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Editorial
Faltando aún las cifras correspondientes al IV trimestre de 2020, el gráfico 1 da una adecuada visión del impacto de la pandemia Covid 19 en el sector nacional de Alojamientos (Hoteles) y Restau-
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G1. PBI TRIMESTRAL DEL SECTOR ALOJAMIENTOS Y RESTAURANTES 2018-2020 (MILLONES DE SOLES DE 2007)
rantes, el cual es un importante demandante de productos provistos por la producción agropecuaria doméstica.
Fuente: INEI.
De acuerdo al mencionado gráfico, el PBI acumulado del sector Alojamientos y Restaurantes al III trimestre de 2020 cayó en -54.4% respecto al mismo período de 2019.
Según el más reciente reporte del INEI (Informe Técnico – Producto Bruto Interno Trimestral, No. 4, noviembre 2020), dicha disminución se debe a la caída de los servicios de alojamiento (-64.9%) y del subsector restaurantes (-52.2%). La disminución de los servicios de alojamiento se explica por la menor actividad turística afectada por la cuarentena decretada por el gobierno; mientras que la caída de subsector restaurantes se debió a la menor actividad en establecimientos de pollerías, restaurantes, comida criolla, café-restaurantes y restaurantes turísticos. Estos negocios se vieron afectados por el cierre temporal debido a la situación de Emergencia Sanitaria, a pesar de las medidas gubernamentales sobre autorización para entrega a domicilio y atención en salón con aforo limitado.
DESCUBREN EL ACEITE DE OLIVA MÁS ANTIGUO DEL MUNDO EN ITALIA
La botella que contenía el líquido quedó enterrada durante la erupción del volcán Vesubio, en el año 79 d.C.
Fuente: Mercacei.com, 17/11/2020
Una investigación realizada por un equipo multidisciplinar coordinado por el profesor Ra aele Sacchi, del Departamento de Agricultura de la Universidad de Nápoles Federico II, ha permitido por primera vez veri car la autenticidad y caracterizar la identidad molecular de una muestra de aceite de oliva almacenada dentro de una botella de vidrio enterrada por la erupción del Vesubio en el 79 d.C. En su estudio, publicado en la revista NPJ Science of Food del grupo Nature, los investigadores indican que se trata probablemente de la botella de aceite de oliva de mayor capacidad (casi 0,7 litros) más antigua del mundo. En el marco de una colaboración entre el Departamento de Agricultura de la Universidad de Nápoles Federico II y el Museo Arqueológico Nacional de Nápoles (MANN) que tiene como objeto el estudio sistemático de los hallazgos orgánicos conservados en los depósitos de este museo, un grupo de investigadores del Departamento de Agricultura del centro docente italiano inició en 2018 una investigación sobre el contenido de una botella de vidrio guardada en dichos depósitos. Los depósitos de este museo conservan los materiales recuperados en las fases más antiguas de las excavaciones iniciadas por el rey Carlos de Borbón en la zona del Vesubio. Según ha informado la Universidad de Nápoles Federico II, la botella parece provenir de Herculano, pero, al igual que muchos otros hallazgos, la información relativa al momento de su recuperación se ha perdido con el tiempo. El punto de partida de este estudio se debe al paleontólogo y periodista italiano Alberto Ángela que, durante una inspección de los almacenes del MANN, advirtió de que la botella estaba aún medio llena. La hipótesis de Ángela era que podría ser vino, pero los análisis llevaron a un resultado diferente y en muchos sentidos “sorprendente e inesperado”, según el centro docente. En concreto, la investigación realizada por un equipo multidisciplinar coordinado por el profesor Ra aele Sacchi permitió por primera vez veri car la autenticidad y caracterizar la identidad molecular de una muestra de aceite de oliva almacenada dentro de la botella de vidrio enterrada por la erupción del Vesubio en el 79 d.C. El uso de técnicas moleculares y la datación por carbono 14 de uno de los "artículos comestibles" más representativos conservados en el MANN han permitido rastrear el contenido de la botella de vidrio con un aspecto muy similar a los representados en los
frescos encontrados en Pompeya. Se trata de una sustancia sólida enigmática con una consistencia cerosa, probablemente encontrada en Herculano durante las excavaciones arqueológicas iniciadas por el Príncipe de Elboeuf en 1738 y continuadas por el rey Carlos de Borbón.
