11 minute read

La momificación en el antiguo Egipto

Los antiguos egipcios creían que la separación del alma (BA) del cuerpo, factor que provocaba la

muerte, era solo transitoria y que el alma al cabo de un corto periodo de tiempo regresaba al cuerpo; de ahí la necesidad de encontrar fórmulas para conservarlo, ya que, en caso contrario, no había

Advertisement

posibilidad de vida en el reino de los muertos.

Esta convicción en la supervivencia del alma al lado del cuerpo, trajo consigo las medidas para la

conservación de éste, o sea la momificación.

Por esta causa religiosa, el embalsamamiento fue una de las más poderosas industrias del antiguo

Egipto, llegando a constituir también una de las más perfectas técnicas.

Las creencias relacionadas con la vida de

ultratumba, generaron un complicado ritual que

iba desde la acción de embalsamar el cadáver

a la preparación del ajuar y del recinto funerario,

pues era creencia general que, en el reino de la

muerte, se repetían los mejores momentos de

la vida terrena; por ello el egipcio no temía la

llegada de la muerte y seleccionaba

cuidadosamente los objetos y utensilios de uso

particular que le acompañarían a la otra vida,

según sus posibilidades.

En el Reino Antiguo (2.670-2.150 a.C.) los procesos funerarios o destinos de ultratumba están muy diferenciados, pues solo el faraón,

su familia y algunos altos dignatarios son merecedores de la inmortalidad, pero paulatinamente, esta idea de inmortalidad fue calando en las diversas capas sociales hasta llegar al pueblo, y ya en el Reino Medio (2.1001.750 a.C.) las creencias del rey y las del pueblo se van mezclando, ya no son celestes para el rey y terrestres para el pueblo, se mezclan los destinos, todos participan en el mismo Mas Allá,

este cambio empieza en el Primer Periodo

Intermedio (2.150-2.100 a.C.).

Sin embargo, no todo el mundo podía costearse

un entierro completo en el que estaba incluida la momificación, pero en el más mísero entierro o tumba que hemos encontrado, se refleja el deseo de llegar a la vida de ultratumba con algunos objetos considerados importantes.

La preparación del sepulcro no era suficiente

para pasar adecuadamente al reino de Osiris, periódicamente debían realizarse ciertos ritos funerarios en honor del fallecido. Para Para el antiguo egipcio era fundamental conservar el cadáver con su forma perfecta y lo

más reconocible posible, como base sustentadora de la existencia en el Mas Allá,

todas las complicadas técnicas de asegurarse la realización de esta continuidad el

egipcio reservaba una parte de sus bienes a financiar fundaciones, atendidas por sacerdotes, esto fue lo que fomentó el poder del

clero, que controlaba y administrada grandes propiedades y riquezas, que exentas de impuestos iban creciendo y creciendo. Cuando se producía una muerte, los familiares

iniciaban un luto de sesenta días, pero antes

debían entregar el cadáver a los

embalsamadores, que pese a su sagrado oficio, eran poco apreciados. Vivían en la “casa de la

muerte” (en egipcio per-nefer, curiosamente su traducción es “casa hermosa”), allí recibían los

cuerpos que debían embalsamar y que,

concluido el proceso, devolvían a los familiares.

Invertían en la labor más o menos tiempo, embalsamamiento no tienen otro fin. El muerto

debe tener la forma perfecta de la que gozó en

vida. Se le introducirá en un determinado

momento en un sarcófago antropoide o sea con forma humana, y se le enterrara en una tumba que será su casa, donde vivirá su “KA”, o doble

etérico, que es la energía cósmica o parte

espiritual. Aunque en el siglo V a.C. Herodoto y posteriormente en el siglo I a.C. Diodoro de Sicilia, describieron los rituales y prácticas de la momificación, que según el mito osiriaco, habría

sido transmitido a los hombres por el dios Anubis, la mejor fuente de datos e información

que podamos obtener es el estudio de las propias momias.

según se tratara de un trabajo más o menos complicado (persona rica o pobre). Había obreros de tres clases, gobernados y guiados por los sacerdotes, unos estaban a sueldo, otros eran huidos de la justicia y unos terceros eran condenados por la Ley a este tipo de trabajos. “Solo la gente maldecida por los dioses En la década de los 40 se empezó a

desenvolver momias, pero de tal forma que se destruyeron todos los mejores datos que podíamos tener y por ello en los años 70, se

dejo de desenvendarlas para su estudio y se procedió a efectuarse por medio de rayos X y

análisis del ADN.

