Obispo acedo
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Para aquellos que desean vivir en alegria, en abundancia y en fo una.
Introducción ........... a.............................................................
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Capítulo 1: La vuelta triunfal
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Capítulo 2: Padre rico, hijos ricos ...
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Capítulo 3: Promesas de abundancia .. u.. u................
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Capítulo4: Una fe que conquista .. u.. uuu_aa···uaaaa............
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CapítuloS: Salud es vida abundante ............... u .. -.u.....
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apítulo 6: Probando a Dios .....
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Capítulo 7: El milagro del diezmo
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UGU&aB&Waaauenuauensmeu
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Se engañan los que oran pidiendo fe, esto nunca lo debemos hacer. "La fe es por el oír, y el oír por la Palabra de Dios", es la prescripción para adquirir feo Nunca ores pidiendo fe para ser sanado. Si aprendes a usar la Palabra de Dios tendrás fe. La Palabra desarrolla la fe. Conoce tus derechos, entonces tendrás fe; y puedes conocer tus derechos solamente leyendo y oyendo la Palabra~ No encuentro difícil ejercer fe en mil pesos si sé <que tengo ese dinero en el cajón. Inconscientemente po o mi fe en acción, sacando del cajón cualquier cantidad de dinero menor a esa. Puedo firmar un cheque por ese importe sin percibir que ejercité fe en el talón del cheque, en el banquero, en la caja o en el banco~ Sé que ·el cheque será bueno porque leí el extracto de mi cuenta que mostraba saldo suficiente~ Creo que podemos tener un conocimiento tan pleno de la ve d en la Palabra de Dios que no precisamos más ejercer conscientemente nuestra fe cuando necesitamos ser sanados$ Sabemos que la sanidad es nuestra* Nos fue provistao La enfermedad fue removida por CrisPrefacio
to. Somos redimidos por ella. Dios dijo: "Yo soy el Señor, quien te sana". Esto se torna una verdad vital que vive en mí$ Tratémosla como tratamos la resistencia del puente que atraviesa grandes desfiladeros. No dudamos de la capacidad del puente para soportar el peso de nuestro autom·óvil. Sim-plemente lo atravesamos dirigiendo nuestro auto.. Empleamos nuestra fe, haciéndolo de una manera inconsciente . La Palabra se torna tan real y vital frente a una necesidad, que atravesamos lo "imposible", considerando que Dios sustenta esa bra. Ella no p,uede fallar. Confesamos su bondad, su eficacia y avanzamoso No nos puede fallar.
-No nos esforcemos más para ser sanados. Dios dijo que ya fuimos sanados. Esto es nues. . -tro. Lo confesamos Y.Le agradecemos, sabien. do que es nuestro. Nonos esforcemos más para creer. Somos creyentes (creemos) si somos salvos, y "todo es nuestro". La fe verdadera se posee . Las posesiones de la fe son tan verdaderas como las posesiones físicas. Las cosas espirituales son tan reales como lo son las materiales. Habla con fe y se- . rás siempre vencedor. Acostú~brate a hablar el lenguaje de Dios y te habilitará para decirlas por causa de la abundancia de ellas en tu cora,
zon. -
T. L. Osborn Vida en abundancia
En toda la Biblia encontramos siempre un único mensaje. Parece increíble que en medio de tantas leyes y enseñanzas doctrinarias se pueda· extraer un pensamiento que sintetice el Libro de Dios; la verdad más grande de la que ninguno puede huir es que el mensaje bíblico es el llamado a los hombres para que vuelvan a la comunión con Dios. ' e t manera . amó Dios al.mundo, que ha d a su
un · énito, para que todo aquel e en él cree no se pie , sino que te a vida_ eterna. ios no enf!iÓ a su Hijo al mundo ra condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él" Uuan3:16-17). La gran verdad que la Biblia nos enseña es que somos co-partícipes d~ la Obra de Dios, esto es, que somos parte de los planes del CreaG dor para ejecutar Su obra& "Si no para que sea un testimonio entre nosotros y vosotros y entre los que vendrán de ués de nosotros, de que
podemos hacer el servicio del eñor de nte de él con nuestros·holocaustos, nuestros sa · y nuestras endas de. z; para que no an mañana vuestros hijos a los nuestros: Vosotros no tenéis parte en el Señor" sué 22:27). Cuando Dios fundó la obra de la creación, Introducción
llamó a Adán y le dio el privilegio de designar los nombres para los animales que había crea. . do. Dios quiso que Adán tomase parte en su obra; El creó y Adán dio los nombres a aquello que El creó; así, los dos, Dios y el hombre se asociaron en la obra de la creación, y quería el Señor que esa feliz unión nunca tuviese fin . "El Señor DiOsformó, es, de tierra toda bestia del campo y~ ave de los cielos, y las trajo ~
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a Adán para que viera cómo las ha "a de mar; y el nombre que Adán ó a los animales vivientes, ese es su nombre" (Génesis 2:19). Hubo una tragedia en el Jardín del Edén, donde el hombre tenía su cuartel general de atención para trabajar codo a codo con el Creador. El hombre· pecó, desobedeció y por eso fue expulsado del Paraíso. "Luego dijo el Señor Dios: El hombre ha venido a ser como uno de nosotros, conocedor del bien y el mal; ahora, pues, que no al4rgue su mano, tome también del árbol de la vida, y coma y viva para siempre" (Génesis 3:22). Es claro que no podría haber más comunión entre los dos. El hombre oyó la voz del dial;>lola< bella serpiente - y ahora no tenía más condiciones de encarar a su Creador. Se escondió, mintió y acabó deshaciendo la sociedad que Dios le había propuesto . En su ser había la mancha del pecado y como Dios no puede asociarse al error, tuvo que destituir a Adán de todas sus regalías y privilegios. Pobre Adán. uy lo Vida en abundancia
sacó el Señor brara la tierra
huerto E 'n, para.que lala que fue tom "
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enesis 3:23).
A partir de entonces, Dios en su infinita bondad y misericordia, inició Su via-crucis para traer al hombre a su estado primitivo, a su estado natural, que es el de gracia, virtud, felicidad y abundancia .
Desde la salida de Adán de la presencia de Dios, éste, con todo Su amor, miserico ia y compasión, viene intentando traer al hombre de vuelta a la total participación en Sus planes, pues Dios nunca declaró el alejamiento del hombre como copartícipe de Su obra; muy por el contrario, hace de todo para que él vuelva . L-a ftlosofía de la Biblia es siempre la misma y vemos en el correr de la historia de la humanidad el esfuerzo de Dios en hacer que el hombre abarque lo máximo posible, que sea abundante así como Él, Dios, lo es. En el tiempo· de Abram, la promesa fue: ''Vete de tu tierra, tu parentela y de casa de tu padre, a la tierra que te mostraré. aré de ti una nación gra , te b ciré, engrandeceré tu nombre... " (Génesis 12:1-2). Hoy el Señor le dice a usted, amigo lector: "Sal de tu religiosidad, abandona tus pecados y entrégame tus caminos, y te mostraré el reilntroducción
no que vas a habitar, te bendeciré, engrandeceré tu nombre y te haré abundante". Para Moisés, la promesa fue: ''Yo os sacaré de la a ·cción de Egi o a tierra del cananeo, del heteo, del amorreo, delferezeo, del beveo y del jebuseo, a una tierra e fluye leche y miel" (Éxodo 3: 17). Hoy el Señor djce: ''Yo te sacaré de la aflicción, de los gemidos y de la miseria, para la tierra de gozo, de alegría, de abundancia y de
fortunas .. " Ahora, amigo lector, podemos analizar que, si en la época de la Ley, donde prevalecía la intransigencia del ojo por ojo y diente por diente, había promesas maravillosas de Dios para los hombres, imaginése ahora, que vivimos en la dispensación de la Gracia, cuando Jesús ya llevó sobre sí todas nuestras dolencias y enfermedades y fue castigado para que viviésemos en paz con Dios~ ~'Para que se cum ·era lo dicho por el profeta Isaías: Él mismo tomó nuestras enfermedades. y llevó nuestras dolencias" (Mateo 8: 17). Vivimos en la época del Espíritu Santo, que tiene cumplidos los mínimos detalles de las promesas de Dios y que vela para cumplirlas, dirigiéndonos según su voluntad a través del amor. inseparable de Dios para todos los que Lo invocan en espíritu y en verdad . Vida en abundancia
En esto vemos la voluntad de Dios para los hombres: participación efectiva en toda Su obra. Cuando veo personas. siendo sanadas, recibiendo enseñanzas del Espíritu Santo, pros-perando financieramente y viviendo constantemente en un estad-o de victoria, me alegro grandemente y me regocijos Llamo a esto vivir en el Reino de Dios, pues la persona que así vive es un verdadero ciu no d ·no e Dios..
