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OMUNIÓ Órgano Informativo de la Diócesis de Querétaro La Comunicación, hace la Comunión
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6 de marzo de 2022
No. 1254 /Año 25
Ejercicios Cuaresmales
A
sí como el cuerpo requiere atención y cuidado, alimentación y ejercicio, pasa lo mismo con el espíritu, necesita ser cuidadosamente atendido para que esté muy bien alimentado… aunque pareciera que el mundo y su actual generación se ha vuelto “irreligioso”, palabra de san Pablo que expresa muy bien el padecimiento de la ausencia de Dios en el hombre que, curiosamente, busca afanosamente su parte más trascendental a veces en la magia, en el esoterismo o en mundos que le dejan cada vez más insatisfecho. La cuaresma es un tiempo oportuno para vivir y hacer “ejercicios espirituales” que atiendan al paso de Dios por la vida de cada hombre, un tiempo intenso de oración que recuerda a Jesús en el desierto donde se encontraba a solas con su Padre. Los ejercicios cuaresmales se convierten así en un
tiempo fuerte en la vocación de ser santos desde una experiencia de Dios que es vivida e interiorizada, como tiempo de gracia para mirar con el corazón… para contemplar al Señor y ser contemplados por Él. Aunque es verdad que el desierto también es el lugar donde cada uno encuentra sus propias tentaciones, Jesús lo hizo, y buscar vivir esta práctica cuaresmal es exponerse no a encontrar nuevas tentaciones, sino a descubrir las que ya se llevan cargando, a veces de toda la vida, pero que no se ha tenido el valor de enfrentarlas porque exigen un combate espiritual al que, muchas veces, no se está dispuesto. El demonio siempre tratará de apartar al hombre del camino que le conduzca a Dios. Ejercicios espirituales cuaresmales… tiempo del Señor que pasa por nuestra vida para
vivir con radicalidad la vocación específica, revisar actitudes y convicciones, profundizar en el seguimiento de Cristo a fin de vivir la identidad cristiana. Pregúntese y pregunte ¿en mi parroquia habrá ejercicios espirituales esta cuaresma? ¿En dónde puedo tomar unos ejercicios espirituales? Porque es Dios el que llama. No es para mirarse ensimismados y con autosuficiencia, lo central será Jesús que llama a ser cristianos a pleno corazón y a tiempo completo. Y así vamos descubriendo que lo esencial de los ejercicios es una elección, elijo hacer y ser una realidad viviente del cristianismo. Y entonces la santidad no es meta sino consecuencia de mi relación con Cristo.