Colección Novenas & Novena bíblica al Divino Niño EQUIPO DE REDACCIÓN DE EL DOMINGO & Novena a la Divina Misericordia EQUIPO DE REDACCIÓN DE EL DOMINGO & Novena a Nuestra Señora del Carmen MONS. ARCENIO RAÚL CASADO & Nueve visitas al Santísimo Sacramento FERNANDO TESEYRA & El Rosario y los misterios de la luz, JUAN CARLOS PISANO & El Espíritu Santo prometido, JUAN CARLOS PISANO & Rosario de sanación, GUSTAVO E. JAMUT & Novena de las familias EQUIPO DE REDACCIÓN DE EL DOMINGO & Novena a la Madre Teresa EQUIPO DE REDACCIÓN DE EL DOMINGO & Novena bíblica a san Cayetano EQUIPO DE REDACCIÓN DE EL DOMINGO & Novena a santa Teresita del Niño Jesús MARÍA CECILIA JAURRIETA, OFS & Meditando el rosario en clave franciscana MARÍA CECILIA JAURRIETA, OFS & Novena a san Juan de la Cruz MONS. ARCENIO RAÚL CASADO & Rosario de bendiciones, GUSTAVO E. JAMUT & Rosario de resurrección, GUSTAVO E. JAMUT & Novena a San Martín de Porres, FERNANDO TESEYRA & Rosario de bendición familiar, GUSTAVO E. JAMUT & Rosario de alabanzas, GUSTAVO E. JAMUT & Rosario de sanación intergeneracional, GUSTAVO E. JAMUT & Rosario para ser libre de los temores y de los miedos, GUSTAVO E. JAMUT
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P. Gustavo E. Jamut, OMV
ROSARIO PARA SANAR LAS HERIDAS DEL VIENTRE MATERNO
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Distribución San Pablo:
Introducción
Argentina Riobamba 230, CI025ABF BUENOS AIRES, Argentina. Tels. (011) 5555-2416/17 - Fax (011) 5555-2439. www.san-pablo.com.ar - E-mail: ventas@san-pablo.com.ar
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Jamut Gustavo E, Rosario para sanar las heridas del vientre materno - I° ed.Buenos Aires: San Pablo, 2009 48 p.; 15,5x11 cm.I.S.B.N. 978-987-09-0044-3 I. Libros de devoción I. Título CDD 242.74
Con las debidas licencias / Queda hecho el depósito que ordena la ley 11.723 / © SAN PABLO. Riobamba 230. C1025ABF BUENOS AIRES, Argentina. E-mail: director.editorial@san-pablo.com.ar / Impreso en la Argentina en el mes de Octubre de 2009 / Industria argentina. I.S.B.N.: 978-987-09-0044-3
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Para algunas personas, la etapa de la gestación todavía es un misterio total. Sin embargo, desde hace ya bastante tiempo, la ciencia viene estudiando y ha demostrado que la criatura que se está gestando en el vientre materno es sujeto de recepción de estímulos y de un sinfín de experiencias emocionales, que le llegan desde el exterior, a través de la madre. De este modo, los meses que un niño transcurre en el santuario del vientre mater no son fundamentales para el desarrollo pleno de su vida. En el momento que la madre intuye que está esperando un niño, la criatura comienza a cobrar una percepción cada vez más definida e intensa de su propia existencia. En ese sentido, un niño cuya llegada es recibida por su madre y por su padre, con aceptación y amor, estará recibiendo, desde el vientre materno, una oleada de fortaleza y seguridad que lo acom pañará durante el resto de su existencia, y le será de gran ayuda para ir plasmando la propia identidad, superar los obstáculos normales de la vida y concretar las diversas metas que ese hombre o esa mujer se vaya fijando. -5-
