El Shar Pei 1 y 2

Todo lo que Usted quiere saber

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El Origen del Perro Doméstico El Origen del Shar Pei

Capítulo 1

Origen del perro domestico Antes del año 2000 se encontraba vigente la teoría que postulaba que los perros descendían de los cánidos salvajes como los coyotes, chacales, hienas, lobos y zorros.

El etólogo Konrad Lorenz decía que la mayoría de los perros descendían del chacal y otros pocos del lobo, Lorenz en sus escritos afirmaba que los chacales se acercaban a las hogueras del hombre en búsqueda de calor y restos de alimentos a cambio actuaban como centinelas con sus aullidos y así a lo largo de los años se llevó a cabo la domesticación.

Estas teorías quedaron de lado cuando en el año 1997 se presentó en la revista “Science” del mes de Junio, un trabajo del Dr. Carles Vilá junto a Peter Savolainen, Jesús Maldonado y otros donde se postulaba que el lobo era el ancestro del perro doméstico y que la antigüedad del perro era mayor a la que mostraban los

registros fósiles que se habían estudiado hasta el momento.

El trabajo del Dr. Savolainen y su equipo consistió en tomar muestras de ADN de 162 lobos de 27 localidades a lo largo del mundo y de 140 perros domésticos de 67 razas más otros perros mestizos.

LOBO Analizando el ADN de todos esos ejemplares se concluyó que durante el Pleistoceno (tardío) los humanos y los lobos coexistían, comenzando la domesticación y la aparición de los primeros perros, los cuales siguieron intercambiando su material genético con los lobos, dado que pueden dar productos fértiles de su cruzamiento, lo que dio origen a la gran diversidad de fenotipos que se da en el perro.

CHACAL Así mismo, como todas las especies salvajes del género Canis pueden criar entre ellos, todos podían ser potencialmente el ancestro del perro doméstico; debido a esta razón también se analizaron 5 coyotes y 12 chacales.

ZORRO

Luego de analizar el ADN de todos los ejemplares se concluyó que el ADN de los lobos claramente era el más cercano al ADN del perro doméstico (canis familiaris), el ADN del coyote y del chacal se encontraba mucho más alejado del ADN del perro doméstico, por lo tanto se demostró que el origen del perro doméstico estaba en el lobo.

El estudio de Vilá, Savolainen y demás investigadores descubrió que los perros domésticos se encuentran divididos en 4 clados, clanes o ramas, estas ramas se componen de individuos que descienden todos del mismo antepasado común.

El Clade 1 incluye 19 de los 26 haplogrupos que se encontraron al estudiar el ADN, entendiéndose por haplogrupo un grupo grande de haplotipos, los que son series de alelos en lugares específicos en un cromosoma, encontrados en el ADN de los sujetos de la muestra, que incluía una gran variedad de razas incluyendo algunas primitivas.

El Clade 2 incluye un haplotipo de dos razas de perros provenientes de Escandinavia, el Elkhound y el Jämthund, los cuales están muy relacionados con dos haplotipos de lobos encontrados en Italia, Francia, Rumania y Grecia.

El Clade 3 incluye otros 3 haplotipos diferentes.

El Clade 4 incluye 3 haplotipos que son idénticos o muy similares a un haplotipo de lobos encontrados en Rumania y Rusia.

Con este estudio se pudo establecer también que la aparición del perro doméstico es mucho más lejana en el tiempo que lo que muestran los registros arqueológicos.

Por medio de los estudios de los Drs. Vilá y Savolainen quedó establecido que el antecesor del perro doméstico es el lobo.

Otro trabajo del Dr. Savolainen junto a científicos que fue publicado en la revista Science del mes de Noviembre del año 2002, determinó basándose en el estudio del ADN mitocondrial de más de 1000 ejemplares de perro doméstico que todos los perros descienden de lo que se dio en llamar “Las 5 Evas lobas” las que pertenecían a la región geográfica de Asia del Este.

Todos los perros domésticos portan en su ADN mitocondrial material rastreable que indica su origen común. Esto es posible debido a que el ADN mitocondrial se pasa vía materna sin ser alterado, por lo tanto contiene material ancestral.

Paleontología Seguidamente se expondrá cómo fue la evolución desde el punto de vista paleontológico para llegar al lobo partiendo de sus ancestros.

En el Paleoceno (60-65 millones de años atrás) existió una criatura llamada Miacis.

El Miacis pertenecía a la super familia Miacoidea la que representa a un grupo de carnívoros.

