José Luis Troconis Barazarte
Poesías
Cuchillo Y apenas entra en la mano. pero se cierra cruel por los pechos embrujados y lejos se para en el espacio donde palpita retorcido el hosco bulbo de la voz.
A Lorca Los conocí veloz descubren dos chorros estáticos al final en medio de pedruscos crecidos, dos varones en las extremidades del caballo extintos en la hermosura de la sombras cadáveres sí, sacrificados.
Pecados, vicios y virtudes AsĂ vivo, sin orden con la piel delgada para sentir mĂĄs, innegable el hueco que deja el despojarse de la necesidad de decir pecaminosamente vicioso y sin virtudes conscientes sin querer ser mejor solo dispuesto a empezar Otra vez.
Confusión Mi alma ¿es tu centro? ¿Quién me muestra inspiraciones? ¿Quién me entrega este arranque sin raíces? ¿Por qué se apodera mi vestido de matices? ¡Todo es encuentro! ¿Por qué conoces en el pecado tanta letra? Distante ¿eres tú o soy yo? ¿Y estas extremidades tan insensibles son de aquél? Me conozco por los finales, y un gentío transita mi corazón.
Sueña Sueña. no desconfíes del aspecto frágil. Duerme. Ni la larva, ni la voz, ni la chispa secreta del cerrojo te lastimarán. Duerme. Como mi centro, así tú, retrato mío. Vergel donde el apego me aguarda. Suéñate sin prudencia, pero despierta, cuando agonice el último roce de mi boca.
Mujer Píntate la boca, camina píntate los ojos tanto que decir y callas, siempre serán las diez cuando llegues siempre serán las seis cuando te duermas, cargada, sucia, hueca. Te repites y no te alcanza.
Siento Siento que inflama en mis arterias raza, fuego pĂşrpura que va consumiendo pasiones en mi esencia. Hembras, viertan lĂĄgrimas, cuando todo arde sĂłlo las cenizas se elevan al viento.
Hostil Violada inspiración es en tu cama la enemiga Violentas caricias de rasos y tramas espera perenne y seguridad que no volverás. Áspera certeza de la culpa por los golpes y la promiscuidad. ¿Es hostil la poesía? Sí, hostil e infinita como el homicidio, como el odio de conocerme condenado. Atormentar es la única elección.
MUÑECA DE GRES De tierra, tierra mojada con agua de lluvia y rio en un tobo roto donde son de una sola condición caolín, bentonita, sílice y feldespato ¿Qué importa? ¡Eres! Antes del tobo, de la mano antes del fuego y la pintura eres en la voluntad del quien te toca de quien te mira. Linda muñeca de gres con una cesta, con una flor, con una arepa.
Eres antes de objeto, un recuerdito o un olvidar en una caja cuando te rompes o en la basura cuando no importa Bella en la vitrina de la tienda quiere ser especial nadie la mira, no está de moda hay una china que cuesta más eres esencia de un pensamiento solo un repaso y arrinconar linda muñeca de gres con una cesta, con una flor, con una arepa…
Como: María José Sanoja
En mi Alma Húrgame con tu mala lengua y besa cada centímetro de mi aliento, tócame donde nadie ha frotado antes, allí donde ninguno ha escrito donde soy limpia aún. Lo que velé, donde me arde y me hace daño, me embriaga más si me duele me pertenece más y atormenta. Donde arde la letra ya no hay más letras ni sangre allí, si, más rudo, ¡más!… José Luis Troconis Barazarte.