Caminemos Juntos Ed.16

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JUNTOS JUNTOS

Atrévete a seguir tu camino”

CONTENIDO

Editorial TESTIMONIO momento bíblico

galería

momento don bosco

¿SABÍAS

QUÉ?

formación

Callejiando la fe diver vocacional

EDITORIAL

¡Hola Jóvenes!

La llegada de este segundo semestre del 2024 nos “regala” el mes de agosto, mes de Don Bosco, con un marcado carácter vocacional.

Amigos, en el camino de la vida, nos encontramos a menudo estímulos variados, itinerarios diversos, incluso cruces de caminos en los que discernir qué nos pide el buen Dios, qué camino seguir.

Jesús, buen pastor, cuida de cada uno de nosotros con ternura y cariño, nos llama por nuestro nombre y acompaña el camino de nuestra vida, alumbra nuestras decisiones con delicadeza y nos regala gracia y la fortaleza para seguir y andar con esta aventura de nuestras vidas.

La vocación cristiana es precisamente eso: discernir, bucear, elegir, optar por un camino, cada uno el suyo… en la clave del seguimiento de Jesús y de la entrega gratuita, generosa a los demás.

Así lo vemos en la vida de Don Bosco: siguió el camino que Dios le ofrecía… y aunque no era un camino exento de dificultad (recordamos el sueño de las rosas con espinas), era el que le hacía feliz.

Hoy el mismo Don Bosco nos ayuda a seguir el camino de Jesús, el mismo que, en el Oratorio, era el de la santidad y la alegría, el del cumplimiento del deber, el de “hacer el bien sin esperar el aplauso de nadie, tan solo el reconocimiento del buen Dios” (Don Bosco).

No olviden de seguirnos en @soy_sdb y en Spotify “Historias de un salesiano feliz”.

P. Edward Páez Llinas, SDB. - Delegado para la Pastoral Vocacional

REFLEXIONEMOS

«Sintió com-pasión de ellos»

La espiritualidad Salesiana está marcada por una sensible preferencia por aquellos que más necesitan del amor de Dios, «en todo sentido»; es por eso que diariamente en el mundo salesiano se propone establecer la acogida como una oportunidad para fortalecer tantos vínculos rotos en las almas de los niños, niñas y jóvenes que el Señor nos coloca en el camino; es por eso, que día a día el Señor nos muestra todo lo que está bien, desde su presencia - encuentro, hasta el regalo de la libertad que nos es dado y que nos permite disfrutar del envío como bautizados, para hacer vida en la misión, de todo aquello que hemos aprendido de Él y es pieza clave para sembrar el bien en el corazón de la almas.

Recuerda, querido amigo, que es el encuentro con Jesús el alimento que comunica vida, la misma que por tantos factores sociales se ve atacada, perjudicada, golpeada; ese alimento verdadero, Don Bosco lo comprendió muy bien, él sabía que Jesús es el único que pone vida donde escasea o donde hasta ahora había desolación; por eso, sus acciones personales y pastorales, logran en plenitud restituir la vida, potenciándola, enriqueciéndola y haciéndola verdaderamente valiosa. Querido joven, no olvides que Jesús es el Pastor excelente (Jn 10), no con doctrinas, ni dominio, sino, como encontramos en Mc 6,35-44, dando alimento, dando pan y haciéndose pan para nosotros, para todos.

Esa es la com-pasión que lo representa, la que nos dejó Jesús como enseñanza, la que

Marcos 6, 30

nos lleva a imitarlo y a ser reflejo vivo de su Evangelio; porque hacer la cosas con pasión, es sin duda alguna joven, lo que busca el ADN Salesiano, hacer que en todos sus ambientes reine la alegría de servir en un entorno seguro, estable y cómodo, donde se haga el bien con todos los que el Señor pone en nuestro camino, incentivando ese deseo que proviene del interior, del corazón, para que todos logren seguir el camino que se trazó en el sueño de Don Bosco y que sigue siendo en la Iglesia la oportunidad de educar con el corazón, ésta es la invitación para ti joven Salesiano, de vivir el llamado, de seguir a Jesús con el estilo Salesiano.