Ser cristiano es ser hijo de Dios y co-heredero de jesús; dueño, por herencia, de todas las cosas que existen en la faz de la tierra; propietario· de todo el Universo Esto no es arrogancia ni utopía; por el contrario, es ocupar la posición que Dios quiere que ocupemos, vivir en la real posición de hijo de Dios, manifestando Su gloria y exuberancias Usted, lector; es heredero de todas las cosas, y en su vida debe resplandecer la gloria del Padre~ No se contente con su desgracia o con su pobreza. Levántese ahora mismo y asuma su posición. ''Y si hijos, también bere e
rederos de Dios y coherederos con C o, si es que padecemosjuntamente con é~ para que · ntamente con él seamos glo omanos 8: 17).·
Introducción
Cada uno d茅 como propuso en su coraz贸n: no con tristeza, ni por necesidad, porque Dio$ ama al dador alegre. 2 Corintios 9:7
La vida ·del holllbre tiene un propósito d~vino. El hom.bre, instintivatnente, busca a Dios y hasta que descubra cuál es el propósito de Dios,.vive en un gran vacío ..
La vuelta triUnfal
Jesús enseñó, en uno de los pasajes más importantes de las Escrituras,. acerca de un muchacho que pidió su parte de la herencia de su padre ·y partió para una tierra distante, donde lo desperdició todo, padeciendo necesidadeso
''También dijo: Un hombre tenía dos hijos, y el menor de ellos dijo a su padre: Padre, me la parte de los bienes que me corresponde. Y les repartió los · bienese No muchos días después, juntándolo todo, elltijo menor, se fue lejos a una provincia apartada, y allí desperdició sus bienes viviendo perdidamente (Lucas 15:11-13). 1
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El muchacho, en la desesperación; consiguió un empleo para apacent~r cerdos, pero hasta la misma comida de los cerdos le era negada . Ante esta situación volvió en sí y pen,.,. so: ;'¡Cuántos jornaleros en la casa de mi padre tienen abundancia de pan, y yo aquí perezco de la vuelta triunfal
hambre! Me levantaré e iré a mi padre, y le diré:
Padre, he pecado contra el cielo y contra ti. Ya no soy digno de ser llamado tu hijo¡ hazme como a uno de tus jornaleros'' (Lucas 15:17-19). Llevando su decisión adelante, el joven se levantó y fue a encontrarse con su padre. Mientras tanto, la situación no fue como él imaginaba . Su padre, viéndolo de lejos, corrió a su encuentro, lleno de íntima compasión, se lanzó en sus brazos, lo besó y perdonó, lo calzó y vistió con la mejor ropa, le puso un anillo en su dedo y le preparq un gran banquete, integrándolo nuevamente a sus posesiones . "Traed el bece"o gordo y matadlo, y comamos y hagamos fiesta ...'' (Lucas 15:23).
La gran decisión La mayor decisión hecha por aquel joven fue la de volver a la comunión con el padre y ésa es también la mayor de las decisiones que un hombre puede tomar en toda su vida . El hombre fue apartado de la com.unión con Dios porque desobedeció, pasando a ser esclavo de Satanás, perdiendo ~sí sus ·derechos a una vida abundante.
Dios en su infinito amor, nunca abandonó Su p~opósito de tener el hotnbre y la tnujer, que El creó a Su imagen y semejanza, cerca · Vida en abundancia
suyo. Pero ¿qué podía hacer, si Su propia Ley no podía ser transgredida? El alma que pecare,. ésa morirá. Todos habían pecado por lo tanto todos debían morir.
''Por tanto, como el pecado entró en el mundo por ~n hombre y por el pecado la mue e, así la
muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron'' (Romanos 5:12).
Para satisfacer el clamor de justicia, uno que era perfectamente inocente tomaría el lugar del culpable, moriría como su sustituto. Así el crimen sería pagado y la culpa sería justificada, aunque él nunca hubiese pecado .
''Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo'' (Romanos 5:1). ;
Jesús, ~1 Hijo de Dios, era perfecto, El nunca pecó. El vino a este mundo a tomar sobre Sí los pecados de toda la humanidad y sufrió por nuestras fallas, para garantizarnos la vuelta a la comunión con el Padre.
''Al siguiente día vio Juan a Jesús que venía a él, y dijo: ¡Este es el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo!" (Juan 1:29). De esta manera, Jesucristo vino a ser el camino de vuelta a Dios.
la vuelta triunfal
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A través de Su sacrificio, El removió para siempre nuestra condenación y derrumbó las barreras que estaban entre nosotros y Dios, de modo que ahora somos bienvenidos al retor. no de Su presencia, donde podemos otra vez gozar de la vida abundante. '.~Todas las.cosas que pertenecen a la vida y a la
piedad nos han sido dadas por su divino poder, mediante el conocimiento de aquel que nos llamó por su gloria y excelencia'' (2 Pedro 1:3): ·
Un propósito divino La vida del hombre tiene un propósito divino. El hombre, instintivamente, busca a Dios y hasta que descubra cuál es el propósito de _Dios, vive en un gran vacío~ Siendo ~reado a imagen y semejanza de Dios, ~1 hombre es, en principio, una parte de Dios. Elt1unca puede hallar completa satisfacción sin Dios~ Soledad y amarguras, dolencias y sufrimientos, pobreza y fracaso, odio y lllUerte, todas esas cosas son evidencias de que el ser l_lumano vive apartado de su verdadero cammo. Jesús dijo: uyo soy el camino, la verdad y la vida; nadie ·viene al Padre sino por mí'' (Juan 14:6). · Vida en abundancia
Él no es un camino, sino el camino, porque es el único que tomó nuestro lugar. Él deshizo las barreras que había entre usted y Dios y ahora dice: .(/Vuelva para casa, para el Ja ín de la Abundancia para el cual fue usted creado y viva la Vida undante que Dios, amorosamente, desea para usted" .
''Él mismo llevó 11uestros pecados en su cu sobre el madero, para que nosotros, estando m s a los pecados, vivamos a la justicia. ¡Por su herida habéis sido sanados!'' (1 Pedro 2:24). "No quitará el bien a los que andan en integridad'' (Salmo 84:11). .
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Para que usted lo conozca mejor, Elle dará, a través de su gran poder, todas las cosas que precisa para una vida abundante: Usted ahora se torna un verdadero amigo de Dios; irá ~ conocerlo mejor y es rá siempre junto a El, como un amigo muy íntimo·. Ahora, no habrá más miedo ni inseguridad, culpa, conde~ación e inferioridad delante de Dios, porque El estará siempre vigilando para que todas las cosas buenas acontezcan en su vida . " Este es el propósito de Dios en la vida del hombree Quien vive fuera de esa dimensión está fuera del propósito divino y necesita descubrirlo urgentementeD
la vuelta triunfal
"Porque por medio de él los unos y los otros tenemos entrada por un mismo Espíritu al dr~.
Por eso, ya no sois extranjeros ni forasteros, sino conciudadanos de los santos, y miembros de la
familia de Dios'' (Efesios 2:18-19). La decisión es suya ¡Usted no puede quedarse toda la vida . u apacentando cerdos"! Levántese ahora mismo y asuma su posición. Jesús ya preparó todo el ambiente para su vuelta triun!al al Jardín .de la Abundancia de Dios, pero El no puede forzarlo a hacer eso . En la vida cristiana, existen cosas que· dependen sólo de nosotros. Lo que depende de Dios para hacernos prósperos, abundantes y bendecidos ya fue hecho. Dolencias, sufrimientos y enfermedades no estarán más sobre su vida porque Jesucristo habitará junto con usted, en su casa .
¿¿Ciertamente llevó él nuestras enfermedades y sufrió nuestros dolores, ¡pero nosotros le tuvimos por azotado, como herido y afligido por Dios'' (Isaías 53:4). ~
El viene a hacer ahora en su propia vida y cumplirá Su palabra, cuando dijo:
Vida en abundancia
"... yo he venido para que tengan vida, y pftra que la tengan en abundancia" (Juan 1 10). Dec铆dase ahora mismo. Diga adi贸s a las dolencias, a la miseria y a todos los males, ten-ga un reencuentro con Dios y asuma nuevamente su posici贸n en la familia Divina .
la vuelta triunfal
A Dios no le alegra que sus hijos sean -pobres y necesitados. 路 .
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El hombre fue colocado en la tierra para vivir en abundancia, sobre la fortuna y la prosperidad. Adán no tenía escasez de agua, ni de alimentos, ni precisaba llevar a Eva, su mujer, al médico. Ellos eran perfectos y
gozaban de la perfección de Dios, sin que les faltase absolutamente nada.
Padre rico, hijos ricos
Antes de crear a Adán y a su compañera Eva, Dios realizó toda Su obra. Creó luz, para que ésta disipase las tinieblas, hizo nacer toda clase de frutas y vegetales, separó las aguas y creó los animales.