Esta criatura tenía cinco garras, su largo era de alrededor de 30 cm y su hábitat comprendía Norte América y Europa.

Tenía cráneo alargado, cuerpo también alargado, cola larga y patas cortas, contaba con 44 dientes (el perro doméstico tiene 42 dientes).

Las extremidades posteriores eran más largas que las anteriores, su pelvis era muy parecida en forma y estructura a la pelvis del perro doméstico.

Sus garras eran retráctiles, como la de los felinos, su visión era binocular y sus extremidades estaban preparadas para trepar.

Su cerebro comparado con su tamaño tenía una buena relación por lo que se dedujo que era inteligente.

Tenía hábitos arbóreos, era depredador de pequeños mamíferos, reptiles y pájaros, se cree que también se alimentaba de huevos y frutos.

MIACIS Del Miacis evolucionó otro ancestro llamado Cynodictis. El Cynodictis era miembro de la familia Amphicyomidae, suborden caniformia.

Vivió en Eurasia y Asia desde el Eoceno tardío hasta el Oligoceno temprano (37,2-28,4 millones de años atrás).

Tenía garras retráctiles y las usaba para excavar las riberas de los ríos para construir madrigueras, su piel

era moteada lo que lo ayudaba para mimetizarse con la vegetación del lugar.

CYNODICTIS En las madrigueras la hembra daba a luz las camadas que contaban con alrededor de 5 individuos cada una, los cachorros dependían de su madre por algunos meses.

Muchas veces estas madrigueras se inundaban por las crecientes de los ríos y las crías morían, debido a esto han quedado registros fósiles de los nidos completos con ejemplares en diversos estadios de desarrollo.

Especímenes fósiles se han encontrado en Gran Bretaña, Alemania, Francia y China.

Las garras que poseía lo ayudaban para trepar árboles en busca de presas, podía correr muy rápido y excavar rápidamente. Como era veloz cazaba pequeños roedores.

Su hábitat eran las planicies semiáridas cruzadas por ríos que dependiendo de las épocas se volvían muy caudalosos y desbordaban fácilmente.

El Cynodictis dio origen a las civetas del viejo mundo, al Dicnitis que durante el Pleistoceno originó a los felinos y al Cynodesmus ancestro del lobo.

El Cynodesmus aparece durante el Oligoceno tardío (33.3 – 26.3 millones de años atrás).

Es el primer antecesor del lobo y del perro doméstico que tiene un aspecto parecido al del perro.

CYNODESMUS Medía alrededor de un metro de largo, su cráneo era corto y su cola pesada. Sus extremidades no eran muy buenas para correr comparadas con otros cánidos.

Tenía 5 dedos en cada pata con garras parcialmente retráctiles. El primer dedo quedó como rudimentario.

El Cynodesmus es el antecesor del Tomarctus que vivió entre 23-16 millones de años atrás durante el Mioceno.

Del Tomarctus descienden los lobos, perros, zorros y los vulpes zerda.

Su cara era corta, las mandíbulas pesadas del tamaño de un perro mediano, era buen corredor, su cuerpo tenía forma de perro con miembros largos.

El primer dedo ya era rudimentario y estaba acortado.

Del Tomarctus nace la familia Canidae y el género Canis del cual surgen los lobos, chacales, zorros, fenecos, perros salvajes y el perro de Peat.

Luego el lobo dio origen al Canis familiaris o perro doméstico.

Cr谩neo f贸sil

Clasificación Doméstico

Taxonómica

del

Perro

CLASIFICACIÓN CIENTÍFICA Dominio

Eukarya

Reino

Animalia

Subreino

Eumatazoa

Filum

Chordata

Subfilium

Vertebrata

Clase

Mamalia

Subclase

Theria

Orden

Carnívora

Suborden

Caniformia

Familia

Canidae

Género

Canis

Especie

Canis lupus

Subespecie

Canis lupus familiaris

Sinónimos: Canis familiaris, Canis familiaris domesticus

Registros Fósiles El origen del perro es el lobo lo que se ha establecido ya hace varios años.

La evolución de cualquier especie se estudia por medio de los registros fósiles de sus ancestros y los ejemplares vivos modernos. El problema con los registros fósiles es que no siempre se puede completar con fósiles la línea evolutiva, esto sucede por muchas razones, la más común es no haber encontrado un punto de excavación que los contenga o bien puede suceder que hay piezas fósiles en diversas colecciones de museos o fundaciones y hayan sido mal catalogados al momento de su estudio ya que los métodos de datación, estudio y catalogación avanzan con los años.

