Descripción Morfológica: Las avispas de esta familia son vistas frecuentemente en el campo, caminando o haciendo pequeños vuelos cortos y rápidos. Sus alas se pliegan sobre la espalda cuando no están volando. Los adultos se encuentran a veces libando néctar de flores. La mayoría de las especies fabrica túneles subterráneos en los cuales se deposita la araña para alimentación y sobre esta los huevos. Unas pocas especies son parásitas de los nidos de otras avispas. Los adultos tienen un veneno neurotóxico en su agujón. Desde mi niñez he visto esta escena espectacularmente violenta, donde un Pompilido ataca a una tarántula, y luego de paralizarla la arrastra a una cueva, donde depositará sus huevos. Ambas especies, la avispa y la araña pollito son muy comunes en Chile Central. Siempre desee saber si ocasionalmente la avispa Pepsis pierde la batalla. Es notable que la Pepsis sabe dónde picar a la araña, en el centro nervioso que la paraliza. Las larvas se desarrollan en el cuerpo paralizado de la araña. Esta avispa es una fuerte picadora y conocida por paralizar a las arañas o insectos, sobre los cuales deposita sus huevos, para que más tarde estos sirvan de alimento a sus larvas. Hacen creer que son presas, hacen salir a la araña, vibrando rápidamente a la entrada de la cueva. Cuando establecen contacto, se alejan unos centímetros del borde, obligando a la hambrienta araña a que exponga parte de su anatomía fuera de la cueva.
Las hembras oviponen en ninfas de segundo estadio. El chanchito blanco parasitado se transforma en una momia de forma aguzada con un leve color oscuro o verde petróleo. Se encuentra muy bien establecido a lo largo de todo el país. También, se le ha observado oviponiendo libremente sobre P. citri y P. maritimus, pero en ambos casos, C. gurneyi no ha terminado normalmente su desarrollo, lo que hace suponer que los huevos del parasitoide son destruidos por un proceso de fagocitosis. YUDELEVICH, (1950) señala que C. gurneyi ovipone sobre chanchitos blancos de los dos sexos y en todos los estadios evolutivos, evitando al parecer, los primeros estadios larvales. Normalmente, un solo huevo del parasitoide debería ser depositado en cada huésped, pero generalmente las hembras colocan dos o más, al parecer, C. gurneyi no distingue entre un huésped parasitado y otro que no lo está, por lo tanto, un mismo huésped tiene la posibilidad de ser atacado por más de una hembra, aún se produce comúnmente el caso de una misma hembra parasitando dos o más veces un mismo chanchito blanco, por consiguiente, el superparasitismo es muy frecuente. La duración del ciclo biológico, en condiciones de campo, no es uniforme ya que varía por una serie de circunstancias, entre las cuales se encuentra la época, temperatura, edad del huésped, abundancia de alimento y presencia de otros parasitoides. Según CAPDEVILLE (1945), el ciclo de vida de C. gurneyi, desde huevo a adulto, demora aproximadamente 27 días. YUDELEVICH, (1950) observa que bajo condiciones de laboratorio, la emergencia de los parasitoides adultos de C. gurneyi es entre los 25 y 31 días siguientes a la oviposición. La duración del ciclo biológico va en función de la temperatura a la cual se desarrolle el insecto. En experimentos realizados en laboratorio a una temperatura constante de 23 ºC, se obtiene una duración del ciclo biológico de 15 a 18 días.
Las hembras ponen muchos huevos. La larva en su 煤ltimo estadio teje un capullo de seda poco compacto, mediante una secci贸n del extremo de su abdomen lo que le permite observar el hiperparasitoide.