Dios adornó el mundo creado., con piedras preciosas y flores que engalanaban los valles y las m_ontañas, proveyó un vapor que subía · de la tierra para regar las plantas y separó, en medio de las maravillas de Su creación, un lugar especial, donde las cosas más bellas de toda Su creación fueran colocadas juntas, de tal manera que llamó a aquel lugar Paraíso . Fue en este lugar que Dios colocó a Adán, y luego a Eva, su mujer; el mejor y más lindo lugar del mundo, Su Jardín, ordenándoles que crecieran, se multiplicaran y llenasen la tierra. ''Los bendijo Dios y les dijo: Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra y sometedla, ejerced po-
testad sobre los peces del mar, las aves de los cielos Padre rico, hi¡os rico.s
y todas las bestias que se mueven sobre la ·erra'' (Génesis 1:28).
El hombre fue colocado en la tierra para vivir en abundancia, sobre la fortuna y la prosperidad. Adán no tenía escasez de agua, ni de alimentos, ni precisaba llevar a Eva, su mujer, al médico& Ellos eran perfectos y gozaban de la perfeccíón de Dios, sin que les faltase absolutamente nada. Tenían abundancia de felicidad y de placer, de energías y de amor, vivían en plena y absolpta felicidad, pues para eso. fueron creados. Esta, innegablemente, era la voluntad de Dios para sus vidas y las de sus descendientes. Les bastaba que diesen continuidad a aquello que Dios había creado . Todas las cosas aquí en la tierra les estaban sometidas y gozaban todavía del beneficio de la íntima y perfecta comunión con Dios el Creador. Dios siempre fue y siempre será un Dios de Abundancia. El Señor Jesús d~jo: ''El ladrón no viene sino para hurtar, matar y destruir; yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia.''
Ahora, si Jesús dijo esas palabras, es porque el carácter de Dios no cambió . El hombre desobedeció y fue expulsado del paraíso, pero .Jesús pagó su culpa y nos da nuevamente el derecho de volver al Jardín de la Abundancia -Vida en abundancia
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de Dios. El mismo dijo con sus propias palabras, que nos quiere dar vida pero que esa vida sea en abunda~cia. Un Padre Rico Yo creo en Dios como un Padre y no podría creer de otra manera . Vea lo que la Biblia dice en Efesios 4:6
"Un Dios y Padre de todos, el cual es sobre todos y por todos y en todos.'' Imagino que Dios no es un Padre peor que yo u otros padres~ Y yo por ejemplo, tengo dos hijas y, por mi voluntad, daría a ellas un castillo millonario en el mejor lugar- del mundo . -Las mejores ropas, las más lindas joyas, la más fina educación, y, si pudiera, elegiría para ellas príncipes que las desposaran. No tengo la menor duda que haría eso, si pudiera . Si estuvieran .enfermas, buscaría los mejo.res especialistas del mundo/ y, con respecto a la. alimentación, mandaría traer duraznos de California/ naranjas y manzanas de rgentina, aceite de Portugal, quesos de Suiza, y especias directamente de los países que son los mejores fabricantes. Yo haría para ellas todo lo mejor que pudiera hacer, simplemente porque ellas son mis hijas ... Así yo veo y comprendo al Señor Dios, un Padre rico, hijos ricos
Padre que tiene tod·o el poder en sus manos, toda la autoridad, toda la riqueza, toda la gloria, en fin, todo lo que existe en el UI}iverso . Todo está en Sus manos y creo que El tiene por Sus hijos un amor mayor que el mío .
Si yo que tengo fallas, soy injusto, pecador, ingrato y cosas como ésas, soy capaz de amar y brindar a mis hijas lo mejor que poseo, ¿cuánto más mi,.Padre Celestial dará cosas mejores a sus hijos? ~
Hijos Ricos
De hecho, el gr~n deseo de Dios es que nosotros podamos mostrar la imagen de Su hijo Jesús; que exhalemos el perfume de Cristo .
''Porque para Dios somos grato olor de Cristo en los que se salvan y entre los que se pierden'' . (2 Corintios 2:15). ¡Presentémonos al mundo como verdaderos hijos y ciudadanos del Reiho de los Cielos, ·pueblo de propiedad exclusiva de Dios, nación santa, pura e inmaculada, capaz de mostrar al diablo y sus demonios q\le somos algo especial y que tenemos un Padre que nos da la verdadera vida abundante! CuandO su hijo va a la escuela y es escogido por sus compañeros, o por los vecinos, por . s~puesto que usted se siente gratificado, con-
tento satisfecho y entc)Jlces pie11.sa que todas las luchas y sacrificios q11e tu,ro por su ·hijo valiero11 la pena, ¿110 es verclad? 1
Cuando acontece 1(_) corltrario, ct1ando stl hijo no va bien en los estttdi(JS, es tlna criatura que no consigue apre11.cJer 11<:1da, cuar1do llega a la casa con la ropa SlJcia y co11 el rostro hinchado de haber peleaLi.c) cor1 sus compañeros, cuando él sólo vive er1fermc) y llorat1do, ¿ct1ál es su reacción? Naturalmente usted se er1oja, llega a veces hasta llenarse de rabia/ }1Ues no le agrada verlo sufrir. Asi tambiéil el Señor Nuestro Padre. Él no tiene ni11.gún placer er1 vernos sufrir con enfermedades, pobrezas y clerrotas . La Voluntad de Dios Está claro que la voluntcld de Dios es que sus hijos sean bendecidos y prósperos.. amos las Palabras de Jesús, ct1ando dice que vino para que tuviésemos ·vida y vida en abtln.dancia, podemos dar u11a tnirada a la ciudad q·ue está siendo preparada para 11.osotros, una ciudad hecha con metales y piedras preciosas, con agua y alimentos e11 abundancia, donde todos gozaráil de perfecta salud en la presencia de Dios y nunca 1nás veráil tristezas ni muerte.
"En medio de la calle de la cittdad y a uno y otro Padre rico, hi¡os ricos
lado del río estaba el árbol de la vida, dan a cada mes su fruto; y las hojas del árbol eran para
la sanidad de las naciones. Y no habrá más maldición. El trono de Dios y del Cordero estará en ella, sus sieroos lo servirán'' (Apocalipsis 22:2-3). Verdaderamente, sólo un Padre rico podrá tener hijos ricos . Si usted, amigo lector, no está viviendo como un abundante hijo de Dios, es porque está apa:¡;tado de los orígenes de su verdadera ·familia, o no quiere poseer la herencia; mientras tanto, si usted desea vivir la verdadera vida que Dios le tiene prepjlrada, comience hoy, ahora mismo, a tomar de El todo . aquello que ha prometido ..
"Canten y alégrense los que están a favor de mi justa causa y digan siempre: Sea exaltado el Señor, que ama la paz de su siervo'' (Salmo 35:27).
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La vida abundante que Dios, por Su gran am.or, nos garantiza a travĂŠs de Jesucristo, incluye todas las bendiciones y provisiones que necesitatnos e incluso las que deseatnos .
Promesas de abundancia
Dios creĂł al hombre para que viva una vida abundante.
No es Su deseo que tengamos una vida llena de sufrimientos y que vivamos lamentando nuestras culpas y pecadosD No es tampoco Su voluntad que suframos dolencias o que tengamos una vida de fracasos. En realidad, Dios no desea ninguna de estas cosas para s11s hijos. La vida abundante que Dios, por Su gran amor, nos garantiza a travĂŠs de Jesucristo~ incluye todas las bendiciones y provisiones que necesitamos .e incluso las que deseamos. Inmediat~mente
despuĂŠs de dar un paso hacia Dios, El corre a nuestro encuentro trayendo en Sus manos todo aquello que ha reservado para nosotros&
Dios nos reserva el derecho de ser llenos en los tres aspectos de la vida humana_ en los Promesas de abundancia
que podemos ser felices: Espiritual, Físico y Fi.
nanctero~
"jBendito sea el Señor! ¡Cada día nos colnta de beneficios el Dios de nzJestra Salvación!'' (Sal;tzos 68:19).
Juan, el apóstol del amor, sabía perfectamente y mejor qtte nadie qtte la volu11.tad de Dios era be11.decir. comp letan1ente a todo aquel qtte creyese en Jesucristc), y dijo:
"A11tado, yo deseo que tt! seas prosperado en todas las cosas y qtte te1tgas salttd, así como prospera tz.t al1na" (3 fzian 2). La expresión "e11 todas las cosas" en los originales griegos irtcltty'e claramente abttndancia financiera.
Para recibir las bendiciones materiales, por la fe, usted debe hacer lo sigttiente:
. 1) Estar cot1vencido ele q1.1e Dit)S quiere qtte ttsted prospere fina11cieran1.ente. 2) Estar dispuesto a aceptar la responsabilidad de ser uno de los .socios y admii1istradores de la obra de Dios.
"Aizora bien, lo que se reqttiere de los admi1tistradores es qtte cada ttno sea hallado fiel" (1 Corintios 4:2).