Por el contrario, cuando el bebé recibe, de su madre, la información de que ha sido una criatura no deseada, y ella no revierte esa primera reacción negativa en una aceptación amorosa, se sentirá rechazado, lo cual, tal como se ha demostrado, producirá, en el futuro, repercusiones negativas en su conducta, como, por ejemplo, retraimiento, búsqueda obsesiva de aprobación o agresividad. A esto se suma que la criatura percibirá, a lo largo de los meses que dura la gestación, las vivencias y los estados emocionales por los que atraviesa su madre. No obstante, la Buena Noticia es que no hay ningún mal sobre la tierra que el amor de Dios no pueda curar. Nuestro Señor tiene la medicina adecuada para sanar, por medio de su amor, estas dolencias congénitas. En los retiros que vengo dando con esta temática, en varios países del mundo, experimento que, más allá de los diferentes idiomas y de las diversidades culturales, los problemas son, más o menos, los mismos para todos; y que, en todos los lugares, el Señor nos anima a recorrer ―desde la oración y la contemplación de algunos misterios bíblicos, tales como su encarnación, la visitación o el nacimiento en Belén― nuestro propio camino de restauración, permitiendo que la gracia que brota -6-
de esos momentos salvíficos impregnen nuestro ser y renueve, en nuestras mentes, el registro que tenemos de los primeros meses de vida. A partir de esa realidad, el Señor hace maravillas en sus hijos e hijas, independientemente de cómo haya sido la historia de la propia gestación. Este rosario de la gestación no sólo es para pedir sanación, sino también para dar gracias a Dios por el don de la vida, alabarlo por nuestra existencia y revivir nuestro deseo de servirlo. Antes de ser rosario escrito, fue un rosario orado, que he utilizado en un sinnúmero de retiros espirituales, ayudado, incluso, por las imágenes de una presentación en power point. Debido a la insistencia de tantos hermanos, es hora de publicarlo, de modo que, pudiendo llegar a una mayor cantidad de personas, también sean más los que reciban las gracias que Nuestro Señor quiere derramar, por la intercesión de María, Madre suya y Madre nuestra. El Señor te dice: Éste es el tiempo favorable, éste es el día de la salvación (2Cor 6, 2).
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Testimonios para la gloría de Dios Testimonio 1 “Querían un varón” Me llamo Leticia, soy psicóloga y vivo en la isla de Tenerife. Participé del retiro que el padre dio en el auditorio de Las Arenas. Quería que le hicieran llegar al padre el mensaje de que tocaron muy adentro de mi corazón todas sus palabras y oraciones. Las enseñanzas del retiro han enriquecido mis conocimientos, puestos al servicio de la gente por medio de la psicología, pero también me han revelado algo que ya intuía, y, en el retiro, sentí confirmado: una “herida de no ser”. Mis padres deseaban mucho un hijo varón y sufrieron una gran decepción al nacer yo y ver que era otra hija mujer, ya que, antes de mí, habían nacido otras dos niñas. De hecho, cuando era pequeña, muchos de los juegos que yo jugaba eran de varones, como para agradar a mi padre, que era quien siempre decía que Dios no le había querido dar hijos varones. Yo pensé que esto ya lo había superado, pero me di cuenta de que no era así, pues seguía perturbándome el recuerdo de esa situación. -8-
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En el retiro, no sólo comprendí esto, sino que, demás, la comprensión se transformó en liberación, al descubrir el poder que tiene la oración, cuando se hace desde el corazón y bajo la guía del Espíritu Santo. En estos dos meses, siento un cambio muy profundo en mi interior, en relación conmigo misma, con mi familia y con mis pacientes. Por lo cual, le hago llegar mi testimonio con toda mi estima y mi agradecimiento. Dra. Carmen Leticia N., Tenerife, España.
