CineMag SIGNIS: Latin America

Publication trimestrielle multilingue Multilingual quarterly magazine Revista trimestral multilingĂźe

LatinoamĂŠrica Latin America

Les prix que l’OCIC/SIGNIS attribue dans les festivals internationaux depuis 1947 ne sont que le sommet de l’iceberg de ses activités dans le cinéma. Ils rendent cette organisation visible sur le plan international et dans le monde professionnel du cinéma. Son but est de promouvoir, à travers l’expertise de ses membres, des films qui expriment certaines valeurs humaines et spirituelles. L’OCIC/SIGNIS est une organisation avec des membres nationaux actifs sur tous les continents. La plupart de ces membres ont des activités en lien avec le cinéma, et ce depuis le début du cinéma. Ils ont une longue tradition de critique de films, et animent des débats dans des écoles, clubs de cinéma, paroisses, festivals etc.. Comme par le passé, chaque membre de SIGNIS, en Afrique, Amérique latine, Europe, Océanie ou en Amérique du Nord, apporte ses compétences et sa sensibilité culturelle. Dans la tradition et la culture de notre association, le cinéma n’a été jamais considéré comme un art mineur mais un don à l’humanité.

Raconter des histoires et les mettre en images est commun à de nombreuses cultures. L’art et la création rendre l’Homme plus humain. Chaque film est une vision du monde et reflète des valeurs qui invitent à une réflexion personnelle et publique.

Dans cette lignée, les membres de SIGNIS d’Amérique latine apportent, sur le cinéma, un regard empreint d’une histoire et d’une culture sociale et politique spécifique à leur continent.

Cette diversité est plus que jamais nécessaire dans un monde où même le regard sur la réalité humaine et les émotions tend à s’uniformiser, appauvrissant ainsi notre part d’humanité.

Magali Van Reeth

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EDITO

Baixa Funda, o destino de um povo de Marcello Sannyos (Brasil)

The films OCIC / SIGNIS has been awarding at international festivals since 1947 are just the tip of the iceberg of its activities in the world of cinema. They make the organization visible on the international scene and among the film professionals. Its goal is to promote, through the expertise of its members, films that express certain human and spiritual values. OCIC / SIGNIS is an organization with national members active on all continents. Most of these members have activities related to the cinema since the beginning of this art. They have a long tradition of film criticism, and debates in schools, film clubs, parishes, festivals etc. As in the past, today every member of SIGNIS, in Africa, Latin America, Europe, Oceania or America of the North, brings his skills and cultural sensitivity into these activities. In the tradition and culture of our association, cinema has never been considered a minor art but a gift to humanity.Telling stories and putting them in images is common to many cultures. Art and creation make man more human. Each film is a vision of the world and reflects values that invite personal and public reflection.

In this vein, SIGNIS members from Latin America bring to the cinema, a view marked by a history and a social and political culture specific to their continent. This diversity is more than ever necessary in a world where even the gaze on human reality and emotions tends to become standardized, thus depleting our share of humanity.

Magali Van Reeth

N°4/2019 Publication éditée par l’Association Catholique Mondiale pour la Communication Publication of the World Catholic Association for Communication Publicación editada por la Asociación Católica Mundial para la Comunicación SIGNIS – Rue Royale, 310 – 1210 Brussels – Belgium – Tel: 32 (0)2 734 97 08 – www.signis.net Secretary General: Ricardo Yáñez Chief Editor: dr Guido Convents – Lay-Out: Pascale Heyrbaut Team/Correspondents: Magali Van Reeth, Marianela Pinto, Peter Malone, Marc Bourgois, Alejandro Hernández, Adrián Baccaro, Blanca María Monzón, Carlos Correa, Carlos Ferraro, Marialva Monteiro, Pamela Aleman, Amalia Ramos, Mónica Villanueva, Cristina Martínez, Luis García Orso, Ricardo Casas, Alejandro Fuentes Arce E-mail: guido.convents@signis.net – @SIGNIS – facebook.com/signisworld – youtube.com/user/signisworld Photo Cover: Still from A Vida Invisível de Eurídice Gusmão by Karim Aïnouz (Julia Stockler in the role of Guida) ISSN 0771-0461 Les articles signés expriment les opinions personnelles des auteurs.

Imprimé sur du papier recyclé.

EDITO

OCIC/SIGNIS ha premiado películas en festivales internacionales desde 1947. Esto representa solo una parte de las actividades en el mundo del cine. Los jurados internacionales convierten a SIGNIS en una organización activa y visible en el mundo cinematográfico internacional y entre los profesionales del cine. El objetivo principal es promover películas que expresan valores humanos y espirituales universales. Quienes integran estos jurados cuentan con experiencia en actividades relacionadas al cine y forman parte de una tradición de crítica cinematográfica y de cine-debates en escuelas, cineclubes en parroquias y en festivales. Hoy en día, así como en años anteriores, los miembros de SIGNIS en África, América Latina, Europa, Oceanía, Asia y América del Norte brindan sus capacidades y sensibilidad cultural para servir a este sector, manteniendo la tradición cultural de nuestra asociación que considera al cine un arte y un regalo para la humanidad.

Compartir historias y ponerlas en imágenes es común para muchas culturas, por lo que cada película expone una visión del mundo y refleja valores que invitan a la reflexión personal y comunitaria.

Bajo esta premisa, los miembros de SIGNIS América Latina, aportan al cine una historia marcada por una cultura social y política propia de su continente. Esta diversidad es necesaria en un mundo en donde las distintas visiones de la realidad y las emociones tienden a desmantelarse, limitando así, los valores que encarnan.

Magali Van Reeth CineMag

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América latina 70 años promoviendo el cine dentro y desde Latinoamérica Más que nunca, en 2019, los miembros de SIGNIS América Latina se encuentran cautivos bajo la luz de valores espirituales y culturales y en todos los aspectos del mundo cinematográfico. Durante casi 70 años, se han mantenido activos como profesionales en el mundo de la educación cinematográfica, cineclubes, foros y crítica cinematográfica, otorgando premios anuales y manteniendo su presencia en jurados de festivales internacionales de Cine en los que SIGNIS juega un papel esencial como en Berlín,Venecia, San Sebastián y Locarno. En Latinoamérica, los miembros de SIGNIS participan como jurados en festivales regionales en países como Argentina, Bolivia, Cuba, Chile, o Perú. Sin embargo, países como Venezuela y Argentina, establecieron sus propios festivales internacionales de cine.

SIGNIS América Latina goza de una historia que promueve e integra la producción cinematográfica a la sociedad de una manera crítica y cultural. Esta institución apoya y defiende al cine con valores que contribuyen a promover el diálogo y la reflexión sobre las más diversas realidades temporales de la sociedad.

Todo comenzó en Julio de 1896, cuando este nuevo medio de la modernidad arribó al continente Latinoamericano. Así como en otras partes del mundo, las imágenes móviles fascinaron a la población de varios países del continente como Argentina, Brasil, Chile, Cuba, Ecuador, Uruguay, México,Venezuela, Perú y Colombia, quienes se involucraron directamente con la Organización Católica Internacional del Cine (OCIC) establecida en Bruselas, Bélgica. A finales de 1940, el Secretario General para Relaciones Exteriores de OCIC, Ruszkowski, tuvo una exitosa visita a Latinoamérica dadas las múltiples y variadas actividades en el mundo del cine en estos lugares. Como consecuencia, estableció un Secretariado para América Latina, que hoy en día se encuentra localizado en Quito, Ecuador, y inició la primera licenciatura de estudios cinematográficos en el continente en la Universidad Pontifica Católica del Perú (PUCP), en la ciudad de Lima. De 1949 en adelante, la publicación de OCIC, Revista Internacional de Cine, comenzó a publicar, en casi todas sus ediciones, contenidos acerca de cine escrito por miembros de Latinoamérica. En 1951, el gobierno de Uruguay organizó el primer festival Latinoamericano de Cine en Punta del Este. Un año después, el primer jurado de OCIC premió la película, Intruso en el Polvo, un drama dirigido por el norteamericano Clarence Brown. Asimismo, en esta fecha, se organizó la primera junta a nivel continental con conferencias en crítica y educación cinematográfica. El director del festival declaró posteriormente que la presencia de OCIC representaba la garantía para que el festival tuviera una visión enfocada a valores culturales y espirituales en el cine, en lugar de convertirse en un evento comercial. Durante los próximos años, los jurados internacionales de OCIC/SIGNIS estuvieron presentes en Cartagena, Guyana, Rio de Janeiro, Viña del Mar, Santo Domingo y Quito. El día de hoy, se encuentran invitados al Festival de Mar del Plata, La Habana, Buenos Aires, Santa Cruz y Montevideo-Divercine. Los miembros de América Latina han estado presentes en jurados internacionales como Cannes, Berlín, San Sebastián, Venecia y Hong Kong. A mediados de los años ochenta, OCIC ofreció cinco películas africanas y un festival de cine itinerante en Latinoamérica. Esta fue la primera ocasión que una serie de largometrajes africanos fueron mostrados en el continente americano. Estas películas viajaron alrededor del continente por más de veinte años. Los miembros de SIGNIS Latinoamérica tomaron conciencia del impacto del cine en la población indígena del continente cuando se dieron cuenta que el cine les proporcionaba a estos grupos una voz y una imagen que los identificaba dentro de la sociedad. OCIC/SIGNIS otorgó el primer premio a un filme latinoamericano en 1955 en Punta del Este a la película Sinhá Moça del director Brasileño Tom Payne. En 1956, se otorgó una mención especial a la película mexicana El Camino de la Vida del director Alfonso Corona Blake.

En los años 60, se empezó a sentir cierta frustración debido a la supuesta colonización continental de Hollywood a través de sus imágenes, lo que ocasionó una promoción activa del cine local. A nivel internacional el premio de OCIC en Cannes para el film Brasileño Vidas Secas del director Nelson Pereira Dos Santos en 1960, fue un indicador del nacimiento de un nuevo género de cine en Latinoamérica. Esto resultó importante para la promoción del cine latinoamericano, en donde organizaciones eclesiásticas locales jugaban un papel importante para la promoción de su estilo cinematográfico: un estilo que reflejaba preocupaciones de la localidad, historias, sensibilidades y valores sociales y políticos. A partir de este momento, cientos de películas latinoamericanas comenzaron a recibir premios de OCIC/SIGNIS, lo que resultaron de gran importancia para aquellos productores de cine que lo consideraban un símbolo de gran valor. En el Festival de Cine de la Habana en 1995, varios productores de cine solicitaron ayuda a OCIC para la posproducción de sus películas, a lo que OCIC/SIGNIS respondió con el lanzamiento de una competencia de post-producción para filmes latinoamericanos. Más adelante, SIGNIS formó parte del proyecto Cine en Construcción en los festivales de San Sebastián y de Toulouse, así como del CineMag 2, dedicado a la presencia de SIGNIS en cine para la infancia y la juventud. Mientras tanto, SIGNIS Argentina continúa desarrollando el programa Cine Mundo Chico y en Montevideo, Uruguay, SIGNIS establece un jurado internacional en el festival Divercine y SIGNIS Republica Dominicana organiza cine-debates en diversas parroquias y unidades educativas, con el fin de dialogar con padres de familia y jóvenes acerca de diversas problemáticas sociales, humanas y ecológicas.

