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4 Padres que viven a través de sus hijos Como padres siempre buscamos lo mejor para nuestros hijos, nos interesa que salgan adelante y que tengan un futuro brillante, queremos que sean exitosos. Pero, exitosos ¿según quién?
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olemos tener ideas y perspectivas del futuro que queremos para nuestros hijos, puede que nos imaginemos qué carrera va a estudiar y a qué universidad queremos que vaya incluso cuando son muy jóvenes para siquiera tener conciencia de ello. Es normal, es parte de ser mamá. Está bien soñar con su futuro, el problema es cuando vemos en nuestros hijos una segunda oportunidad de lograr aquello que nosotras mismas no hicimos. En ocasiones los niños son empujados por sus padres a seguir un camino que no es el que ellos preferirían. Padres que suelen sentirse insatisfechos con sus vidas ven en sus hijos la oportunidad de retomar el camino y vivir, a través de sus hijos, sus sueños. Pero no solo se trata de lograr lo que no lograron, sino de evitar que cometan los errores que ellos cometieran, limitándolos de la posibilidad de aprender de sus propios errores. No es difícil caer en esto. Nos preocupamos por nuestros hijos y queremos llevarlos por el mejor camino -el que nosotros consideramos que es mejor-. Solo buscamos lo que es bueno para ellos y a menudo no nos damos cuenta de que estamos viviendo a través de ellos. Pero estas actitudes pueden tener efectos adversos en nuestros hijos, poniendo una inmensa presión sobre sus hombros y provocando resentimientos, frustración e incluso depresión. La cuestión se dificulta cuando los hijos se convierten en adultos jóvenes, y dado que no comparten los intereses de sus padres, se rebelan ante la imposición de un sueño que no es el suyo, causando conflictos.
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Es importante entender que si bien nuestro papel como padres es guiar a nuestros hijos y darles las herramientas que necesitaran para su futuro, es necesario que ellos tengan espacio y libertad para actuar y pensar de acuerdo a sus propias convicciones. Nuestro papel es mostrarles el camino, no llevarlos de la mano. Es muy tentador querer resolverles la vida, en parte porque nos preocupa su bienestar y en parte, tal vez menos consciente, porque lo vemos como una oportunidad de corregir nuestra propia vida. Pero debemos dejarlos vivir la suya. Es necesario detenerse a reflexionar si estamos viviendo a través de nuestros hijos, pueden ser pequeñas actitudes que no notamos, pero cuestiónate, ¿en verdad estas impulsándolo a seguir su camino? ¿De verdad lo estas escuchando? ¿En verdad sabes lo que quiere o es lo que tú crees que quiere? En lugar de intentar vivir a través de tu hijo ¿por qué no intentas cumplir tu sueño por ti? Querer que ellos vivan el sueño por nosotros es asumir que nuestra propia vida ya no tiene nada más que ofrecer. Atrévete a seguir tu sueño, no siempre es sencillo, pero nunca es demasiado tarde para empezar a hacerlo. Vive tus sueños y deja que tus hijos vivan los suyos
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8 Somos lo que pensamos A menudo asumimos que nuestra personalidad, actitudes y emociones determinan lo que somos o lo que podemos hacer.
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emos a alguien tímido y pensamos que quizá no sería capaz de atreverse a llamar la atención. Pero lo cierto es que algunos estudios indican que la forma en que actuamos, también afecta lo que pensamos o sentimos. Un estudio sobre la atracción dirigido por Glen P.Williams y Chris L. Kleinke, publicado en el Journal of Research in Personality, dividió a parejas de desconocidos que debían verse a los ojos o no, tocarse o no y la opción de ambas o ninguna; actitudes que comúnmente se presentan cuando una pareja comienza a salir. Aquellos que debían tomar las actitudes propias del coqueteo, reportaron sentir una mayor atracción por la persona con la que compartieron el experimento.
transformarnos. Así como un hábito requiere de tiempo y constancia, cualquier cosa que deseemos cambiar de nosotras mismas, necesitará que actuemos en ese sentido hasta convertirnos en ello. Para ser hay que hacer, debemos actuar conforme a lo que queremos ser, proyectarlo en nuestras acciones. Quizá de pronto sintamos que estamos fingiendo, que estamos mostrando una cara que no es la nuestra. Pero solo a través de la constancia será posible transformarnos en lo que hemos deseado.
