Pocitos, Montevideo. Helio Piñón

Page 1


tccuadernos.com

Ver mรกs / More details


POCITOS, EJEMPLO DEL ENCUENTRO ENTRE EL TEJIDO URBANO Y EL MAR

8 De nuevo tengo el honor y el placer de decir unas palabras referidas al nuevo libro de la serie Sin Palabras, de nuestro querido y admirado compañero y amigo Helio Piñón. Y esta vez su mirada atenta y reflexiva, realizada tanto desde el profundo conocimiento de la arquitectura de la Modernidad, como desde la percepción sensorial, entendida como una experiencia completa, como nos decía Eduardo Chillida, nos lleva, como ya hiciera en sus tres libros anteriores, a reconocer arquitecturas honestas de una factura intachable, realizadas en la década de los años 1950, por arquitectos que habían asimilado con sencillez y con decisión los principios de esa modernidad que hoy seguimos admirando y en gran medida añorando. Pero Helio, no conformándose con descubrirnos ese buen hacer de arquitectos, en su mayoría desconocidos para nosotros pero muy valorados en su ciudad, nos introduce en una de las cuestiones más relevantes de la buena arquitectura, que a la vez es su razón de ser más profunda, y que no es otra que la de ser la clave, el instrumento de la construcción de la ciudad, definiendo su escala, y lo que es más importante, conformando el espacio público urbano, estableciendo las condiciones para que el ciudadano pueda desarrollar con cualidad y calidad ambiental, tanto sus necesidades como sus aspiraciones y deseos. Helio centra su trabajo en el barrio de Pocitos de la ciudad de Montevideo. Un lugar cuya ordenación cartesiana en cuadrícula, con manzanas de 100 varas de lado, unos 83m, surge del proyecto que el cartógrafo José María Reyes realiza en 1833, desarrollado a partir de 1841 por José Ramírez

Pérez, de forma que a finales del siglo XIX y principios del XX, se convirtió en zona de recreo, como estación Balnearia de gran relevancia pues la primera línea eléctrica de tranvía de Montevideo se realizó en 1906 entre la Aduana y Pocitos, consolidándose como barrio con arquitecturas de grandes casas veraniegas, que fueron complementadas con viviendas para la clase media, allá por los años 1915-1940. Pero la transformación importante de Pocitos hasta convertirlo en el barrio mas densificado y con mas calidad de vida de Montevideo, se produce fundamentalmente en las décadas de 1950-1960, con la actuación de arquitectos reconocidos como Julio Vilamajó, Raul Sichero, Luis García Pardo, Adolfo Sommer Smit, Walter Pintos Risso, y otros muchos, que supieron asimilar la esencia del Moderno, y sin hacer concesión alguna al “ego”, a la “idea” o a la forma preconcebida, sino trabajando desde la coherencia material, cromática y constructiva, así como desde el orden geométrico, donde la repetición no es asimilable a la copia sino a la reinterpretación y transformación, como nos decía el padre del existencialismo, Kierkegaard, y con ello llegar a la creación de ritmo, secuencia, orden, tensión, … desarrollaron esa arquitectura que hoy nos sigue pareciendo muy cercana, muy actual, llena de frescura, y que Helio nos muestra con clara maestría, dirigiendo la mirada hacia algunas de las cuestiones de mayor calado. Quizá una de las mas relevantes sea precisamente, como el tejido urbano se relaciona con el medio natural del mar. Si nos detenemos a mirar la ciudad desde la visión aérea, lo primero que detectamos es una trama densa que se va


aproximando a la línea de la costa, ajustando, deformando y girando la cuadrícula como si se buscara un encuentro lo más amable posible con el mar. Aquí no hay una imposición de las leyes de la ciudad posicionándose de forma autónoma con respecto al mar, sino que la suave curvatura de la bahía de Pocitos, la playa y la Rambla actúan como elemento intermedio entre esa ordenada estructura urbana y una naturaleza poderosa, majestuosa y cambiante, vibrante las más de las veces o serena cual mancha de aceite, que nos sitúa en la antesala del océano a través del Rio de la Plata, consiguiendo una transición paisaje natural-paisaje artificial, capaz de poner las bases para superar el acusado desencuentro entre ambos, propiciando la interacción y la continuidad, consiguiéndose una nueva lectura de esa relación. En la consecución de este diálogo transversal, tiene un peso decisivo la arquitectura que conforma ese tejido urbano, y en especial la que se nos muestra como fachada marítima. Aquí los sencillos mecanismos de la línea común de cornisa y del vuelo de 1,50m de toda la fachada de todos y cada uno de los edificios, junto a un sistema de orden secuencial horizontal establecido por los forjados y las terrazas, definen un frente marítimo unitario, armónico y másico, que despegándose del plano-tierra, parece querer flotar introduciéndonos en esa sugerente relación del peso y la levedad. Helio, con su mirada incisiva nos muestra la visión del peatón de ese frente marítimo, desde ambos extremos de la bahía, reconociendo en ellos como la superficie tersa e infinita del mar-playa se funde en el plano suelo de la ciudad,

introduciéndose bajo los edificios, precisamente a través de 9 esa línea de sombra que produce su vuelo continuo. Se trata de una profunda fisura que invita a su aproximación, a su percepción cercana, como si se tratara de un sistema de acceso procesional, que al acercarse descubrimos como el plano del espacio público se intersecta con el privado, definiendo espacios intermedios protegidos llenos de vegetación que lo hacen mas amable y atractivo, dejando en segundo plano el rugido de los coches, tomando ahora el protagonismo la visión hacia la inmensa llanura de la desembocadura del rio. Si nos situamos en el interior de los edificios, donde el plano suelo se encuentra parcialmente elevado, podemos percibir como ahora el vuelo del edificio junto con el plano tierra, enmarcan horizontalmente la mirada, capturando el mar como si de una sensación mágica se tratara. Estos son algunos de los mecanismos del buen hacer arquitectónico, que en Pocitos, han permitido configurar un espacio urbano a escala humana, y con ello contribuir decididamente a la construcción de la ciudad. Estas reflexiones son solo una pequeña muestra de las sugerentes imágenes que el sentido crítico y la mirada certera de Helio Piñon, nos ofrece en este recorrido por Pocitos, ese barrio de Montevideo cuyo nombre proviene de su playa de arenas limpias y sedosas, que a principios del siglo XIX, percibieron las suaves manos de las lavanderas al escarbar pequeños pozos para realizar su tarea cotidiana. Ignacio Bosch Reig Catedrático de Proyectos Arquitectónicos


10


11


12


13


14


15


16


17


18


19


20


tccuadernos.com

Ver mรกs / More details


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.