Marianela Pinto/GC

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Premio OCIC/SIGNIS - La Habana 1984 Remitente Nicaragua, carta al mundo de Fernando Birri (Argentina)

1990 Después de la Tormenta de Tristan Bauer (Argentina)

2013 La reconstrucción de Juan Esteban Taratuto (Argentina)

1985 Las Madres de la Plaza de Mayo de Susana Muñoz/Lourdes Portillo (USA)

1991 La Guerra de los niños de Sandra Werneck (Brazil)

2014 Conducta de Ernesto Daranas Serrano (Cuba)

1986 A Cor de seu destino de Jorge Duran (Brazil)

2015 Campo Grande de Sandra Kogut (Brazil/France)

1987 La Noche de los lapices de Hector Oliveira (Argentina)

1992 La Frontera Ricardo Larrain (Chile) --------------2010 José Martí: el ojo del canario de Fernando Pérez Valdés (Cuba)

2016 Aquarius de Kleber Mendoça Filho (Brazil/France)

1988 Cien niños esperando un tren de Ignacio Agüero (Chile)

2011 Los últimos cristeros de Matías Meyer (Mexico)

2017 Aos teus olhos de Carolina Jabor (Brazil)

1989 Que Bom Ter Ver Viva de Lúcia Murat (Brazil)

2012 No de Pablo Larraín (Chile/USA)

2018 Inocencia de Alejandro Gil Álvarez (Cuba)

70 years promoting cinema in and from Latin America

70 ans de promotion du cinéma en et d’Amérique latine

In 2019 national members of SIGNIS in Latin America are more than ever caught up in the light of spiritual and cultural values in almost every aspect of the world of cinema. For over seventy years now, they have been active as professionals in film education, film clubs, film fora, film criticism, giving annual awards, and being present in international juries at international film festivals in which SIGNIS is involved such as Berlin,Venice, San Sebastian,Toulouse and, Locarno In Latin America national SIGNIS members are established in the local film festivals with local juries as in Argentina, Bolivia, Cuba, Chile or in Peru. Some, as in Venezuela and Argentina, even started their own international film festival. In Brazil and OCIC and SIGNIS personality Miguel Perreira was one of the important defenders of international but above all national cinema. SIGNIS in Latin America can look back to a long history in promoting and integrating in a critical way the local cinema and cinema culture in society. They support and defend a cinema with values that contribute “to promote dialogue and reflection on the most diverse temporal realities of society”. In these 70 years OCIC/SIGNIS has promoted several hundreds of films from Latin America in giving them prizes at international film festivals, launching a project of post-production and making them internationally known.

En 2019, les membres nationaux de SIGNIS en Amérique latine ont, plus que jamais, fait la promotion des valeurs spirituelles et culturelles dans presque tous les aspects du monde du cinéma.

Depuis plus de 70 ans, ils sont actifs dans l’éducation au cinéma, les ciné-clubs, les forums du film, la critique de films. Chaque année, ils sont membres de jurys internationaux auxquels SIGNIS participe dans plus de trente festivals comme Berlin, Venise, Saint-Sébastien et Toulouse et décernent des prix. Ils ont mis en place des jurys nationaux dans des festivals en Argentine, Bolivie, Cuba, Chili ou au Pérou. Certains ont même lancé leur propre festival international, comme au Venezuela et en Argentine. Au Brésil, une personnalité comme le professeur Miguel Pereira, a été un important défenseur du cinéma national. Dans ce continent, SIGNIS peut s’appuyer sur une longue tradition afin de promouvoir et d’intégrer de manière critique le cinéma local et la culture du cinéma dans la société. Ils soutiennent et défendent un cinéma dont les valeurs contribuent « à la promotion de la diversité, de la réflexion et de la spiritualité ».

Au cours des années 1970 OCIC/SIGNIS a soutenu plusieurs centaines de films d’Amérique latine en leur attribuant des prix dans des festivals internationaux, en développant un projet de postproduction et en les faisant connaître au niveau international.

In Cinemag 3 the presence of SIGNIS in the world of cinema for children and young people was put forward and also here our members play an important role. SIGNIS Argentina continues to develop the Cine Mundo Chico program, SIGNIS has an international jury at the Divercine festival in Montevideo. A member like SIGNIS Dominican Republic organizes film debates in various parishes and educational units, in order to talk with parents and youth and adolescents about various social, human or natural problems.

MP/GC

Dans le domaine du cinéma pour enfants et adolescents, SIGNIS Argentine continue d'animer le programme Cine Mundo Chico. Il y a un jury SIGNIS international au festival Divercine de Montevideo.

La délégation SIGNIS République dominicaine organise des débats sur le cinéma dans différentes paroisses et unités éducatives, afin de discuter avec les parents, les jeunes et les adolescents de divers problèmes sociaux et humains liés à la société.

MP/GC

CineMag

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Cassandro, the Exotico! de Marie Losier (Francia)

Premio SIGNIS Mar del Plata 2018

Este documental nos lleva al increíble universo de la lucha libre… Un retrato conmovedor sobre un hombre excéntrico que ha encontrado la confianza en sí mismo a través del deporte. vestidos de travestis saltar, caer y rodar en el ring causando alegría en el público.

La directora francesa Marie Losier nos hace penetrar en este universo con una cámara de 16 milímetros que brinda una textura de irrealidad al filme. Todo es increíble en la vida de Cassandro, cuyo verdadero nombre es Saúl Armendáriz. De niño fue violentado y posteriormente humillado en su entorno social por su preferencia homosexual. Saúl encontró su refugio en la lucha libre, el gusto por el entrenamiento con el grupo, gusto por el espectáculo, la alegría y los gritos del público. Se entrega físicamente, mezcla drogas y alcohol, pero desiste de todas sus adicciones el 4 de junio 2004 cuando se tatúa la espalda.

Cassandro es un fenómeno en su arena, un personaje de multicolor como las combinaciones en su vestimenta y en su maquillaje. Cambia constantemente dentro de universo extraño donde los despliegues físicos son reales y donde la puesta en escena es tan precisa como los detalles de sus disfraces. Su objetivo es brillar, deslumbrar y sobre todo golpear a sus adversarios, combatir en el ring. Es todo un espectáculo sorprendente ver a hombres

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Es también un hombre debilitado, con un cuerpo destrozado, operado, con numerosas cicatrices y huesos lastimados que la religión reconforta. En su casa, en desorden expone las imágenes de la virgen y de su pequeña prima, fotos de su madre, de él mimos en escena, recuerdos de viajes y sus medallas.

Velas, incienso, plumas, participa en rituales religiosos indígenas: “Se dice que la religión es para aquellos que tienen miedo del infierno, pero la espiritualidad es para aquellos que ya estuvieron ahí, como yo’’.

Entre la frontera de Estados Unidos y México se mueven las fronteras del mundo

deportivo y artístico, y las fronteras de su sexo, hombre y mujer a la vez, feliz de disfrazarse y compartir su pasión. Saúl se entristece con la sola idea de dejar el espectáculo porque el cuerpo no pueda seguir el ritmo que sus ganas le dictan.

Con el objetivo de contar que es el mismo cuerpo maltratado el que hace sufrir a Cassandro, Marie Losier opta por imágenes y una puesta en escena turbulenta donde los fuegos artificiales cobran un sentido.

Cassandro es burbujeante, emocional y, al mismo tiempo, decadente; siendo este filme un retrato digno de tal personaje, incluso en su desmesura.

Magali Van Reeth Versión en francés en: signis.net “Resulta curioso pero la influencia de la lucha libre en el cine es tal que la temática es considerada un género fílmico y es que desde la década del cincuenta enmascarados y guerreros del ring se tomaron el séptimo arte con el estilo único que hizo grande este deporte-espectáculo que, en sus épocas doradas, conquistó fanáticos alrededor del mundo y, cómo no, en Colombia, que soñaban con emular las proezas de El Santo, Mil Máscaras u Octagón tanto en el cuadrilátero como fuera de él.’’

Fabián Giraldo Alzate

Ray & Liz de Richard Billingham (Reino Unido) Premio SIGNIS BAFICI 2019 Un filme que reafirma la concepción del cine como arte. Una mirada sobre el desasosiego que genera el desamor.

Luego de su consagración como fotógrafo, y gracias a su libro Ray’s A Laugh (1996), donde había documentado a Ray, su padre alcohólico, y a Liz, su madre obesa llena de tatuajes, Richard Billingham, vuelve a la ficción de corte autobiográfico. Por lo que en el film se cruzan, por una parte, las impresiones subjetivas del autor, y por otra, el intento de representar objetivamente la realidad. Porque también está el contexto de esa Britania de los 80 y 90, perteneciente a esa clase media baja sin trabajo, que subsiste gracias a la ayuda social. Este es su contexto, sus condiciones de origen, y esas personas, -lo quiera o no-, han sido determinantes en su percepción y en su perspectiva del mundo.

Relaciones tan brutales, como sutiles, son las que dan cuenta de los secretos de una familia, que excede lo disfuncional. Y eso se refleja en el espejo de lo privado. Y se confronta con lo que no pudo dejar atrás, en una especie de catarsis vital.

Ray & Liz esta narrado con una exquisita solidez estética y dominio técnico, usando a la repetición como estrategia. Hay tres fragmentos autobiográficos, a modo de flashback, que dan cuenta de su asfixiante infancia, y que retornan a la misma escena: un cuarto sucio y lleno de moscas donde Ray en la cama, ya anciano y devastado, se dedica a dormir y beber varios litros al día de cerveza casera. Mientras repite que esa es la vida que lo hace feliz. Lo terrible de la respuesta

es que es real. Esas son las ambiciones de un padre pasivo y dependiente, que no ha tenido ningún tipo de poder dentro de la escena familiar. El primero de los recortes muestra a los padres rondando los 40 años, en un ambiente siniestro, donde la suciedad, el maltrato, la abulia y la violencia son moneda corriente. Allí Richard intenta encastrar sus bloques, con un inmenso cuchillo en las manos, que le ha dado otra persona que no se sabe si es otro de los tíos. Lo cierto es que parece que el mundo explota y se derrumba. La sensación que predomina es la impotencia. Es que hay una potente miseria emocional, y algunos actos hablan de un potencial de maldad inesperada. Luego aparece el niño, ya más grande, durmiendo en una casucha abandonada, más consciente de que está desprotegido y abandonado.

Mientras una vecina lo pide en adopción, la madre continúa impasible, con el descontrol de la obesidad, y sus rituales de jugar con sus enormes rompecabezas y fumar, enfrascada en un mundo propio.Y esto se ve reforzado por una cámara que va y viene por la casa haciendo foco en cada uno de los detalles, que se repiten una y otra vez. Donde la existencia de los dos hijos, transcurren en un absoluto desamor.

La elección de filmar en 16 mm granulado le aporta un look vintage, y la idea de usar una pantalla casi cuadrada, acentúa la sensación de agobio. Un retrato insoportable, que la

mirada de su director reafirma y lleva al extremo.