Esto ha pasado con los fósiles de los ancestros del perro, no se han encontrado muchos y algunos han sido mal catalogados y datados.

Los trabajos científicos de Beneck, Morey, Olsen y otros han establecido morfológicamente el origen del perro, los escritos de los Drs. Vilá y Savolainen lo han establecido genéticamente.

Anteriormente los registros fósiles nos contaban que la antigüedad del perro rondaba los 14.000 – 10.000 años

para el Oeste de Europa y de 14.000 – 12.000 años para Europa del Este donde se incluyen también algunos sitios de Eurasia, pero se cree que en la mayoría de Eurasia la antigüedad debe ser mayor.

Si nos guiamos por los estudios realizados por el Dr. Savolainen veremos que las poblaciones recientes de perros tienen un origen común en un solo pool genético originario de Asia del Este, descendiendo todos de cinco linages de ADN mt (mitocondrial), lo que serían las 5 lobas primordiales o Evas.

El ADN mt cuenta que el origen del perro debía ser mucho más antiguo que lo que nos indica los registros fósiles encontrados hasta ese momento y por ende la domesticación debía haber comenzado mucho antes, hace aproximadamente unos 40.000 años.

A los investigadores les llamó mucho la atención la falta de registros fósiles para ese nicho no cubierto, por lo tanto decidieron realizar un análisis osteométrico de cráneos de cánidos que podían haber estado mal catalogados y que provenían de Bélgica, Ucrania y Rusia.

Hasta ese momento el esqueleto más antiguo correspondiente a un perro doméstico era el que se encontró en un enterramiento en Rusia Central que se dató en unos 17.000 años.

Los investigadores realizaron estudios del ADN de los restos que estaban estudiando, sobre todo los restos encontrados en la Cueva de Goyen en Bélgica para así poder comparar los haplotipos y ver si eran de lobos o de perros.

Se llevaron a cabo así mismo análisis de isótopos radiactivos los que se usan para determinar, por ejemplo, el tipo de alimentación que tenían; ver el tipo de alimentación de estos animales ayuda a comprender el tipo de relación que tenían con los humanos.

En la mencionada Cueva de Goyet se encontraron artefactos pertenecientes al Paleolítico Medio y Superior junto a los restos de mamíferos de la edad de hielo, el estudio de los artefactos y de los estratos de la cueva indicó que estuvo habitada por sucesivas oleadas de pobladores.

Entre los fósiles encontrados hay un cráneo de cánido datado en 31.700 años, este cráneo fue encontrado por Dupont en el año 1873, datado y catalogado; estos científicos lo que hicieron fue realizar nuevamente la datación, medición y catalogación del ejemplar, de lo que resulta que es, hasta el momento, el cráneo de cánido más antiguo encontrado, como fue hallado junto a restos de artefactos y demás que nos refiere a una cohabitación con los humanos se puede establecer que la domesticación ya había comenzado.

En otra cueva, Dupont encontró un esqueleto parcial de otro cánido que él identificó como perteneciente a un lobo y que fue datado en 21.800 años de antigüedad, este esqueleto parcial se encontró en el mismo horizonte donde se habían encontrado restos del Neanderthal.

La domesticación Con los resultados a la vista de los estudios llevados a cabo en los fósiles de la Cueva de Goyet por Germonpré y su equipo en el 2009 y los de Napierla y Uerpmann en el 2010, se replanteó el curso y el inicio de la domesticación del perro.

En el 2005 Lindblat y otros investigadores contando con el material genético de los perros modernos pudieron calcular por medio de programas de simulación que la separación entre los perros y los lobos se produjo aproximadamente hace 27.000 años , por lo tanto el cráneo de la Cueva de Goyet es el primer hallazgo paleontológico que apoya esto.

A partir de esa fecha paleontológica se han encontrado otros hallazgos que cuentan la historia de la domesticación del perro por parte del hombre, estos hallazgos muestran que en el final período Paleolítico los perros estaban distribuidos por todo el mundo incluyendo hallazgos en Europa, Medio oriente y América.

Dentro de estos hallazgos se han encontrado esqueletos de perros de tamaño pequeño (unos 40 cm) y otros, la gran mayoría, de tamaño de un perro grande.

En el Paleolítico el perro domesticado tenía una función muy importante en su interacción con los humanos, era perro de guardia y además ayudaba en la caza de otros animales, muchas veces también ha servido como alimento en épocas donde otro tipo de carne no estaba disponible para los humanos.

