciudad, disfrutando muchísimo de sus clases como así también de su anécdotas con el creador del Aikido O’Sensei Morihei Ueshiba, de quien era uchi deshi. No fue tarea fácil, pero valió la pena.

RS. Cuáles es su visión personal del aikido? Aikido: creo que sería redundante que hable de ello cuando ya lo han hecho tantos maestros y hay tanta literatura al respecto, lo que si debo agregar que para mí es una forma de vida y que tiene una rica filosofía que hace que las personas con el transcurrir de las prácticas cambien en su forma de ser, en su forma de actuar, en su forma de resolver las cosas, combatan contra su ego, no empleen la violencia, mejoren los modales, etc. etc. Creo que el aikido es tan o más importante en la vida diaria de una persona que en la práctica en el tatami.Me gustaría si me lo permite introducir un pensamiento del gran maestro Nabuyoshi Tamura Senseí que decía: “El principio del Aikido aplicado por medio de irimi-tenkan, ki, kokyu, de la dualidad aparente yo-adversario, del trabajo de uno contra varios, enseña el sentido de unidad, la armonía, el amor y la paz. Por medio del cuerpo, el Aikido expresa el orden del universo. Si el orden del universo se dirige correctamente al cuerpo, la técnica y la salud se desarrollan de manera natural. Si el orden del universo se aplica correctamente a la vida diaria, la educación, el trabajo y la personalidad se desarrollan de forma natural. Si el orden del universo se aplica correctamente a la sociedad, la armonía social y la relación entre uno mismo y los demás se desarrolla en forma natural. La humanidad, como una sola familia, actuará entonces para el restablecimiento de un mundo cuya armonía, hoy en día, esta trastornada” RS: Cuantos han llegado a la categoría de danes en su Dojo? Hasta la fecha llevo graduados 10 danes que para ésta ciudad es un número más que importante, sobre todo en Aikido y personas que han tenido alguna graduación llevo contabilizado más de cuatrocientas.

RS: Sigue dando clases actualmente y donde? Actualmente sigo dando clases en mi dojo, sito en la calle Pecoraro 587 de ésta ciudad, practicando un Aikido muy distinto a otros lugares que he tenido oportunidad de conocer, yo no digo que lo que hago está bien o mal, sino que es diferente, para mí el aikido debe de estar muy lejos de ser un comercio, en mi dojo no cobro inscripción ni cuota fija, sino que el alumno que puede colabora con un importe para solventar los gastos de impuestos, gas, luz, limpieza, etc. y el que no puede no paga, simplemente ayuda con alguna tarea en el dojo, pero todos paguen o no tienen la misma oportunidad de aprender y practicar Aikido. RS. Una consideración sobre O Sensei? Tenemos que entender que O’ Sensei no era un Dios, era una persona común, simple, amable, alegre, muy creyente en su religión, pero con una capacidad increíble para utilizar la energía, capaz de dominar a cualquier adversario y un dominio total en varias artes marciales, artes que dejó de lado para crear el Aikido. Sería bueno que todos tengan la oportunidad de leer sobre su vida y sobre lo que nos legó. RS. Cuéntenos sus proyectos para este 2011? Para éste 2011 los proyectos son los de siempre, seguir practicando y enseñando los que he recibido de los grandes maestros, tal vez pueda a mediados de año traer a Trelew algún maestro para dar seminario, en eso estamos.

Entrevista:

SENSEI 2° Dan. Comenzó a practicar con el SENSEI Emilio García, (fallecido), en la ciudad de Puerto Madryn en 1993 quien pertenecía a la Asociación Argentina de Aikido, del Maestro Kenzo Miyazawa. Martínez SENSEI introduce el Aikido en la ciudad de Comodoro Rivadavia (Chubut) y en la ciudad de Caleta Olivia (Santa Cruz).

RS. Cuándo descubre usted el Aikido? Uf!! Fue allá por el año 1973, que cuando salía del colegio, iba a la parada del colectivo de regreso a casa e inevitablemente pasaba por una librería en donde veía, todos los días, la enciclopedia de Aikido de koichi Tohei de editorial Glem. Que por muchos años añoré y luego de muchos años pude comprar. RS. Fue el Aikido su comienzo en las artes marciales? No, mis comienzos fueron con el judo allá por el 70´, luego con el Karate Goju ryu con Yoshio Yamashita Sensei, luego a fines del1974 comienzo a practicar Tang su do, práctica que realice hasta 1992, hoy estoy abocado al kwon Bop, -Kenpo coreano-. Luego practique otras artes marciales pero, no es el objeto de esta nota. Déjeme decirle que, a finales de 1980 en uno de mis viajes a Buenos Aires conocí al Sensei Néstor Ivanisevic, en el instituto Kumazawa de Cabildo, un alumno de Miyazawa Sensei y también de Kurata Sensei que por desgracia también falleció muy joven en 1987, con él practicaba cada vez que iba a Buenos Aires esos son mis primeros pasos formales en el Aikido y él me hablo de Emilio García Sensei que estaba radicado en Puerto Madryn, que fue en la primera ciudad patagónica que viví antes de radicarme en Caleta Olivia y en donde mi señora madre vivía. Allí comienza mi práctica verdaderamente formal y también, en forma esporádica me ha

brindado conocimientos el Maestro Tolosa Sensei, cosa que nunca olvido y agradezco.