Billingham recrea su historia personal, en tres períodos concretos de su vida. Y lo hace desde la conciencia de la naturaleza fugaz de la historia y la memoria. Sabemos, que las trampas del recuerdo son peligrosas. Aunque el espectador perciba la característica del pacto auto ficcional, que se da entre guionista, director y personaje.

La identificación siempre será ambigua.

Esa representación con que el artista da cuenta de su conflicto interno genera en el espectador una reflexión, que remite a la idea de pensar a este film, como un proceso de reconciliación con ese pasado doloroso, de una crueldad enfermiza e involuntaria.Y a la vez intuir un reconocimiento de su parte para llegar a digerir sus propios fantasmas, los cuales entendemos, ha logrado trascender.

Y en este sentido, comprobamos como el arte incide en nuestras propias emociones, ya que esa visión del mundo está allí, para que la miremos con nuestros propios ojos, y podamos sentir misericordia.

Blanca María Monzón

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Canción sin nombre de Melina León (Perú)

Premio SIGNIS Chile en el SANFIC 2019

Canción sin nombre es realmente conmovedora. Basada en hechos reales, la cinta se introduce en el Perú profundo del año 1988 donde se vive un conflicto social y político de envergadura.

La historia corresponde a Georgina Condori, una joven andina que da a luz una bebé que desaparece misteriosamente. En medio del caos de la época, Pedro Campos, un joven periodista limeño, toma a su cargo la investigación del caso y emprende junto a ella una desesperada búsqueda. Con un blanco y negro plagado de matices, las escenas resultan intensas y elocuentes.

La ausencia de sonido en puntos clave tensa aún más la narración que profundiza en muchísimos de los subtextos que se encuentran insertos en el guion.

Es desgarrador ver caminar a “Geo”. Sube y baja los cerros desde y hacia su casa.

Transita junto a su marido rumbo a su informal trabajo de feriante callejera en el centro de Lima, en una travesía propia de un migrante dentro de su propio país.

Visiblemente embarazada, el esfuerzo es en ocasiones el doble o el triple. Ella no alcanza a comprender lo que vive, menos entiende la situación política del país junto a las condiciones sociales que rodean esos años durísimos y complejos de Perú a fines de los años 80.

Las temáticas que aborda el relato son extensas. No solo la situación de Georgina es impactante. Hay una vulneración de

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la pobreza en todos los ambientes. La marginación social, sobre todo la que se muestra en forma explícita con una representante andina, se repite también en otras esferas. Los anuncios de radio ofreciendo servicios gratuitos de maternidad fácilmente son aceptados como lícitos cuando existe necesidad imperiosa de ayuda y no hay mayor información disponible. Este abuso de poder, aprovechando las pocas herramientas de educación de la población más vulnerable, facilita un ilícito que además es encubierto por el poder transversal que entrega una sociedad que se enfrenta a divisiones, violencia y también al terrorismo.

La situación del periodista no es muy distinta. Pedro, si bien trabaja en un diario reconocido, es un llanero solitario. No solo le afecta su situación personal, también sus ideales corresponden a su propia búsqueda de identidad y de verdad. El guion se interna en Pedro, en lo que vive, en su propia represión y lo desnuda a su manera, con una sutil delicadeza. El marido de Georgina tampoco escapa al conflicto. Vive al día y de los trabajos esporádicos que le ofrecen.

Pasa largas temporadas fuera de casa para intentar encontrar el sustento familiar. Por ello, cuando una nueva oferta de trabajo es oscura y difusa, la acepta sin pensar

en las consecuencias de acciones que pueden poner en riesgo incluso a su propia comunidad.

La cultura indígena está también siempre presente en el relato con celebraciones, fiestas, música, danza y procesiones; hay un alma subterránea que se encuentra en la base de la historia.

La marginación es brutal, la división horrorosa y el abuso inaceptable. La cinta se basa en hechos reales, en el secuestro de bebés, hecho ampliamente difundido incluso en la prensa de la época. Y no solo se trata de una denuncia sino también una prueba innegable del sufrimiento al que están condenados quienes no suscriben al régimen imperante y de todos aquellos que de una u otra forma no encajan con el sistema. Su relato está dibujado perfectamente y el magnetismo que provoca su confección mantiene máxima tensión durante todo su metraje. Sin duda, Canción sin nombre es de las mejores realizaciones del último tiempo en nuestra región y aún puede obtener otros reconocimientos, que sin lugar a dudas, tendrá ampliamente merecidas.

Carlos Correa

SIGNIS Prizes in Latin America Ray & Liz

by Richard Billingham (United Kingdom) On the outskirts of Birmingham and the margins of society, the Billingham family perform extreme rituals and break social taboos as they muddle through a life decided by factors beyond their control. Based on director and photographer Richard Billingham’s memories, the film focuses on his parents Ray and Liz, their relationship and its impact on Richard and his younger brother Jason as they grow up in a Black Country council flat.

Inocencia

by Alejandro Gil (Cuba) The Cuban film Innocence was awarded the SIGNIS Prize at the 2018 Festival of New Latin American Cinema in Havana. Based on real events that took place in 19thcentury Havana, where a class of first-year medical students is sent to prison for a crime they did not commit. For sixteen years, one of their cellmates, Fermín Valdés Domínguez, struggles to prove their innocence, when suddenly a new clue emerges.

This necessary film starts with a rigorous investigation and reconstructs a historical fact with a possible contemporary reading.

Cassandro, the Exotico!

by Marie Losier (France) After 26 years of spinning dives and flying uppercuts in the ring, Cassandro, the star of the gender-bending cross-dressing Mexican wrestlers known as the Exoticos, is far from retiring. But with dozens of broken bones and metal pins in his body, he must now reinvent himself.

Polvo de estrellas

by Aldo Sotelo Lázaro (Mexico) Adan lives day-to-day helping his father Hilario to collect garbage. An unexpected visit to the school, will reconfigure Adan’s whole universe. One young man realizes that no matter how humble his surroundings, he can still find a path to reach for the stars.

Canción sin nombre

by Melina León (Peru) Georgina’s newborn daughter is stolen at a fake health clinic. Her desperate search for the child leads her to the headquarters of a major newspaper, where she meets a lonely journalist who takes on the investigation.

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MAR DEL PLATA BAFICI

SIGNIS Jury: Miguel Monforte, Lorena Muñoz and Marcelo Fernández

The Mar del Plata Festival, the only festival in Latin America granted a “Category A”, was created in 1954 under Juan Domingo Perón’s administration, as the first NonCompetitive Film Exhibition, stressing the entertaining nature of cinema. Mar del Plata was chosen as a venue for this film festival since it was a well-known touristic destination, just like Cannes and Venice.

In that first edition, 18 countries were represented by 52 feature films from directors such as Vittorio de Sica, Luis Buñuel, Anthony Mann and Ingmar Bergman, among others. The exhibition inaugurated a space of interest for the intellectual and the film world, thus enabling the creation of the Mar del Plata International Film Festival. In 1959, the Festival became competitive. Organized by the Argentine Film Critics Association, this edition introduced Juries and Awards. In 1961 the Italian Ildo Avetta, member of the OCIC board had been invited to see whether a jury could be introduced. It resulted in the international OCIC jury in 1963 consisting of Mgr Jean Bernard (Luxemburg), Yvonne de Hemptinne (Belgium), América Penichet (Cuba-Argentina), Ramiro de Lafuente (Argentina), Carlos E. Tortorelli (Peru) and Mgr Justo Laguna (Ecclesiastical assistant). It gave its first award to The Spanish film A Summer Night by Jorge Grau, a film about a

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world in which sexuality and eroticism were invading and menacing marriage. “This film offers positive support as it treats complex problems of marriage in highlighting the values of authentic love based on fidelity and mutual understanding, a total gift, which enables the spouses to sacrifice personal feelings in respect for the marriage bond.”

It obtained also the international Filmpress (Fipresci) prize. In 1968 the OCIC jury gave its prize to Three Poplars at Pluyshchikha Street by the Soviet filmmaker Tatiana Lioznova. It was the first time that a Soviet film obtained an international Catholic Film Prize. Then there was no OCIC jury until 1996 where Fr Hugo Segovia and Robert Molhant were invited to take up again the tradition of the OCIC awards.

Although in Mar Del Plata most OCIC, and from 2002 SIGNIS, prizes went to foreign films, several Argentinean productions won awards or obtained a commendation: Buenos Aires Viceversa by Alejandro Agresti (1996), Pizza, Beer, Smoke by Bruno Stagnaro & Adrien Caetano (1997), Soul’s Square by Fernando Díaz (1997), Black Box by Luis Ortega (2002), Family Law by Daniel Burman (2006), 4 de julio by Juan Pablo Young & Pablo Hernán Zubizarreta (2007) and Ghosts of the Road by José Campusano (2013).

Prize at Mar del Plata 2017 Wajib

by Annemarie Jacir (Palestine) Wajib shows in a simple, direct, empathetic, and humourous way the reconciliation between generations by showing the strength of customs as well as family bonds.Through the father-son relationship, the film shows a population looking for solutions to reach peace and envelops the viewer in the dynamics of the reaffirmation of the truth while respecting oneself and others.

2018 Cassandro, el exótico

by Marie Rosier (France) This first-person portrait with an audiovisual narrative allows immediate empathy with the protagonist, a fighter not only by profession but also in life, who knew how to make his way from adversity to be respected and loved in the world of wrestling. Saúl Armendariz is above all a fighter who faced discrimination and misunderstanding, and despite suffering the vicissitudes of excess, managed to rebuild himself. His spirituality allows him to move forward despite physical pain, to earn a place from his authenticity and without grudges.

Virus tropical, de Santiago Caicedo (Colombia)

Jaime Potenze (1918-1991) Un pionnier de la critique du cinéma

Buenos Aires Festival Internacional de Cine Independiente

Une des personnalités qui a joué un rôle important dans le monde du cinéma en Argentine a été l’avocat Jaime Potenze. Il y a 70 ans, en 1949, il était correspondant/ rédacteur du magazine de l'OCIC : la Revue Internationale du Cinéma et cette année-là, il y a publié son premier article sur le cinéma italien, notamment sur le néoréalisme en Amérique latine. Dans son pays, il était déjà très connu, en tant que critique, il écrivait pour la revue Criterio et aussi dans La Prensa, La Nación, La Opinión, La Gaceta, Esprit (Paris), etc...

Il sera le premier argentin dans un jury international. En 1953, il participe à celui de Venise, où le film Guerra de Dios de Rafael Gil a été primé. Deux ans plus tard, il est membre du jury à Punta del Este. Il était également professeur de cinéma dans une école de cinéma à Santa Fe et au musée social Argentin. Il a été co-fondateur de l'Agrupación CINE et membre du Fondo Nacional de las Artes (FNA) en Argentine.

Il travaillait au Service de la culture de la municipalité de Buenos Aires.

El Jurado SIGNIS en el Buenos Aires Festival Internacional de Cine Independiente (BAFICI) premió en abril 2019 la película Ray & Liz de Richard Billigham (Reino Unido).