Esa es nuestra tarea, hacer que todos se sientan amados, correspondidos y tranquilos de poder vivir lo que el Señor con sus enseñanzas nos motiva a realizar en las casas Salesianas, con pasión necesitamos de jóvenes valientes que se decidan a seguir construyendo la civilización del amor, con propuestas espirituales que sean un motor de vida y de motivación. Aquí está la tierra donde estamos llamados a trabajar, necesitamos de manos que estén dispuestas a salvar, servir, soñar con los destinatarios, porque con ellos y para ellos, es que se hizo realidad la obra de Dios desde las fuerzas del santo de los jóvenes. Que María Santísima Auxiliadora, acompañe tu camino de reflexión con los ojos puestos en el Señor, deja que Ella te lleve de su mano a la intimidad del amor con Dios, Dios te bendiga.

de un salesiano HISTORIA FELIZ

Nos disponíamos todos a escuchar las tradicionales Buenas Noches por parte del encargado, un espacio para dar una reflexión corta antes de dormir. Todos con una actitud de expectativa y curiosidad, esperábamos con ansias que empezara a contar sus inimaginables anécdotas y así proceder al descanso.

El encargado comenzó su historia con un sueño e inmediatamente captó mi atención, porque siempre me he interesado por el tema onírico.

Se encontraba en un patio de un colegio y a su alrededor había un gran número de muchachos que se entretenían. Muchos de ellos conversaban entre sí, pero otros parecían fijar su mirada a un dispositivo que no les permitía compartir con sus amigos. De este, salían varias notificaciones que los hacía desconectarse de su realidad. Al ver esto, el encargado se lanzó sobre ellos y trataba de quitárselos, pero una barrera invisible le impedía acercarse a ellos.

Comentó que durante el sueño empezó a caminar por todo el patio y pudo ver en perspectiva que en aquel lugar se encontraban

más jóvenes: Un grupo de ellos hacían movimientos particulares y robotizados y tenían unas gafas de gran tamaño que escondían los ojos de cada uno. Luego se topó con unos que parecían adormilados, en torno a una máquina que tenía el letrero de Chat GPT. Cuando llegó a esta parte, el encargado pausó su historia, y se echó a reír, porque no sabía lo que significaban estas palabras.

Siguiendo su recorrido, mencionó que unos jóvenes se trataban de acercar a él, pero éstos, a diferencia de los otros que parecían depender de un aparato para existir, tenían una cinta en su boca, que trataban de decirle algo, pero no podían.

Al final del recorrido apareció un hombre que lo llamó por su nombre, pero no pudo reconocer su rostro. Lo mandó a ponerse al frente de aquellos jóvenes y le dijo: “Empieza ahora a enseñarles la belleza del encuentro y la cercanía”.

Mientras que el encargado relataba su historia, no me quedaba más que imaginarme las escenas de lo que estaba

contando. Miré de reojo a mis demás compañeros, y todos estaban absortos.

Confundido y con temor, el encargado interpeló al hombre y le dijo entonces que era un ignorante en todas esas situaciones juveniles; sin embargó empezó a hablarles aquellos chicos. En este momento todos lo rodearon, dejando sus dispositivos.

El relator nunca supo quién era el que hombre que le hablaba. Comentó, además que apareció en su sueño una señora muy bien vestida que lo tomó de la mano y le dijo: “Conoce lo que ellos hacen para que tú les muestres lo que conoces”.

El encargado volvió entonces sus ojos alrededor de los jóvenes, y en vez de estar aglomerados y abstraídos, había jóvenes que dialogaban entre sí, reían y bailaban como si quisieran festejar con el hombre y la señora.

El encargado dijo que en ese momento se

puso a llorar porque no comprendía bien lo que sucedía. Pero Entonces ella, poniéndole la mano sobre la cabeza, le dijo: “A su tiempo lo comprenderás todo”.

Cuando terminó de contarlo, me impresionó que nos los hubiera confiado, pues los sueños son algo que no se comparten con todas las personas.

Después de las acostumbradas jaculatorias a la Virgen, advertí que el encargado se incorporaba para desplazarse a su habitación, pero lo interrumpí, preguntándole qué podíamos hacer. Me miró profundamente y luego de esto me desperté.

A mi lado se encontraban un lápiz y un papel; así que me puse a escribir. Fin...

