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Amor a la fotografía

En una era antigua antes de la existencia de la tecnología, cuando todo era primitivo, en un lugar muy poco habiado, existían 2 montañas muy similares y cercanas, una junto a la otra, en la una vivia una tribu pequeña llamada keña que por más esfuerzos de sus habitantes no prosperaba y en la otra montaña existía una aldea con menos habitantes pero mucho más productiva llamada keo. En la primera aldea ubicada al norte, keo, era habitada por 2 hombres y 10 mujeres los cuales vivian en un hambiente muy machista en donde los hombres cazaban y las mujeres realizaban varias tareas, entre labores domésticas, agricultura, costura, etc, uno de estos dos hombres se llamaba kael quien era fuerte grande y rápido y estaba a cargo de la seguridad y la provisión de carne procedente de diferentes animales de la zona, el segundo hombre se llamaba Canú era pequeño delgado pero con una gran inteligencia, a cargo de el se encontraba la organización de todos incluidos la predicción del tiempo y clima que influía en la siembra y cosecha. Mientras que en la otra aldea llamada keñia tenian 4 hombres y cinco mujeres en la cual no tenian organización ya que todos hacian todas las labores, pero claro esta eran muy unidos para cualquier situación. En cierta ocasión salieron los dos hombres de la aldea keo a cazar y uno de ellos el más grande resultó atacado por un animal salvaje, el segundo hombre corrió y logró escapar del animal pero su rumbo cambio y al huir perdido entre los dos montes logró sin querer llegar a la aldea vecina, ellos lo encontraron ya muy débil y cansado por lo que decidieron ayudarlo, cuando Canú se recuperó vio como en esta aldea vivían y estaban desorganizados, todo marchaba sin un orden de tareas ni jerarquías, todos desarollaban tareas similares, estaban distribuidos como gandes, fuertes y jóvenes y ancianos y niños esta aldea por más esfuerzos que hacían no progresaban como deberían, pese a la organización que llevaban, por lo que Canú pudo comparar con su aldea y le gustó mucho la forma de unión que tenían en Keña. A Canú nunca le gustó cazar el era muy ingenioso y hacia inventos y estructuras muy complejas, útiles e interesantes pero en su tribu era obligado a salir a cazar por el hecho de ser hombre, Canú tenía mucho miedo por lo que siempre tenía expresión de estar muy asustado y para cazar, realmente era muy malo, nunca pudo cazar ni un conejo, por lo que no quiso regresar a su aldea ya que sabía que le reprocharían por su falta de valentía y pericia que deben tener los hombres, solo de imaginarse tal hecho se paralizaba y la idea de regresar no quería por lo que en sus

adentros como forma de venganza, decidió quedarse en esa aldea desorganizada y colorida, que regresar al orden que existía en su aldea, desde ese entonces Canú puso todo su interés y conocimiento para dotar a Keña de todo lo que había hecho en su anterior aldea, pues inmediatmente se puso a trabajar con la ayuda de todos, construyeron trampas para animales de esta forma facilitaban a los hombres y mujeres cazadores que puedan hacer su trabajo, ya que ideó una nueva forma de organizarlos. Al pasar de los dias Canú logró impresionar a todos con sus inventos que les ayudaba en su dia a dia como bolsas para guardar sus cosechas, rejas para que no cruzaran los animales a dañar la siembra, así mismo construyeron corrales para cada tipo de animales de granja y salvajes, también dóto a la aldea herramientas para cazar y recolectar, entre otras cosas la tribu comenzo a verlo como lider de ellos. Canú con el apoyo que tenía de todos, formó una organización más igualitaria donde hombres y mujeres cumplían roles igualitarios como por ejemplo los hombres y mujeres grandes furtes y rapidos se encargaban de la caza, los hombres y mujeres más ancianos se encargaban de la recolección y la pesca, las mujeres y hombres jóvenes se dedicaban a las construcciones, de ese modo ellos lograron tener mejores resultados, la tribu comenzó a crecer a tener mas granjas mas comida mas personas y más producción tanto así que estaban ya ocupando la mayor parte de la cima de la montaña y seguían expandiéndose, se notava su progreso y poco a poco se fueron haciendo más fuertes. Un día en particular a Canú le invade una gran nostalgia, recuerda a su antigua tribu que abandonó por venganza y miedo, pues sintió un deseo de volver, al meditarlo y pensarlo se dio cuenta que ellos no lo hacian por maldad si no de esa manera les enseñaron que se debe hacer las cosas porque creían que era lo correcto, entonces le llegó la noticia que la tribu vecina les hacia falta un lider su progreso se había estancado y tenían muchos problemas. Al pasar los años Canú estableció una estrategia para unir estas dos aldeas fortalecido por tener más conocimientos, elaboró un plan en el cual compartirían productos y servicios que uno tenía y el otro no, le preocupaba que su aldea Keña que en un tiempo era mucho mas progresista, se encuentre estancada y con muchos problemas, Por lo que vivian día a día y cada vez eran mas pequeños. El trabajo de Canú era muy complicado porque dependía de que todos los habitantes de Keo puedan apoyar a Keña, lo cual se tornaba dificil por la