El jurado integrado por Eduardo Freire (Argentina), Blanca María Monzón (Argentina) y Marjorie Denisse Reffray Vilchez (Perú), consideró que la cinta recrea “con emoción y agudeza una historia asfixiante, en la sociedad británica de los ochentas, sobre la familia disfuncional del propio realizador y guionista. Con actuaciones relevantes, trama atrapante y gran ritmo narrativo, ilustra distintos problemas sociales (acoso, abusos, alcoholismo, etcétera), resaltando la miseria y el abandono de grupos en desventaja, invitando a la reflexión sobre la importancia del respeto a la dignidad humana y a los valores humanos universales.

En 2018 el Jurado SIGNIS otorgó su premio a la película india Village Rockstars de Rima Das: por evidenciar, con una mirada de aprecio cultural, el poder de superación de las adversidades de la comunidad protagonista. Una realización con una construcción estéticamente bella de las imágenes poetizando el ambiente. Con actuaciones naturales y sensibles acercándonos el mundo desde la perspectiva de una niña, sus amigos y su familia. Un Virus tropical de Santiago Caicedo (Colombia) ha recibido una mención: Por mostrar con creatividad y excelencia una historia familiar contemporánea con las contradicciones propias de su marco cultural. La técnica de animación de factura impecable suma a la realización un aporte sustancial al relato cinematográfico. El festival fue creado en 1999 por la Secretaria de Cultura del gobierno de Buenos Aires.

En su primera edición, OCIC/SIGNIS estaba presente con un jurado internacional y premió a la película portuguesa Los Mutantes de Teresa Villaverde.

Blanca María Monzón

GC CineMag

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ARGENTINA

Faire-Part de Anne Reijniers, Nizar Saleh, Paul Shemisi y Rob Jacobs

SIGNIS Argentina se destaca como una de las asociadas de SIGNIS con mayor actividad dentro del ámbito cinematográfico. Además de integrar regularmente los jurados SIGNIS internacionales en festivales como Venecia, Berlín, San Sebastián y Toulouse, sus miembros también participan con jurados nacionales en cerca de diez festivales locales cada año, como Cine Migrante, Hacelo Corto, Festival Internacional de Cine de Rosario, Pantalla Pinamar, FICSUR, Festival de Cortos Universitarios- Pehuen-Cortos, Festival Cine de Mar del Plata,TAFIC, Premios Condor, etc.

En el sitio web de SIGNIS Argentina, existe un recuento de todas las películas premiadas por sus miembros en los festivales nacionales e internacionales, así como de las cintas galardonadas por los jurados SIGNIS en los festivales internacionales.

El miembro de SIGNIS Argentina Pablo Devita organiza el Festival Internacional de Cine Religioso (Arfecine). El festival nació en Tandil, una ciudad de 135 mil habitantes en la Provincia de Buenos Aires, y luego al año siguiente realizó un ciclo itinerante por Rosario, Tucumán, Salta y Córdoba, y ahora en 2019 la sede principal es en la Alianza Francesa de Buenos Aires. El Festival busca que sea un espacio de encuentro plural en relación con las diferentes manifestaciones de la fe dentro de lo que son las religiones, y particularmente la mirada a un cine

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que realiza producciones eminentemente artísticas donde se analizan contenidos de carácter religioso, pero no desde un lugar confesional. Se da el primer valor a la calidad artística de las producciones y, en relación a eso, luego se busca su entendimiento con las diversas manifestaciones de diversas religiones. Esa es la propuesta del Festival Religioso y eso significa para el organizador Pablo Devita esa posibilidad de diálogo y de entendimiento.

En 2019, Arfecine dio el premio a la mejor película al filme alemán Pecado, de Gerd Schneider, que cuenta la historia de tres jóvenes sacerdotes amigos y el escándalo cuando uno de ellos es arrestado. Un premio especial fue otorgado a la película francesa Rengaine, dirigida por Rachid Djaidani.

Presenta la historia de Dorcy, un chico negro, cristiano, que quiere casarse con Sabrina, magrebina, hasta que se topa con un tabú aún muy arraigado en ambas comunidades: no debe haber bodas entre negros y árabes.

En el Festival Internacional de Cine/Corto de Tapiales (TAFIC) SIGNIS Argentina otorgó su premio 2019 a Joel de Carlos Sorín los Premios Cóndor de Plata a la producción 2018, organizada por la Asociación de Cronistas Cinematográficos de la Argentina, ACCA. el largometraje recibió este reconocimiento “«Por abordar

el tema de la adopción y su influencia en la dinámica de la pareja adoptante, y explicitar los posibles prejuicios que pueden aparecer en la comunidad circundante. El director logra expresarlo de manera contundente, motivando al espectador a asumir una toma de posición ante esta problemática tan vigente (...)

SIGNIS Argentina entregó su premio en Cine Migrante en 2019 al film Faire-Part (Bélgica/ RDC Congo), de los directores Anne Reijniers, Nizar Saleh, Paul Shemisi y Rob Jacobs: “por retratar, con gran calidad cinematográfica, la actual situación de Kinshasa, capital de la RD del Congo, donde la lucha por la liberación aún está vigente. El film levanta la voz por los que no tienen voz y defiende vivamente a los oprimidos, ignorados globalmente. Con una estructura segmentada temáticamente, resalta la ideología como un instrumento indispensable para la construcción de una identidad y les permite a ellos hacer su propio relato, lejos de la mirada europea ajena y colonizante. Promueve la libertad y la dignidad humana. Asimismo, apela a que los cambios económicos, políticos y sociales estén verdaderamente al servicio de la población.”

El jurado de SIGNIS, fue conformado por Samanta Rombolá, Edgardo Cabeza y Javier De Silvio.

Joel, de Carlos Sorín (Argentina)

Promover los premios El trabajo de SIGNIS Argentina dentro del cine no se limita, sin embargo, a los jurados y otorgar premios, promover estas películas premiadas. pero también Desde el 2000, SIGNIS Argentina trabaja en el proyecto educomunicativo Cine Mundo Chico, a través del cual se organizan cine-debates en establecimientos educativos, con el propósito de que los jóvenes - de nivel secundario - descubran valores humanos y sociales.

La vocación profesional, la justicia, la dignidad de la persona humana y la solidaridad son algunos de los temas que regularmente surgen durante estos diálogos. Igualmente, con el mismo objetivo, se llevan a cabo talleres de formación de cine-foros a docentes, así como talleres de realización audiovisual para niños y adolescentes. La experiencia incluye, junto con el apoyo de SIGNIS ALC, una escuela de formadores de cine, dentro de la cual se han editado varios manuales, como El proceso educativo y el cine-foro o debate y El cine y sus lenguajes.

En 2018, también se lanzó el texto “Cine con jóvenes”, en el que pueden encontrarse guías didácticas para la realización de cineforos sobre 36 películas, como una forma de apoyo a los docentes.

SIGNIS Argentina en el 18 Festival International de Cine de Derechos Humanos (FICDH) El documental argentino La voz propia de Valeria Sartori. ganó el Premio SIGNIS Argentina en el FICDH en Buenos Aires en 2019. El Jurado de SIGNIS Argentina (Elisa Vidal, Eduardo Abbate y Carlos Ferraro) explicó que la película “a través de testimonios de diferentes adultos que sufrieron abuso en la infancia, con intervenciones justas y pertinentes de especialistas en esta temática tan dolorosa, se construye un film concreto y creíble, mostrándonos cómo estos adultos, corriéndose del lugar de meros “objetos” como víctimas que fueron, se constituyen como sujetos comprometidos, transformando su dolor, o dándole un sentido a través de las actividades de servicio y ayuda a quienes pasaron por situaciones similares”. La cinta argentina participó en la Competencia Oficial de Documentales Nacionales, en el rubro sobre abuso, Infancia y Juventud.

El FICDH, bajo el lema “Abramos el juego”, se enfocó en esta 18° en el tema de los derechos de los niños, niñas y adolescentes, con el propósito de visibilizar y profundizar el debate sobre el tema y encontrar, a través del arte, nuevos espacios de empoderamiento que puedan ser replicados como herramientas de transformación individual y colectiva. El FICDH es el festival temático más antiguo de Sudamérica desde 1997. Organizado por la asociación civil sin fines de lucro Instituto Multimedia DerHumALC (IMD), se realiza bianualmente en Buenos Aires y es miembro fundador de la Human Rights Film Network. El objetivo del Festival es presentar las películas más impresionantes realizadas en los últimos dos años que abordan los problemas sociales relacionados con la defensa de los derechos humanos y el medio ambiente desde múltiples y originales puntos de vista, promoviendo así un cine crítico que contribuye al cambio social. SIGNIS Argentina, identificada con estos valores, acompaña con su presencia en este festival desde 2002.

Carlos Ferraro/SIGNIS ALC

(cfr. Cinemag 3: www.signis.net) CineMag

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CUBA LA HABANA

Jurado 2018 en La Habana: Jorge Villa,Yarelis Rico, Carlos Ferraro

Los católicos cubanos realizaban la proyección de películas desde 1914. En 1936, publicaron una guía moral del cine y desarrollaron la crítica cinematográfica con la que promovieron películas de calidad.Tres años después, la Juventud Católica Cubana fundó la Comisión del Cine, que tenía por objetivo orientar y cuidar el orden moral en los contenidos de las películas. Con el inicio de la relación con OCIC y con la incorporación de jóvenes laicos en 1946, fue creado el Centro Católico de Orientación Cinematográfica CCOC. Dos años después, el representante de OCIC, André Ruszkowski, al visitar Cuba, predicaba que el cine es un arte y que si una película es artística no puede ser inmoral, pues “todo lo bello es bueno”, en común acuerdo con la más ortodoxa tradición tomista.

Ruszkowski enseñó a los cubanos el proceso de los cine debates y, con su metodología, inauguró el primer Cine Club del Centro Católico en 1952. Otro logro alcanzado fue la publicación de una revista de cine: Cine Guía. En 1957 OCIC organizó su congreso mundial en La Habana con el tema: “La promoción del buen cine”. OCIC-Cuba fue también llamada en 1959 a colaborar con el nuevo Instituto Cubano del Arte y la Industria Cinematográficos (ICAIC).

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En diciembre de 1984, OCIC participó por primera vez con un jurado internacional católico en el Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano de la Habana.

OCIC respondía así a una invitación oficial del Ministerio de Cultura de Cuba, en la que el director del festival subraya “la contribución importante de esta organización católica internacional en el campo de la cultura cinematográfica”. Este jurado fue un acontecimiento histórico.

Hay que señalar, sin embargo, que en los 25 años que lleva la revolución, el CCOC ha continuado sus actividades (sin sus publicaciones, ni con los cineclubes) pero colaborando con el ICAIC. La presencia de un jurado católico que, además del presidente de OCIC, Padre Ambros Eichenberger, y de un miembro brasileño, profesor Miguel Pereira, era signo del compromiso cultural de la Iglesia cubana. Esta presencia abrió nuevas posibilidades de diálogo. Las reacciones fueron sorprendentemente positivas, sobre todo de los profesionales del cine y del festival que ha llegado a ser uno de los principales puntos de encuentro del mundo cinematográfico no sólo para cuba, sino para toda América Latina.

