Origen de las inundaciones

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BUENOS AIRES | 21

| Sábado 6 de abril de 2013

el drama de las inundaciones | Obras que nO se hicierOn para evitar la catÁstrOfe

La Corte había avisado sobre los riesgos de una inundación El alto tribunal y la Facultad de Ingeniería de La Plata habían señalado los peligros por falta de infraestructura Viene de tapa

calle es algo visible, que se puede mostrar; las obras hidráulicas son invisibles”. Por su parte, el ingeniero Adolfo Ruiz, agente del Ministerio de In­ fraestructura y delegado gremial de ATE, dijo que lo ocurrido “es el resultado del aumento de la cons­ trucción sin un acompañamiento de la infraestructura básica míni­ ma que permita el escurrimiento del agua” y que es “un producto di­ recto de la modificación del COU”. Para Ruiz, “cerca de los arroyos el problema no tiene solución, pero un metro de agua en el Barrio Nor­ te, el más acomodado de la ciudad, es algo inaudito”. Más allá de las cuestiones de in­ fraestructura, muchos vecinos re­ cordaron en los últimos días las pa­ labras del intendente Bruera cuan­ do, tras la inundación de principios de 2008 que afectó a unos 90.000 platenses, se comprometió a rea­ lizar un plan de obras hidráulicas para aliviar la situación. En aquel momento, Bruera buscó responsabilizar a la empresa con­ cesionaria de la autopista La Plata­ Buenos Aires, Coviares, por haber realizado un conducto aliviador uniendo dos arroyos que pasan por la zona, sin ejecutar otras obras es­ tructurales que permitieran el flu­ jo del agua hacia el Río de la Plata. La compañía respondió por carta. Dijo que no era responsable por lo ocurrido y que no tenía pendiente ninguna obra hidráulica. Consultado por la nacion sobre las responsabilidades de lo ocurrido, Bruera destacó la falta de una nueva planificación de infraestructura en el distrito: “Estamos frente a la pre­ sencia de un hecho nuevo. La Plata dejo de ser lo que era”.ß

Secuencia temporal EL AGUA 0

1

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Concentración de la lluvia

Drenaje hacia las afueras

Sudestada

No sólo se ha edificado en las planicies de inundación de los arroyos, sino también en los cauces de las cañadas

La tormenta descargó principalmente en el núcleo urbano, con una ligera pendiente en forma de embudo que convirtió en canales a avenidas como la 44

El agua discurrió hacia los alrededores y afectó principalmente a casas (de tipo más bajo y humilde) y anegó los huertos del anillo de agricultores que rodea La Plata

El viento del Sudeste hizo que el bañado Maldonado, llanura de descarga habitual, no admitiese en este caso el agua proveniente de los arroyos y la ciudad

Bañado Ruta 11 Maldonado

Río de la Plata

392 mm

Corte transversal del partido de La Plata

Zona de descarga

A

LA NUBE TÓXICA

1

Otro de los problemas añadidos en la zona es la contaminación de las áreas urbanas y de cultivo provocada por la nube tóxica generada en el incendio

B

Agua en la planta

El combustible que flotaba en el agua llegó a la altura del horno a alta temperatura y provocó una explosión

Humo tóxico El viento, en dirección a la ciudad, descargó el hollín disuelto en el agua de lluvia

La construcción en las cuencas fluviales DESNIVEL Y CAUCES La superficie cuadriculada muestra el desnivel de las cuencas fluviales. En azul, el curso natural de los arroyos según un plano de 1983

Río de la Plata B

Aunque es ligera, la pendiente provocó que el agua buscase salida hacia las cotas más bajas

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En el mapa se observa la pendiente hacia la zona noroeste de la ciudad y los afluentes del arroyo del Gato, que cruzan el casco urbano

Parte de la refinería de YPF está construida sobre el bañado

Tolosa Ciudad de La Plata

Bañado Maldonado

Ao. Pérez + desnivel

San Carlos

Villa Elisa

Altos de San Lorenzo Los Hornos

- desnivel

11

Ao. Maldonado

A

Ao Garibaldi

1 km

IMAGEN SATELITAL ACTUAL

lG

at

o

La mayor parte del agua discurrió desde la calle 32 hasta la 501. En la imagen se puede observar cómo la diagonal 74 y otras avenidas coinciden con cauces naturales

de

el agua esté ennegrecida no signifi­ ca que traiga efectos nocivos para la salud”. Los vecinos también mostraron preocupación por algunas man­ chas como de aceite que quedaron en las paredes después de que ba­ jaron las aguas. Según explicaron en organismos oficiales, fuentes co­ mo vertidos cloacales, lubricentros o talleres mecánicos sumados a la gran precipitación pudieron haber provocado esas marcas. En ese sentido, la OPDS indicó que en la destilería de YPF también se tomaron muestras de suelo para evaluar la presencia de hidrocarbu­ ros, aunque los resultados todavía están siendo procesados. Del mis­ mo modo, se analizan aún las tomas que se realizaron en los canales que rodean la planta para descartar la presencia de algún contaminante en esa zona. La destilería permanecerá fuera de funcionamiento por lo menos 36 horas, a lo que hay que sumar un arranque por etapas.ß

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o.