RS. Usted introduce el Aikido en su ciudad? Si, en realidad cuando me afinque en Caleta Olivia lo único que se practicaba era taekwondo, yo comencé a enseñar Tang su do en 1980 y luego a fines de 1993 Aikido. A Comodoro Rivadavia viajaba martes y jueves enseñaba en el Club Náutico y en Caleta los demás días era duro, porque las distancias en la Patagonia son matadoras. RS. Cómo es como Sensei? Uy!! Que pregunta. Creo que eso lo deberían decir quienes son y fueron mis alumnos pero, bueno entiendo que un instructor debe capacitarse más allá de los estándares técnicos del arte y entregarse a sus alumnos sin guardarse nada pero, sobre todo debe enseñar el camino de la No-violencia y no como que, se está preparando para convertirse en arma mortal. Lo que intento es una común unión, una comunión, de amistad y respeto entre las personas y las artes marciales. No existen una mejor que otra como muchos profesan o se arrogan el eslogan porque, no es más que eso, de practicar un arte tradicional, eso es lo que enseñó Ueshiba el No-limite en las técnicas cada uno puede interpretar y practicar la técnica de acuerdo a su psicología partiendo de la técnica base cuando dijo: “hay que entrar por la técnica para salir de la técnica”. El Budo es integración no desintegración, usted va escuchar a diario, “yo practico el estilo original”, y así están, todos disgregados. RS. Unas palabras de O´ Sensei? Fíjese que O´ Sensei siempre se lo ve con una sonrisa, creo que se está riendo de todos nosotros por no haber descubierto el verdadero Budo antes. RS. Que espera que sus alumnos recuerden de usted? Rie… Le voy a contestar con una expresión de O´ Sensei, Cerca del final de

camino, pero cuando miro hacia atrás, no veo a nadie que me siga...". La lamentable falta de armonía entre los discípulos de Morihei y las constantes discusiones sobre quién es el que enseña el "auténtico" Aikido. Mire, jamás he cobrado por enseñar las distintas artes que practico y salvando las distancias, como O´ Sensei, al mirar atrás, no veo a nadie que haya entendido lo que les di y es más hoy cuando me acerco a otros dojos ni siquiera me presentan no digo como instructor, ni siquiera como alumno antiguo. RS. Cuáles son sus objetivos próximos? Por el momento seguir aprendiendo y colaborando en lo que pueda para que las artes marciales estén un poco más unidas, realizando encuentros, seminarios para que maestros y amigos vengan a la Patagonia a compartir con nosotros sus conocimientos y si puedo servir de nexo ahí me vera.

Entrevista:

Hoy SENSEI 3°Dan. El pertenece al centro difusión del Aikido, vive en Rio Grande, Tierra Del Fuego, una de las ciudades más austral del mundo. Martín es casado, de profesión abogado y como otros, un enamorado del Aikido y ha llevado este arte al Sur extremo de la Argentina para compartir la belleza de este arte.

RS. Cuándo nace ese enamoramiento por el Aikido? Nace en mi época de estudiante en el año 92´, recuerdo siempre, que iba a la facultad y pasaba mirando hacia un primer piso de la calle córdoba como practicaban RS. El comienzo en la enseñanza como fue? Bueno, cuando regreso a Rio Grande, luego de de haber concluido mis estudios, comienzo a enseñar a un grupo pequeño, no muchos conocían al Aikido y así empecé, en el año 1995. RS. Hemos podido ver que trabaja intensamente? Bueno, no tanto como uno quisiera, primero por la profesión y segundo porque cuesta mucho que la gente se haga la costumbre de ir al gimnasio, así lo tengan a la vuelta de casa. Además de dar clases regularmente, he dictado algunos cursos para la policía de la provincia.

RS. Lo hemos visto que se integra con otras artes marciales? Si, en donde nos den un espacio, estamos mostrando un poco lo que es el aikido haciendo una exhibición me refiero, una clínica para estilos de karate. Todo lo que pueda hacer para que conozcan el aikido… RS. Estuvo dictando un seminario en Calera Olivia recientemente? Si, así es, unas jornadas maravillosas, fueron dos días intensos de práctica con la gente de Caleta, Comodoro, donde hicimos hincapié en la técnica base para vencer esa fuerza innecesaria en la técnica. En verdad disfrute muchísimo con un grupo maravilloso de gente y trabajamos con mucha armonía más allá de las diferencias técnicas que el Aikido pueda tener.

En aquellos días, Kenji Tomiki, alumno del Dr. Jigoro Kano, gracias a sus alumnos que le habían platicado de las hazañas de Morihei, le pidieron que se probara con el Maestro, a lo que él dijo: “Yo también he oído de esas demostraciones fraudulentes de Ueshiba, pero miren él tiene más de cuarenta años. Si yo le pusiera una zarandeada me vería muy mal con mis compañeros de Judo y dirían que soy un abusivo”, pero sus alumnos le dijeron que nadie se atrevería a pensar algo así. Entonces Tomiki accedió y fue a retar a Morihei Ueshiba. Ya en combate, Tomiki trató de sujetar la solapa y la manga de su adversario (como buen judoka), pero antes de que lo lograra se encontraba proyectado a varios metros. Luego, el maestro Ueshiba lo clavó firmemente en el tatami sin que pudiera moverse este. Dejó que se levantara y le dió otra oportunidad, este volvió a intentar otra de sus llaves, pero nuevamente se encontró suspendido en el aire para finalmente aterrizar de espalda en el suelo, después de esto se disculpó y le pidió respetuosamente si lo aceptaba como alumno. Años después Tomiki creó su propia versión de Aikido .

"El aikido, no es para un paĂs o para alguien en particular, es mi herencia a la humanidad." Morihei Ueshiba