ITJ·Vida en abundancia
Dios desea que usted prospere en tres aspectos, de acuerdo con el apóstol Juan: · ·
1) Financiero; 2) Físico; 3) .Espiritual. Prosperidad completa para su vida. Todas las riquezas del mundo fueron creadas por nuestro Padre. El oro y la plata, el petróleo y los minerales, las piedras preciosas y los campos, los rebaños y las manadas; todo, todas. .las cosas fueron creadas por nuestro Padre. El es el dueño de todo. ''Ahora, pues, si diereis oído a mi voz y guar-
d.áis mi pacto, vosotros seréis mi especial tesoro sobre todos los pueblos, porque mía es toda la tierra'' (Exodo 19:5). Administradores temporarios
Los hombres son apenas- administradores temporarios de las riquezas de la tierra. El Señor Dios es el verdadero dueño . Seguramente que, cuando terminamos de pagar la última cuota de una casa o departamento que durante quince o veinte años sacrificamos nuestra vida para saldarla, quedamos como quien sueña y entonces decimos: ubien, ahora soy el verdadero dueño y propietario de mi · casa. Ella es mía y solamente mía" . Mientras, Promesas de abundancia
nos olvidamos qtle al tomar la escritura de la ca.sa, estamos ape11as con ttn docu~ento que 11os da el derecho sobre la misma mientras vivamos . Desptlés de lél111tterte, dejamos de ser dueños de cualqt1ier cc)sa de este mundo. Está claro que nuestros l1erederos usufructuarán aquello que les dejatllC)S, pero, ellos también sólo serán dueños por tln breve tiempo. Y así concluimos qtte al final del tiempo, no tenemos 11ada; todo pertenece a Aquel que es Eterno, esto es, el Señc>r Jesticristoo Por eso es que nosotros pedin1os a las personas que se . . envuelvan con el Señor Jesús, pues siendo El el dueño de todt), ciertarr1ente les "dará" todo lo qtte sea necesario 1-'ara. sus vidas . Fue por eso que él dijo:
yo he vettido para tJtle tengan vida, y para que la tengan etz ab1-111datzcia'' (Juan 10:10). "eu
Y también es bt1eno para Dios que nosotrqs poseamos bastante di11ero con el fin de que El pueda, a través de nosotros, alcanzar a Io·s perdidos de este 111U11do, con el mensaje salvador del Señor Jesucristo . ¿Cuántas personas e11 este mundo t1UI1ca escucharon hablar de J~sús? Y para que podamos presentarlo, necesitamos, o mejor dicho, Dios necesita usar todo lo que tenemos. Y cuanto más tengamos, más el Señor nos podrá usar. Entonces, cuanto más . Dios nos ~~~ más nos podrá ttsar. Así, amigo · lector, verificamos qtte somos colaboradores de Dios, administradores de todo lo que Él
colocó en la faz de la tierra. Coloque esto en su mente y siga adelante. Nunca oiga la voz de los enemigos de Cristo que colocan mensajes demoníacos afirmando que el dinero es· malo, que la riqueza es del diablo o cosas semejantes a éstas~ Procure siempre observar que lo que usted tiene pertenece a Dios, y cuanto , más usted se coloca e11. sus santas manos, Ello utilizará como su embajador, procurador o administrador. 1
varias parábolas el Señor Jesús con1.para el Reino de Dios con un hombre que se ausentó del país, llamó a sus siervos y les confió sus bienes. (Mateo 25:14)é ¿Y no fue eso exactamente lo que el Señor Jesús hizo al partir de este mundo? Entonces/ ¿po~ qué no astlmimos las responsabilidades que El nos entregó? Yo creo que hay miedo, coba.rdía o algo así, que impide al pueblo del Dios vivo alcanzar los bienes con toda osadía y poder para mostrar al reino del diablo que el Señor Jesús es Rey de Gloria y de la Gloria, por los siglos de los siglos. Eil
Lo que' Dios dice Son~tantas
las promesas de Dios para que el hombre tenga una vida abundante, tanto en el Antiguo Testamento como en el uevo Testamento, qtle muchas veces nos espantamos al ver religiosos tradicionales que parecen IlO entender los planes de Dios. Promesas de abundancia
"El Señor te hará sobreabundar en bienes, en el fruto de tu vientre, en el fruto de tu bestia y en el fruto de tu tierra, en el país que el Señor juró a tus padres que te había de dar'' (Deuteronomio 28:11). "El ladrón no viene sino p.ara hurtar, matar y destruir; yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia'' (Juan 10:10).
"Asimismo, a todo hombre a quien Dios da bienes y riquezas, le da también facultad para e coma de ellas, tome su parte y goce de su trabajo. Esto es don de Dios" (Eclesiastés 5:19). "Bienaventurado el hombre que teme al Señor y en sus mandamientos se deleita en gran manera. Su descendencia será poderosa en la tierra; la generación de los rectos será bendita. Bienes y riquezas hay en su casa, y su justicia permanece para siempre" (Salmos 112:1-3). ''Canten y alégrense los que están a favor de mi justa causa y digan siempre: Sea exaltado el Señor, que ama la paz de su siervo'' (Salmos 35:27). ''... porque sol y ~seudo es el Señor Dios¡ gracia y gloria dará el Señor. No quitará el bien a los que andan en integridad'' (Salmos 84:11). " ... para hacer que los que me aman tengan su heredad y que yo llene sus tesoros'' (Proverbios 8:21). · Vida·en abundancia
"Solamente esfuérzate y sé muy valiente, cuida1tdo de obrar conforme a toda la ley que mi sier-
vo Moisés te 1nandó; no te apartes de ella ni a. ·estta tti a siniestra, para qtte seas prosperado en todas las cosas que emprendas" (Jostté 1:7). "Gztardaréis, pt-tes, las palabras de este pacto y las pondréis por obra, para que prosperéis en todo lo qzte lzagais" (Dettterottomio 29:9). "Gttartla los preceptos del Setior, ttt Dios, andtzltdo en stts ca111i1lOS y observando stts estattttos y sz.ts 11ta1tda1ltietztos, stts decretos y stts testit11onios, de ltl1llatlera qtte está escrito en la Ley de Moisés, para qzte p1¡tosperes etl todo lo que 1z .· as y en todo aqttello que et1tpre11das ... " (1 Reyes 2:3).
"La be1tdició1.z del Señor es la qtte ettriqttece, y 110 a{iade tfisteza COll ella" (Proverbios 10:22) . "El Señor es 111i pastor, tzada 111e faltará"fl (SalnlOS 23:1). "Los leo1-zcillos tzecesitatz, y tie;ze1·tlta111bre¡ pero los qzte bztscatz al Señor no tendrá1z~(alta de ttittgtín bie1·1" (Sal1JlOS 34:10). "iBendito el Señor! ¡Cada día nos col1·1ta t1e l-;etteficios el Dios de ntlestra salvaciótt!" (Salmos 68:19) .
Promesas de abundancia
"Buscad primeramente el Reino Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas''
(Mateo 6:33). "Nadie podrá hacerte frente en todos los días de tu vida: con1o estuve con Moisés, estaré contigo¡ no te dejaré ni te desampararé. Esfuérzate y sé valiente, porque tú repartirás a este pueblo como heredad la tierra que juré dar sus padres. Solamente esfuérzate y sé muy valiente, cuidando de obrar conforme a toda la ley que mi siervo Moisés te mandó¡ no te apartes de ella ni a diestra ni a siniestra, para que seas prosperado en todas las cosas que emprendas. Nunca se apartará de tu boca este libro de la Ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que
está escrito en él; porque ento11ces harás prosperar tu camino y todo te saldrá bien" (Josué 1:5-8). ucomeréis hasta saciaros, y alabaréis el nombre del Señor, vuestro Dios, el cual hizo maravillas con vosotros; y nunca jamás será mi pueblo avergonzado" (Joel2:26).
'' ... porque contigo está el manantial de la vida¡ en tu luz veremos la luz" (Salmos 36:9). íJEl Señor empobrece y enriquece, abate y enaltece" (1 Samuel2:7)~
"Las riquezas y la gloria proceden de ti, y tú
dominas sobre todo; en tu mano está la fuerz-a y el poder, y en tu mano el dar grandeza y poder a todos" (1 Crónicas 29:12). "¡Cuán innumerables son tus obras, Señor! Hiciste todas ellas con sabiduría;¡ la tierra está llena de tus beneficios" (Salmos 104: ).