y los criminales se contrataban como embalsamadores para escapar de la justicia y se les reconocía desde lejos por su olor salobre y a

cadáver. De manera que todo el mundo los evitaba y no eran admitidos en las tabernas ni en las casas de placer”, así los describe Waltari en

su obra Sinuhé el egipcio. Los procedimientos utilizados en la momificación han venido interesando, aparte de

arqueólogos e historiadores, a físicos, químicos

y especialistas en paleontología, que con las

modernas técnicas de rayos X, resonancia

magnética y escáner entre otras, han podido

reconstruir bastante bien, sus vidas, genero de alimentación, enfermedades, (las más

corrientes eran los problemas de dientes y parásitos intestinales), defectos físicos,

determinar los grupos sanguíneos, pero aún así

quedan muchas lagunas. El mejor dato que tenemos para conocer el proceso de la momificación, está en dos papiros con hierbas aromáticas, la nariz se

que se han encontrado, supuestamente en tumbas tebanas (Luxor) y que además se llenaba con granos de pimienta o trocitos de lino pequeños y las mejillas

aprecian que han sido utilizados, pues en sus márgenes se observan notas, como si se

hubiera ido siguiendo el ritual y marcando los pasos. A estos papiros se les conoce con el nombre de Boulaq-3 y están en el museo del

Louvre con el número 5158, se dividen en dos

partes, la parte material o medico-quirúrgica,

cuyos capítulos siempre empiezan en rojo y con

la misma frase : “a continuación ... y la parte ritual, que empieza con : “Palabras que hay que

decir... y es mucho mas larga que la anterior. Son seis las cosas o pasos que se hacían sobre

el cuerpo para su momificación, pero

desconocemos el orden de ejecución. Este podría ser:

1. Lavado externo del cuerpo (purificación)

2. Depilación y posiblemente una primera

aplicación de natrón para sacar la grasa

del cuerpo. 3. Secado del cuerpo, y además se tintaba

de marrón oscuro a los hombres y de con trozos de lino y en la nariz para que no quedase aplastada se le ponía,

además, un hueso de pollo.

5. Descerebración, sacaban el cerebro

rompiendo el tabique de la nariz, o por la parte occipital, o inyectaban una resina que lo deshacía y sacaban el

liquido dando la vuelta al difunto. 6. Deshidratación y posterior hidratación

por medio de aceites y es cuando empieza el verdadero Ritual de Momificación, con el vendaje exhaustivo

de cada parte del cuerpo.

naranja a las mujeres. 4. Evisceración (sacar las vísceras del

interior del cuerpo). Las vísceras se

ponían bajo la protección de los cuatro

hijos de Horus, en los vasos canopos, AMSET protegía el hígado, Estas vendas podían llegar a ser muy largas, y

estaban previamente embadurnadas de betún,

e intercalaban entre las vendas determinados

amuletos, entre los que destaca el famoso escarabeo o escarabajo sagrado conocido por

DUAMHOTEF el estomago, HAPI los pulmones y QUEBESEMUF los intestinos y todos ellos estaban protegidos a su vez por las cuatro diosas ISIS, NEIT, SELKET y NEFTIS. La cavidad de la momia se rellenaba

el dios JEPER, símbolo de la resurrección por

los antiguos egipcios. Esta labor de vendaje era ciertamente un arte, era efectuado por sacerdotes que mientras colocaban y anudaban las tiras de lino debían

recitar rezos a las divinidades protectoras. Los personajes que intervenían en este Ritual eran: ANUBIS, o sea el sacerdote que llevaba su máscara que era conocido como “El que está

sobre los misterios”, HORUS “el canciller divino”, 4 ceremoniantes o sea “los 4 Hijos de HORUS”

y varios vendadores. Imaginemos la escena, cerremos un momento los ojos para ver al difunto ya preparado para vendar sobre su lecho mortuorio con cuatro

antorchas, una en cada esquina, y todos estos personajes alrededor, el humo y aroma de incienso llena la sala, se oye la voz del sacerdote y …. empiezan los rezos y conjuros, en el lenguaje sagrado….

ANUBIS, y HORUS se acercan a la momia y proceden en primer lugar a ungir su cabeza y primer lugar, la venda Nekeb se pone en su frente, después la venda de Hator en el rostro,

la venda de Thot en los oídos y la venda de Nebt-hetep en la base de la nuca, todo ello se hace lentamente y con precisión. Sobre la

cabeza se pone la venda de Seket y dividida en dos piezas pasa por las orejas, las dos fosas nasales y las mejillas, veintidós tiras de vendas

en cada lado del rostro en total y mientras ANUBIS, comprueba que todos los dibujos en las vendas de los dioses y diosas estén

correctos, con la última unción de la cabeza al

difunto se le nombra justificado y se dice de él

que ha recibido la luz. Ahora se colocan los dedales de oro en los

dedos de la momia, que han de ser de derecha a izquierda, se comienza el vendaje de las manos por la mano izquierda, en la cual se ponen 36 paquetitos de plantas que representaban las divinidades ancestrales y se le coloca además un anillo en el dedo anular.

