Micromemoria porteña una obra de Sebastián Santana
Micromemoria porteña una obra de Sebastián Santana
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Esta es la puesta en página que pude hacer de la Micromemoria porteña al día de hoy (8 de febrero de 2017). Son 447 escaneados del rollo de algo más de 129 metros de largo que fui armando entre ¿junio? de 2015 (se me escapa el mes de comienzo de ésto, el documento más claro que tengo es una foto de octubre de 2015, donde ya está registrado abril. Un rompecabezas, una laguna en la memoria de un proyecto sobre los recuerdos, algo que, mirado con cierto ángulo, no está exento de significado. Significado menor, pero no deja de ser un dato), decía, entre algún mes del primer semestre de 2015 en Valparaíso, Chile, y enero de 2017 en Montevideo, Uruguay. Es, por tanto, una pobre reproducción de un objeto que fue hecho para ser compartido en cuerpo presente, en persona, en un espacio concreto y un tiempo determinado. Lo digital es parte, pareciera que indivisible, de nuestras vidas, por supuesto, pero la vida es el aire, el suelo, las cosas que se prenden fuego, el agua que corre y la mugre que mancha, lo siempre imprevisible de salir a la calle, el semáforo que cambia justo cuando uno anda apurado, un papelucho descartable que trae un recuerdo como si fuera una piña, esas cosas. Queda, entonces, explicitado un anuncio respecto a lo que se verá en las páginas siguientes: se trata de una mala copia de una obra física, y por tanto proveerán una experiencia incompleta de lo que sería encontrarse con el rollo en persona. Si tal cosa le interesara, veremos la forma de concretarlo. Estoy trabajando para eso. Nos vemos, Sebastián Santana