A los anegamientos y destrozos que dejó el agua, se sumó entre los vecinos de La Plata y alrededores una preocupación: la tonalidad de las aguas acumuladas en piletas y recipientes. La razón: el incen­ dio que se produjo en la destilería de YPF, en Ensenada, que a causa del viento y la lluvia se esparció a más de 6 kilómetros del complejo industrial. Según el Organismo para el De­ sarrollo Sostenible (OPDS), el daño a la salud quedó descartado. “La muestra de los compuestos orgáni­ cos volátiles resultaron por debajo de los niveles que pueden ser noci­ vos. El viento y la lluvia hicieron que esas partículas cayeran, pero favo­ recieron a la limpieza de la atmósfe­ ra”, indicaron en el organismo. En YPF, en tanto, indicaron que

“el humo provocado por el incen­ dio en las instalaciones de la refi­ nería es un material particulado, compuesto mayoritariamente por partículas de carbono”. Según la compañía, “se presenta en forma de carbón molido muy fi­ no y se deposita en superficies ho­ rizontales. El hollín que produjo el incendio se elevó a gran altura y fue dispersado largamente por acción del viento, hasta perder concentra­ ción en el aire, por lo cual no repre­ sentó riesgo alguno para la salud. El hollín precipitado no tiene con­ secuencias directas sobre las perso­ nas, ya que no puede ser inhalado ni ingerido”. El incendio, que dejó a la destile­ ría fuera de servicio desde el martes pasado, se produjo después de que empezara a llover en uno de los hor­ nos de coque. Eduardo Ortiz, ingeniero quími­ co sanitario y ambiental, indicó que la lluvia “permitió un gran barrido del material que se había despedi­ do”. Y aclaró: “El sólo hecho de que

Explosión

A

Los vecinos notaron la presencia de este material en el agua acumulada

2

La acumulación de agua de lluvia y un corte de luz desencadenaron el descontrol en la planta de YPF

Ao. del Gato

Hollín, tras el incendio en YPF

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Construcción en los cauces

Diag. 74

También varios estudios del De­ partamento de Hidráulica de la Facultad de Ingeniería advirtieron sobre los problemas hídricos de la ciudad. Un informe realizado en 2007 por los profesionales Pablo Romanazzi y Arturo Urbiztondo mostraba, luego de un trabajo de cinco años, la necesidad de enca­ rar obras en la zona del arroyo El Gato, en Tolosa, que resultó parti­ cularmente castigada durante la última tormenta. “En 2008 habíamos presentado propuestas. Si hubiéramos tenido el canal de El Gato ensanchado, el agua se habría retirado más rápido”, afirmó ayer Romanazzi. El temporal del martes último fue un fenómeno inusual, que rompió el récord de precipitaciones en la región, según el Servicio Meteoro­ lógico Nacional (SMN). Pero, según el informe, la infraestructura en el lugar estudiado no está preparada siquiera para soportar los efectos de una tormenta de dimensiones más corrientes. “Sobre la base de los es­ tudios realizados se pudo constatar que el sistema actual de evacuación de excedentes pluviales en la cuen­ ca del arroyo El Gato se presenta insuficiente aun para tormentas frecuentes de baja magnitud”, ad­ vierte el texto. Para la cuenca del arroyo El Gato –un curso de agua que forma parte del río Santiago y atraviesa San Car­ los, Ringuelet y Tolosa, los barrios más afectados por la inundación–, la facultad planeó un ensanche des­ de el puente del Ferrocarril Roca hasta la avenida 19. Además, instó a que se impida que siga asentán­ dose gente sobre el arroyo. Ese estudio fue entregado al in­

tendente saliente en esos momen­ tos, Julio Alak –hoy ministro de Justicia de la Nación–, y luego a su sucesor, el actual jefe comunal Pablo Bruera; después, al gobier­ no de Daniel Scioli en la provincia, que inició el proceso para licitar las obras sugeridas. “Pero al final, tal vez por una cuestión de costos, nunca se licitaron”, dijo Romanazzi a la nacion. Fuentes del Ministerio de Infraes tructura bonaerense, a cargo de Alejandro Arlía, dijeron que “hay otros estudios hidráu­ licos sobre la misma zona y hay obras millonarias por licitar, pero se considera que en este caso la ca­ tástrofe no se debe a una cuestión hídrica, sino a un exceso pluvial; de lo contrario, el agua no hubiese escurrido tan rápidamente como lo hizo”, argumentaron. “Esto viene de hace décadas. En los años setenta, cuando yo presi­ día el Departamento de Hidráulica, elaboramos un proyecto de sanea­ miento integral para una parte de la ciudad. Tengo entendido que de todo lo que planteamos no se hizo nada”, dijo a este diario el ex decano de Ingeniería, Horacio Albina. Albina consideró que “no se pue­ de evitar que esto vuelva a pasar. Ha­ bría que construir obras hidráulicas que puedan soportar tormentas con una recurrencia excepcional. Se­ rían obras tan costosas que al final nunca se ejecutarían”. Y agregó: “Pe­ ro seguramente las consecuencias habrían sido menores si se hubiera ejecutado aquel proyecto nuestro. La municipalidad en su momento tuvo la intención de hacerlo, pero son proyectos muy caros que, ade­ más, tienen una gran desventaja política: no se ven. Asfaltar una

Explicaciones para una tragedia

501

32

74

1 km

Fuente: ‘Hidrogeología de La Plata’ (UBA) y Asociación Geológica Argentina / LA NACION


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