La botella de oliva descubierta. / Cucinare.tv
Los estudios llevados a cabo por el equipo de investigadores de la Universidad de Nápoles Federico II, del Consejo Nacional de Investigación de Italia (CNR) y de la Universidad de Campania Luigi Vanvitelli han demostrado que la materia orgánica originalmente presente en la botella era aceite de oliva que, debido a las altas temperaturas a las que fue expuesta en el momento de la erupción del Vesubio y los profundos cambios ocurridos en casi dos milenios de almacenamiento en condiciones incontroladas, lleva las huellas de profundas modi caciones químicas típicas de las grasas alimentarias alteradas. Así, sobrevivieron muy pocas de las moléculas típicas del aceite de oliva: los triglicéridos, que representan el 98% del aceite, se han degradado en los ácidos grasos constituyentes; y los ácidos grasos insaturados se han oxidado completamente, generando hidroxiácidos que a lo largo de unos 2.000 años han reaccionado entre sí formando productos de condensación como los estólidos, nunca antes observados en procesos convencionales de alteración natural del aceite de oliva. A su vez, la sustancia grasa también ha producido una multitud de sustancias volátiles que son las que se pueden encontrar en un aceite fuertemente rancio, derivadas de la descomposición del ácido oleico y linoleico. Además, el per l de ácidos grasos saturados y el de toesteroles permitió establecer con certeza que la grasa era de origen vegetal y no contenía grasa de origen animal, muy utilizada por las poblaciones de la época y que era inequívocamente aceite de oliva. “Esta es la muestra más antigua de aceite de oliva que nos ha llegado en grandes cantidades, la botella de aceite más antigua del mundo. Esta identi cación nos da una prueba irrefutable de la importancia que tenía el aceite de oliva en la dieta diaria de las poblaciones de la Cuenca Mediterránea y en particular de los antiguos romanos de Campania Felix”, ha destacado el investigador Ra aele Sacchi.
QUÉ ES EL "CAFÉ SENSIBLE” Y POR QUÉ PROMETE CONVERTIRSE EN UNA TENDENCIA MUCHO MÁS JUSTA
Esta nueva propuesta pretende desbancar al café de especialidad reduciendo el impacto medioambiental y mejorando las condiciones de los productores.
Fuente: Iker Morán, en diario La Vanguardia, España , 12/01/2021 Foto: Alexander Raths
Cada día en el mundo se consumen más de 2.200 millones de tazas de café. Hablamos de una de las bebidas más consumidas del planeta -sólo por detrás del agua y el té- y un producto que mueve miles de millones y cotiza en el mercado de futuros. La calidad de ese café de la mañana en casa o en el bar o las condiciones de los miles de empleos que hay detrás son, para la mayoría, un detalle todavía menor de un gran negocio. El denominado café de especialidad se ha ocupado en los últimos años de mejorar la calidad de granos, tueste y elaboración del café. Ahora, una nueva propuesta bautizada como café sensible quiere incluir también en la ecuación el impacto medioambiental o las condiciones de los productoFrijol morama (Tylosema esculentum. / res.
Wikimedia Commons – La Vanguardia “La mayoría del café que consumimos fue producido, comercializado y tostado para sacar el máximo rendimiento, sin tener en cuenta aspectos de sostenibilidad o calidad de sabor”, explica Kim Ossenblok, una de las voces más reconocidas en España al hablar de café de especialidad e impulsor de este nuevo movimiento de café sensible.
Según datos de la International Co e Organization el 90% de la producción del café se produce en países en vías de desarrollo mientras que la inmensa mayoría del consumo se da en el denominado primer mundo, con Europa a la cabeza. El clásico desequilibrio entre el precio en origen y en tienda, que en este caso se ve multiplicado por la geopolítica de un mercado internacional y gigantesco.