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tradición de enemistad que sostenían estos dos pueblos, fue entonces que Canú decide regresar a su pueblo, pero en ese momento le salta la duda si le reciben o no. Canú no podía aplazar más tiempo su regreso, lo que el no sabía es que su fama de poseer una inteligencia increíble, llegó a saberse en toda la región, La tribu se alegro al verle y el igual a ellos al conversar los 2 se pidieron disculpas ya que ese era el ejemplo por el cual habían sido giados durante años. Canú unió las dos tribus formando kañiñeo la tribu que vivía en las montañas gemelas, enseñó a todos organizarse mejor y su guia lograron llegar hacia su libertad e independecia, ellos no solo crecieron hasta formar una tribu grande si no que comenzaron a crecer y expandirse hasta formar una nación la cual fue la más grande del continente así ayudando y uniendose a otras naciones hasta formar la gran nación de Canú en donde todos tenian la oportunidad de ser libres y poder escoger sus labores con las cuales estan muy contentos. Canú nunca se imaginó que al extraviarse iba a significar el progreso y unión de estos pueblos hermanos, unidos por la geografía y ahora unidos por el corazón.

Fin.

"Es muy triste ver como se rompe ese flechazo, que pensabas que duraría toda la vida… —Pero miren la preciosura que llega — dijo Hannah mi mejor amiga. —Ustedes también están divinos. — ¿Ya nos vamos? — dijo Blake mi otro mejor amigo, somos el típico grupo de cuatro junto con Dante. Hoy es el día de mi graduación, estudié fotografía, no saben cuánto amo fotografiar paisajes, plantas y más. Pero nada de personas, he intentado fotografiar a mis amigos, pero a mi gusto nunca quedan bien. Los chicos dicen que son geniales, pero seguro lo dicen por lástima. —Sí, ya estamos todos listos — dijo Dante acomodándose su corbata azul que hacían juego con mi vestido y el traje de Blake. Hannah llevaba un vestido vino tinto que contrasta con su cuerpo. Salimos del departamento para dirigirnos al auto. —¿Tus padres van a venir, Zay? — Oh, la verdad, no lo sé, Hannah. Les dije sobre esto. Mamá creo que, si vendrá, pero, papá siempre está trabajando, así que no lo sé. —¡Llegamos justo a tiempo! — avisó Blake. Bajamos del auto y me dirigí hacia mis compañeros y maestros, echaba ojeadas a todos lados para buscar a mis padres... y no estaba tan solo mi madre. También mi padre, de eso hay que asombrarse. Mamá me ve y me da una sonrisa cálida, que quitaron mis nervios y fui a sentarme en mi lugar. Mi padre siempre está viajando por su trabajo y casi nunca pasa en casa, es un milagro que esté aquí. Mi hermana menor, Valye, estaba a su lado, esa pequeña traviesa. Ya estaban nombrando a todos los alumnos para recoger sus diplomas. Tengo demasiados nervios. — Zay Williams — Subí al escenario, todos aplaudieron, felicitaron -ya saben todo eso- bajé y reviví, arriba no quise ver a nadie más que al suelo, era un lindo suelo. Salimos con los chicos hacía el patio, lanzamos birretes, abrazos, besos en mejillas, típico todo. Hasta que mis padres se acercaron. —¡Madre! —Ven pequeña. Estoy muy orgullosa de ti princesa, sabía que podías lograrlo, valieron mis consejos de madre a hija. —Gracias por venir mamá. Hola pequeñita —dije a mi hermana. —Hola — tan sólo respondió. —¿Nada más? —dije molestándola. Me sacó la lengua—gracias por