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Testimonio 2 Maravillas haces tú, Jesús Padre Gustavo: Hace un tiempo que hice, con usted, un retiro de sanación de las heridas del vientre materno y le cuento que, unos pocos días atrás, el Señor me mostró la raíz de mi herida. Ahora, luego de haberlo visto y orado, me siento sano para la gloria de Dios. Le cuento que, desde que era niño, mi mamá me decía que yo era muy triste, que no jugaba, y los médicos no me encontraban nada. Recuerdo que, a los seis o siete años, le regalé todos mis juguetes a mi hermano, porque yo no quería vivir más. Recuerdo que sentía mucha tristeza los días de mi cumpleaños; lloraba todo el día y, así, crecí con muchas inseguridades y sentimientos de inferioridad, pues creía que era distinto de todos los demás niños. A los veintiséis años, tuve una crisis amorosa y tomé por el camino del alcohol, cigarrillos, mujeres y todo lo que me ofrecía el mundo, y, cada día, me sentía peor y tenía menos paz. La ansiedad y la depresión se hicieron compañeras inseparables de mi vida. Entonces, consulté -11-
psiquiatras, neurólogos, psicólogos, sin encontrar la respuesta a mis problemas. Una de las noches que solía venir borracho, me acosté y, cuando desperté, tenía la Biblia en la mano. Está claro que estaba ciego, porque la tomé, la puse abierta dentro del placard y me fui a trabajar sin darle importancia. Cuando regresé, mi mamá me llamó asombrada y me preguntó si había estado leyendo la Palabra. En ese momento, comencé a darme cuenta de que esto era un llamado de Dios. La cita era Jeremías, capítulos 2, 3 y 4. A partir de allí, inicié mi regreso como hijo pródigo, lo cual no fue nada sencillo, porque ya tenía problemas con el alcohol y aún no aguantaba mucho estar en la misa o frente al Santísimo. Hasta que empecé a postrarme ante Jesús y a pedirle que me liberara, que yo quería, pero que solo no podía. De a poco, el Señor fue haciendo su obra y liberándome del alcohol, del cigarrillo, y de otras cadenas, aun así, no tenía paz. Luego, tuve dos noviazgos más, pero no podía amar y veía que todo lo que emprendía se desmoronaba. Seguí caminando en Jesús y me dispuse, a pesar de todo, a trabajar para su Reino. El Señor me fue mostrando que mi relación con mi madre no era buena y que mi infelicidad se -12-
transmitía en la vida afectiva y en mi modo de relacionarme con la imagen de la mujer. Durante la oración, el Señor me señaló la raíz, que era una carga negativa que recibí de mi madre en el vientre materno. Al entregar y perdonar, el Señor me fue liberando de los síntomas de inseguridad, intranquilidad, oscuridad, angustia, inestabilidad, e hizo ver que estos síntomas eran consecuencia de mi odio inconsciente hacia mi mamá. Me acerqué a confesarme, y el sacerdote me dijo: “En este retiro, el Señor te va a sanar, y, desde hoy, no vas a caminar, sino que vas a volar”; y oró por mí, pidiendo a Dios que cortara los efectos de cualquier influjo negativo, y yo sentí que nacía de nuevo. También me dijo que en mí había un amorodio, que las mujeres percibían, y que ése era el motivo de tantos fracasos en mis noviazgos. En la efusión del Espíritu Santo, percibí que el Señor me decía que era él quien me había formado y elegido, y que me daría todo lo que le pidiera. Comparto este testimonio para la gloria de Dios, porque no hay nada imposible para él, y su amor no se deja ganar en generosidad. Hoy estoy llevando adelante, por medio de la oración, un proceso de perdón hacía la imagen fe-13-
menina y siento que el Señor sigue restaurando el momento de mi concepción y la relación con la mujer. Por primera vez, me siento vivo, en paz, para la gloria de Dios. Darío, Santa Fe, Argentina.