En la mano derecha se pone una imagen de Isis y otra de Neftis, en color oscuro, se le añade

además una imagen de Min y se venda la mano

12 veces. Cuando las manos ya están

correctamente vendadas, ANUBIS recita las

rostro con aceites, después a perfumar su

cuerpo, el cual se hacía con 10 aceites diferentes, uno de ellos se le conoce con el nombre de: “el perfume de la fiesta”, conocemos el nombre de 6 mas, uno de ellos era esencia de Libia, todo ello se hacia mientras se iban

recitando conjuros y rezos de protección. En palabras de poder ante ambas manos y así se

consigue la seguridad de las mismas. Seguimos por las piernas, primeramente, se les hace una primera unción y un vendaje recitativo,

en la derecha se pone una imagen de Horus y en la izquierda de Anubis, finalmente se cubre al difunto con un sudario con oraciones escritas

en él y se termina el vendaje de todo el cuerpo.

Entre las vendas se pondrán diversos amuletos

protectores y joyas, aunque poco se sabe de la

colocación de los amuletos, pues en los papiros

que hablan del ritual no está especificado,

aunque en El Libro de los Muertos, algo se explica sobre ello, por ejemplo, en su capitulo 155 dice : “El Pilar Djet, será puesto en el cuello

del fallecido en el día del entierro, atado con hilo

de oro o de sicomoro”, normalmente se ponía

entre las vendas o en el sudario superior, no tocando el cuerpo. Una vez finalizado todo el proceso se le introducirá en un sarcófago en cuya tapa suele

estar la diosa NUT, ya que ella, simbólicamente,

está protegiendo al ser que debe de renacer, es

Autora : ELISA VILLAGRASA

Investigadora de la civilización egipcia por ello que la momificación duraba unos 70

días, puesto que simulaba la gestación de NUT.

Ahora, terminado este ritual-ceremonia,

comenzaba otro Ritual, mucho más vistoso,

puesto que se hacía de cara al público y en el

que podían participar todos los familiares del difunto, pero también bastante largo y

complicado, aunque muy hermoso; el traslado del difunto a su “casa de la eternidad”, allí seria

acompañado, con todos los honores como ya

hemos mencionado, por parte de sus familiares y amigos, depositado en su tumba, y honrado

por toda la eternidad como un dios. ■

RITUAL PARA: SALIR BIEN DE CUALQUIER DIFICULTAD

con

JEPER “Quien viene a ser”

El escarabajo egipcio era considerado sagrado pues se creía que renacía

con el sol cada día, es el que renace siempre, y es portador además de

buena suerte, ya que siempre sale victorioso, por lo tanto, le pediremos ayuda para salir de todas las dificultades o problemas puntuales que se nos presenten.

En Domingo de cara al Este.

1. Escribiremos el problema que nos angustia y queremos eliminar.

2. Encendemos la vela y el incienso.

3. Con el incienso humeante, diremos la siguiente invocación:

“AA Necher Jeper Sejem. I Gran Dios Jeper escúchame. ¡Oh! Gran Dios Jeper, divinidad solar que renace cada día como el Sol.

Material:

✓ Vela naranja, amarilla ó dorada. ✓ Incienso de mirra ✓ Pergamino ✓ Lápiz

Tú eres un dios poderoso, portador de buena suerte desde tiempos antiguos hasta el día de hoy. A ti te pido, pues, aquí y ahora que me ayudes a salir de este problema que tanto me angustia y pueda salir de él victorioso, y renacer cada día como tú.”

4. Quemaremos el pergamino sin doblar viendo cómo se quema totalmente y visualizando

como de igual manera desaparece el problema.

Echaremos las cenizas al aire para que nuestra petición llegue al padre Celestial y nos envíe

la solución. ■ Autora: ELISA VILLAGRASA.

Investigadora de la civilización egipcia

Nota: Si poseemos la típica representación del escarabeo JEPER (es como una piedrecita azul que en Egipto encuentras en cada tienda), aprovecharemos para ponerla el lado de la vela mientras hacemos el ritual y después la guardaremos en nuestro portamonedas pues cuenta la leyenda que de esta forma te traerá suerte y nunca te faltará lo necesario para vivir.

Puedes copiar la imagen adjunta y te hará la misma función. Si quieres aprender más apúntate a nuestros talleres de Magia Egipcia con la investigadora Elisa Villagrasa. Para más información sin compromiso contacta al mail: morganabarcelona@gmail.com

This article is from: