Hoja parroquial Arquidiócesis de Guadalajara, A.R.
Nº 1 • La Epifanía del Señor Ciclo A • 2 de Enero de 2011
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Conducidos por una Estrella, llegaron a Jesús
P
ara los creyentes, la Epifanía es el otro nombre que recibe la Navidad, el nombre que le dieron las iglesias orientales desde el principio. Si la Navidad, fiesta de origen latino, alude al nacimiento (“La Palabra se hizo carne y habitó entre nosotros”), Epifanía significa manifestación y sugiere la idea de alumbramiento o de dar a luz: “y hemos visto su gloria, gloria propia del Hijo del Padre, lleno de gracia y de verdad”. Por consiguiente, la metáfora bíblica de esta fiesta es la luz: “la gloria del Señor que amanece sobre Jerusalén”, “la revelación del misterio escondido”, la estrella de los magos que vienen de oriente... Por el nacimiento de Jesús en Belén creemos que la Verdad de Dios, la Palabra, es un hecho, una vida, y no solo una doctrina.
Guiados por una Estrella Jesús nace en Belén para todos los hombres, para los de cerca y para los de lejos, para los judíos y para los gentiles, para los pastores y para los magos que vienen de oriente. No hay acepción de personas. Pero los primeros en recibirlo van a ser los pobres, los pastores, para que se vea que “los pobres son evangelizados”, como había dicho el profeta Isaías. Y, después, llegarán los magos guiados por aquel bello cuerpo celeste iluminado en la noche por el sol... Esa estrella que nos conduce a todos es
la que nos saca de casa, del acomodo en bienes y opiniones, de las certezas humanas y demasiado humanas, de la pretensión de poseer la verdad. Herodes y los Magos Estos personajes tipifican dos actitudes contrarias ante la Verdad: la de aquellos que la aman y la buscan sinceramente, poniendo en juego toda la vida; y la de aquellos que la temen y recurren a todas las astucias, hasta la injusticia, para liquidar la verdad del mundo. Nosotros, los cristianos, en ocasiones nos ufanamos de poseer la verdad, como si fuéramos los propietarios en exclusiva de la luz,
como si fuéramos ya la luz. Pero la luz, la Verdad, es Cristo. Nosotros somos sólo testigos de esa luz y Verdad. Todos los hombres de buena voluntad caminan a la luz de esta Verdad única, que es Cristo. Pero mientras muchos -cristianos anónimos- recorren su camino sin reparar en la luz que les alumbra, nosotros -los cristianoscaminamos y sabemos que esa luz es Cristo. Él es la Verdad abierta para todos los hombres. Nosotros lo sabemos y somos testigos, tenemos que ser testigos de que la Verdad, la única, está ya con nosotros. Llenos de regocijo, vamos a dar gracias a Dios. 1
ANTÍFONA DE ENTRADA
Cfr. Mal 3, 1; 1 Crón 19, 12
Miren que ya viene el Señor de los ejércitos; en su mano están el reino y la potestad y el imperio.
SALMO RESPONSORIAL del salmo 71
R. Que te adoren, Señor, todos los pueblos.
Comunica, Señor, al rey tu juicio y tu justicia, al que es hijo de reyes; así tu siervo saldrá en defensa de tus pobres y regirá a tu pueblo justamente. R. Que te adoren, Señor, todos los pueblos.
Florecerá en sus días la justicia y reinará la paz, era tras era. De mar a mar se extenderá su reino y de un extremo al otro de la tierra. R. Que te adoren, Señor, todos los pueblos.
Los reyes de occidente y de las islas le ofrecerán sus dones. Ante Él se postrarán todos los reyes y todas las naciones. R. Que te adoren, Señor, todos los pueblos.
Al débil librará del poderoso y ayudará al que se encuentra sin amparo; se apiadará del desvalido y pobre y salvará la vida al desdichado. R. Que te adoren, Señor, todos los pueblos.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Mt 2, 2 R. Aleluya, aleluya.
Hemos visto su estrella en el Oriente y hemos venido a adorar al Señor. R. Aleluya.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Mt 2, 2
Hemos visto su estrella en el Oriente y venimos con regalos a adorar al Señor. 2
Lectura del libro del profeta Isaías 60, 1-6 Levántate y resplandece, Jerusalén, porque ha llegado tu luz y la gloria del Señor alborea sobre ti. Mira: las tinieblas cubren la tierra y espesa niebla envuelve a los pueblos; pero sobre ti resplandece el Señor y en ti se manifiesta su gloria. Caminarán los pueblos a tu luz y los reyes, al resplandor de tu aurora. Levanta los ojos y mira alrededor: todos se reúnen y vienen a ti; tus hijos llegan de lejos, a tus hijas las traen en brazos. Entonces verás esto radiante de alegría; tu corazón se alegrará, y se ensanchará, cuando se vuelquen sobre ti los tesoros del mar y te traigan las riquezas de los pueblos. Te inundará una multitud de camellos y dromedarios, procedentes de Madián y de Efá. Vendrán todos los de Sabá trayendo incienso y oro y proclamando las alabanzas del Señor. Palabra de Dios.
Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los efesios 3, 2-3. 5-6 Hermanos: Han oído hablar de la distribución de la gracia de Dios, que se me ha confiado en favor de ustedes. Por revelación se me dio a conocer este misterio, que no había sido manifestado a los hombres en otros tiempos, pero que ha sido revelado ahora por el Espíritu a sus santos apóstoles y profetas: es decir, que por el Evangelio, también los paganos son coherederos de la misma herencia, miembros del mismo cuerpo y partícipes de la misma promesa en Jesucristo. Palabra de Dios.
EVANGELIO Lectura del santo Evangelio según san Mateo 2, 1-12 Jesús nació en Belén de Judá, en tiempos del rey Herodes. Unos magos de Oriente llegaron entonces a Jerusalén y preguntaron: "¿Dónde está el rey de los judíos que acaba de nacer? Porque vimos surgir su estrella y hemos venido a adorarlo". Al enterarse de esto, el rey Herodes se sobresaltó y toda Jerusalén con él. Convocó entonces a los sumos sacerdotes y a los escribas del pueblo y les preguntó dónde tenía que nacer el Mesías. Ellos le contestaron: "En Belén de Judá, porque así lo ha escrito el profeta: Y tú, Belén, tierra de Judá, no eres en manera alguna la menor entre las ciudades ilustres de Judá, pues de ti saldrá un jefe, que será el pastor de mi pueblo, Israel". Entonces Herodes llamó en secreto a los magos, para que le precisaran el tiempo en que se les había aparecido la estrella y los mandó a Belén, diciéndoles: "Vayan a averiguar cuidadosamente qué hay de ese niño, y cuando lo encuentren, avísenme para que yo también vaya a adorarlo". Después de oír al rey, los magos se pusieron en camino, y de pronto la estrella que habían visto surgir, comenzó a guiarlos, hasta que se detuvo encima de donde estaba el niño. Al ver de nuevo la estrella, se llenaron de inmensa alegría. Entraron en la casa y vieron al niño con María, su madre, y postrándose, lo adoraron. Después, abriendo sus cofres, le ofrecieron regalos: oro, incienso y mirra. Advertidos durante el sueño de que no volvieran a Herodes, regresaron a su tierra por otro camino. Palabra del Señor.
Creo en un solo Dios, Padre todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra, de todo lo visible y lo invisible. Creo en un solo Señor Jesucristo, Hijo único de Dios, nacido del Padre antes de todos los siglos: Dios de Dios, Luz de Luz, Dios verdadero de Dios verdadero, engendrado, no creado, de la misma naturaleza del Padre, por quien todo fue hecho; que por nosotros, los hombres, y por nuestra salvación bajó del cielo, y por obra del Espíritu Santo se encarnó de María, la Virgen, y se hizo hombre; y por nuestra causa fue crucificado en tiempos de Poncio Pilato; padeció y fue sepultado, y resucitó al tercer día, según las Escrituras, y subió al cielo, y está sentado a la derecha del Padre; y de nuevo vendrá con gloria para juzgar a vivos y muertos, y su Reino no tendrá fin. Creo en el Espíritu Santo, Señor y dador de vida, que procede del Padre y del Hijo, que con el Padre y el Hijo recibe una misma adoración y gloria, y que habló por los profetas. Creo en la Iglesia, que es una, santa, católica y apostólica. Confieso que hay un solo Bautismo para el perdón de los pecados. Espero la resurrección de los muertos y la vida del mundo futuro. Amén
La Epifanía
“E
pifanía” quiere decir manifestación. En este caso, manifestación de Dios. Ya en el Antiguo Testamento se habla de las manifestaciones de Dios, es decir, de las epifanías. Sin duda que la más grande fue a Moisés en el Monte Sinaí, entre rayos, truenos y relámpagos (Ex 19, 6ss). Pero no menos importante fue la acaecida a Elías, en el suave murmullo del viento (I Re 19, 12b-13). En el Nuevo Testamento o Alianza hay una teofanía singular en la Transfiguración de Jesús en el Monte (Mt 17, 1-5), cuando sus vestidos resplandecían de luz y su rostro brillaba como el sol. Sin duda significaba el nuevo y definitivo Moisés que, haciendo Alianza con Dios, nos conduce a la verdadera Tierra de la libertad, a la Resurrección y la Vida. Testigos de esta Transfiguración fueron Pedro, Santiago y Juan, por el Nuevo Testamento, y por el Antiguo Testamento Moisés (la Ley) y Elías (los Profetas), que se aparecieron con Jesús. ¿Qué es, entonces, esta Fiesta de la Epifanía que se celebra el 2 de enero, en pleno tiempo de Navidad y antes de que concluya? Popularmente quedó como la Fiesta de los Reyes Magos, como una manifestación de Jesús al pueblo que no lo conocía ni había escuchado hablar de Él. Pero vayamos por partes.
¿Qué se celebra en la Epifanía? Si bien ha tomado preponderancia popular lo que señalábamos antes, en
este día se celebran tres acontecimientos o manifestaciones de Jesús, que están hermosamente señaladas en las antífonas de los Cánticos Evangélicos de Laudes (oración de la mañana) y Vísperas (oración de la tarde).
1. La manifestación a sus discípulos El primer acontecimiento de ellos es la manifestación de Jesús al círculo íntimo de sus discípulos. Fue en las Bodas de Caná, cuando fue invitado con su Madre y discípulos, y ante el pedido de aquélla, que cambia el agua en el mejor vino (ya que estaba faltando), y la Escritura dice que entonces sus discípulos creyeron en Él (Jn 2, 11). De una simple relación de amistad o de maestro a discípulos, éstos pasan a ver en Jesús algo más, manifestado en el signo que acaba de realizar. Continúa en la página 4
Gloria a Dios en el Cielo, y en la Tierra paz a los hombres que ama el Señor. Por tu inmensa gloria te alabamos, te bendecimos, te adoramos, te glorificamos; te damos gracias, Señor Dios, Rey celestial,
Dios Padre todopoderoso. Señor Hijo único Jesucristo, Señor Dios, Cordero de Dios, Hijo del Padre; Tú que quitas el pecado del mundo, ten piedad de nosotros; Tú que quitas el pecado del mundo, atiende nuestra súplica;
Tú que estás sentado a la derecha del Padre, ten piedad de nosotros, porque sólo Tú eres santo, sólo Tú, Señor, sólo Tú, Altísimo Jesucristo, con el Espíritu Santo en la gloria de Dios Padre. Amén 3
Viene de la página 3
2. La manifestación al Pueblo de Israel El segundo acontecimiento que se celebra en este día es la manifestación de Jesús al Pueblo de Israel en su Bautismo. Si vamos al texto de Mateo 3, 16-17, contemplamos que cuando Jesús es bautizado por Juan, varios signos lo acompañan. Desde el cielo desciende una paloma, signo del Pueblo de Israel, corporeización del Espíritu Santo (Mt. 3, 16c) que lo unge para la misión de la vida pública. También una paloma soltó Noé en el final del Diluvio para ver si las aguas habían bajado (Génesis 8, 8-12), hasta que se posó en Tierra Firme para no regresar... Ahora regresa sobre la Nueva Tierra del Cuerpo limpio del Señor, libre de las aguas borrascosas de la inestabilidad. Los cielos cerrados a nuestros primeros padres (Génesis 4, 23-24) se abren (Mt 3, 16b), y la voz del Padre (Mt 3, 17) da testimonio de que Jesús de Nazareth es su Hijo muy amado, igual a Él, a Quien debemos escuchar para ser hijos en el Hijo, para que siguiendo el proceso inverso, por nuestro Bautismo (sumergirdos en Cristo) recibamos el Espíritu Santo que nos hace hijos amados del Padre Celestial. Es de notar, a manera de ilustración, cómo el Padre profesa su amor a su Hijo, signo de que toda paternidad debe manifestar su amor -tanto en obras como en palabras- explícitamente a los hijos que engendra para la vida.
3. La manifestación a todos los hombres
Los Magos venidos de oriente significan la más amplia manifestación de Jesús. No ya a sus discípulos, ni al Pueblo de Israel, sino a los que no tenían la fe del Pueblo elegido ni esperaban al Mesías Prometido. Está hermosamente detallado en el Evangelio de Mateo (2, 1-12), recibido posiblemente por el evangelista de la familia de José, ya que es en Mateo donde las comunicaciones del Ángel del Señor se hacen a José, mientras que en Lucas se hacen a la Virgen (posiblemente entrevistada por el médico griego). Es Jesús quien está inmerso en la eternidad de Dios, y es Él quien se comunica salvadoramente en el tiempo y el espacio de este mundo, esperando que aceptemos su manifestación gloriosa.
14, 15 y 16 de enero de 2011
7, 8 y 9 de enero de 2011
JUBILEO CIRCULAR 3, 4 y 5: Lunes, Martes y Miércoles
EL ESPÍRITU SANTO, Hogares Nuevo México NTRA. SRA. DE LA ENCARNACIÓN SANTO NIÑO DE ATOCHA, Balcones de la Cantera SAN PABLO, Copalita LA DIVINA PROVIDENCIA, Lomas del Cuatro SAN SEBASTIÁN EL GRANDE SANTA ROSA DE LIMA, La Estanzuela EL CARMEN, Ocotlán
6, 7 y 8: Jueves, Viernes y Sábado
Pedidos a domicilio Al teléfono: 3613 3043
Pabellón La Gran Plaza Plaza Patria Arboledas Iteso Galerías
JESÚS SACERDOTE SAN JOSÉ, ESPOSO FIEL NUEVA SANTA MARÍA DIVINO MAESTRO, Col. Villa Guadalupe SAN JUAN DIEGO, Bosques de la Victoria SAN FELIPE APÓSTOL, Cuquío SANTUARIO DE GUADALUPE, Ocotlán SAGRADO CORAZÓN, Ocotlán SAN JUANITO DE ESCOBEDO, Ahualulco SAN MIGUEL ARCÁNGEL, Tonalá SANTA CECILIA, Ocotlán
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