22
COMPAÑÍA DEL SALVADOR
COLEGIOS MATER SALVATORIS
Madre María Félix Fundadora de la Compañía del Salvador
Abril
2014
BÚSQUEDA INTRÉPIDA DE LA VOLUNTAD DE DIOS En el prólogo a la edición de los escritos autobiográficos de la M. María Félix, el P. Luis M.ª Mendizábal, S.J., escribe: He tenido el privilegio de tratar espiritualmente a la Madre Félix en su madurez durante muchos años. Y siempre tuve la impresión de encontrarme ante una persona de categoría superior, una mujer extraordinaria en su mente, en su grandeza de corazón, en su visión de las cosas, en su elevación de espíritu, en su amor a Jesucristo y a San Ignacio, en su entrega sin límites, en su fidelidad a un carisma que le trajo muchos rompecabezas y problemas, pero al que se mantuvo fiel toda su vida, a través de muchos sufrimientos y también de muchas alegrías que el Señor le concedió. Siendo una mujer excepcional, por encima de todas sus cualidades humanas conservo en mi memoria la imagen de una persona entregada a Dios: de una mujer de Dios. Eran notables su sencillez de espíritu, su bondad y su intimidad con el Señor, que le hacía muchas veces prorrumpir en lágrimas que se deslizaban por su rostro al hablar del amor de Dios. El amor de Dios era su tema predilecto; al amor y a la gloria de Dios se entregó desde su juventud con toda su alma. Dios le había dotado de una gran capacidad de amar: empezando por su familia, se enternecía con el recuerdo de su padre y su trato con él en torno a la vocación; era unum con la Madre Aige, con sus compañeras, alumnas, colaboradoras... Pero no se trataba de un
temperamento dulce y blandengue: tenía un carácter fuerte, que en ocasiones le llevaba a exabruptos de los que luego se dolía, pues podían ser duros con las personas a las que reprendía; siempre le servían de humillación y pedía por ellos perdón. Un alma entregada sin fisuras. Un alma llena de bondad y de sentido común, de amor a todos, que entraba en las personas y que en una sencilla conversación era capaz de tocar los corazones y ganarlos con su delicadeza, con su amor, con su bondad, con su inteligencia superior. Un alma que aparece fielmente retratada en estas páginas, escritas por ella misma. Si tuviera que resumir en una sola palabra el contenido de estos apuntes autobiográficos de la Madre Félix, hablaría de una búsqueda, porque lo que aparece en estos «Recuerdos de mi vida» es un itinerario de búsqueda intrépida de la voluntad de Dios, de la mayor gloria de Dios. […] La evolución interior se realiza en el Colegio «La Enseñanza», de la Compañía de María. En él, de manera insensible, la Madre Félix comenzó a «saborear y gustar el tesoro que iba descubriendo». La vida de las monjas de la Compañía de María, su entrega y dedicación en la labor educativa y, sobre todo, el testimonio de una pobreza abrazada por amor a Jesucristo, causaron en ella una honda impresión. En ese ambiente de vida espiritual impregnado de espíritu ignaciano, fue conociendo un
El P. Luis M.ª Mendizábal, S.J., y la M. María Félix, en la celebración de su 90 cumpleaños
estilo al que se iría aficionando más y más con la lectura de autores jesuitas. Ese espíritu la fue invadiendo y conquistando. Y la culminación de este proceso de conversión vino con la experiencia de aquel Jueves Santo de 1922, cuando «irresistible y dulcísimamente atraída por el Señor», se entregó a Él para siempre, ¡con catorce años! Desde entonces, será ésa la orientación de toda su vida. Constituirá su camino de maduración interior y exigirá a la Madre Félix un continuo discernimiento, necesario para que el Señor pudiera realizar en ella lo que era su agrado. […] El espíritu ignaciano impregna todo este proceso de búsqueda. La Madre Félix tuvo en San Ignacio el desahogo de su corazón, y en numerosas ocasiones identifica la Compañía de Jesús con el mismo San Ignacio. Ella, que tanto amaba a su padre natural y tanto sufrió su incomprensión ante el camino que le marcaba el Señor,
encontró en San Ignacio un verdadero padre y le correspondió con todo su genio. Cuando yo la conocí, la Madre manifestaba una personalidad serena, penetrante. Tenía una cierta claridad en su persona, propia de quien ha encontrado en el Corazón del Señor su lugar predilecto para descansar. Ese descanso en el Corazón del Señor fue moldeando en ella la misma actitud de entrega generosa a los demás, de manera aún más delicada. La obediencia de San Ignacio, que ella tanto cultivaba y promovía en la Compañía, fue el camino por el que el Señor la fue llevando para realizar en su vida ese ideal de la mayor gloria de Dios, con la inmolación verdadera de todo su ser. Con San Ignacio buscaba «en todo amar y servir a su Divina Majestad», y con San Ignacio decía y vivía el «Tomad, Señor, y recibid toda mi libertad... Todo es vuestro, disponed a toda vuestra voluntad».