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Testimonio 3 Programación del sexo Mi sexo fue programado por mi padre, por un método que le fue entregado (le envío fotocopia del calendario que usted vio en el retiro de sanación desde el vientre materno). Por medio del retiro, el Señor Jesús me mostró, el primer día, el instante de mi concepción: fue con mucho amor y expectativa por el resultado. Al segundo día del retiro, por la mañana, Jesús me reveló una conversación entre mis padres: estando yo en el vientre de mi madre, mi papá le dijo a mi madre: “me están robando”. Mi padre tenía un negocio de ramos generales en otra ciudad de las sierras de Córdoba. Puso mi padre a su cuñado (mi tío) como socio. Este, con sus hermanos y padre, le robaban herramientas y alimentos a mi padre. El negocio se fundió, y quedó, hasta el día de hoy, ese rencor no manifiesto, pero tapado, oculto, en mi familia. Siendo yo adolescente, un día, le robé, a ese tío, una escopeta. Después de unos años, se lo confesé y le hice un regalo de mayor valor que lo robado. Me sentí perdonado. -15-
Por la noche del segundo día del retiro, el Señor me reveló el momento de mi nacimiento; fue una alegría tremenda, sobre todo de mi papá, el método había dado resultado: era varón. Puedo describir la habitación, el color de la puerta, etcétera, y mis dos hermanas esperando que llegara la cigüeña. Jesús me señaló, que siempre, en el mismo mes de gestación, sentía presión, impulsos de irme, de huir. Lo hice, por primera vez, a los dieciséis años. Ya casado, me fui cuatro veces, siempre en la misma fecha. Cuando cursaba el secundario, no podía continuar más allá del mes de gestación, esto se repitió cuatro veces. Siempre me resistí a todo lo formal y programado. Obsesivo con las pertenencias y comprador compulsivo. El domingo, último día del Retiro, durante la consagración, sentí que el Señor Jesús me decía: “Por entregarme el corazón, rompo las cadenas que te hacen huir”. Pues, en mi última huida, había traicionado a Jesús y a mi familia. Decidí entregarle mi vida a Jesús, y, desde ese instante, cataratas de bendiciones inundan mi vida y hogar. -16-
Éste es el comienzo maravilloso de vivir con Jesús y para Jesús. Ahora, hasta abrazo con el amor de Jesús a los que se manifiestan como enemigos. Ésta es una parte de mi testimonio de lo que en mí está obrando Jesús. Son testigos de mi cambio: mi esposa, mis cinco hijos, mis tres yernos, mi madre, mis hermanas, mi tío y mis amigos de la juventud que testifican de mi comportamiento. Tadeo B., Córdoba, Argentina. “La vida es como una montaña rusa. No se trata de llegar al final del paseo, si no de disfrutar lo que sucede en el trayecto”. Para hacernos llegar tus testimonios, puedes escribir a: www.sanroquercc.com Introducción En este rosario, contemplaremos los misterios de la gestación de Jesús y, bajo la luz de su encarnación y nacimiento oraremos a Dios, pidiéndole la gracia de la restauración de la concepción y la -17-
sanación de cualquier efecto negativo que se haya producido en el instante de la concepción, durante los meses de gestación, y en el momento de nacer.
En el Primer Misterio Contemplamos el anuncio del Arcángel Gabriel a la Virgen Santísima y la concepción del Hijo de Dios en el seno purísimo de María. Texto bíblico inspirador
Inicio (+) Por la señal de la santa cruz, de nuestros enemigos, líbranos, Señor, Dios nuestro. (+) En el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Acto penitencial: - Por las veces que no hemos valorado el don de la vida que recibimos. Señor, ten piedad. - Por la veces que no hemos visto la vida de nuestros prójimos, como un don de Dios. Cristo, ten piedad. - Por las veces que hemos olvidado de adorar a Dios, autor de la vida. Señor, ten piedad. -18-
No temas, María, porque Dios te ha favorecido. Concebirás y darás a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús... Dijo María: “Yo soy la servidora del Señor, que se cumple en mí lo que has dicho” (Lucas 1, 30-31 y 38). Petición: Nos unimos con nuestro espíritu, nuestra mente y todo nuestro ser a ese momento tan sagrado de la encarnación, y en la fe también nosotros nos volvemos pequeños y nos refugiamos en el seno purísimo de la Virgen, pidiéndole a Jesús y a María que nos colmen de amor; y que, con el poder del Espíritu Santo, renueven el momento en que fuimos concebidos. Padre Nuestro 1. Te pedimos, Señor Jesús, que tu sangre lave y verifique el instante de nuestra concepción de -19-
cualquier perturbación que hayamos recibido en ese momento... Dios te salve, María... 2. Te entregamos, Virgen María, el temor que pudo haber sentido nuestra madre al intuir que estaba embarazada... Dios te salve, María... 3. Libéranos, Padre Dios, de cualquier desorden o concupiscencia recibidos en el vientre materno... Dios te salve, María... 4. Cólmanos, Espíritu Santo, de tu amor, supliendo el afecto que pudo haber faltado en el momento de la concepción... Dios te salve, María... 5. Libera, Jesús, nuestros corazones de toda falta de conciencia que pudo haber venido de nuestros padres cuando ellos eran instrumentos tuyos para darnos la vida... Dios te salve, María... 6. Sana, Padre Amado, toda herida de rechazo que hayamos podido recibir hacia nuestra existencia... Dios te salve, María... 7. Libera, Jesús, a esa criatura de cualquier herida producida por la idea errónea que pudieron tener sus padres de que llegó por accidente... -20-
Dios te salve, María... 8. Apacigua y sana, Espíritu de Dios, el corazón de esa pequeña criatura herida, que aún habita en nosotros, por cualquier pensamiento que haya percibido de rechazo a su existencia... Dios te salve, María... 9. Ponemos en tus manos, Virgen Santa, a ese niño, cuya madre hacía todo lo posible para ignorar su existencia y le negaba la atención que requería desde el momento mismo de la concepción... Dios te salve, María... 10. Te pedimos, Señor, que le regales a este(a) hijo(a), que en estos momentos está en tu presencia, una nueva concepción... Dios te salve, María... Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo... Jaculatoria: Por el poder de tu encarnación, bendícenos y sánanos, Señor.