"Y cuando se levantaron por la mañana, salieron al desierto de Tecoa. Míen as ellos salían, Josafat, estando en pie, dijo: Oídme,Judá y habitantes de Jerusalén. Creed en el Señor, vuestro Dios y estaréis seguros¡ creed a sus profetas y seréis prosperados" (2 Crónicas 20:20). 11
Yo amo a los que me aman, y nte hallan los que temprano me buscan. Las riquezas y el honor me acompañan; los bienes permanentes y la justicia'' (Proverbios 8:1 18). "Ahora, pues, si dais oído a mi voz, y guardáis mi pacto, vosotros seréis mi especial tesoro sobre todos los pueblos¡ porque míá es toda Ja tierra" (Exodo 19:5). ~~
porque mía es toda bestia del bosque y los millares de animales en los collados" (Salmos 50:10)e ..e
'''Porque el Señor, tu Dios, te introduce en la buena tierra, tierra de arroyos, de uas, entes y de manantiales, que brotan en vegas y montes; tiePromesas de abundancia
rra de trigo y cebada, de vides, hig¡-leras y granados; tierra· de olivos_, de aceite y de 1niel; tie1..1"a etz la cz1.al no comerás el pan con escasez, y donde no te faltará nada; tierra cuyas piedras son hier1. o y de ct-tyos 11101ztes sacarás cobre'' (Dez.tteronon1io 8:7-9). "Allí comerás y te saciarás, y bendecirás al Se.ño1~ tz.t Dios, por la buena tierra que te hab1. á dado Cuídate de no olvidarte del Señor, tu Dios, para cz.tmplir los nta;-zdamie11tos, decretos y estattltos que yo te ordeno hoy; 110 suceda que comas y te sacies, ed~fiqttes bttetzas casas y las habites, cuando ttts vacas y tzts ovejas aumenten, la plata y el oro se te 111ultipliquen y todo lo qtte tengas se acreciente..." (Dezttero1tomio 8:10-13). e
"... y digas en tu corazón: Mi poder y la fuerza de 1ni n1ano nte ha traído esta riqueza ... '' (Deuteronomio 8:17). " ... sino acuérdate del Señor, tu Dios, porque él
es qtlien te da el poder para adquirir las riquezas, a fin de confinnar el pacto que juró a tus padres, co1no lo hace hoy'' (Deuteronomio 8:18). ''Honra al Señor con tus bienes y con las primicias de todos ttls frutos; entonces tus graneros estarán col1nados con abundancia y tus lagares re-
bosarán de nzosto'' (Proverbios 3:9-10). ,.~Traed
todos los diezmos al alfolí y haya ali.mento e11 mi Casa: Probadme ahora en esto, dice el
Señor de los ejércitos, a ver si f!.O os abro las ventanas de los cielos y derramo sobre vosotros bendi~ ción hasta que sobreabunde'' (Malaquías 3:10). uestra Herencia Dios creó todas las cosas COl) abundancia y , nos colocó en medio de ellas. El es rico y nos adopta cuai}do recibimos a Cristo en nuestros corazones. El desea que gocemos de su plenitud espiritual, física y material& Son innumerables los textos que hablan de la voluntad de Dios en que Sus hijos prosperen y sean bendecidos materialmente. /
Pero ¿por qué? Porque El está interesado en hacerlo a usted feliz/ suplir sus necesidades y darle la prosperidad suficiente de modo que tenga bastante y que le sobre para ayudar a los demás.
Promesas de abundancia
~.~Honra
al Seiior con tus bienes y con las primicias de todos tus frutos; entonces tus graneros estarรกn colmados con abundancia y tus lagares rebosarรกn de mosto'' (Proverbios 3:9-10).
f 1111
1
Nunca tendretnos suficiente fe en las prom.esas de Dios para poseer lo que pretendem.os, Inientras.nuestros labios confiesen la derrota.
Una fe que conquista
El Señor Jesús nos ha dado varias lecciones al respecto de la fe que conquista. En una ocasión, después de hab-er hecho a una higuera secarse completamente, el Señor oyó decir: "Maestro,1ni1Aa, la higuera quema ijiste se ha secado. Respondiendo Jesús, les dijo: Tene -e en Dios. De cierto os digo que cualquiera que a a este 111onte: Quí~ate y arrójate en el mar, y no d1.1da en stt cotazón, sino qtle cree qtle será hecho lo que dice, lo que diga le será hecho" (Marcos 11:21-23). Nunca tendremos suficiente fe en las promesas de Dios para posee:r; lo que pretendemos/ mientras 11uestros labios confiesen la derrota. Muchas veces afirmamos que no podemos hacer esto o aquello/ sin al menos intentarlo. Hay quienes tienen más fe e11la acción del diablo que en las promesas de D!os . Decir que Dios no nos puede dar lo que El mismo prometió es, además de falta de fe/ una gran falta de respeto hacia nuestro Padre. Una fe que conquista
El dicho popular de que "lo prometido es deuda" se aplica también para Dios . Todo aquello que El promete en su Palabra es una deuda que tiene con uste9-, amigo lector. Y lo más importante es que El quiere pagar sus deudas; ¿pero qué puede hacer si usted no quiere recibirlas? Muchos no están viviendo en la abundancia de Dios porque presentan motivos que llegan a ser tan infantiles (y que no nos dejan recibir lo que Dios nos quiere pagar) como los que mostramos a continuación: Esto es demasiado bueno para mí - Hay personas que no creen en la grandeza del amor de Dios y viven en la pobreza, en la miseria, piensan que Dios no es capaz de colocarlas en una posición mejor.. Deseo afirmar que Dios es capaz y quiere colocar a Sus hijos en la posición más alta posible.
"Sino acuérdate del Señor, tu Dios, porque él es quien te da el poder para adquirir las riquezas, a . fin de confirmar el pacto que juró a tus padres, como lo hace hoy'' (Deuteronomio 8:18). Yo no soy digno - Preguntamos: ''¿Quién lo
es?" En realidad, Jesucristo nos tornó dignos de recibir toda la gracia del Padre, al pagar _con su muerte nuestros pecados, llevando sobre Sí las dolencias, los dolores, la desgracia, la miseria, etco, haciendo a cada uno de noso·vida en abund·ancia
tros dignos de recibir las más ricas bendiciones de Dios .
''Para que se cump]iera lo dicho por el profeta Isaías, cuando dijo: El mismo tomó nuestras enfermedades y llevó nuestras dolencias" (Mateo 8:17). ,
Este es mi destino - Es común encontrarnos con personas que cree11. que el sufrimiento y la miseria son una condición humana pre-es. tablecida por Dios, de la cual no pueden huir. Sobre los pretextos de u estar pagando por los errores d.e vidas anteriores", "sufrir para crecer espiritualmente/J', uaprender a ser paciente.~~, o "sufrir, porque es esto lo que debemos hacer en este mundo, para esperar la recompensa en los cielos"/ muchos cargan un fardo muy pesado y viven toda una vida sin participar de los derechos que Dios les ha concedidoé Dios no predestinó a nadie. Nosotros somos quienes hacemos nuestro destino. La enseñanza de Jesús es que aquello que el hombre siembra, cosecha~ ~'No os engañéis¡ Dios no puede ser burlado, pues
todo lo que el hombre siembre, eso también s ará" (Gálatas 6:7). Si plantamos fe, cosechamos milagros como Una fe que conquista
respttesta. Si damos crédito a la miseria, vivirern.os en la miseria, pero si creemos que Dios sumple Sus promesas y reclamamos esto de El, entonces viviremos la verdadera vida; u11.a vida en abundancia, conforme a lo que Jesús nos prometió. La fe victoriosa · La fe depe11.de .de cómo la encaramos. Si co11fesamos derrotas, aún antes de que vet1gan, seremos fatalmente derrotados, pero si confesamos victorias aún antes de que acoiltezcat1., seremos victoriosos. Para el cristiano no existe el no puedo", o esto es difícil 11 • No, no y no. Usted puede todas las cosas si cree así: uTodo lo pued9 etz Cristo que 1'1le fortalece" (Filipenses 4:13). Este debe ser su lema. 11
I/
Si usted está pasando por dificttltades fina11.cieras, crea que puede salir hoy mismo de esa crisis. Ponga su fe en acción y confiese:
'"Mi Dios, pues, suplirá todo lo qtle os falta co1tfonne a sus 1--iqttezas en gloria en C;isto Jesús'' (Filipe1zses 4:19). Co11.fiese siempre la Palabra de Dios, las promesas de Jesús, aunque las cosas no le estéil yendo bien, porque el Señ_or vela veinticuatro horas por día para cumplir Su Palabra.
El Espíritu Santo es un agente vigilante en este mundo, cuidando para hacer cumplir todas las promesas hechas por las otras personas de la Trinidad, el Padre y el Hijo, Jesucristo.
Cuando Jesús dijo: ''El cielo y la tierra pasarftn, pero mis palabras no pasarán" ( arcos 13:31), El estaba afirmando que n na de sus promesas dejarían de ser cumplidas. 6
Cuando usted coloca sus palabras de acuerdo con las Palabras de Jesús, cuando usted cree con !oda su alma que Jesús no mintió y · exige de El el cumplimiento de lo que prometió, entonces usted tiene una fe poseedora y nada podrá impedir que sea bendecido . La propia Palabra de Dios afirma: ¿andarán dos juntos, si no estuvieren de acuerdo?". 11
''Otra vez os digo que si dos de vosotros se po-
nen de acuerdo en la tierra acerca de cualquier cosa que pidan, les será hecho por mi Padre que está en los cielosuc'' (Mateo 18:19)e Es claro que no. ¿Cómo puede un hombre gozar de la plenitud de las promesas de Dios, si no está de acuerdo co11 Dios en lo que dice respecto al cumplimiento de Sus promesas?