Y es que no solo nuestro cerebro determina nuestras emociones, también nuestro cuerpo influye en cómo percibimos nuestro entorno. La cercanía, el toque o la mirada. Actuar como si estuvieran en esa fase de atracción, les hizo sentir atraídos. Son nuestras acciones las que determinan quienes somos, y esto es en el sentido más literal. La forma en que actuamos tiene impacto en nuestro cerebro. Una persona tímida puede dejar de serlo si decide actuar como si no fuera tímida. Aunque al principio se sienta nerviosa, proyectar seguridad, finalmente se la dará. Nuestro cuerpo tiene un lenguaje que podemos utilizar a nuestro favor. Las posturas y gestos afectan como nos sentimos. Nuestras acciones influyen en nuestro pensamiento. Si queremos sentirnos felices solo basta con sonreír. Aunque al principio sintamos la sonrisa forzada, en nuestro cerebro se recibe la señal de que estamos sonriendo y se generan los cambios necesarios para hacer ese estado cierto. A veces nos detenemos de hacer cosas que nos gustarían porque sentimos que no estamos hechos para eso. Dudamos de nosotras y evitamos intentarlo. Sin embargo, la constancia de una acción nos hace
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10 Abre tu mente; las posibilidades son infinitas.
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n ocasiones nos sentimos desalentadas, no encontramos lo que nos apasiona o sentimos que será demasiado difícil lograr lo que deseamos.Abrir nuestra mente puede ser la clave que necesitamos para encontrar respuestas, vivir más motivadas, estimular nuestra pasión y lograr todo lo que queremos. En tradiciones ancestrales, la conciencia y la mente abierta eran consideradas un despertar espiritual, la iluminación que combate el miedo y la confusión al tiempo que nos brinda paz, claridad y felicidad. Tener una mente abierta, flexible y dispuesta a aprender nos hace ser más fuertes y nos permite desarrollarnos mejor ante situaciones nuevas o adversas. La pasión no es aquello que hacemos, sino aquello que sentimos. Tener la mente abierta nos acerca a las posibilidades, nos hace sentir curiosas y motivadas. Abrir nuestra mente es también una forma maravillosa de encontrar aquello que nos apasiona –si aún no lo hemos descubierto— y es también una forma exquisita de disfrutar el mundo. Cuando abrimos nuestra conciencia somos más perceptivos y estamos abiertos a las nuevas experiencias, nuestros sentidos parecen más atentos y potencializamos nuestra capacidad de sorprendernos. Podemos vivir la vida con pasión. Y es que no tener una pasión no significa que no podamos vivir apasionados. La pasión es un motor y bien podemos activarlo hacía algo específico que disfrutamos o hacia todos los aspectos de nuestra vida. Pero para vivir apasionadamente se requiere tener una mente abierta. Esto nos permitirá entrar en contacto con la parte más profunda de nosotras mismas, nuestro verdadero yo.