La película Diles que no me maten del venezolano Freddy Siso, obtuvo el premio de OCIC. Siso relata la vida de los campesinos de los Andes, mostrando un universo en el que se entremezclan la magia y la religiosidad con la violencia.

También se otorgó una Mención Especial a la producción del Grupo Chaski, un colectivo peruano, que exhibe en el filme Gregorio, a un grupo de niños que grupo de niños que viven juntos en un tranvía abandonado en la ciudad de Lima.

En presencia de Fidel Castro, el documental del argentino Fernando Birri, Remitente Nicaragua. Carta al Mundo recibió también el premio OCIC. En su película, Birri expresa su fe en los valores sociales, culturales y espirituales de América Latina y lanza una visión de esperanza para el provenir.

Actualmente, SIGNIS-Cuba continúa sus actividades con jurados locales como en la Muestra Joven del Cine y con el jurado SIGNIS en el festival de la Habana.

Walfredo Piñera María Caridad Cumana GC

Inocencia de Alejandro Gil Álvarez (Cuba)

En 2018 el jurado SIGNIS mundial al Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano otorgo su premio a la película Inocencia del cubano Alejandro Gil Álvarez: “por considerarse una película necesaria que, partiendo de una rigurosa investigación, reconstruye un hecho histórico con una posible lectura contemporánea. Se argumentó además que la realización contenía un buen pulso melodramático, donde la atinada conjunción realidad-ficción, permite reflexionar al espectador sobre ese pasado que relata la obra, y el presente, donde el oportunismo, la intolerancia, la corrupción, el abuso de poder y la delación siguen afectando nuestro entorno social”.

Es una historia basado a fechas reales que acontecen en Cuba en 1871. Estudiantes de Medicina son encarcelados por una injusta acusación, pero solo ocho de ellos serán víctima de un inesperado desenlace.

Dieciséis años un amigo y compañero de celda de las víctimas, ha luchado por demostrar la inocencia de aquellos jóvenes, una nueva pista lo acerca a la clave que desentrañaría la verdad oculta. Una historia que irá develando la incansable pesquisa de Fermín y aquellos estremecedores sucesos que condujeron a los acontecimientos más dramáticos y sensibles de La Habana del siglo xix. Basado en hechos reales.

Jurado SIGNIS Cuba en la Muestra Joven del Cine 2019 En abril 2019 la SIGNIS Cuba celebró el aniversario 15 del Taller Talentos para el Futuro, que se realiza en el contexto la Muestra de Joven del ICAIC para potenciar el diálogo entre los jóvenes cineastas y realizadores de experiencia. Esto coincidió con la celebración del 60 aniversario de la fundación del ICAIC. Este evento reunió a los realizadores noveles cubanos con el eslogan: Del corte a la acción. La muestra se abrió con la película mexicano, largo metraje Museo de Alonso Ruiz Palacios, una historia con jóvenes. El programa constó de unos 50 cortos (ficción y documental) con temáticas muy variadas. El jurado nacional de SIGNIS Cuba, compuesto de Adrián Martínez, Amalia Ramos y Manuel Alejandro Rodríguez, integrantes de SIGNIS Cuba Joven, otorgó su premio al cortometraje de ficción Alberto, de Raúl Prado.

La entrega del galardón tuvo lugar en La Habana, como parte de una ceremonia sencilla donde se dieron a conocer los reconocimientos colaterales de esa cita del séptimo arte. Según el jurado la obra aborda con respeto y sensibilidad un tema histórico del que persisten heridas en la sociedad cubana: la migración. Su abordaje desde el entorno familiar le otorga al cortometraje un tinte más atractivo y cercano.

Asimismo, “Alberto destaca por su excelente fotografía y constituye una apuesta a la vida y a ese futuro esperanzador que todos necesitamos; es –además– una invitación a reflexionar sobre el perdón y la acogida”, expone el documento. El corto de ficción Generación, de Meilín Quiles, que critica al aborto y a una posible sociedad futurista basada en la frivolidad y el egoísmo.

El evento del ICAIC tiene como objetivo promover un audiovisual que muestre una visión de la realidad “crítica pero compasiva, corrosiva pero profunda, pues intenta comprender”. Con intensas búsquedas formales y temáticas, cada año se exhiben ficciones, documentales y animaciones tan diversas como sus creadores.

Amalia Ramos CineMag

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BOLIVIA PERÚ

En octubre 2018 en el XVIII Festival Internacional de Cine de Santa Cruz (FENAVID), SIGNIS Bolivia otorgó su premio, en la categoría de ficción, a la película paraguaya Los Buscadores; y su premio al mejor Documental se lo llevó la producción ecuatoriana Ukamau Y Ke. Fue el octavo año en que se otorgaron estos premios. En 2011 el festival invitó al Jurado de SIGNIS Bolivia por primera vez.

En 2015, el jurado premió a Chicas Nuevas 24 Horas, trabajo de la española Mabel Lozano, como mejor largometraje documental; mientras que la película cubana Conducta, de Ernesto Daranas, resultó el mejor largometraje de ficción.

En 2016, El premio al mejor largometraje documental fue para Paciente del colombiano Jorge Caballero, mientras que el largometraje premiado fue El soñador, del peruano Adrián Saba.

El largometraje ficción Esteban de Jonal Cosculluela (Cuba) fue la cinta que ganó el premio SIGNIS 2017. También el largometraje documental Los sueños de Idomeni de Amparo Climent y Héctor Melgares (España) ganó el Premio SIGNIS (Mejor Documental).

Alejandro Fuentes Arce

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SIGNIS Bolivia, o los católicos en este país, tiene una notable tradición en la promoción del cine en general, pero sobre todo como un arte para dar voz a la población mayoritaria del país, los indígenas. Desde 2007, Bolivia celebra, el 21 de marzo, el día del Cine Boliviano para conmemorar el asesinato del Jesuita Luis Espinal Camps como homenaje a su lucha por los derechos humanos y la democracia, y su aporte a la cinematografía de Bolivia. Fue un acto del gobierno de Evo Morales Ayma. En los años sesenta, el Jesuita Luis Espinal estudio cine y televisión en la Scuola Superiore de Giornalismo e Mezzi Audiovisuali de la Universidad del Sacro Cuore de Milán, en Bérgamo. Por sus ideas democráticas no podía trabajar en España, por lo que llegó como misionero a Bolivia y produjo programas para la Televisión, además de trabajar como crítico cinematográfico.

En 1970 adquiere la nacionalidad boliviana.

Fue un defensor de derechos humanos y colaboró en la película Chuquiago de Antonio Eguino, la más taquillera del cine boliviano, que trata aspectos raciales, sociales y culturales de La Paz (llamados Chuquiago por los Aymaras) visto a través de cuatro diferentes historias.

Premios Llama de Plata El miembro de OCIC, el Centro de Orientación Cinematográfica organizó entre 1974 y 1996, el festival Llama de Plata para otorgar anualmente los premios “Llama de Plata”. El festival fue inaugurado con motivo del Día Mundial de la Comunicación Social y el décimo aniversario del cineclub Luminaria de la Paz. El primer premio fue para la película italiana Sacco e Vanzetti de Giuliano Montaldo.

En memoria Sebastiana Kespi (1942-2019)

Sebastiana Kespi fue la actriz principal de Vuelve Sebastiana de Jorge Ruiz (1953), una pelicula clásica del cine boliviano y una de las precursores del cine indigenista y antropológico a nivel mundial. Muestra las costumbres y tradiciones de la cultura chipaya a la que Kespi pertenecía. En 2015 recibió la Medalla al Mérito Cultural que le otorgó la Cámara de Diputados de La Paz, por su aporte a la cultura.

La vida invisible de Eurícide Gusmão de Karim Aïnouz (Brasil/Alemania)

Premios APC-SIGNIS Perú en el Festival de Cine de Lima (2011-2019) La Pontificia Universidad Católica del Perú es organizadora del Festival de Cine de Lima que se lanzó como “elcine” en 1997 con la participación de muchos jóvenes colaboradores. Durante diez días de proyecciones, non solo los filmes, pero también debates sobre el valor del cine. Así, durante mas que 20 años miles de peruanos tenían la oportunidad de disfrutar de su #PasiónPorElCine latinoamericano, tanto en obras de ficción como documentales. En 2011, la Asociación Peruana de Comunicadores “Mons. Luciano Metzinger” (SIGNIS Perú) participo con jurado propio y con premio a la película que mejor resalte los valores humanos universales.

En 2019, y en sintonía con el lema de la 23° edición del Festival de Cine de Lima, “Escápate al Festival”, APC-SIGNIS Perú una vez más en con un jurado especializado que premió la mejor película de la competencia oficial de ficción, destacando en sus historias o personajes los valores humanos y sociales, que promueva el respeto a la dignidad de todo ser humano y los derechos de las personas y de los pueblos.

El jurado de APC-SIGNIS Perú, 2019 fue presidido por Marjorie Reffray Vílchez, comunicadora, quien también este año fue parte del Jurado SIGNIS en el BAFICI, en Buenos Aires. Los otros dos miembros del jurado fueran la comunicadora Mary Ann Lynch Solis y la joven Rocío Mendoza Vásquez.

Para el Jurado APC-SIGNIS la película La vida invisible de Eurícide Gusmão, del realizador brasileño Karim Aïnouz, “cuenta con ejemplares actuaciones, gran fotografía, magnífica banda sonora y una brillante dirección, junto con un efectivo ritmo narrativo que evidencia la situación de la mujer en la sociedad conservadora de Río de Janeiro en los años 50. La obra exalta la dignidad humana que emerge de la lucha por la independencia y el empoderamiento femenino”.

Los premios APC-SIGNIS Perú buscan resaltar el cine con calidad artística y que contribuya a promover el respeto por los valores humanos universales, en especial la dignidad de todo ser humano y los derechos de las personas y de los pueblos.

La película premiada por APC-SIGNIS Perú es ambientada en “Río de Janeiro, 1950.

Eurídice, 18, y Guida, 20, son dos hermanas inseparables con padres conservadores.

Aunque inmersas en una vida tradicional, cada una nutre un sueño: Eurídice de convertirse en una pianista de renombre, Guida de encontrar el amor verdadero.

En un giro dramático, son obligadas a vivir separadas por su padre. Ellas toman el control de sus destinos separados, aunque nunca pierden la esperanza de encontrarse una a la otra. Un melodrama tropical del director de Madame Satã”.

En las anteriores ediciones SIGNIS Perú ha premiado a Las acacias (Pablo Giorgelli, Argentina); Historias que solo existen cuando son recordadas (Julia Murat, Brasil); El evangelio de la carne (Eduardo Mendoza, Perú); A que hora ella regresa (Anna Muylaert, Brasil); Ciencias naturales (Matias Lucchesi, Argentina); Alba (Cristina Barragán, Ecuador), Gabriel y la Montaña (Fellipe Gamarano Barbosa, Brasil) y Pájaros de verano (Cristina Gallego y Ciro Guerra, Colombia).

