Producción y Diseño Francisco Astorga Matías Egea Marcelo Astorga Contacto supercheriafanzine@ gmail.com Imagen de Tapa Théo Gosselin Imagen de Centro Amiel Balderramas Sintonía Medusal Foto Montaje Imagen Pag 10/11 Constanza Delfino Tinta y Microfibra
Imagen de Contratapa Siyu Chen
Coordenadas para que el ayer, mañana, sea hoy.
Ruedan imanes y se pegan, algunos de a tres. Ríen quienes lo han visto, al menos son tres. Suena lindo, quedan los versos justos, Soloquedantrés. Tres trenes, Dos Vías, Un mes. Crocante, muy fresca, contesta la rima: 1+1=2 y 2+1=3 (Nótese que no es “1+1+1” sino “2+1” los que suman 3) Marcel y Yo
Encantador de Marmotas
La cara blanca de polvo y pintura, nariz y ojos rojos por el mismo polvo y demás, una cabeza claramente ofuscada, escaso pelo de los colores que quieras. El maquillaje luce un poco gastado, sólo un poco, nada feo, más curtido solamente. Y para qué saber más… Por lo peculiar de su vocación despierta pasiones ambiguas en quienes reposan sus rabos a escucharlo. Risa, complacencia, pavor y odio es lo más frecuente. Escupe a menudo, a menudo lo escupen, pisa mierda y caga en medio de las flores. Cosas que a todos les suceden. Por la mañana se toma algunas horas para inflar globos, los ata y cuidadosamente, con sus guantes grises puestos, les amarra un hilo delgado que los hace maleables. Ideal para un niño, ideal para jugar; y con tanto alcance y tensión como para reventar en cualquier momento. Por las madrugadas, los globos que no son vendidos sufren mejor suerte. El cuchillo siempre a tono para la ocasión lo espera ansioso en el cajón de la mesa de luz (el que no tiene manija) envuelto en un trapo de seda, dado el excesivo filo y su neurótica obsesión. Sudado y algo cansado reparte manotazos profundos y certeros que culminan siempre, o casi siempre, con algún humo y la tranquilidad de un día acabado.
De polvos, pinturas y globos.
Encantador de Marmotas
Francisco Astorga - Foto Montaje
Se Avecinan las Lluvias.. Se avecinan las lluvias! Se avecina el sol! Se avecinan las locuras, las mejores, esas que no tienen razón de ser, esas charlas que parecen suceder en un lugar alejado de donde venís, esa libertad de respirar y reprochar lo que fuere, pues el clima es tan cálido que nada molesta, ni que refuten, ni aunque se esfuercen por hacer pasar malos ratos. O al menos esto veo, eso siento… Ahora lo digo, con seguridad, y sin titubear. Estoy seguro que quien habla soy yo. Seguramente esperabas algo más interesante… Ese es tu error, si no hubieras esperado por nada este escrito no sería este escrito. Sería quizá una grata sorpresa, un aire que llega ante lo sofocante que se vuelve la rutina cuando se apagan las perspectivas de que hay algo más entre un texto y quien lo escribe, hay algo más entre las palabras y quien las lee. Ya que arruinaste tu sorpresa, voy a pasar a preguntarte algo. Algo que en realidad quiero que te preguntes. ¿Quién sos? Y no me contestes que haces, cuál es tu ocupación, tus gustos, o ideales… No me contestes con el nombre que alguien te puso derivado de una novela, de un familiar difunto o por alguna razón inentendible, como el significado bíblico o porque ese día había sol… Ya casi que no sos nadie, pero el hecho de que te lo estés preguntando te encuentra ahí, presente, un alguien, un rasgo, un gesto en los labios, una mirada confundida, o cualquier postura que tengas en este instante te pertenece. Verás pienso que no somos más que una reacción a todo lo que nos atraviesa. La cultura, la educación, la religión y este mismo texto te condicionan, te estructuran, no permiten que tu reacción sea espontanea, sino una acción falaz basada en el sentido común, la lógica, y cuanto estratagema hayas incluido en ese armatoste que te recubre y adorna
Marcel y Yo
Francisco Astorga - TĂŠcnica Mixta