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Meditación: Esta es una de las formas más efectivas para abrir nuestra mente. Nos ayuda a encontrar calma, aclarar nuestros pensamientos y hallar nuestro verdadero yo. La meditación nos da un espacio con nosotros mismos en el que podemos prestar atención a aquello que tal vez habíamos ignorado. Tan solo 15 minutos pueden ser suficientes para impulsar tu pasión. Entrar en contacto con la naturaleza: Caminar por un bosque, ver las estrellas, disfrutar un poco de la calma del mundo natural. Ese contacto despierta nuestros sentidos y nos acerca a lo infinito: cuando ves las estrellas y te das cuenta que hace miles de años, otros seres humanos también las observaron, te das cuenta de que eres parte de algo más grande. Explorar la naturaleza es una excelente forma de autoconocimiento. Acercarnos al arte: No necesariamente en un sentido de creación, sino de apreciación. Aproximarnos al arte estimula nuestra curiosidad y despierta nuestros sentidos para disfrutar más lo que nos rodea. Abrir nuestra mente para encontrar esa faceta más profunda de nosotras mismas, es hallar una fuente de energía, creatividad y motivación que nos lleva más lejos. Aunque en ocasiones podamos estar decaídas, recordar esto nos ayudará a seguir adelante. Vivir con la mente abierta es vivir apasionadamente, es disfrutar con mayor intensidad y motivarnos cada día a ser más felices.
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14 Test: Descubre tu temperamento dominante Cada cabeza es un mundo y la forma en la que reaccionamos ante las situaciones, puede variar muchísimo de una persona a otra e incluso, podemos sorprendernos de nuestras propias respuestas. Si bien, nunca terminaremos de conocernos, hay características de nuestra personalidad que prevalecen y tienen influencia en nuestras actitudes, pensamientos y decisiones; por lo que conocer ese pilar de nuestra personalidad puede ayudarnos a conocernos mejor. ¿Sabes cuál es tu temperamento básico? Averígualo aquí. Elige en cada uno de los casos aquello con lo que te identifiques más. a) Me gusta ser líder y estar activa b) Me gusta conocer gente y disfrutar el momento c) Me gusta estar tranquila y relajada d) Me gusta reflexionar y disfruto la soledad a) Me enojo fácilmente y no olvido b) A veces me enojo, pero se me pasa rápido c) Casi nunca me enojo d) No suelo expresar mi enojo y a veces guardo rencor a) Soy apasionada b) Soy entusiasta c) Soy agradable d) Soy creativa a) Tengo iniciativa y muchos proyectos b) Irradio alegría y hago amigos fácilmente
c) Soy equilibrada, confiable y me llevo bien con todos d) Soy sensible, paciente y disfruto las artes a) Soy tenaz b) Soy espontánea c) Soy analítica d) Soy meticulosa a) A veces me dicen que soy desconsiderada b) Dicen que soy indisciplinada c) La gente dice que soy apática d) Me han dicho que soy pesimista a) Me gusta que las cosas se hagan a mi modo b) Me gusta que las cosas sean divertidas c) Me gusta que las cosas se hagan de forma fácil d) Me gusta que las cosas se hagan bien
Mayoría de A. Colérico Independiente, autosuficiente y muy activo. Necesita tener actividad y le gusta fijarse metas. Es seguro y valiente, si bien también puede ser explosivo e intolerante. A veces puede parecer insensible a los otros.
Mayoría de B. Sanguíneo Optimista, agradable y entusiasta. Hace amigos con facilidad y le gusta ser el centro de atención. Es alegre y espontáneo, aunque a veces se deja llevar por sus emociones y se distrae con facilidad.
Mayoría de C. Flemático Apacible, confiable y conciliador. Tienen buen carácter y se adapta a las circunstancias.Es diplomático y sabe escuchar, sin embargo, rara vez muestra sus emociones y puede ser inseguro. En ocasiones puede mostrarse distante.
Mayoría de D. Melancólico Analítico, perfeccionista e introvertido. Es talentoso y sensible, capaz de lograr lo que se proponga; sin embargo, es temeroso y le cuesta tomar la iniciativa. Puede tener tendencia a la depresión.
Ninguno de estos temperamentos es “puro” existen combinaciones que enmarcan nuestra forma de ser. Para tener una idea más clara de tu temperamento, revisa también la opción con la que te identificaste en segundo lugar. Si quieres conocer las combinaciones y saber más sobre los temperamentos, entra a supermujer.com.mx/temperamentos
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