PUBLICACIONES PENSAMIENTOS • Oh Señor, como párvula llévame en tus brazos. (Escritos de conciencia, 1945) • Señor, lo que yo no puedo, lo podéis Vos. ¡Oh, si Vos quisierais! Confío en Vos; me entrego a Vos. (Ejercicios Espirituales, 1950)
COMPAÑÍADELSALVADOR
COLEGIOSMATERSALVATORIS
50º ANIVERSARIO
Madre María Félix
Fundadora de la Compañía del Salvador
• Estoy entregada del todo a Él. Yo me siento debilidad y miseria, pero me siento suya. (Ejercicios Espirituales, 1951) • Abandonarme al amor de Cristo. Sólo en Él encuentro paz y seguridad (Escritos de conciencia, 1964) • ¡Qué bueno es mi Padre celestial, nos guarda como a las niñas de sus ojos, cuida de nosotras como una madre cuida a sus hijos en su regazo! ¡Qué bueno es Dios! (Escritos de conciencia, 1967) • Me parece que viajo en un coche querido por Dios; viajo con Él, con naturalidad... En el viaje se suceden distintos parajes. Unos gratos, otros molestos. El coche avanza y el espíritu de la viajera no se inquieta. Le gustan los paisajes bellos y no se inquieta por lo feo ni lo molesto. ¡Es un viaje! No vale la pena poner el corazón en lo efímero. (Escritos de conciencia, 1992) • Creo en Ti, en tu amor, en tu misericordia. Mi pasado es tuyo, mi presente es tuyo, mi futuro es tuyo. Soy tuya y te amo. (Escritos de conciencia, 1999)
¿Qué haré por Cristo?
Pensamientos de la Madre María Félix P.V.P. 4€
Vida de la Madre María Félix Biografía Infantil P.V.P. 6€
“Toda, sólo y siempre de Dios” DVD: duración 47 min. P.V.P. 5€
“Destellos de Luz”
DVD: duración 25 min. P.V.P. 10€
“Recuerdos de mi vida”
Escritos autobiográficos de María Félix Torres P.V.P. 15€
FAVORES Le puse una estampita Hace dos años a la abuelita de mi actual marido, que por entonces era mi novio, le dio un infarto al corazón y la llevaron al Hospital Puerta de Hierro. Los médicos nos dijeron que era muy mayor y que tenía el corazón debilitado; que seguramente no viviría. Le puse la estampita de la Madre Félix debajo de la almohada y, asombrando a los médicos, salió andando del Hospital. Al poco tiempo la abuela perdió la cabeza y le diagnosticaron alzheimer muy agresivo. Insultaba y pegaba a su marido e hijas, la tuvieron que llevar a una residencia porque no se hacían con ella. Yo le volví a poner la estampa con su foto en su habitación y milagrosamente su agresividad desapareció y se acuerda de todo. La abuela ya vive en su casa con su marido, siempre lleva la estampa y está muy bien de salud, tiene 85 años. A los 20 años me iba a presentar al examen práctico de conducir. La verdad es que no estaba preparada pues había dado muy pocas clases; me llevé la estampa de la Madre Félix y la puse en la palanca de marchas. El profesor me dijo: por muchas monjitas que pongas no vas a superar la prueba... ¡APROBÉ A LA PRIMERA! Tantas y tantas cosas la pido que sería imposible contarlo, cada vez que algo me asusta ella está conmigo. (M.P., Madrid, España)