Escena de caza prehistórica donde se ve la interacción entre humanos y perros Poco a poco el perro pasó a ser algo más que meramente una ayuda en la supervivencia de los humanos tornándose en un verdadero compañero, tanto es así que se han encontrado tumbas del Paleolítico Superior donde se ven junto al humano esqueletos de perros, en una de estas tumbas en Israel,

se encontró un esqueleto humano en posición fetal y en su mano un esqueleto de un cachorro de perro de alrededor de 5 meses de edad.

Apoyados en todas las evidencias fósiles que se han encontrado se llegó a la conclusión que la primera fase de la domesticación del perro coincidió con el establecimiento del sedentarismo de las sociedades cazadoras-recolectoras primitivas.

Se cree que la segunda etapa de la domesticación comenzó en la región llamada “media luna fértil” en la Mesopotamia asiática, en el Neolítico (entre los 12 y 8 mil años).

La domesticación no se hizo de golpe en una sola etapa sino que se llevó a cabo en diversos tiempos y lugares, siendo ésta la base para diversidad de tipos que encontramos entre los perros, dado que se fueron domesticando diferentes poblaciones de lobos en diferentes tiempos.

En su estudio el Dr. Vilá dice que al menos hubo seis locaciones diferentes para la domesticación para poder tener el número de alelos diferentes encontrados en la población canina actual.

De acuerdo a los fósiles hallados se pudo establecer que en este período con el sedentarismo humano ya establecido los perros comenzaron a decrecer en tamaño , dado que el humano comenzó una especie de

selección de aquellos ejemplares que eran más fáciles de manejar por su tamaño menor.

A partir de ese momento, los grupos humanos comenzaron a seleccionar ciertos tipos de perros acordes a sus necesidades.

Los grupos agrícolas buscaron perros que tuvieran las cualidades necesarias para montar algún tipo de vigilancia en sus zonas de cultivo pero que a la vez no destruyeran las zonas. Otros grupos humanos especializados en la incipiente ganadería buscaron perros que tuvieran el instinto de reunir el ganado y vigilarlo diversificando estas dos actividades en dos tipos de perros, el que reunía el ganado era más pequeño y el que vigilaba era más grande.

Los grupos de humanos cazadores tuvieron la necesidad de tener a su lado un perro capaz de acompañarlo en esta actividad y que los ayudara a doblegar a su presa, por lo que requerían un perro de tamaño algo mayor y un temperamento acorde a su función, para ello se elegían los cachorros de mayor tamaño y con mayor instinto de caza.

El mayor problema se planteaba con la domesticación en América, dado que los lobos americanos no fueron domesticados, los datos genéticos cuentan que el poblamiento de los perros en América se llevó a cabo con el paso del hombre hacia este continente a través del Estrecho de Bering, los grupos provenientes de Europa trajeron con ellos sus propios perros . El fósil más antiguo de perro que se encontró en Norte América tiene una edad calculada en 10.000 años y se encontró en la Caverna Danger en Utah, luego de este hallazgo se han encontrado infinidad de fósiles y esqueletos de perros mostrando gran diversidad en su apariencia.

Estudios genéticos realizados en algunos esqueletos encontrados, muestran que los lobos de Norte América se cruzaron con los perros que provenían de Eurasia Desde este punto comienza la especialización, debido a factores como la selección humana, aislamiento geográfico y densidad de población, comenzando la verdadera especialización y diversificación de tipos de

perros, de los cuales luego descienden tipos mรกs modernos.

Capítulo 2

Origen del Shar Pei La evolución de las especies que habitan o habitaron nuestro planeta se estudiaba, hace unos años, por medio del registro fósil, este registro se nutría de las piezas que los paleontólogos, paleoantropólogos, antropólogos y arqueólogos rastreaban y desenterraban, estos restos se descubrían por lo general luego de estudios del terreno y de su estratigrafía para poder tener una idea aproximada del emplazamiento de algún sitio de interés.

Hoy día estos científicos cuentan con una herramienta eficaz, el ADN, para sumar a los registros fósiles.

Dentro de las células hay un organelo que se denomina mitocondria, dentro de la mitocondria encontramos ADNmt, este ADN tiene la característica de portar intactos todos los “datos” del linaje materno desde el principio de ese linaje.