dejarme ver que, si tenías lengua, pensé que se te la comieron—ella soltó una risa. —Hola, papá—dije nerviosa—Gracias por venir. —No me perdería la graduación de mi hija — Le sonreí agradecida. Al salir de mi graduación, con mis amigos nos dirigimos a un restaurante. Se fue haciendo tarde y Blake fue dejándonos a cada uno en nuestras casas. Subí a mi departamento donde estaban mis padres esperándome ya listas sus maletas. —Seré rápido, no podemos pagar más este departamento y tienes que mudarte con nosotros— habló mi padre. —¿Qué? —dije, sin saber muy bien que decir ante eso— aquí están mis amigos, no puedo irme de aquí. — Ya está todo listo y organizado, tienes una semana para disfrutar el resto de tus días aquí. En esa semana alistarás tus cosas, entregarás el piso y te despedirás de tus amigos, vendré y nos iremos a Menorca. —¿Menorca? —lo corté rápidamente, esa era la ciudad en la cual viví durante años cuando era pequeña, no es tan habitada por lo cual es magnífico. —Sí, ahí estará tu madre, Valye y tú, yo trabajaré fuera de la ciudad, lamentablemente. —Claro, siempre estás fuera… ¡No! no me puedo ir, sé que Menorca es mi cuidad, pero ¡no! Tengo una vida por hacer aquí. Tengo que alistarme, saldré. —¿Puedo ir? —dijo Valye. —No. —¿A dónde vas pequeña? —dijo mi madre preocupada. —Voy con los chicos. — Entonces te espero en Menorca, querida hermana— y salió del departamento. —Cuídate, ¿sí? —Si mamá, bay... … —¡¡¿QUÉÉÉ?!!—dijeron los tres cuando les conté la conversa con mis padres. —Lo sé, me quiero morir—dije cubriéndome la cara— Buenooo, hay una parte que me salté de la historia— se quedaron viéndome con cara de "en serio"— mhm...también me iré por...la...falta...de... —¿Dinero? — esa voz, no ¿por qué él?

—¿Qué haces aquí? —dijo casi al instante Dante, nunca pensé que tendría su lado frío. —Solo los vi aquí y quise venir a saludar, pero sin querer, escuché tu historia. —Genial—dije con un tono de voz frío. —Vamos chicos tratemos de entablar una amistad, ¿sí? —No —dijimos los cuatros. —Bien, ¿quieren...unos helados? —¿Tú pagarás todo? —habló Dante. —Claro, pidan lo que sea. —Genial, por esta noche me caerás bien —y todos fueron a pedir, yo me quedé sentada. —Entonces, te vas—habló Víctor, mi ex-novio. —Si, a la vez es triste, pero a la otra emociónate, años que no voy por ahí. —Si quieres, puedes quedarte en mi casa o si te incomoda puedes pedirles hospedaje en la casa de algunos de tus amigos. —Eso sí que no lo pensé. —Sería una opción o la otra es irte a Menorca… —¿De qué hablan? —llegó Blake con helados en las manos. —Blakeee, ¿me dejas hospedarme en tu casa? — puse cara de perrito. —Lo siento Zay, pasaré vacaciones fuera de la cuidad. —¿Y tú Dantesito? —suplique. —Zay, siempre voy con la familia de Blake. Fui donde Hannah a pedirle que... —Sabes que voy con amigos a pasármela bien, perdona mi niña. —Entonces, no hay más que hacer... —Hagamos que pases la mejor semana de tu vida, sabes que siempre vamos a estar para ti. … Pasé la semana con los chicos, divirtiéndonos, recordando momentos y secretos que nos decíamos y hasta aquí llegamos, el último día que los vería por este mes, porque se iban de vacaciones y yo a Menorca a vivir probablemente por siempre. Tenía hecha la maleta, entregué el piso y me despedí de todas las personas que conocía incluido Víctor. Mi padre ya estaba esperándome, subí mi maleta a la cajuela y me senté en los asientos traseros. Me coloqué mis auriculares escuchando idfc de Blackbear, es mi canción favorita del momento. El sol entraba por la

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