Info: Mónica Villanueva y Cristina Martínez

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MÉXICO VENEZUELA

Jurado Guanajuato 2018: Luis García Orso, Hugo Jesús Castro Mesta, y Aldo Valdés López

Dada la situación económica de Venezuela en los últimos años, el número de películas venezolanas producidas ha disminuido drásticamente. Durante aproximadamente diez años, en promedio, hubo 12 largometrajes producidos cada año, sin contar los cortos y los documentales, gracias al apoyo del Centro Nacional Autónomo de Cinematografía (CNAC), e incluso había aumentado a 30 en 2014. Pero en 2018 sólo algunas películas fueron producidas.

El país tiene una decena de festivales nacionales e internacionales que cubren todo el campo del cine. Uno de ellos es especial: el Festival de Espiritualidad en el Cine Venezolano.

Festival de Espiritualidad en el Cine Venezolano (FESCIVE) Se inició en el año 2011 en Ciudad Guayana (Edo. Bolívar). El festival resalta y premia los trabajos que proyectan valores humanos y espirituales, y se “busca promover y difundir el diálogo más profundo que se da en el ser humano y está expresado en las películas venezolanas: descubrirnos tal cual somos para poder ser mejores”. Allí se entregó por primera vez en Venezuela el premio SIGNIS junto con los premios propios del Festival, dándole una índole internacional al FESCIVE. Ya en el año 1982 el jurado OCIC (hoy SIGNIS) llamó la atención en el festival de Locarno al cine venezolano al mencionar la

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película La Boda de Thaelman Urguelles. Dos años después Tiznao de Dominique Cassuto y Salvador Bonet ha recibido el premio de OCIC en el Forum del Festival de Berlín.

Este mismo año, 1984, el premio OCIC fue otorgado a Freddy Siso por su película Diles que no me matan. Oriana de Fina Torres ha recibido una Mención à Figueira da Foz (Portugal) en el año siguiente. Películas en las que los valores en la sociedad venezolana son considerados críticamente. Estos premios han contribuido para el reconocimiento internacional del cine venezolano. En los años siguientes, diez películas venezolanas más fueron premiadas y mencionadas en festivales internacionales de cine para jurados internacionales de OCIC/SIGNIS. En diciembre 2018 se cerró el telón de la octava edición del Fescive. Durante cuatro días, en el auditorio Guido Arnal de la Universidad Católica Andrés Bello extensión Guayana, se proyectaron las películas más destacadas de las ediciones pasadas. Según comentó el P. Néstor Briceño, presidente de SIGNIS Venezuela, debido a la crisis política, social y económica que vive el país no fue posible realizar el festival 2018 con las características de las siete ediciones anteriores, que convocaron a los cineastas y productores cinematográficos de Venezuela para que expongan sus recientes producciones que proyecten la dimensión espiritual y humana.

“No obstante, en el propósito de que

esta cita anual del cine siga promoviendo y apoyando el talento venezolano en las artes audiovisuales, el FESCIVE decidió realizar esta octava edición con una modalidad diferente, pero sin perder su esencia”, dijo.

En esta nueva edición del FESCIVE se proyectaron largometrajes, cortometrajes, documentales, en torno a los cuales se realizaron cine-foros. Con esta edición especial del FESCIVE se asume también el impulso para continuar trabajado por la edición 2019, que se espera pueda realizarse de forma normal con las premiaciones correspondientes.

Néstor Briceño

Pelo Malo de Mariana Rondón (Mención SIGNIS en San Sebastián 2013 y Premio SIGNIS en Santo Domingo 2014)

Premios SIGNIS en FESCIVE Cortometrajes de ficción 2011 Colmillo, de Albi de Abreu 2014 Guárdame Puesto, de Alfredo Hueck 2016 Un litro, de Gresliz Aguilera Cortometrajes animación 2012 El robo de las Aes, de George Rojas 2014 No Seré Siervo de tu Horror, de Airam Zajor 2016 El columpio, de George Rojas Documentales 2012 La Musa Del Callao, de José Miguel Zamora 2014 Plan de Dios, de Gustavo Sulvarán 2016 Asómate la ventanita, de Tito D’Aloia Galante 2016 El silencio de las moscas, de Eliézer Arias Largometrajes ficción 2011 Macuro, de Hernán Jabés 2012 El manzano azul, de Olegario Barrera 2014 Bolívar. El Hombre de las Dificultades, de Luis Alberto Lamata 2016 Amor Cuesta Arriba, de Nelson Núñez

SIGNIS Mexico at the 2019 Guanajuato Film Festival Despite federal government budget cuts for cultural festivals, this year's 22nd Guanajuato International Film Festival was held in late July. Thanks to the generosity of many people, institutions and companies, the festival was held in different places in San Miguel Allende but was a little more austere in the city of Guanajuato. Here, the only place for the event was the magnificent State Auditorium, but the festival still presented all the films and could also count on the presence of the winners: British director Terry Gilliam and Filipino director Kidlat Tahimik.

Perhaps the most moving and promising moment during the closing and award ceremony was to feel the enthusiasm of the university students, who were recognized for their first cinematographic works, both in the Identity and Belonging section and at the university rally. SIGNIS Mexico was once again present with its own jury, composed this year by film and communication scholars Aldo Valdés, Hugo Castro and Luis García Orso. In addition, the festival organizers delegated to this same team the selection of the prize for the best Guanajuato filmmakers.

The special mention of SIGNIS Mexico for the short film of the international selection of Fiction was awarded to God Never Dies (Dios Nunca Muere) by Barbara Cigarroa (USAIreland). Set in the current drama of Mexican migrants in the United States, this intimate story reassesses the courageous commitment of mothers to their young children and to the search for a home.

This year, the SIGNIS Mexico Award was presented to Brotherhood by Meryam Joobeur (Canada-Tunisia). This painful and moving story is set in the context of the international conflict of the Islamic state. It shows us that young people's frustration with a social situation can lead them to take up weapons, but that reality opens a space of repentance if human beings go deep into their hearts: their families and the dignity of the person.

(Version Spanish y Frances : www.signis.net) Luis García Orso, S.J. CineMag

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BRASIL CHILE

Baixa Funda, o destino de um povo de Marcello Sannyos

Los premios Margarida da Prata 2019 Finales de Julio, el premio Margarida de Prata ofrecido por la Conferencia Nacional de Obispos de Brasil (CNBB) para películas brasileñas que enfatizan los valores humanos, éticos y espirituales, con el objetivo de ampliar la conciencia crítica y artística del público brasileño. El premio por el mejor cortometraje fue para la película Baixa Funda, o destino de um povo de Marcello Sannyos, y O Poder da (Des)informação de Graciely Bittencourt Machado ha recibido el premio por el mejor documental.

O Voo da Primavera de Dagmar Talga ganó el premio Margarida de Prata en la categoría de largometraje. Es una obra producida por muchas manos y que dura unos 10 años, que representa, según Essá Filmes, un fragmento histórico “de la lucha por la tierra y el territorio en Brasil, que retrata la resistencia indígena, quilombola, campesino y cuya línea de guía es el trabajo de Don Tomás Balduino”. Algunos sectores de la Iglesia, de grupos vinculados a la concepción de la Teología de la Liberación, formaron la raíz de la lucha por la tierra, por el territorio, por la gente del campo

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y el bosque. Don Balduino, quien sirvió como obispo en la ciudad de Goiás entre 1967 y 1998, fue un personaje importante de la resistencia con el pueblo, uno de los fundadores del Comissão Pastoral da Terra y del Consejo Misionero Indígena.

La preservación de la Amazonía y la resistencia de las indígenas para la sobrevivencia contra al capitalismo salvaje ha sido el punto focal para el jurado de Margarida de Prata durante años. En 2018, el documental KIWXI - Memória, Martírio e Missão de Vicente Cañas de Cireneu Kuhn (SVD) obtuvo el premio. Es la historia del misionero jesuita español Vicente Cañas (Kiwxí), asesinado en 1987 en la Amazonía brasileña por defender los derechos territoriales de los indígenas Enawenê.

Los premios Margarida da Prata fueron instituido en 1967 por la idea de Hilda Azevedo y Miguel Pereira en Río de Janeiro, los dos ligados al Central Católica del Cine parte de la estructura CNBB. A lo largo de los 52 años estos premios han revelado nuevos nombres y confirmado directores y productores de la escena cinematográfica brasileña. El primer premio fue para Proezas

de Satanás na Vila de Leva-e-Traz de Paulo Gil Soares. Según el cineasta Glauber Rocha, la película es parte de una segunda fase de la ola Cinema Novo, basada en estilos personales y una conexión efectiva con el público. La película ve a Brasil desde el ‘sertão nordestino’ y analiza las formas de conciencia popular en la adversidad.

Centrarse en las prácticas religiosas, un rasgo de la cultura nacional, critica el proceso de modernización experimentado por el país.

Esta iniciativa representó un importante apoyo a la producción cultural libre del país, especialmente en el momento en que el país atravesó un período de represión militar. El director Silvio Tendler ha sido poseedor del récord hasta ahora, con cinco premios recibidos. Muchos otros grandes cineastas han sido honrados, como Leon Hirszman con They Don’t Wear Black Tie de 1981 y Walter Salles con el moderno Central do Brasil de 1998. En estas dos producciones trabajó la actriz Fernanda Montenegro, que fue honrada con Mención Honorable por CNBB, en 2017.

Info: Miguel Pereira GC

El hombre del futuro de Felipe Ríos (Chile)

SIGNIS Chile Festival Internacional de Cine de Santiago 2019 (SANFIC) En la 15 edición del SANFIC, celebrado en agosto de 2019 el Premio SIGNIS Chile fue otorgado a la cinta Canción sin nombre de la realizadora peruana Melina León. En esta ocasión, además de los directivos de SIGNIS Chile encabezados por Juan Pablo Donoso, presidente de SIGNIS Chile y Carlos Correa Acuña, presidente del Círculo de Críticos de Arte de Chile, participó como jurado Adrián Baccaro, directivo y Secretario Ejecutivo de SIGNIS Argentina. La película ganadora se destaca por ser una profunda y conmovedora denuncia social. La película narra la historia de Georgina Condori, una joven andina que da a luz una bebé que desaparece misteriosamente. En medio del caos político y social de la época, Pedro Campos, un joven periodista limeño toma a su cargo la investigación del caso y emprende con ella una desesperada búsqueda. La cinta, inspirada en hechos reales, con un guion de Melina León y Michael J. White, tiene una magnífica fotografía a cargo de Inti Briones, desarrollada en un blanco y negro lleno de matices y gradientes. El cielo plomizo de Lima se repliega en la vida gris de una familia nativa que no logra adaptarse a la vida urbana hostil, ni a sus costumbres. La historia se desarrolla en un contexto de violencia político-social que degrada, ayer como hoy, en un genocidio físico y cultural del origen mismo de nuestros pueblos. La competencia internacional del SANFIC 15 abarcó nueve cintas de excelente nivel, entre las que destacaron la vietnamita The Third Wife de Ash Mayfair, la chilena El hombre del futuro de Felipe Ríos, la alemana System Crasher de Nora Fingscheidt y la francesa Amanda de Mikhaël Hers.