Psicoalejo

Alejandro Correa Molina - Prenovicio COM “Ganador del Concurso Literario”

En estos tiempos, se necesitan jóvenes y adultos que se atrevan a seguir su camino, el suyo propio, que es también el de Jesús… jóvenes que se atrevan a buscar, que se aventuren con valor, que decidan ponerse en camino, que se comprometan en el camino del prójimo; que se dejen llamar por su nombre y acompañar y cuidar por el buen pastor. (Papa Francisco)

Descubre las historias vocacionales de los Salesianos en Spotify

¿sabías quÉ?

El pasado domingo 28 de julio, el P. José Ariel Guerrero Castro asumió el cargo de inspector de la Inspectoría San Luis Beltrán COM para el sexenio 2024-2030. Este nombramiento, realizado desde Roma por el Cardenal Ángel Fernández Artime, Rector Mayor de los Salesianos de Don Bosco, marca el inicio de una nueva etapa de liderazgo en la Inspectoría con sede en Medellín, que desempeña una destacada labor educativa y evangelizadora en el Occidente Colombiano.

GALERÍA

“Encuentro de Formandos 2024”

MOMENTO CON DON BOSCO

El tiempo de mi vocación

“Quien encuentra excusa una vez para demorar la vocación, casi seguro que nunca la concretará, porque siempre encontrará nuevas excusas”.

¡Queridos amigos! Un escritor llamado Søren Kierkegaard nos dice que el ser humano es un individuo único e irrepetible, con un destino propio que debe descubrir y realizar1. En este sentido, podemos afirmar, con Kierkegaard, que la persona es esencialmente un ser vacacionado y, por esta razón, su identidad auténtica depende de la capacidad para descubrir y realizar el proyecto vital más importante de todos: su propia vocación.

Tanto es así que, en la Palabra de Dios encontramos múltiples testimonios en los cuales Dios manifiesta su llamado a hombres y mujeres2, no obstante, sienten que lo que Dios les propone es mucho más grande que ellos y sus cualidades; seguramente, esto es algo que también has experimentado al plantearte ciertas posibilidades con respecto a tu futuro. Ante esto, sostiene Roberto Carelli que “eso es lo

1El concepto de la angustia. Søren Kierkegaard. Alianza Editorial, 2013.

2Si quieres profundizar un poco, puedes leer: Moisés, Ex 3,1. Jeremías, Jr 1,6. Pedro, Lc 5,8. Isaías, Is 6,5. Amós, Am 3,8. Pablo, Hch 9,1-9 y María, Lc 1, 29.

Pablo García

que sucede en todas las grandes vocaciones: mientras experimentan la seducción de Dios, se muestran temerosos y vacilantes ante algo que los supera”.

De hecho, estas sensaciones —no tan positivas— también unen el llamado de Juan Bosco con los relatados en la Biblia, porque la historia de su vocación incluye la consternación y las lágrimas3; es el mismo Juan, en la narración del Sueño de los 9 años, quien sostiene que “confundido y con temor, le dije entonces que yo era un pobre muchacho ignorante e incapaz de hablarles de religión a aquellos chicos”.

Ante esto surge la pregunta: ¿Cómo anteponer a la confusión y a la incertidumbre de mi vocación, las exigencias amorosas de Dios y la grandeza de sus dones? Pues bien, el mismo Don Bosco nos enseña que, ante la incapacidad humana de quien comprende que su llamado vocacional es imposible, el Señor le pide obediencia y le promete una sabiduría que le enseñará una Maestra que, desde entonces, nunca lo abandonará; incluso, aunque Juan no entienda en un primer momento el significado de su sueño, sólo logrará desentrañar su sentido último a medida que su experiencia vital le permita, progresivamente, interpretar su mensaje. Esto nos enseña que la relación entre tiempo y vocación es clave, sobre todo, en un

mundo en el que nos hemos acostumbrado a posponer tareas importantes para enfocarnos en actividades más placenteras y menos urgentes; alejándonos del momento presente y perdiendo la noción del tiempo real, generando en nosotros expectativas poco realistas con respecto al futuro.