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En el Segundo Misterio Contemplamos a la Virgen María, que embarazada de Jesús, se pone en camino con prontitud, para visitar a su pariente Santa Isabel, quien también está esperando a un niño. Texto bíblico inspirador En aquellos días, María partió y fue sin demora a un pueblo de la montaña de Judá (Lucas 1, 39). Petición: Virgen peregrina, nos unimos, con nuestro espíritu, nuestra mente y todo nuestro ser, a ese momento en que te pusiste en camino para visitar a tu pariente Isabel. Te entregamos, en este misterio, los tres primeros meses de nuestras vidas en el vientre materno para que sean renovados por tu amor maternal; y te pedimos que recibas todo lo que pudo haberse producido en nosotros por experiencias maternas de viajes, trabajo excesivo, cansancio o búsquedas incesantes. -22-
Padre Nuestro 1. Te pedimos, Señor Jesús, por esa criatura que de algún modo experimentó que sus padres querían programar su sexo. Con tu sangre, sánala de cualquier consecuencia negativa... Dios te salve, María... 2. Te entregamos, Virgen María, el enojo que recibimos en el vientre materno y que pudo haberse instalado en nuestras almas... Dios te salve, María... 3. Libéranos, Jesús, de cualquier circunstancia que nos llevó a realizar una elección inconsciente de querer vivir con nuestras solas fuerzas... Dios te salve, María... 4. Cólmanos, Espíritu Santo, de la aceptación que necesitamos en estos meses de desarrollo en el vientre materno, para tener una vida emocionalmente sana... Dios te salve, María... 5. Libéranos, Padre Dios, de cualquier situación que nos llevó a realizar una elección inconsciente de muerte... Dios te salve, Marta... 6. Jesús, tú sabes en qué momento exacto nuestro corazón comenzó a latir. Pon Señor, en ese ór-23-
Índice Introdcción.................................................................
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Testimonios para la gloria de Dios Testimonio 1: “Querían un varón” ........................ Testimonio 2: Maravillas haces tú, Jesús ............... Testimonio 3: Programación del sexo..................... Introducción ................................................................ Inicio ............................................................................ Acto penitencial ...........................................................
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En el Primer Misterio Texto bíblico inspirador ........................................... Petición ....................................................................... Padre Nuestro ........................................................... Jaculatoria ..................................................................
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En el Segundo Misterio Texto bíblico inspirador ........................................... Petición ....................................................................... Padre Nuestro ........................................................... Jaculatoria .................................................................. -42-
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En el Tercer Misterio Texto bíblico inspirador .......................................... Petición ...................................................................... Padre Nuestro ........................................................... Jaculatoria ..................................................................
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En el Cuarto Misterio Texto bíblico inspirador .......................................... Petición ...................................................................... Padre Nuestro ........................................................... Jaculatoria ..................................................................
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En el Quinto Misterio Texto bíblico inspirador .......................................... Petición ...................................................................... Padre Nuestro ........................................................... Jaculatoria .................................................................. Oración .......................................................................
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