Sus oraciones quedan en buenas manos Desde hace 20 años trabajo en una Casa Hogar que aloja a casi 40 ancianos. Hace tres años se presentaron diversas dificultades que obligaban a desalojarla o a comprarla, lo que no estaba dentro de nuestras posibilidades. Cada día se iban cerrando más las posibles soluciones y sólo podíamos esperar un milagro. Fue entonces cuando, al ir a buscar a mi hija al colegio, me encontré con una religiosa de la Compañía del Salvador y le conté el problema que teníamos. Ella me dijo que rezara con mucha fe, pidiéndolo por la intercesión de M. Félix, y, que si era de Dios, saldría adelante. Así lo hice y, gracias a la ayuda de muchas personas, hace apenas un mes que firmamos la adquisición del inmueble, evitando así el desalojo de los ancianos. Desde ahora no dudaré en encomendarle a la M. Félix las dificultades, grandes o pequeñas, que me pueda traer la vida diaria, teniendo por seguro que mis oraciones quedan en buenas manos. (F.J., Caracas, Venezuela) Damos las gracias a las personas que nos remiten testimonios de la vida de la M. María Félix y favores recibidos por su intercesión, así como los donativos para su causa, enviados por giro postal o por transferencia a: • Compañía del Salvador: c/c 2100-442611-0200020387 de la Caixa, Madrid, ESPAÑA. • Instituto Religioso Compañía del Salvador. Cta. n.º 362058602 Banco Popular, San Juan, PUERTO RICO.
DATOS BIOGRÁFICOS María nació en Albelda, Huesca, el 25 de agosto de 1907 y fue bautizada el 12 de septiembre en la misma villa. A los catorce años sintió la llamada a una entrega total a Jesucristo, y un atractivo irresistible hacia la espiritualidad ignaciana. La mayor gloria de Dios, siguiendo a Cristo y unida a Él, se convirtió en la razón de su existencia. Entre tanto, obtuvo la licenciatura en Ciencias Químicas, para ser un instrumento más apto para su servicio. A través de un sorprendente y no pretendido paralelismo con el itinerario espiritual de San Ignacio de Loyola, el Señor la llevó a fundar la Compañía del Salvador, erigida en Congregación Religiosa de
derecho diocesano en 1952, y de derecho pontificio en 1986. Dios le asignó dentro de su Iglesia la parcela de la educación cristiana de la juventud, sobre todo universitaria, en cualquier parte del mundo. Con este fin surgieron los Colegios Mater Salvatoris, que tienen como misión propagar el carisma que Dios le concedió de adhesión al Papa, amor tierno a la Santísima Virgen y hacer de los jóvenes permanente fermento evangélico en la sociedad, para llevarla a Jesucristo. Murió santamente en Madrid, el 12 de enero de 2001, y sus restos descansan en el cementerio de la Compañía del Salvador en Mota del Marqués, Valladolid.
ORACIÓN para la devoción privada Padre misericordioso, cuyo Hijo, Salvador nuestro, te glorificó cumpliendo amorosamente hasta el fin tu voluntad. Tú suscitaste en tu hija María el deseo ardiente de glorificarte y de seguir de cerca a Jesucristo, cooperando a la redención del mundo mediante la Compañía del Salvador, por ella fundada. Concédenos por su intercesión la gracia que te pedimos, para que la Iglesia, a la que amó apasionadamente como a Esposa de Cristo, la eleve al honor de los altares, para tu mayor gloria. Amén. Padrenuestro, Avemaría y Gloria. De conformidad con los decretos del papa Urbano VIII, en nada se pretende prevenir el juicio de la Iglesia.
Dirección
Se ruega comuniquen los favores recibidos por su intercesión a: Religiosas de la Compañía del Salvador Tapia de Casariego, 19 • 28023 Madrid (España) www.mariafelix.org •e-mail: madre.felix@ciasalvador.org Con licencia eclesiástica