El SANFIC fue fundado en 2005 y apareció según la revista La Fuga en un momento adecuado. Sus periodistas explican esto diciendo que “Santiago pedía a gritos una actividad cultural como esta: un festival que comunique con filmes de todo el mundo a nivel internacional y con estrenos que es posible que jamás volvamos a ver por estos lares. A la vez, porque cinéfilos, directores, productores, distribuidores, críticos tendremos espacio para vernos las caras en la actividad que más gozamos: ver y hablar de cine”.

Fue un suceso. Desde su primera edición SIGNIS Chile participa regularmente con un jurado propio en este festival internacional, certamen que se celebra anualmente durante el mes de agosto, en la ciudad de Santiago de Chile. En 2018, durante el SANFIC 14 el jurado de SIGNIS Chile premio la película Doubtful, del realizador israelí Eliran Elya. En esa ocasión, el jurado estuvo integrado por los directivos de SIGNIS Chile, Juan Pablo Donoso y Carlos Correa.

Carlos Correa CineMag

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SIGNIS in Latin America & cinema xxxxx

Miguel PEREIRA Importance of national cinema 22 CineMag

Miguel Pereira Importance of national cinema Miguel Pereira (1941-2019), was one of the most active professionals in OCIC and later in SIGNIS, as a film critic for important Brazilian dailies as O Globo, and a professor at a university, in Brasil. As a young film journalist, he was among the advisors for the Brazilian bishops conference to launch the Margarida da Prata prize to award annually the best Brazilian films. It was a very brave decision to do so. Miguel Pereira became not only an ambassador for Brazilian cinema but for quality cinema in general.

At the World Congress of OCIC in 1982 in Nairobi, the participants discovered the sharpness of his views on cinema and values. From the 1980s on, he was actively connected with OCIC and later with SIGNIS. He was present at the creation of SIGNIS-Brazil and he started with a group of researchers from the Pontifícia Universidade Católica do Rio de Janeiro for the same purpose to rationalize the area of cinema within the Association. In 2017 he had planned to organize with SIGNIS an international conference on film and Fr Felix Morlion OP (1904-1987) but could not complete it.

In 1983, Miguel was, for the first time, a member of the international OCIC jury in Berlin. That year Roberto Farias’ film Pra Frente Brasil won a commendation, which showed without any doubt that Miguel could be able to makehis mark by his presence in this jury. It was also a strong political film being a clear approach to the fight for democratic freedom in Brazil and other Latin American countries, and for the effective denunciation of totalitarian regimes.

A year later he was at the first OCIC jury in La Habana where the Prize was given to the Venezuelan film Diles que no me Matan by Freddy Siso. Thanks to him, delete: he obtained that the Festival in Rio de Janeiro invited in the 1980s again an OCIC jury where Edouardo Coutinho’s film Cabra marcado para morrer (Twenty Years Later) obtained the Prize.

Giving the OCIC Prize to this film was paying tribute to a cinema that speaks out for Human Rights and Democracy in Latin America.

It was this critical attitude that made him so beloved among his students and in the world of film journalism in Brazil.

He was also present at the recent general assemblies of SIGNIS.

En 1983, Miguel a été le premier membre du jury international de l’OCIC à Berlin.

Cette année-là, le film Pra Frente Brasil de Roberto Farias a obtenu une mention, ce qui montrait clairement que Miguel avait a su marquer ce jury de sa présence. C’était aussi un film politique fort, qui mettait en avant une approche claire de la lutte pour la liberté démocratique au Brésil et dans d’autres pays d’Amérique latine, et qui s’engageait pour la dénonciation effective des régimes totalitaires.

En 1983, Miguel fue por primera vez miembro del Jurado OCIC en Berlín.

Ese año, la película de Roberto Farias, Pra Frente Brasil, recibió una mención especial, la cual reveló, sin ninguna duda, la presencia de Miguel en ese jurado.También fue una película políticamente honesta en su apuesta por la democracia en Brasil y en otros países latinoamericanos.

Un año después, participó en el primer Jurado de OCIC en La Habana, donde se le otorgó el Premio a la película venezolana Un an plus tard, il était membre du Diles que no me maten de Freddy Siso. premier jury de l’OCIC à La Havane, où le Gracias a él, se logró que el Festival de Prix avait été décerné au film vénézuélien Río de Janeiro invitara de nuevo al jurado Diles que no me Matan de Freddy Siso. de OCIC en la década de los 80s. En Grâce à lui, dans les années 80, le festival 1984, la película documental brasileña de Rio de Janeiro avait de nouveau invité de Eduardo Coutinho, Cabra marcado un jury de l’OCIC à participer au festival para morir, obtuviera el Premio. Otorgar et le film Cabra marcado para morrer el Premio OCIC a esta película fue rendir d’Edouardo Coutinho avait obtenu le Prix. homenaje a un cine que habla por los Donner le prix OCIC à ce film, c’était Derechos Humanos y la Democracia en rendre hommage à un cinéma qui défend América Latina. les Droits de l’homme et la démocratie en Amérique latine.

Fue esta actitud crítica la que lo hizo tan querido entre sus estudiantes y en el C’est cette attitude critique qui avait fait mundo del periodismo cinematográfico de lui quelqu’un de tellement apprécié de Brasil. También participó en los más de ses étudiants et du monde du recientes congresos mundiales de SIGNIS. journalisme cinématographique au Brésil.

Il était également présent aux récentes Assemblées générales de SIGNIS.

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The next generation of filmlovers Cinema and children in Latin America SIGNIS members in Latin America have been involved for many years in cinema for children and building a next generation of filmlovers. Two years after the launching of the Deni Plan (Plan de Ninos) in 1968 and considered as the first systematic experiment in audiovisual education in Latin America OCIC-AL (Catholic International Organization for cinema in Latin America) assumed the project and took it two years later to Uruguay, Brazil, Paraguay, Bolivia, and the Dominican Republic. In Brazil, this project was called CINEDUC. The project was developed mainly in Rio de Janeiro. Sponsorships made it possible to extend the project to public schools and free courses were also created. CINEDUC´S entry into CIFEJ (Centre International du Film pour l’Enfance et la Jeunesse), a UNESCO entity, brought the organization international recognition. In this way, CINEDUC actively collaborated to form theoretical positions about image/education and children and communication vehicles.

During this phase, films, videos and several didactic materials aimed at teachers about the usage of audiovisual language in school were also produced.Today CINEDUC offers courses for teachers in several Brazilian states and video production workshops with youth.

In Uruguay, the OCIC member worked closely together with the film festival, Divercine, in Montevideo founded in 1992.

With the subdivisions of Divercine in other countries such as Argentina (Rosario), Peru (Lima), Mexico (Guadalajara), Chile (Santiago de Chili), Bolivia (Santa Cruz de la Sierra) and Puerto Rico (San Juan), without counting In the interior of Uruguay itself, more than 30,000 children can see one hundred films that are scheduled throughout the continent. This network of film festivals for children which Divercine director Ricardo Casas co-founded in 2004 with Susana Velleggia, Marialva Monteiro and SIGNIS member Pablo Ramos from Cuba this network called (CINIÑO). From 2008 SIGNIS has been present at Divercine film festival in Montevideo with an international jury to give its prize to the best film. In

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August 2019 its jury members Serafín Ilvay (Ecuador), María Eugenia Arana (Uruguay), Vittorio Pilone (Uruguay) made its award to the Mexican short film Stardust (Polvo de estrellas) by Aldo Sotelo Lázaro (México) about a young poor kid working in the garbage to survive who discovers one day by chance a school and a new world opens for him.

The SIGNIS jury emphasized that this film makes clear that today education is still seen by many as a privilege and not as a right. In that sense, Stardust makes an interesting contribution to the debate on the universal right for every child to go to school.

Furthermore, the jury explained that this film denounces the situation of exclusion experienced by many children. This insight can help the filmgoer to become aware of the problem, a problem seen from the perspective of the young boy, who is lucky enough to be able to transcend his reality and “recreate the universe”. This allows the filmgoer to question the situation, to become empathetic and make clear that there is hope and a possibility that society can be changed.

En Divercine 2019 the Argentinean short Chico Miguel by Maximiliano Subila, assisted by Gustavo Winkler and produced

by Adrian Baccaro - three members of SIGNIS Argentina won the award of the Festival jury as best short film. This short film associates the situation of children living in the poorest and most dangerous town in the city of Buenos Aires, Villa Zabaleta, with the story of Miguelito who, in a process of resilience, tries to adapt to his situation of poverty and isolation. Starting from the bond he develops with his doll, together with his

teacher and classmates, they develop an artistic project that will serve as a bridge for the recognition of their father emotionally affected by their marginal situation.

At this festival, there was also a Children's Jury of the DENI Plan made up of boys and girls between 9 and 12 years old, from a school from the city of Minas. This jury award the Spanish film Vs. Santa by Raul Colomer and Aitor Herrero. This jury of youngsters wanted to highlight that Vs. Santa was a very funny short film and a quality production The way the story is presented surprised the members of this jury. They emphasised that this film made clear that having parents and their presence is highly important for them and that the time they spend with them is "more valuable than any gift they can give us". They believe that the film is accessible to all audiences.

Info: Ricardo Casas

Poster of the film Vs. Santa by Raul Colomer and Aitor Herrero.

Cinemag 2 was dedicated to the relation of SIGNIS with children’s film festivals and children’s films. It can be consulted online : www.signis.net/content/cinemag-signis

National SIGNIS Prizes Ukamau y Ké / That’s How It Is, and What!

by Andrés Ramírez (Ecuador/Bolivia) Abraham Bojórquez (Ukamau y Ké) developed the so-called hip hop Aymara, with his social lyrics he shook the Latin American society in the early 21st century. He died violently at the peak of his musical career, the same day he finished recording his second album.Years later, his friend, Ecuadorian rapper and director Andrés Ramírez, returns to Bolivia to uncover the reasons for his death and to find him in the Andean cyclical time. In this surreal journey Ukamau y Ké comes back to life through records, files, and dream visions.

Los Buscadores (The Gold Seekers)

by Juan Carlos Maneglia and Tana Schémbori (Paraguay) Los Buscadores follows Manu, a newspaper delivery boy who lives in La Chacarita and works in the outskirts of Asunción, who one day receives a book that talks about the history of Paraguay, but later discovers that he is hiding a map that may or may not reveal the exact location of a treasure hidden at the time of the Triple Alliance War. Together with his friend Fito and Don Elio, they decide to follow the clues and look for the treasure, which would put an end to the economic problems that everybody is going through living very close to the flooding of the Paraguay River.

A Vida Invisível de Eurídice Gusmão (Invisible Life)

by Karim Aïnouz (Brazil) Two sisters born in Rio de Janeiro make their way through life, each mistakenly believing the other is living out her dreams half a world away.

La Voz propia

by Valeria Sartori (Argentina) A group of women and men who suffered sexual abuse during their childhood tells their stories of struggle in the first person. At a time when the approach to sexual abuse is being modified, they find a way to raise their voices and break the silence.

