8 minute read
BHO y Budder
from 2013 01 ES
by SoftSecrets
EXTRACCIONES DE CALIDAD EN VALDEMORO (MADRID)
Miky Pérez
2013, el año de las extracciones
¿Qué hay entre Pinto y Valdemoro? Pues hay un camino que une los dos pueblos, en el cual se encuentra HousePlant Valdemoro. Así es, el mismo que los seminarios de cultivo, los del enriquecimiento con CO2 y la O.G. Kush. En Valdemoro se cuecen habas… y otros cannabinoides.
El equipo de Soft Secrets ha tenido la oportunidad de pasar una tarde con su gerente y apasionado de las extracciones puras de cannabinoides. Algunos lo llaman Budder King, en honor al pionero y especialista americano (según la leyenda, el único en conseguir una extracción del 99,9% de THC). Siempre habrá un mínimo de muestras de las mejores extracciones que se hacen en Madrid y si te quieren invitar a un pipazo, cuidado… sólo apto para profesionales y experimentados fumadores (mejor que seas tú mismo quien recoja la dosis con el daber).
Recién terminado un seminario de cultivo con CO2, como si de un chiste se tratara, se quedan el representante de Silika, el nuevo Budder King y un servidor. Cámara en mano y mecheros alejados comienzan las 4 horas más fructíferas.
Precaución
Antes de empezar a explicar cualquier proceso, debemos insistir en las medidas de seguridad. Es algo que se olvida, sobre todo con la experiencia de extracción tras extracción sin ningún tipo de sobresalto, por eso es nuestro deber recordarlo siempre. En el número pasado (nº6 de 2012) pudimos ver “Los secretos del Golden Oil” (página 21) en los que se insiste de nuevo en las medidas de seguridad.
Hay que ser consciente de que para realizar extracciones se están usando materiales altamente inflamables por lo que cualquier tipo de combustión puede llegar a ser muy peligroso. Las recomendaciones
siempre son de hacerlas en el exterior (es lo mejor), pero si no dispones de una terraza o balcón, puedes usar los mismos extractores de tu cultivo colocados frente donde se haga el proceso con gas. Recordemos que el gas butano se trata de un gas muy pesado que tienda a ubicarse a ras de suelo, por lo que la fricción de las zapatillas sobre el entarimado o la misma electricidad estática producida por el roce de un jersey, pueden provocar una chispa que nos llevará a no poder hacer extracciones nunca más (por favor, no queremos que nadie salga volando o se quede sin ninguna extremidad). En algunos sitios, sobre todo cuando se hacen extracciones con mucha gente presente, se extreman las medidas de seguridad: nada de cigarros o porros encendidos, todos sentaditos y los mecheros en una caja fuera de la habitación. Dos pipazos en el cuerpo, un mechero en el bolsillo más un despiste y adiós muy buenas a tus colegas.
La calidad de los materiales que usemos también va a determinar, no sólo la calidad de nuestra extracción, sino la seguridad de la misma. Usar materiales de calidad hará de nuestra extracción algo exquisito y más seguro. Hagamos un repaso de los materiales usados
Con este material, la calidad y seguridad de las extracciones está prácticamente asegurada
Antes de comenzar la extracción, preparemos todo y ajustemos la temperatura del agua Fijense cómo se reparten los goterones por la superficie
Material necesario
Lo primero y puede que más importante, el tubo de extracción. Es algo que muchos no miramos, usamos cualquier cosa o nos hacemos un tubo extractor con PVC reciclado. Por valer, vale, pero no es lo más adecuado para sibaritas. Nosotros usamos un tubo pequeño de borosilicato, que no deja ningún tipo de impurezas, ni residuos cuando pasa el gas por la materia vegetal, además de ser bastante resistente (es decir, más seguro). Exactamente el tubo usado es uno mediano-pequeño con capacidad para alrededor de 10 gramos de materia vegetal. Y a todo extractor le falta un filtro. Uno de los mejores filtros son las mallas metálicas termoselladas (para que el micraje no se abra con el uso) sujetas con bridas al tubo. Otra alternativa, de un solo uso, son los filtros de café, aunque nosotros usamos unos filtros de laboratorio, que tienen un micraje más ajustado y son más resistentes. Para que se quede bien sujeto el filtro al tubo de borosilicato y no se resbale en medio de la extracción, hay que usar algo que lo deja pegado. El esparadrapo blanco viene muy bien, ya que sujeta y no deja excesivo residuo de pegamento en el exterior del tubo.
Otro de los materiales muy útiles y fácilmente de encontrar en casi cualquier casa, es una plancha de cocina. He visto a personas usando la alternativa de su vitrocerámica, aunque muchas veces la temperatura es menos controlable y puede terminar quemando nuestra extracción. Si no se dispone de plancha, nos veremos obligados a estar calentando agua continuamente para renovarla, o a usar una resistencia dentro de la misma. Usemos el método que sea, lo mejor va a ser siempre tener controlada con exactitud la temperatura del agua para nuestro baño maría, con un termómetro digital (cuidado con los tradicionales y el mercurio, pues si llega romper y mancha la extracción, esta quedaría inservible y tóxica).
Ahora, necesitaremos dos bandejas, una que quepa dentro de la otra, para hacer el baño maría. La de arriba, lo mejor es que sea de pyrex, dado que es la opción más sencilla, higiénica y duradera. La bandeja de abajo, va a depender de que usemos para calentar el agua. Como nosotros teníamos la plancha de cocina, no podíamos poner ni una de pyrex (no calentaría), ni una de plástico (al igual que si se usa una resistencia dentro del agua del baño), por lo que la mejor opción es una fuente de teflón. La calidad de esta fuente, no va a determinar la calidad de la extracción, pero si la seguridad y la durabilidad de la misma.
Sólo nos faltaría el gas y algunos materiales para manipular la extracción, así como para purgarla. En cuanto al gas, cuanto mejor sea (es decir, más refinado), mejor será el resultado final. En este articulo hemos usado el mejor gas del mercado con diferencia, se trata de Vector, directamente importado desde California, la cuna de las extracciones de calidad, es un gas que se refina hasta cinco veces con el que puedes conseguir un producto final con mucha
mejor calidad y mucho menos dañino para la salud. Nada que ver con otros gases que dejan muchos más residuos.
Cuchillas para recoger la extracción y papel de horno para colocarla encima. En el papel de horno la extracción no se pega, tampoco se quema, ni se empapa, por lo que es una opción bastante mejor y más barata que los clásicos petris. Y para el purgado, lo más barato es rayar la superficie de la bandeja mientras emulsiona… aunque no se trata de la opción de más calidad. Lo mejor, sobre todo si te gustan las texturas budder, es una bomba de vacío con una desecadora de cocina. Una buena opción es comprar una entre varios colegas, pues si eres fan de las extracciones, te hará falta y no a la larga, precisamente. En este punto del proceso, también nos ayudaremos con un decapador térmico (es decir, una pistola de calor como la que se usa para secar la pintura de las paredes). Esto es lo que queda tras un rato, sin manipular ni tocar nada
Proceso de extracción
Después de este pequeño repaso a los materiales y medidas de seguridad, ya estamos listos para hacer nuestra extracción.
Con todo montado y preparado, encendemos la plancha, que calienta la bandeja de teflón con el agua y hacen el baño maría con la bandeja de pyrex, que es la superficie donde trabajaremos nuestra extracción. Con un termómetro podemos controlar la temperatura del agua, lo idóneo es entre 60 y 80 grados para “cocinar a fuego lento”. Si no tienes termómetro, puedes tocar con la mano la bandeja de pyrex y esta no debe llegar a quemarte. Si a ti te quema la mano, también lo hará con nuestro extracto. Cuando se recoge con las cuchillas, nos llevamos las burbujas de la bandeja. Hace falta un purgado
Enchufamos el tubo de gas en el extremo superior del tubo y apuntando sobre la bandeja de pyrex caliente, vamos apretando para que salga poco a poco. Pequeños escupitajos de gas amarillento empiezan a caer en la superficie, la cual vamos pintando sin amontonar los goterones en la misma esquina. A medio bote de gas, paramos unos minutos para terminar de gastarlo después. Controlando la temperatura del agua, dejamos que las burbujas de gas se vallan evaporando hasta que sólo quede una fina película ámbar sobre la bandeja. Dentro de la desecadora, la extracción se infla por el gas residual que contiene Ahora viene la parte del purgado. Muy importante, a mejor purgado, mejor calidad de extracción. Una bomba de vacío con la desecadora nos permitirán sacarle absolutamente todo el gas residual, además de conseguir formas y texturas que de otra manera sería imposible. Con las cuchillas, recogemos esa sustancia pegajosa y la untamos en el papel de horno.
La pieza de papel untado, la colocamos encima de la bandeja de pyrex caliente y con el decapador a potencia mínima (volvemos a usar el truco de no quemarte la mano para comprobar que no estropearemos la extracción) dejamos que se caliente y se vuelva práctica-
Resultado final, listo para disfrutar y compartir
mente líquido. Con la textura expandida, colocamos con cuidado el papel de horno en la desecadora, tapamos y encendemos. La extracción empieza a inflarse como un pan bimbo debido al gas que contiene. Este proceso, debemos repetirlo varias veces, cuantas más mejor, más limpio y purgado quedará el resultado final.
Para algunos, esta extracción contiene exceso de ceras vegetales, por lo que se puede hacer una purificación con etanol y carbón activo (véase Soft Secrets nº6, página 28). Igualmente recordamos que debemos mantener las medidas de seguridad, higiene y pulcritud. Así nos saldrán las mejores extracciones.