Una fe que conquista
Un buen cristiano ~'<·¿~~tiendes ahora, querido lector, por qué ~---~ni:oritr~mos personas que se dicen ·"buenos /~ristiano~" y q~e viven una vid.a totalmente
/f<-~9:Jejada -Á"~•• ~-"'
te?
de\ esta verdad que es la vida abundan: · 1~
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El iipós,tol Juan, en su gran viSión del Apocalipsis, dijo: . __./ ~ ··. ·-~
"Entonces oí unqgtán voz en el cielo, que decía: ·_Ahora hf(Yenideliisalvación, el poder y el reino de nuestroi'Diós y la atttoridad de su Cristo, porque ha sido expulsado el acusador d~ nuestros hermanos, el que los acusaba delante de nuestro Dios día y nocl1eo Ellos lo han vencido por medio la sangre del Cordero y de la palabra del testimonio de ellos..." (Apocalipsis 12:10-11). /
. Esta es una razón más por la que debemos confesar resueltamente la palabra de fe, de esperanza, de certeza, pues por medio de nuestras confesiones obtenemos las grandes victorias . Un buen cristiano es aquel que tiene la fe poseedora y da testimonio de todo lo_ que Dios hace.
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Vida en abundancia
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1
Cuando creernos que Jes煤s n1uri贸 por nuestros pecados tenernos la certeza de que sotnos salvos, y lo solllos reahnente . Cuando, por otro lado, creem.os que por 路las heridas de Jes煤s ftiitnos sanados, tene111os la certeza de que lo estam.os y esto es real. Eso es fe.
Salud es vida abundante
. Vida abundante inclt1ye tan1bién la salud física . Dios desea que Sus hijos gocen de perfecta salttd física, como también que gocen de excele11te vida espiritual.
Ct1a11.do Jesucristo salva al hombre del pecado y del dominio del diablo, también lo cura de todas sus e11.fermedades y esto es lógico. Una persona está convencida de haber sido salva mediante las promesas de la Palabra de Dios. El hecho de que Dios nos ama y de que Cristo murió por nosotros e11la cruz Ilos da la certeza de que somos salvos y no discutimos eso con nadieo
De esta manera, una persona puede convencerse de que está sana de todas las enfermedades, creyendo que éstas fueroil llevadas por Jesús y que no tiene más la obligación de llevarlas~
Salud es vida abundante ·
Dios desea que el hombre tenga un cuerpo salu.dable en todos los aspectos . Vida en abundancia
Cuando creemos que Jesús murió por nuestros pecados tenemos la certeza de que somos salvos, y lo somos realmente. Cuando, por otro lado/ creemos que por las heridas de Jesús fuimos sanados, tenemos la certeza de que lo estamos y esto es real. Eso · es fe. La tradición religiosa enseña que debemos pedir todas las cosas «sí fuera de la voluntad de Dios». Consecuentemente/ muy pocas personas han experimentado milagros de sanidad. Parece contradictorio, pero la realidad es que viven enseñando por ahí que «tal vez no sea la voluntad de Dios sanar» . ¡Esto es diabólico, falso, abominable! Es necesario mucho esfuerzo por parte de algunos «teólogos» para cambiar la Palabra de Dios sobre los asuntos más importantes de los Evangelios e interpretarlos de esta manera. Promesas abundantes
Dios ha prometido abundantemente, en toda su Palabra sanar a sus hijos . Vea qué sucedió inmediatamente después de que Jesús resucito de los muertos. Esto es un ejemplo del deseo de Dios para que elevangelio sea predicado: Salud es vida abundante
"Finalmente se apareció a los once mismos, estando ellos se11tados a la mesa, y les reprochó Sll · incredulidad y dureza de corazón, porque no hqbían creído a los que lo habían visto resttcitado . Y les dijo: Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatttra. El que crea y sea bautizado,
será salvo;pero el que no crea, será condenado . Estas señales seguirán a los que creen: En mi nombre echarán fuera demonios, hablarán nuevas len
as,
tomarán serpientes en las manos y, aunque beban cosa mortifera1 no les hará daño; sobre los enfermos pondrán sus manos, y sanarán'' (Marcos 16:14-18). ''Por la mano de los apóstoles se hacían mtlchas señales y prodigios en el pueblo. Estaban todos uná-
nimes en el pórtico de Salomón, de los demás ninguno se atrevía a juntarse con ellos¡ sin embargo, el pueblo los alababa grandemente. Los que creía11 en el Señor aumentaban más, gran número de hombres y de mttjeres¡ tanto que sacaban los enfermos a las calles y los ponían en camas y camillas, para que, al pasar Pedro, a lo menos su sombra cayera sobre alguno de ellos. Aun de las ciudades vecinas muchos venían a Jerusalén trayendo enfermos y atormentados de espíritus inmundos; y todos eran sanados" (Hechos 5:12-16). Dios sana hoy Para vivir plenamente una vida abundante y recibir, en consecuencia, la sanidad de todas las enfermedades, uno de los más importanVida en abundancia
tes pasos es saber que el tiempo de los milagros no ha pasado, y que aún hoy la voluntad . de Dios es sanarnos, como parte de la vida abundante prometida por Jesús. En los días bíblicos, los enfermos eran sanados, los ciegos veían, los leprosos eran purificados, los paralíticos andaban y las personas que sufrían las más diversas enfermedades eran transformadas en personas saludables, como una prueba de que Dios, como Padre, las amaba y no deseaba verlas sufrir.
La certeza de la sanidad Esos milagros acontecían en las iglésias de aquellos tiempos tanto como acontecen hoy. Existen cinco grandes razones por las cuales nosotros podemos tener esa convicción: 1- Dios promete sanar.
''Les dijo: Si escuchas atentamente la voz del Señor, tu Dios, y haces lo recto delante de sus ojos, das oído a sus man mientos y guardares todos sus estatutos, ninguna enfermedad de las que envié sobre los egipcios trqeré sobre ti, porque yo soy el Señor, tu sanador"(Exodo 15:26). Y Él nunca cambió: "Porque yo, el Señor, no cambio¡ por esto, hijos de Jacob, no habéis sido consumidos (Malaquías 3:6). N
Salud es vida abundante
2 - Jesús Cristo sanaba a los enferm.os.
"Recorríú Jesús todas las ciudades y aldeas, etzseña1tdo en las sinagogas de ellos1 predicando el evangelio del Reino y sanando toda enjer1n,edad y toda dolencia e1z el pueblo)'' (Mateo 9:35). Y El nunca cambió: "Jesucristo es el11tismo ayer, hoy y po1¡§ los siglos" (Hebreos 13:8). 3- Jesús mand9 a Sus discípulos que sanasen a los enfermos. "Entonces llamando a sus doce discípulos, les dio autoridad sobre los espíritus impttros, para que los echaran fuera y para sanar todtl enfermedad y toda dolencia" (1Vlateo10:1). Y un verdadero discípulo de Jesús hoy debe ser semejante a los del pasado: "Dijo entonces Jesús a los judíos que habían creído en él: Si vosotros permaneciereis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos ..." (Juan 8:31). -
4 - Los milagros de la sanidad se manifestaban en todo lugar, en el ministerio de la Igle• sta. "Pero Pedro dijo: No tengo plata ni oro, pero lo que tengo te doy: en el nombre de Jesuc1·isto de Nazaret, levántate y anda" (Hechos 3:6). Y la verdadera Iglesia nunca cambió. El libro de Hechos de los Apóstoles es un ejemplo de la verdadera Iglesia, "hasta el fin de los tiempos".
5 - Jesús comisionó a todos lo que creen de todas las naciones, para que sanaran a todos los enfermosv Seguramente los verdaderos creyentes nunca cambiarán, Jesús dijo: el que "u&
etl mí cree, las obras que yo lzago, él tambiéttlas · hará¡ y aun mayores haráu.'' (Juan 14:12)4 Padre Sano, Hijos Sanos Hasta en la frágil constitución hLtmana es seguro que padres sanos generan hijos sanos, y que ningún padre tiene placer o se conforrrta en ver a sus hijos enfermos . Lo mismo sucede con Dios en lo que se refiere a Sus hijos. No los quiere enfermos, antes se preocupa en sanarlos para ·que vivan en plena felicidad. La vida abundante incluye, sin sombra de duda, la cura de las enfermedades del cuerpo, porque no puede ser feliz una persona llena de dolencias, principalmente, porque Dios es un Padre amoroso y celoso;· y jamás descuidaría esa parte con sus hijos. Crea esto, concuerde con la Palabra de Dios y confiese su victoria sobre las enfermedades . Ellas no son de Dios, no vienen de Dios, ni tampoco sort usadas por El para ser glorificado. ,¡>
Salud es vida abundante
Dios, nuestro Padre, es glorificado en nuestra victoria, en nuestra alegría y en nuestra prosperidad.
Un padre que se glorifica en el sufrimiento de su l1ijo jamás puede ser una padre amoroso. No acepte esas ideas que destruyen la fe~ Rechácelas con todas sus fuerzas y aprópiese .de aquello que Dios está colocando a su dis.. . posicion . /
El apóstol Juan, en la carta que escribió a su amigo Gayo, hizo votos por_ su prosperidad y salud, así como por la prosperidad de su alma.