El linaje materno de las “Evas” de los perros domésticos y sus ancestros los lobos, se puede rastrear sin inconvenientes a partir del ADNmt el que nos contará de dónde proviene cada raza de perros existentes hoy en día y cuán antigua es aunque no se encuentren piezas fósiles de los ancestros.

Registros ADN mt:

Se puede rastrear el ADN mt (ADN mitocondrial) con microsatélites (marcadores) específicos para los diversos haplotipos o haplogrupos, al hacerlo se vio que los cánidos domesticados provenían de una región determinada, la región es el Sudeste asiático, esto quiere decir que hay un origen común de los perros entre los lobos grises chinos.

El camino para llegar a esa conclusión fue el estudio del ADNmt de los lobos y de perros de todo el mundo, se vio que los perros domesticados provenían de 4 líneas femeninas de lobos más una que todavía está en estudio y complementaría a las otras (las “Evas” primordiales).

Los estudios dieron como resultado que hay cuatro grupos filogenéticos (A, B, C, D) y un quinto grupo consistente en un haplotipo aislado (E), más otro sexto grupo (F).

Un detalle importante es que los haplotipos son equidistantes del primer ancestro común a todos los lobos.

HAPLOGRUPO Amt: Incluye tres haplotipos encontrados en China y Mongolia, lo que indica que su origen es Chino (SE asiático). Este grupo sugiere un origen común Chino.

HAPLOGRUPO Bmt: incluye dos haplotipos, uno generado en Europa del Este y otro generado en Afganistán. Esto sugiere un origen europeo/asiático oriental.

Como es conocido los lobos recorren mucho territorio desplazándose en manadas, por eso los mismos haplotipos se pueden encontrar en Arabia y en Mongolia, se sabe que la mayoría de los perros tienen haplotipos del grupo A y que casi todos los perros poseen haplotipos de los haplogrupos A, B ó C. El haplogrupo A se encuentra en todos las regiones, los haplotipos B y C en casi todas las regiones del mundo menos en América, lo que indica que los lobos Americanos tienen sus ancestros en los lobos chinos ya que es el único haplogrupo (A) presente en su ADNmt. De los haplotipos A que se encontraron en la zona de Asia del Este 30 son únicos para perros provenientes de esta región. Se descubrió que los otros haplotipos se encontraban en la parte Oeste de Asia y en el resto del mundo, la división entre los haplotipos presente en la zona este de Asia y en el resto del mundo se posiciona geográficamente en una línea que une los montes Himalayas con los Urales.

La misma investigación encontró que la mayoría de los perros domesticados tienen un pool genético común a lo largo del continente Euroasiático, la mayor variación de los haplotipos se da en la región sudeste de Asia sobre todo en China y cercanías, en ese pool genético hay 30 haplotipos que son únicos, de estos 30 haplotipos diferentes y únicos provienen razas de

perros extintas y otras que hoy día todavía perduran. La región Este de Asia es considerada la región con mayor proporción de individuos con haplotipos únicos.

El origen del perro puede estimarse por la distancia genética de cada clan con el haplotipo original del lobo y cuál es el rango de mutación que presenta con respecto al haplotipo original.

El haplogrupo o clan A es el haplotipo más antiguo y deriva directamente de la más primitiva domesticación del lobo y se cree, según las mediciones, que provendría de una época cercana a los 41mil +/- 4000 años, este clan original originó 3 subclanes emparentados y correspondientes a 3 subregiones. En consecuencia el ADNmt sugiere que el primer perro doméstico se originó hace unos 40m años formando solo el Clan A y hace 15 m años se formaron los restantes, por consiguiente los perros que contienen en su ADNmt el haplogrupo A son los que tienen el linaje más antiguo. El origen de 40m años atrás del clan A podría haber implicado un largo aislamiento en Asia del Este antes que los perros se esparcieran por el resto del mundo. Esto implicaría que algunas razas provenientes de la región conservaran algunos rasgos antiquísimos y los conservaran hasta hoy día.

Estos hallazgos genéticos pueden en parte ser corroborados por los hallazgos arqueológicos o paleontológicos, por ejemplo no hay registros fósiles paleontológicos en el paleolítico tardío chino, pero en el Neolítico temprano se encuentran numerosos hallazgos de fechas relativas al 7,5 miles de años todos

estos hallazgos se realizaron correspondiente a la actual China.

en

la

región

Todo lo anteriormente expuesto lleva a la conclusión que el punto de partida de la diversidad de los lobos y del perro domesticado se da en la región Este de Asia.