Predominantemente amarilla o ferruginosa. Alas claras. Zona lisa del área ocelocular reducida. Punteado sub ocelar denso. Engrosamiento interno de la rama de la segunda válvula con una fuerte proyección. Cabeza larga. Ocelos próximos a latangente supraocular, separados de los ojos por 2,3 veces su diámetro. Proporción entre la distancia interocular superior e inferior 1:1,04. Clípeo moderadamente convexo, más elevado en su parte media, margen inferior irregular, separado del ojo por una distancia mayor al largo de F1 y menor que el ancho basal de la mandíbula. Área supraclipeal algo inclinada. Labro con tubérculos delgados, transversales, más altos internamente y unidos por una costilla. Área malar más larga que el ancho basal de la mandíbula (1:0,77) y que el largo combinado. Relación entre escapo y los tres primeros flagelómeros 1:0,22:0,15:0,17. Sexto tergo metasomático con una quilla terminal. Variación. El patrón de flavinización es constante, variando entre amarillo pálido, amarillo blanquecino, amarillo dorado, anaranjado amarillento o ferruginoso intenso. No es raro encontrar ejemplares con invasión de pelos castaños en el propodeo
En una colmena bien organizada y en correcto funcionamiento, debe existir una sola reina. Es una hembra sexualmente funcional, la que será fecundada por los zánganos; posteriormente pondrá huevos y así asegurará el desarrollo de la familia y la perpetuación de la especie. Además libera una ferohormona muy importante para el mantenimiento del orden social de la colmena. Desde el punto de vista anatómico, la reina es muy distinta de los zánganos y las obreras. Su cuerpo es largo, con un abdomen mucho mayor que el de una abeja obrera. Sus mandíbulas están armadas con afilados dientes cortantes, mientras que sus descendientes tienen mandíbulas sin dientes. La reina tiene un aguijón curvado y liso que puede usar una y otra vez sin poner en peligro su vida. Por contraste, las abejas obreras van armadas de una aguijón recto y barbado, de modo que cuando pican, queda anclado con firmeza en el cuerpo de la víctima. Al intentar sacarlo, la abeja se desgarra parte del abdomen y muere poco después. La reina carece de las herramientas de trabajo que poseen las obreras, como cestas para el polen, glándulas que segregan cera y una vejiga bien desarrollada para la miel. Su alimento es casi exclusivamente una secreción, llamada jalea real, que producen las glándulas hiporfaríngeas de las abejas obreras. La vida de una reina es de uno a tres años.
Descripción Morfológica: Este abejorro es negro, con el tórax y el abdomen cruzados por sendas bandas de pelillos anaranjados, y el extremo del abdomen de color marrón anaranjado. El tórax es comparativamente corto y está cubierto de pelo. Una característica diferencial de este tipo de abejorro respecto a otras especies, es que posee una cabeza pequeña y estrecha, con una lengua relativamente corta, de manera que lo que suele hacer es taladrar el cáliz de las flores lateralmente, rompiéndolo, aunque también es posible verlo debatirse entre los órganos internos de la flor para hacerse paso hasta el deseado néctar. Las antenas tienen funciones táctiles y olfativas, y en el primer par de patas aparece una escotadura que le sirve al abejorro para limpiar las antenas de los granos de polen que se les adhieren. El par de patas posterior tiene cestillos para el polen. Las reinas pueden alcanzar los tres centímetros de tamaño, siendo los zánganos y las obreras poco más de la mitad de grandes. Los zánganos carecen de aguijón. Aparece en toda Europa, de forma regular y frecuente en muchas zonas.
Descripción Morfológica: La especie Acanthinodera presenta grandes diferencias de forma, tamaño y color, entre la hembra y el macho. Esto es conocido en biología como dimorfismo sexual. La hembra es prácticamente negra, mide como promedio unos 7 a 8 cm de largo, aunque hay ejemplares extraordinarios que llegan a medir más de 10 cm. El macho es de color pardo a café claro y mide unos 4 cm de largo. Las medidas son tomadas desde el extremo de la cabeza ( desde las tenazas ) hasta el extremo del caparazón ( llamado élitro ) y sin considerar la longitud de las antenas. La hembra recorre el bosque durante el día, y el macho inicia su recorrido al atardecer y hasta las primeras horas de la noche. Una hembra grande es capaz de depositar unos 50 a 70 huevos. Los huevos se asemejan en forma y color a un grano de arroz. Miden unos 6 milímetros de largo por 2 de ancho como promedio. Todo este proceso desde la eclosión hasta el nacimiento a la vida adulta se ha calculado en unos 4 a 5 años.
Descripción Morfológica: Cuerpo dividido en tres partes: cabeza, tórax, abdomen. Un par de alas completamente desarrolladas. Alas traseras reducidas a halteres (estructuras como botones pequeños) que se usan para mantener el equilibrio. Las partes bucales de los adultos son lamedoras, perforadoras o chupadoras. Todos los adultos parecen moscas, pero algunos pueden tener un color metálico (moscón azul). Puede ser difícil distinguir las antenas. Los machos y hembras adultas Es difícil saber la diferencia entre la hembra y el macho. Por lo general, las hembras son más grandes y pueden extender la punta del abdomen para formar un ovipositor, el cual se usa para poner huevos. A veces los machos tienen ojos resaltados que se juntan en la parte de arriba de la cabeza. Inmaduros (diferentes etapas) Las moscas son holometábolas, así que tienen cuatro etapas morfológicas distintas; huevo, larva (cresa), ninfa y adulto. Las larvas tienen un cuerpo blando, sin patas, con unos ganchitos oscuros en la parte bucal. Las ninfas son oscuras, y parecen barrilitos.