De esta forma, queridos amigos, cuando le decimos sí a Dios en el momento presente, en el aquí y el ahora, en la condición precisa de nuestras emociones y temores, ese pequeño sí de aparente inmediatez, adquiere un eco de eternidad. Por eso, responder a Dios con todo y vacilaciones comporta una prioridad humana, ya que lo que somos —nuestra identidad— determina aquello en lo que gastaremos la vida —nuestra misión; y esto no puede ser pospuesto ni opacado por temores; mira cómo, en el caso de Don Bosco, la realización de su sueño marcó de forma indeleble su personalidad y su memoria, de tal manera que no sólo no podrá olvidarlo, sino que, por más que quiera prescindir de él, llegará a ser un día, según él mismo lo expresa explícitamente, “una norma de conducta en su vida”. Dice Calderón de la Barca4: “¿Qué es la vida? Un frenesí. ¿Qué es la vida? Una ilusión, una sombra, una ficción, y el mayor bien es pequeño; que toda la vida es sueño, y los sueños, sueños son”. Por eso, no sueñes tu vida, vive tu sueño.

3 Afirmación del P. Bozzolo en su estudio sobre el Sueño de los 9 años.

4 Del monólogo “Segismundo”.

De la crisis a sueños grandes

En muchas ocasiones la monotonía en el estudio, en el trabajo y en las actividades diarias —aunque buenas en sí mismas— pueden llevar a nublar el corazón, a tapar los oídos, a silenciar la voz de Dios y a paralizarnos vitalmente. Estas crisis se dan en diferentes momentos de la vida y son inevitables. Aun así, sabemos que tenemos a Dios que mueve el corazón humano a soñar en grande, a leer la propia historia como historia de la salvación y asumir toda crisis como oportunidad de una auténtica transformación interior. Desde esta perspectiva, el Papa Francisco nos recuerda que “Dios es experto en transformar las crisis en sueños, Dios abre las crisis a perspectivas nuevas. Quizá no como nosotros esperamos, sino como Él sabe”. Para esto, es necesario preguntarse en qué momento de la propia historia nos encontramos y descubrir si atravesamos alguna crisis personal que esté eclipsando algún sueño; pero ¿Tengo sueños, metas o aspiraciones a las que quiero llegar? ¿Qué obstaculiza cumplir dichos

l a f e C a llejiand o

sueños? He aquí uno de tantos caminos que quizás pueda ayudarte a afrontar la vida, a veces con crisis, como un soñador, desde la lógica de Jesús:

Enciende la chispa

Delante de Jesús en el Sagrario, en oración personal, mira tu historia, lo que has recorrido hasta hoy. Mira a Dios presente en los momentos de tu vida desde el vientre materno. Y, dando una pausa a lo que vives, deja que Dios toque tu corazón y como una chispa encienda en tu interior la posibilidad de conocer lo que quiere para ti. Se trata de frenar, hacer silencio y escuchar a Dios que te indica, en las cosas cotidianas y en el susurro de tu interior, lo que sueña para ti. Y si ya lo sabes, síguelo poniendo en sus manos con total confianza.

Coloca los pies en la tierra

En medio de la cotidianidad en la que puedes encontrar momentos de silencio y de escucha, sé realista. Al conocer tu historia, tus dones y debilidades, mira hacia adelante teniendo claro lo que Dios quiere para tu vida. Ponle nombre a tu sueño, escríbelo, óralo, compártelo con alguien de confianza. Procura que sea medible, esperanzador y realista.

Enamórate y construye

El “enamoramiento —dice Marian Rojas Estapé— es un sentimiento donde se une el deseo y la atracción con el anhelo de que eso que va apareciendo no disminuya ni se pierda nunca”. Enamórate de tu sueño. Sé un soñador enamorado del plan de Dios para ti y deja que su amor sea tu fuerza para caminar día a día; y, aunque vivas crisis, continúa, esto hace parte de la vida.

Si te caes, levántate y sigue

Si tu elección vocacional es correcta dice esta médico Psiquiatra, la voluntad será tu gran aliada el resto de tu vida pues el amor no es solo un sentimiento sino un acto de la voluntad”. Es decir, se trata de un llamado a cuidar los detalles, mirar la meta, caminar sin miedo; y, si caes, esfuérzate por levantarte y déjate ayudar de Dios que te acompaña; busca un buen acompañante; prepárate, estudia, ora y aprovecha las oportunidades de la vida.

En definitiva, se trata de caminar: un soñador camina, busca, escucha la voz de Dios y deja que Él transforme su crisis, su fragilidad y sus dones en sueños. Y ¿cómo empezar? con lo pequeño: “cuando pones el corazón en algo pequeño, pasa a convertirse en algo grande y maravilloso” (Marian Rojas Estapé).

Brian Alfonso Mejía Cantillo, SDB

divervocacional

Fabio Rojas, SDB

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