Joel

by Carlos Sorín (Argentina) Unable to have children, Cecilia and Diego, who have just moved to a small town in Tierra del Fuego, have been waiting for adoption for a long time. While they no longer believed, the sudden arrival of Joel, a 9-year-old boy with a tormented past, will disrupt their lives and the balance of the entire small provincial community.

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Nuestras madres Ce film, tourné au Guatémala en 2018 par Augusto Cesar Diaz de nationalité belgoguatémaltèque, est un bon exemple de la lutte des femmes en Amérique latine pour que la mémoire des années de terreur dues aux régimes dictatoriaux et même aux guerrileros reste vivante.

Augusto César Diaz est né au Guatemala. Il a fait des études de cinéma au Mexique et en France. Il vit en Belgique. Dans ses films il accorde une grande attention au rôle de la femme dans la société et spécialement au Guatemala. « Ce sont même elles qui tiennent encore le tissu social du pays.

Elles transmettent aussi le savoir. Sans elles, le pays s’effondrerait » dit-il dans une interview.

En 2010, Augusto César Diaz tourne le documentaire Semillas de Cenizas qui met en avant une des plus grandes atrocités commises par la junte militaire qui était au pouvoir en 1980 au Guatemala. Le 31 janvier, en pleine guerre civile entre la dictature militaire et les guérillas marxistes, trentedeux représentants d’associations indiennes occupent pacifiquement l'ambassade d'Espa­ gne dans la capitale. Ils demandent que soient reconnus leurs droits et la protection de leurs familles et de leurs communautés.

La réaction des militaires est impitoyable.

Ils ne leur donnent aucune occasion de s’exprimer et mettent le feu à l'ambassade, provoquant la mort de tous ces Indiens.

César Diaz a réalisé ce film avec un regard critique pour commémorer le trentième anniversaire de ce massacre 'oublié' par les

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grands médias. Il questionnait la façon dont le pays traite les familles de ces victimes et surtout comment est fait mémoire de cet évènement. Cinq ans plus tard, le jeune cinéaste, réalise le documentaire Territorio Liberado. Il s’agit d’un travail très personnel sur sa famille. Sa mère lui a toujours raconté que son père était un héros révolutionnaire disparu. Cependant un jour, alors qu’il vivait en Belgique, il décide de rendre visite à sa mère pour connaître la vérité. Il fait à cette occasions deux grandes découvertes : la première est que sa mère n’a jamais raconté la vérité ; la seconde est qui son père a réellement été. Ce film a pu être réalisé grâce au programme Estímulo Gabriel García Márquez para la Creación Cinematográfica en México y Centroamérica, une initiative de l’Instituto Mexicano de Cinematografía (IMCINE) et de la W.K.Kellogg Foundation.

Ces deux organisations veulent soutenir la production de documentaires réalisés du point de vue, et par ceux, qui ne sont pas entendus, c'est-à-dire les communautés autochtones et afro-améridiennes au Mexique et en Amérique centrale. Sur base de ce documentaire César Diaz réalise en 2018 la fiction Nuestras madres. Ce film, une co-production belge, était présenté au Festival international du film francophone

de Namur (Belgique). Il commence en 2018, au moment où l’histoire du Guatemala refait l’actualité et que des militaires qui ont provoqué le déclenchement de la guerre civile ainsi que de la terreur sont appelés, après trente ans, devant le juge. Tous les jours des témoignages des victimes ou de leurs familles sont rapportés par les médias et on entend leur histoire à la radio.

Un jour Ernesto, un jeune anthropologue qui travaille pour un institut cherchant à identifier les cadavres - ou plus exactement les squelettes ou simplement quelques os des victimes de cette guerre sale - rencontre une indigène qui lui raconte l'histoire de l'assassinat de son mari. Cette femme lui montre des photos et raconte que son mari ainsi que d’autres hommes du village ont été massacrés par des militaires parce que la guérilla était venue au village. Elle lui montre des photos de son mari avec un des guérilleros. Ernesto reconnaît son père, qu’il n’avait jamais connu mais seulement vu en photo. Il est bouleversé et va retrouver sa mère qui lui dit de tout laisser tomber. « Ce sont des vieilles histoires », lui dit-elle dit ! Son chef à l’institut ne veut pas non plus qu’il parte dans le village de l’indigène parce qu’à ce moment, son service a trop de travail. Mais Ernesto y va tout de même.

Il entend ainsi ce que les veuves de tous ces hommes tués de ce village lui racontent. Il prend note de toutes leurs histoires. Bien que ce ne soit pas facile, il va tout faire pour faire exhumer ces hommes. Peu de temps après, il apprend que son père a été retrouvé ailleurs, dans une fosse commune.

Déjà en 1972, l’OCIC avait primé le film Coraje del pueblo de Jorge Sanjines, qui parle du massacre des mineurs indigènes en Bolivie en 1942 et des années de répressions qui ont suivi. Dans ce film, on voit aussi le rôle important des mères et des épouses des mineurs.

En 1985 à La Havane, le prix OCIC avait été attribué au film Madres de la Plaza de Mayo qui se passe en Argentine, de Susana Munoz et Lourdes Portilla (Etats-Unis d'Amérique). C’est un des premiers films qui aborde ce thème des plus déchirants de la réalité latino-américaine contemporaine, la recherche des enfants perdus (morts ou donnés en adoption). Quinze ans plus tard le film argentin de David Blaustein Botin de Guerra avait obtenu le prix œcuménique à Berlin. Le film présente la lutte continuelle des grandes mères de la Plaza de Mayo, cherchant à retrouver leurs petits-enfants, nés en captivité ou kidnappés durant la période de la dictature. Au-delà de leur terrible épreuve, c’est leur courage qui est décrit. Ce sont aussi ces « madres » qui ne veulent pas qu’on oublie les atrocités et les injustices de la dictature en Argentine. En 2012 le prix SIGNIS WACC a été attribué au documentaire Verdades verdaderas de Nicolas Gil Lavedra, qui traite de la lutte de Estela de Varlotto et des Grandes Mères de la Place de Mai.

Le documentaire colombien Impunity de Juan Jose Lozano et Hollman Morris, prix SIGNIS à Toulouse, montre aussi comment ce sont surtout les Colombiennes qui demandent justice pour les atrocités

commises par des paramilitaires dans les années 1990 contre la population indigène.

Une nouvelle revue internationale du cinéma

Il n'est pas facile, même dans un état démocratique, de faire toute la lumière sur l'Histoire récente et ses conséquences sur la population. En 2014, le cinéaste péruvien Héctor Gálvez, reçoit le pris SIGNIS à Munich pour NN. Il y raconte l'histoire d'une équipe d'anthropologues qui, comme Ernesto dans Nuestras Madres, reconnaît l'importance émotionnelle des familles qui cherchent à savoir la vérité sur leurs proches disparus afin de rétablir leur identité et leur dignité. Dans chaque cas existe le besoin de justice et d'éclaircissement d’un passé obscur envers le rôle des dirigeants et des militaires autoritaires et antidémocratiques.

Avec ce film, Héctor Gálvez montre que les pouvoirs judiciaire et exécutif ont toujours empêché la reconnaissance de l'identité des disparus.

Le cinéma est omniprésent dans nos sociétés. SIGNIS tient compte de cette présence signifiante. Cet art, expression de la créativité humaine, est comme un média qui influence les cultures avec des valeurs et des visions sur la vie et le monde. Depuis 1947, l’association, alors appelée OCIC, a été invitée par les festivals internationaux pour mettre en place des jurys SIGNIS, œcuméniques et inter-religieux afin de promouvoir des films de qualités, traduisant artistiquement ses valeurs. Ainsi plus de 2000 films ont été primés ou distingués, la plupart étant devenu des classiques. Cette nouvelle revue veut marquer la présence de SIGNIS dans le monde professionnel du cinéma mais aussi être un outil pour ses membres, journalistes, critiques du cinéma et éducateurs aux médias travaillant dans plus de cent pays.

Ce n'est pas un phénomène lié à l’Amérique Latine. C'est également le cas en Espagne. Après la chute du fascisme dans ce pays en 1975, les partis politiques ont convenu d’oublier la mémoire des atrocités commises pendant la guerre civile et surtout pendant la dictature de Franco (1939-1975). Durant cette période le Caudillo avait emprisonné des mères, des filles et des épouses de ses adversaires communistes et autres, pour la plupart innocentes. Beaucoup d'entre allaient être tuées arbitrairement par les phalangistes et leurs corps enterrés anonymement dans des fosses communes. Le film La Voz Dormida de Benito Zambrano, prix SIGNIS au festival Muestra Internacional de Cine de Santo Domingo (République Dominicaine) en 2012, a contribué au mouvement pour la restitution de la mémoire pour que les restes de ces femmes puissent être rendus à leur famille et enterrés avec dignité.

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By the Name of Tania Ce film, réalisé par la belge Bénédicte Liénard et la péruvienne Mary Jiménez, parle du destin de Tania, une adolescente contrainte à se prostituer dans la région des mines d'or du Pérou. Il est basé sur des témoignages réels d'une jeune adolescente péruvienne qui était séduite par des bonimenteurs qui lui ont promis un riche avenir.

Tout se passe d'un côté dans un jungle splendidement filmé et d'un autre côté dans des bars misérables.

Le sort de Tania n'est pas unique. Comme elle, des milliers de jeunes filles sont attirés par la prostitution presque sans issue où la mort est omniprésente.

Ce film était présenté au Festival international du film francophone de Namur.

GC

A new international film magazine Today, cinema is still very present in society.

SIGNIS takes into account this significant presence. This art, an expression of human creativity, is like a medium that influences cultures with values ​​and worldviews Since 1947 the organization, called at this time OCIC, has been invited by international festivals to participate with juries (SIGNIS, Ecumenical and inter-religious) to promote quality films that artistically translate values.

In its 72 years, more than 2,000 films have been awarded or mentioned and most are now considered classics. This new journal wants to mark the presence of SIGNIS in the world of the cinema but also to be an organ for its journalists-critics and media educators working in more than one hundred countries.

Una nueva revista de cine internacional Hoy en día, el cine sigue estando muy presente en la sociedad y SIGNIS está consciente de ello. El cine, una expresión de la creatividad humana, es como un medio que influye las culturas con valores y visiones del mundo. Desde 1947, la organización, denominada en esa época, OCIC, fue invitada por diversos festivales internacionales a participar con jurados (SIGNIS, ecuménicos e interreligiosos) y promover películas de calidad que traduzcan valores de forma artística.

Desde entonces, más de dos mil películas han sido premiadas o han ganado una mención. Con el tiempo, la mayoría de las cintas galardonadas se han convertido en clásicas. Esta nueva revista quiere marcar la presencia de SIGNIS en el mundo del cine, pero también convertirse en un órgano de referencia para periodistas, críticos y educadores de los medios de comunicación en más de cien países.

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SIGNIS – Rue Royale, 310 – 1210 Brussels – Belgium Tel: 32 (0)2 734 97 08 – E-mail: sg@signis.net – www.signis.net @SIGNIS – facebook.com/signisworld – youtube.com/user/signisworld