Por eso hace años -señala Ossenblok- nacieron varias certi caciones que empezaban a tener en cuenta el impacto a nivel medioambiental, económico y social. Por su parte, el café de especialidad puso su foco en el sabor del café, eliminando los granos defectuosos y verde y obteniendo un café con excelente sabor. El café sensible pretende aunar estas dos ideas en un café bueno, pero también más justo.
¿CAFÉ DE CUARTA GENERACIÓN?
Así que ahora que más o menos hemos aprendido lo que es un barista, que es mejor moler el café justo antes de prepararlo y que en ciertos locales de café de especialidad si pides azúcar te miran mal, tal vez sea el momento de mirar más allá. Al origen del producto y las condiciones en que se produce.
Foto: Flickr
¿Se ha olvidado el café de especialidad del productor? En absoluto, de ende Ossenblok. “El café de especialidad ha nacido justamente para generar mas valor para el productor, pagando mas por un producto mejor seleccionado y de excelente calidad”, detalla.
De todos modos, no hay que perder de vista que el café de especialidad o de tercera generación -aquel que tiene más de 80 de 100 puntos según la escala de la organización SCA, Speciality Co ee Association- sigue siendo minoritario, incluso en países donde es relativamente veterano y conocido. En Estados Unidos, por ejemplo, representa el 35% del consumo total de café, según los datos más optimistas. Ocurre además que el productor muchas veces no es consciente de la calidad de su producto o del potencial que tiene haciendo pequeños ajustes en sus procesos que, eso sí, requieren de ciertas inversiones. Por otro lado, las certi caciones que pueden ser una forma de distinguirse también suponen un coste inasumible para muchos pequeños productores. Además, “la complejidad de los sistemas logísticos, exportación y comercialización, les complica venderlo directamente al tostador”, explica Kim Ossenblok. Así que retos no le faltan a esta nueva denominación de café sensible. Empezando por dar a conocer proyectos que ya están en marcha y que tienen esa visión más global del café desde el punto de vista de la calidad y la sostenibilidad. ¿Algo más concreto? Para 2024 convertir un millón de sacos de café (60 millones de kilos) en café sensible. v Así que posiblemente es muy pronto para hablar de un café de cuarta generación, pero los promotores de este movimiento sí hablan del proyecto como “el siguiente paso de la evolución en la industria del café”.
“NO HACE FALTA PAGAR MÁS”
La teoría suena muy bien. ¿Pero realmente la industria y sus grandes actores quieren cambiar? ¿Están dispuestos los diferentes intermediarios a ganar un poco menos y el consumidor a pagar un poco más para mejorar las cosas en origen? “No hace falta pagar más para conseguir ser más justo o sensible -de ende Ossenblok- porque a día de hoy hay varios intermediarios que no aportan valor real al café. En un mundo de trato mas directo y con la ayuda de las nuevas tecnologías, se distribuye mejor el valor generado desde el productor hasta el consumidor”.
Moledora de café. / Flickr
Pero un cambio de paradigma como el que se propone, no sólo necesita tiempo, sino la implicación de todos, desde grandes multinacionales a micro-tostadores, reconocen. “Para crear estas nuevas estructuras del mercado de café sensible, se necesitan empresarios sensibles con negocios exitosos”, apuntan.
Evidentemente ha habido cambios y gestos en los últimos años. “Muchas veces usándolos como simples acciones de marketing para posicionarse y vender más, y otras veces con sensibilidad real”, puntualiza Ossenblok. Más allá de los motivos, el tema está cada vez más presente y el interés de inversores en proyectos que abunden en esta línea de calidad y sostenibilidad también crece. A n de cuentas, para intentar cambiar un gigante de este magnitud y más allá de la fuerza que pueda tener el consumidor a la hora de comprar una taza de café hay que recurrir a las herramientas de ese mismo mercado.
"Sensible es un mundo de café en el que todos ganan”, resume el impulsor de este proyecto que a nales de este mes de enero celebrará su primer congreso on-line.
Laboratorio de Supermeat. / Getty Images
ABRE EL PRIMER RESTAURANTE DEL MUNDO CON CARNE DE LABORATORIO
Clientes pueden ver procesos en laboratorio y cocina.
Fuente: Agrodigital.com, 17/11/2020
En la ciudad israelita de Ness Ziona, muy cerca de Tel Aviv ha abierto “The Chicken”, el primer restaurante del mundo donde se puede degustar carne de pollo obtenida en el laboratorio. En el propio restaurante, el cliente puede ver, por un lado, a los chefs cómo cocinan y por otro, a los cientí cos cómo realizan el proceso productivo. Su plato estrella es una hamburguesa de pollo.
Este restaurante es propiedad de “Supemeat”, una empresa de tecnología que produce carne en el laboratorio a partir de células de pollo. Según la empresa, las células se cultivan en un pienso nutritivo, sin antibióticos y en un entorno completamente libre de contaminantes. Por estos motivos, dicen que el producto tiene una mayor vida útil, y además señalan, como otras ventajas, que el proceso requiere menos consumo de agua y de energía, no hay que sacri car animales ni usar grandes super cies de terreno.
CHINA, EE UU Y EUROPA COMPITEN POR LIDERAR LA NUEVA DIPLOMACIA VERDE
Pekín anunció un plan para la neutralidad de carbono antes de 2060. El Washington de Biden promete revivir su política medioambiental. El mundo entra en una década crucial para la lucha contra el cambio climático.
Fuente: Macarena Vidal Liy y Yolanda Monge, en edición digital Grupo La República (Uruguay), 11/01/2021 El presidente chino, Xi Jinping, visita un bosque en Mongolia en julio de 2019. / Zuma Press Inc.
Cuando llegó la campanada, apenas nadie, fuera del Gobierno chino, la esperaba. En septiembre, en su intervención ante la Asamblea General de la ONU, Xi Jinping, el presidente de la segunda economía del mundo, anunció que su país llegaría a la neutralidad de carbono para 2060 y alcanzaría su pico antes de 2030, en lugar del «hacia 2030» que repetía la política o cial hasta entonces. Con esa iniciativa, el principal emisor de gases de efecto invernadero del mundo (el año pasado produjo el 28% de las emisiones de dióxido de carbono, según el grupo internacional de cientí cos Global Carbon Project) inyectaba un nuevo dinamismo en la conversación global sobre el cambio climático, ralentizada desde la rma del Acuerdo de París -el histórico pacto al que llegaron 195 países en 2015- y la llegada a la Casa Blanca de Donald Trump, en 2017. Aunque el anuncio de China fue unilateral, no condicionado a lo que otros países pudieran hacer, en las semanas siguientes Corea del Sur y Japón siguieron sus pasos y anunciaron objetivos similares para 2050, una década antes. Xi hizo públicos más detalles de su revolución verde este diciembre, en la cumbre virtual para conmemorar los cinco años del Acuerdo de París: para 2030, prometió, China triplicará su capacidad de energía eólica y solar para situarla en más de mil millones de kilovatios, aumentará el porcentaje de combustibles no fósiles en su cesta energética (al 25%, un 5% más que el compromiso anterior), reducirá sus emisiones por unidad de PIB más de un 65% respecto al nivel de 2005 (el objetivo anterior era bajar entre un 60% y un 65%) y ampliará sus bosques. Para que quede clara la seriedad con la que China toma esta promesa, a nales de diciembre la Conferencia Central de Trabajo Económico, en la que se jan las prioridades económicas anuales, incluía el compromiso de desarrollar «una iniciativa nacional a gran escala a favor del medioambiente» entre sus ocho objetivos prioritarios.
El cambio climático afectará a las nuevas generaciones y la naturaleza. / Peter Newman-Flickr
«Por primera vez, China ha señalado que no solo está dispuesta a participar en la lucha internacional contra el cambio climático, sino que el liderazgo climático ha cruzado el Rubicón geopolítico a ojos de Pekín. En otras palabras, se ha convertido en una prioridad central para China, con independencia de los pasos dados por otros países, incluido Estados Unidos», ha escrito el ex primer ministro de Australia y actual presidente de la Asia Society, Kevin Rudd, en la edición china del Financial Times.
Los pasos de China tienen no solo motivaciones geopolíticas, sino también económicas y de política interna. «Vamos a promover un desarrollo social y económico más verde en todos los aspectos, al tiempo que buscamos un desarrollo de gran calidad», apuntó Xi en su discurso de diciembre. El 14º Plan Quinquenal, que regirá la economía china entre 2021 y 2025, y el documento de objetivos para 2035 que se presentarán en la sesión legislativa anual, en marzo, prevén un giro hacia la autosu ciencia, y que la innovación sea el reactor principal del nuevo modelo económico del gigante asiático. Xi, y el resto de los líderes chinos, consideran que las nuevas tecnologías de energías limpias -los vehículos eléctricos, la energía solar o la nueva generación de infraestructura eléctrica- serán motores clave de ese modelo. China ya es el principal productor de paneles solares del mundo y fabrica un tercio de las turbinas eólicas del planeta. Los pasos hacia la neutralidad de carbono contribuyen, además, a la autosu ciencia energética del país, al reducir el uso de combustibles fósiles en bene cio de las energías renovables.
A la espera de la publicación del Plan Quinquenal, persisten los interrogantes sobre cómo planea China exactamente cumplir con estos compromisos. Aunque adopte medidas tajantes para reducir las emisiones dentro de su territorio, es posible que continúe promoviendo el calentamiento global mediante sus inversiones en el exterior. La mayor parte de las plantas eléctricas alimentadas por carbón que se construyen en el mundo son nanciadas por bancos chinos y construidas con tecnología -y compañías-de ese país. Aunque Xi ha asegurado que la ambiciosa iniciativa conocida como Nueva Ruta de la Seda -una red de infraestructuras que conectará a China con el resto del mundo- será verde, hasta el momento no ha aportado estándares especí cos que lo garanticen.
Zona de África (Etosha) donde la época de lluvias se presenta semanas después de lo que era normal. / Pete Foley-Flickr
«Para hacer frente al desafío climático, nadie puede permanecer distante», subrayó Xi en su declaración en la cumbre virtual de diciembre para conmemorar los cinco años del Acuerdo de París. «El unilateralismo no nos llevará a ninguna parte. Solo mediante el multilateralismo, la unidad y la cooperación podemos lograr bene cios compartidos para todos los países». Un reproche a la Administración saliente de Donald Trump en EE UU y un envite a la de Joe Biden, que tomará posesión el próximo 20 de enero y que ya ha adelantado que dedicará especial atención a la política medioambiental. Un gesto a la Unión Europea, que había insistido a Xi para que mostrara un compromiso claro con la lucha climática en momentos en los que aumentaban las discrepancias entre los dos bloques. Y un mensaje en línea con la visión que el presidente chino tiene de su país para las próximas tres décadas, en las que aspira a convertirse en una superpotencia económica y política: Pekín está dispuesto a liderar al resto del mundo para resolver problemas globales. Y si Washington deja huecos en el escenario global, China los ocupará.
Mientras tanto, Estados Unidos entra en el nuevo año recolocándose a toda prisa en la carrera contra el cambio climático tras cuatro años de negacionismo instaurado en la Casa Blanca. No hay tiempo que perder. Trump se retiró del Acuerdo de París apenas dos años después de la muy celebrada rma del pacto, ignorando a los cientí cos que insistían en la urgencia -12 años de plazo- de tomar medidas drásticas contra la crisis climática. El republicano argumentó que las regulaciones para frenar las emisiones de gases de efecto invernadero dañaban la economía y que el auge del fracking, un proceso de extracción de gas natural al que se oponen muchos ambientalistas, resultaba en combustible más barato y más y mejores empleos.
Cuatro años después del aterrizaje de Trump en la Casa Blanca, la nueva Administración de Joe Biden que llegará al poder el próximo 20 de enero apuesta fuerte por una nueva diplomacia verde que devuelva a Washington a los acuerdos internacionales para intentar salvar el planeta -y la reputación internacional de EE UU-. Con el objetivo de alcanzar la neutralidad de carbono para el año 2050, el presidente electo ha hecho dos nombramientos claves: John Kerry como enviado especial de EE UU para el clima y Gina McCarthy como zar para imponer una nueva agenda interior al respecto. De esta manera, Biden deja claro que en su envite contra el cambio climático pretende abarcar dos frentes que están fuertemente interrelacionados, el exterior y el interno.
John Kerry en la Convención de Cambio Climático en Lima, Perú, 2014. / U.S. Department of State
Kerry y McCarthy, bostonianos, amigos, trabajaron juntos en la Administración de Obama. McCarthy dio forma a logros como la regulación de la contaminación de plantas de energía. Kerry se dedicó a promover las políticas interiores de EE UU en el exterior para que otros países las adoptaran. Ambos han visto cómo Trump desmantelaba su legado.El objetivo inmediato de Kerry, que ocupó el cargo de secretario de Estado con Barack Obama, es reactivar a Estados Unidos en la diplomacia climática internacional que Washington ha despreciado durante los últimos cuatro años. No será sencillo. «Biden no puede retomar las cosas donde Obama las dejó», apunta Paul Bodnar, director de la ONG Rocky Mountain Institute y exasesor de Obama. «La crisis climática se ha agudizado. La presencia internacional de EE UU ha disminuido. Y, pese a gestos de liderazgo por parte de China y la Unión Europea, la diplomacia climática está atascada en una forma antigua de hacer las cosas (las negociaciones para el Acuerdo de París duraron 25 años). Hay que pasar de la mentalidad de negociación a las acciones concretas», señala.
La IoT se abre paso en un sector que limita los contactos en remoto y densi ca su producción.
Fuente: Nutricontrol.com, 17/03/2020
La evolución tecnológica en la agricultura no se demuestra únicamente en la automatización de las labores agrícolas, sino que, además, continúa con la modernización de tareas y procesos con la utilización
¿PERO A QUÉ NOS REFERIMOS EXACTAMENTE CON LA TECNOLOGÍA IOT?
El internet de las cosas (IoT) se basa en la utilización e interconexión digital de objetos cotidianos con acceso a internet, para que se comuniquen entre sí y conseguir así ser más independientes e inteligentes. La implementación y desarrollo de tecnologías IoT en la agricultura se re ere tanto a los componentes de hardware y software asociados a esta tecnología, como a la implementación y desarrollo de sistemas que ayudan para la toma de decisiones en los cultivos. Actualmente se calcula que hay más de 8400 millones de dispositivos conectados en el mundo, esto hace que la cantidad de datos y la información que se puede obtener a través de ellos para poder aplicarla al sector agro sea muy importante. Con estas tecnologías el agricultor es capaz de: de otras soluciones tecnológicas basadas en lo que se viene denominando el Internet de las Cosas, (en inglés, Internet of Things, abreviado IoT).
• Analizar variables ambientales (suelo, clima…) • Monitorizar el suelo y cultivo, y recoger información ambiental. • Estudiar procesos de evolución de los cultivos. • Crear modelos especí cos de machine learning. • Implementar sistemas de ayuda a la decisión para la optimización de procesos. • Medir los diferentes sensores sociales para componentes que afectan la toma de decisiones: predecir la demanda, programar la recolección, adaptar la cosecha a los precios… La tecnología y en particular Internet de las Cosas (IoT) es una gran oportunidad de sacar un mayor rendimiento al cultivo y está contribuyendo a desarrollar una producción sostenible que garantice el futuro del sector agrícola.