"Amado, yo deseo que tú seas prosperado en todas las cosas y que tengas salud, así como prospera tu alma" (3 Juan 1:2).
La vida abundante, definitivamente, incluye estos tres aspectos y si usted quiere vivir abun-·
dantemente, encuádrese en ellos, para su felicidad y para la gloria de Dios.
IR
1
No pierda la oportunidad de ser socio de Dios. Col贸quese a su disposici贸n con todo lo que usted tiene y comience a particip~r de todo lo que Dios tiene.
Probando a Dios
"Probadme ahora en esto, dice el Señor de los ejércitos, a ver si no os abro las ventanas de los cielos y derramo sobre vosotros bendición hasta que sobreabunde'' (Malaquías 3:10).
Recuerdo perfectamente que cuando me casé, en 1971, recibía un salario de u$s 250.00 mensuales. Pagaba de alquiler u$s 105.00 y daba u$s 25.00 de diezmo. Era un verdadero desafío para mí, vivir con una cantidad de tan sólo u$s 120. 00 que era el saldo y ~con eso-mantener mi hogar y cubrir los costos de comida, movilidad y gastos que todo recién casado necesita . Yo sabía que mi prosperidad dependía mucho de mi fidelidad a Dios y nunca dudé en probarlo. Continué no solamente dando mi diezmo, sino que también daba ofrendas y ofrendas especiales en la iglesia que frecuentaba. Probando a Dios
El Se単or nos manda probarlo para que las bendiciones vengan sobre nosotros .
1.%1 Vida en abundancia
/
Probé a Dios Y El me respondió. Once meses después del casamiento~ además de tener todas mis cuentas al día, tuve la satisfacción de salir de un.a agencia de automóviles con un auto cero kilómetro. Dios me bendijo en mi empleo haciéndome ascender de puestos, aumentando con eso mi salario y hasta hoy nunca me faltó nadaó 1
El Señor es mi pastor, nada nte faltará$ En lugares de delicados pastos me hará descansar¡ junto ti aguas de 1¡feposo me pastoreará.u" (Sal1nos 23:1-2). '
Muchas personas tienen fe en conseguir alguna cosa de Dios, pero les falta· coraje, intrepidez, confianza, para colocar su fe en acción .
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Probarnos a nosotros mismos
Muchos saben y creen que si prueban a Dios tendrán respuestas afirmativ·as, pero lo que la mayoría tal vez no sepa es que oara probar a Dios, en realidad, tenemos que primeramente ser probados 11.osotros . i
L
•
Yo había decidido probar a Dios, pero primeramente, yo tenía que probarme a n1í mismo. Precisaba pasar por la prueba de dar a Dios: dá11.dole prin1eramente mi parte. Vea lo que Dios dice en Su Palabra, cuando nos manda probarlo: Probando a Dios
"Traed todos los diezmos al alfolí y haya alimento en mi Casa: Probadme ahora en estou." (A!Jalaquías 3:10).
En una de nuestras reuniones, una señora decidió aceptar el desafío- de probar a Dios y la única cosa que podía hacer en aquell~ ocasión era dar los últimos pesos que poseía~ Algunos días después recibió u$s 97.000.00 de una l1erencia que jamás esperaba recibir4 Otra comenzó a probar a Dios pagando el diezmo que era. de u$s 8.00 en 1979. En el año1980 su silario pasó a u$s 850.00 y entonces pasó a dar un diezmo diez veces mayor, teniendo en consideración. que su Sé1lario fue multiplicado por diez. -
¿Quién gana con esto? Dios, y usted, porque teniendo su salario multiplicado, vivirá más tranquilo y feliz, y . .Dios, porque usted traerá más a Su Iglesia y El tendrá más dinero para usar en favor de otras personas que están necesitando ser bendecidas . Dinero, Herramienta Sagrada El dinero es una herramienta sagrada usada en la obra de Dios. El es el dueño de todas las cosas, pero nosotros somos Sus socios en Sus proyectos. De esta manera, nosotros pon~mos el dinero, que es humano; mientras que Dios pone la otra parte, el poder espiritual y
Jj![J Vida en abundancia
los milagros/ que son divinos. Siempre hemos enseñado a las personas que es fácil prosperar si obedecemos la Palabra de Diose
Jesús dijo que el hombre que construye su casa en la roca es sabio y que las lluvias, los vientos, las tempestades o los ríos no la hacen desmoronárseo Así son aquellos que obedecen. Su Palabrae Para edificar nuestras vidas en prosperidad, tenemos que obedecer la Palabra de Dios. Si Dios nos manda dar el diezmo, l1agamos eso y esperemos la respuesta . · La ley de dar para recibir no es.apenas u11a ley física, es también una ley espiritual. tiasta el mismo Dios no escapó de esta ley, cuando dio a su propio hijo, para que pudiese recibir nuestras vidas y nuestra alabanza.
Probando a Dios
El dinero es una herramienta sagrada que Dios usa en Su obra.
Cuando som.os fieles en el diezm.o, aden1ĂĄs de vernos libres de esos sufrimientos, pasan1os a gozar de toda la plenitud de la Tierra, teniendo a Dios de nuestro lado bendiciĂŠndonos en todas las cosas.
El milagro del diezmo
Dar el diezmo es prepararse para recibir bendiciones sin medida/ de acuerdo con lo que dice la Biblia1 sobre los aspectos físico, espiritual y financiero . ;
Cuando pagamos el diezmo ·a Dios, El tiene la obligación (por que lo prometió) de cumplir con Su Palabra, reprendiendo a los espíritus devoradores que traen desgracia a la vida del hombre, actuando en las enfermedades, los accidentes, los vicios, la degradación social y en todos los sectores de la actividad humana, haciendo que el hombre sufra eternamente . Cuando somos fieles en el diezmo, además de vernos libres de esos sufrimientos, pasamos a gozar de toda la plenitud de la Tierra, teniendo a Dios de nuestro lado, bendiciéndonos en todas las cosasó Diezmo, según su interpretación más común, es la décima parte, y según la Biblia, es El milagro del diezmo
Los hombres que se preocupan en ser fieles a Dios, son cada vez mรกs bendecidos .
B
Vida en abundancia
la décima parte de todos los ingresos de una perso11a que deben ser dedicados a Dios . El . diezmo fue instituido por el Señor, como una especie de impuesto a sus criaturas . Así como nosotros ciudadanos, tenemos obligación de pagar nuestros impuestos al gobierno, con el fin de beneficiar a la nación, también el Señor Jesús, a través de nuestros diezmos, hace llegar el auxilio a aquellos que están en las tinieblas de este mundo, a través de la difusión del Evangelio por la radio, el diario o la televisión en todo el mundo. 1
La importancia del diezmo El diezmo es importante para Dios y para la iglesia, porque no se puede hacer 11ada para alcanzar a los perdidos, sin. dinero, tan necesario en esta sociedad de consumo en la cual vivimos: Por otra parte, el diezmista no es menos importante. Abram, por ejemplo sólo fue bendecido después de haber pagado el diezmo a Melquisedec. Solamente después de este acto de fe, sumisión y lealtad, es que Dios estableció Su Alianza con él. Dios hizo una alianza con Abram, diciéndole: 'Abram, tu serás muy bendecido: nadie po1
drá contar las bendiciones que traigo sobre ti y so e tu descendencia, mientras, no te olvides y jamás se aparten de mí. u" Así Abrarn pasó a ser el padre de una gran nación, Israel, y consecuentemente el progenitor de Jesús/ nuestro Salvadoro El El milagro del diezmo ;:~ :;.
diezmo tiene tanta importancia, que fue ordenado mucho antes de los diez mandamientos de la Ley de Dios y, si era importante antes de la Ley y lo fue durante la Ley, ¿por qué no va a serlo también después de la Ley? En cierta oportunidad, Jesús estaba repreil.diendo a los escribas y a los fariseos acerca del formalismo con que practicaban la Ley y les enseñó que eljuicio la misericordia y la. fe eran las cosas más itnportantes que se podían sacar de la Ley de Moisés, pero que aun practicando estas cosas no deberían omitir aque·llas otras que tambié11 eran importantes y en el caso específico de este pasaje, las otras "cosas importantes" de aquellas que Jesús habla no son nada más ni nada menos que dar el diezmoa 1
"jAy de vosotros, escribas y fariseos, ltipócritas! porque diezmáis la menta y el ene y el comino, y dejáis lo más importante de la ley: la justicia, la misericordia y la fe. Esto era necesario hacer, sin dejar de hacer aquello'! (Mateo 23:23).