Por ejemplo, se creía que el origen de los perros americanos era el lobo gris de Norte América, pero por los estudios de ADN mt se sabe que en realidad el lobo gris americano es descendiente del lobo gris chino y es éste el verdadero origen de los perros americanos.

La situación en la región del Este de China parte del lobo gris de china, este lobo en su rama femenina es el fundador del Haplogrupo A y de los tres subclades que se encontraron; de estos subclades como ya dijimos encontramos uno en Mongolia y dos en China, de estos tres sublcades descienden las razas de perros domésticos denominados Haplogrupo A.

Razas evolucionadas de los subclades chinos En el siguiente cuadro podrán observar las razas que han evolucionado de los 3 sublades chinos, dos correspondientes a la actual región de China y uno a la de Mongolia.

SUBCLADES CHINOS

CHOW CHOW

SHAR PEI

AKITA

SHIBA INU

PERRO TAI

SAKHALIN DOG

HOKKAIDO

KISHU

JIN DO

ESKIMO

SUBCLADE CHINO-MONGOL

AFGANO

SALUKI

TERRIER TIBETANO

LHAPSA APSO

De las razas mencionadas en el cuadro del subclade chino, las tres primeras perteneces al mismo subclade, por lo tanto comparten orígenes ancestrales comunes y comparten otros ancestros con las demás razas y con otras de la misma región como pueden ser algunos del grupo de los mastines y sobre todo los antiguos mastines tibetanos y su ancestro.

Cabe destacar que además de las tres primeras razas pertenecientes a ese subclade, hoy en existencia y desarrollo, había otras 4 que compartían características específicas al menos con dos de ellas, como ser la lengua negra, pero son razas extintas hoy día.

También se encontró que el llamado Perro Tang (perro chino) es el ancestro inmediato tanto de los chow chow, shar pei, shiba inu y posiblemente el akita.

Perro Tang, tipo Akita El antecesor del perro Tang es un perro hoy extinto muy similar al Tang pero de tamaño algo más grande, este perro al que se denomina ATg1 también es el antecesor del Mastín Tibetano, por lo que tanto el Shar Pei como el Mastín Tibetano comparten ancestros, pero no es correcto que el Shar pei tenga en su línea como ancestro al Mastín Tibetano.

El Perro Tang dentro de su pool genético contiene todas las variedades de los haplotipos A, estas variedades del haplotipo A hace que estos perros tengan un amplio pool genético, pero a la vez restrictivo a la zona de influencia por lo tanto los genes que portan son de los más antiguos desde la domesticación del lobo gris de china y su carga genética es una de las más intactas.

Perro Tang Chino

Este pool genético del Perro Tang y de sus ancestros, al que podemos denominar como el haplotipo más antiguo del mundo, es el que transmite a lo largo de generaciones las características que poseen estas razas, estas características pueden considerarse en algunos casos como muy buscadas y en otros casos son defectos de acuerdo al estándar actual de cada raza (para nosotros el estándar FCI).

Perro Tang color marrón con cola enroscada.

La gran variedad de perros Tang que se ve hoy día en China y otras regiones, muestran, por ejemplo, mantos moteados (muy frecuentes), mantos atigrados, ensillados, patrón negro y fuego, huesos largos y finos, cabezas más triangulares, orejas erectas, patrón bicolor o tricolor, orejas de hongo, pelo largo, pelo no recto (pelo ondulado), pelo corto y duro, lengua oscura, lengua moteada, lengua rosada y otros.

Perro Tang variedad flowered

Perro Tang variedad orejas chan fa El ancestro del Shar Pei (ATg1) también es ancestro de las razas que se mencionan en el listado arriba citado es por esta razón que vemos en las demás razas características comunes con el perro Tang, con los Shar Pei tradicionales, el Shar Pei moderno y los Chow Chow.

Dos ejemplares Shar Pei Tradicional con orejas chan fa.

En conclusión podemos decir que la raza Shar Pei, es una de aquellas que carga genes más antiguos luego de la domesticación del lobo gris de China, sobre todo es

notable esta carga en la variedad tradicional china, ya que la variedad hocico de hipopótamo o variedad americana o Brush Coat ha sido modificada en su aspecto en tiempos recientes pero sigue igualmente cargando un pool genético heredado por linaje materno, es por todo lo enunciado anteriormente que en la cría de la raza shar pei podemos encontrar a veces ejemplares que presentan características que creemos no típicas de la raza, pero que no son ajenas a sus orígenes.