Cuando hablamos sobre el diezmo, somos siempre blanco de comentarios, objeciones y críticas por parte de ciertos incrédulos. Es claro que si la persona no es iluminada por el Espíritu Santo, aunque comprenda el significado del diezmo, tendrá dificultades para aceptar el hecho de que ella rrtisma precisa cumplir con esa determinación de parte del Creador.
l!fEI Vida en abundancia
Aquellos que n~o entienden o están en desacuerdo con Dios en este aspecto, tendrán, naturalmente, muchas dificultades para retirar el diez por ciento de sus entradas, casi siempre sufridas, para entregar en la iglesia, sin saber con certeza cuál será el destino que éste tomará, mientras millares de personas han sido bendecidas por la práctica de dedicar al Señor la décima parte de aquello que reciben y están siendo bendecidas abundantemente. Dios es el dueño de todo Para aclarar más sobre el tema del diezrrto, tomemos el siguiente ejemplo: en el interior de Brasil, cuando alguien tiene un pedazo de tierra sin cultivar, acostumbra alquilarla para otra persona y hacen entre sí un acuerdo más o menos de la sigtiiente forma: el arrendatario se compromete a limpiar la tierra, surcarla, matar las hormigas y los insectos nocivos, sembrar y cuidar la tierra hasta la cosecha final del fruto . Después de la cosecha, el arrendatario tiene la obligación de pagar al dueño de la tierra parte de aquello que cobró, de acuerdo con el contrato firmado por ambos y que casi siempre es del50°/o de su produccióno
_Muy bien, así se hace en el interior del país y nadie reclama nada o pelea por esto. El propietario de la tierra no hace nada, sólo espera el lucro, sabiendo que hay garantía de que vendrá a su tiempoo El milagro del die?mo :x-:w.·:~,L-....::: ..:·
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Pensándolo bien, cuando Dios requiere el 10°/o de aquello que recibimos como fruto de nuestro trabajo, El está pidiendo poco de lo mucho que nos da. Nuestra vida, nuestra inteligencia, nuestra energía, la tierra, la lluvia, el sol, en fin, todo lo que existe en la faz de la t}erra, como también en el cielo, pertenecen a El y no pasamos de ser meros administradores de aquello que es SuyoG Probar a Dios ¿Quién tiene,el derecho de probar a Dios, de reclamar d_e El aquello que prometió? ¡Sólo el que diezma!
Una de las grandes razones por las que debemos dar nuestro diezmo es ésta . Podemos y estamos en el derecho de probar a Dios. El mismo nos invita a probarlo en Su Palabra y tal invitación se da exactamente cuando se refiere al diezmo. /
#Traed todos los diezmos al alfolí y haya alimento en mi casa; y probadme ahora en esto, dice el Señor de los ejércitos, si no os abriré las ventanas de los cielos, y derramaré sobre vosotros ben-- dición hasta que sobreabunde" (Malaquías 3:10). Conocemos muchos hombres famosos que probaron a Dios con respecto al diezmo y se
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transformaron en grandes millonarios, como el Sr. Colgate, o el Sr. Ford y el Sr. Caterpilar~ Hombres como éstos, que además de los negocios y del cúmulo de riquezas, se preocuparon por la fidelidad a Dios, tienden a ser bendecidos cada vez más~ Usted, amigo lector, está invitado a ser diezmista; a probar eí amor de Dios y Su plan con relación.al dinero. Comience a probar a Dios en este aspecto y verá lo que va a suceder en su vida . Todas las personas quedarán sorprendidas con su prosperidad; y su dinero nunca acabará, por el contrario, se multiplicará de tal manera que usted tendrá oportunidad de adquirir aquello que siempre deseó. Nada le faltará, absolutamente nada, porque el Señor estará con usted.
"El Señor es mi pastor¡ nada me faltará" (Salmo 23:1)~
Plenitud de paz, de alegría, de felicidad, de placer; plenitud de alimentos, de energía y de fuerzas, plenitud de salud, de amor y de vida . Esto es lo que le espera, si tan sólo comienza a colocar en práctica una cosa tan elemental como importante. Haga pna prueba con Dios y comience a recibir de El estas bendiciones, a partir de ahora .
El milagro del diezmo
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Socios de Dios Una de las mayores revelaciones dadas al hombre es la de que Dios desea ser nuestro socio. Dios precisa de usted para darle oportunidad de participar de Sus bendiciones y ayudarlo a trasmitir a todas las personas Su Palabra .
Cuando Dios creó al hombre lo hizo a Su imagen y semejanza a fin de que., éste viniese a mantener una comunión con El. Así como hizo alianzas con Adán, Moisés, bram, Isaac y Jacob, también quiere hacerlas con nosotros. ·Las bases de nuestra sociedad con Dios son las siguientes: Lo que nos pertenece (nuestra vida, nuestra fuerza, nuestro djnero) pasa a pertenecer a Dios; y lo que es de El (las bendiciones, la paz, la felicid-ad, la alegría y todo lo bueno) pasa a pertenecernos. Pasamos a ser partícipes de todo lo que es de. Dios; la Biblia dice que somos co-herederos de Cristo y herederos de Dios.
Así que ya no eres esclavo, sino hijo¡ y si hijo, también heredero de Dios por medio de Cristo'' (Gálatas 4:7). .fl
Una de las cosas que más me impresionan es el interés de Dios por el hombre.
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Vida en abundancia
En toda la Biblia encontramos invitaciones de Dios para el hombre, deseando mantener una comunión con éste, para hacerlo feliz. Dios tiene determinada Su bendición para todos lo que lo invocan en esp~itu y en ver. dad . Cuando nos ali?mo~ con El, quedamos comprometidos con El y El con nosotros. Pertenecemos uno al otro y caminamos juntos de la misma manera como Dios hacía con Adán y Eva antes de desobedecerle, dándoles abundancia de vida y comunión diaria con ellos .
No pierda la oportunidad de ser socio de Dios. Colóquese a Su dísposición con todo lo que usted tiene y comience a participar de todo lo que Dios tiene. Haga eso ahora mismo, amigo lector. Determine esto en su corazón y sea una persona más de las que viven Una Vida en Abundancia.
El milagro del diezmo
E p D L FE 00000 Este libro del obispo M acedo nos hace. vorver a pensar y valorar la magnitud y
grandeza de nuestra fe, sentimiento que no debe "honrar los sentidos naturales del hombre, sino recibir su fuerza poderosa de la Palabra inmutable de Dios".
Colecci贸n Reino de Dios
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El objetivo de este libro del obispo acedo, es enseñar en forma clara-· obj iva el e dio de las do rinas bíblicas, importante para la formación del verdadero cristiano, sin el peso del idioma teológico y sofisticado que muchas iglesias, usan y que confunde más
de lo que explica§ Colección Reino de Dios
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La gracia de Dios se puede comprender como una relación bilateral. La iniciativa es de Dios, pero es necesaria la aceptación por parte del hombre para que esa relación se complete. La aceptación de la gracia, por otro lado, se da por la fe, y exige renuncia, dedicación, obediencia y sacrificios~ Colección Reino de Dios
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Todas las áreas que abarcan los demo-
nios son desenmascaradas en este libro; todos los trucos y engaños que son usados
por el diablo y sus ángeles para ilusionar a la humanidad son reveladosQ El lector sabrá acerca del origen de las enfermedades, peleas, vicios y todos los ma-
les que azotan al ser humano. Colección Reino de Dios
o Este libro pretende mostrar el significado de ser siervo, pero tambi茅n esclarecer sobre el servicio cristiano, estableciendo el cor to
procedimiento a la luz de la Palabra, para quien desea hacer la obra de Dios.
Colecci贸n Reino de Dios
Este libro no es solamen.. un estudio para que el cristiano ejercite plenamen su fe, sino que se trata, sobre todo, de un aviso para que el l. or se conserve inc贸lume en el campo de batalla religioso y no sucumba ante el arg.umento demon铆aco de que "el tiempo de los milagros ya pas贸$ U". Colecci贸n Reino de Dios
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00000 Debido a la multiplicidad de los símbolos del libro del Apocalipsis, la mayoría de los cristianos since-
ros han encontrado dificultades en el entendimiento de su lenguaje e incluso se han desanimado en su lectura. ¡Pero aunque haya dificultad en su comprensión, continúa siendo una revelación para los siervos! Especialmente para los siervos en prue s . Y aún así, es preciso que éstos tengan condiciones
espirituales para comprenderlo. Colección Reino de Dios
• .9l{ianza con 'lJios ?:onw I-I I
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• 'En fos Pasos de Jesús
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• TiPetji{de{Jlombre de 'Dios
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• 'E{ Poder Sobrenatura{ de fa
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Cabocfos y {juías ¿'Dioses o demonios?
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• Ti 'Espíritu Santo • 'E{Petji{ de fa Mujer de 'Dios
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• Las Obras áe [a Carne y fos !frutos áe[ 'Espíritu
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• 'E[Perfecto Sacrificio
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• 'E{ Señor !J e[Siervo
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• T,[ flLvivamiento
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• 'lJoctrinas áe [a Igfesia Universa{ áe[ g{g,ino áe t])ios (o/o[umen 1} 06ispo Maceáo • TJoctrinas áe [a Igfesia 'llniversa[ áe{ !l{eino áe tJJios (o/ofumen 2} Obispo Maceáo ·
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impreso en los Té3.Uerf}s Gráficos
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