15 minute read

Adivina, adivinador

Next Article
Encajar? No

Encajar? No

-Hola Sebastián, bienvenido a tu pesadilla de la que probablemente, no podrás despertar. Enviado. Con ese mensaje empezó todo… Mi nombre es Paula, una psicóloga que tiene un secreto del que te enterarás con el pasar del tiempo. Decidí contar mi perspectiva de los hechos, por qué no siempre el "villano" es el malo. Además, en estas cuatro paredes, no tengo nada más interesante que hacer. Pero empecemos por la razón del porqué decidí hacer todo esto, el porqué de todo este juego. 2 años atrás… 23 de marzo de 2019 El primer golpe fue hace 6 meses cuando Sebastián y yo llevábamos 4 meses de novios. Al salir de una reunión con mis amigas porque no se lo había dicho y por eso se puso muy furioso, es justificable o ¿No? El segundo fue en nuestro primer apartamento, cuando yo decidí mudarme con él porque nuestras universidades quedaban cerca. Se había enojado porque decidí pedir comida en vez de prepararla. Al fin y al cabo, es una lección de que no soy lo suficientemente buena novia. Y así, me fui equivocando cada vez más veces, hasta llegar al punto de perder la cuenta de cuantos golpes llevo. Aunque estas últimas semanas todo ha sido diferente. Sebastián se está portando más cariñoso conmigo, me trae rosas y se preocupa por mis clases. Voy a aprovechar su humor para contarle algo que sé que va a hacer que se disguste un poco. Hace una semana me enteré que estoy embarazada. Sé que somos jóvenes aún, pero a nuestros 20 años, tenemos ingresos estables y un lugar para crear una familia. Sin embargo, a Sebastián nunca le ha agradado la idea de tener hijos, dice que son ataduras. Pero sé que con nuestro hijo va a pensar diferente porque estamos completamente enamorados y nuestro bebé será una prueba más de ello. • Hola cariño, ¿cómo te fue hoy? - pregunto, notando que Sebastián se veía un poco distante. • Bien, ya sabes lo de siempre, chicos haciendo bulla, profesores enojados y ejercicios que carcomen mi cerebro, el tuyo ¿Cómo estuvo? - responde Sebastián con una sonrisa fingida. • Estuvo interesante, las clases con el profesor Lewis son muy buenas, me

hace entender el comportamiento del ser humano a la perfección. • Cómo que últimamente no dejas de hablar de ese tal profesor Lewis, parece que estuvieras enamorada de él- responde, empezando a enojarse. • Dices tonterías, mejor hablemos de otra cosa, hay algo que tengo que contarte… • ¿Qué pasó? - pregunta con un tono enojado como si estuviera a punto de gritar. • Abre la funda que se encuentra en la mesa, es un regalo para ti- le digo, señalando una funda de regalo en la que se encuentra una prueba de embarazo y unas medias para bebé. Sebastián va al lugar donde está la funda, la abre, ve la prueba de embarazo, se me queda viendo con una expresión como de decepción y después de eso me veo en el suelo, con sangre en la boca y una hemorragia debido a las patadas que me dio en el vientre. Él sale corriendo al ver cómo me encontraba y yo llamo a mi mejor amiga Analía, para decirle que me caí y necesitaba que me lleve al hospital. Ya en el hospital, los doctores me preguntan si no soy víctima de violencia a lo que respondo que no. Cómo era de suponer, perdí al bebé y al parecer, puedo quedar infértil debido al golpe. No sé cómo sentirme ahora, si no le hubiera contado a Sebastián, seguiría embarazada y podría haber criado a mi hijo yo sola, pero no puedo regresar en el tiempo y cambiar las cosas. Pero puedo vengarme de lo que pasó y devolverle la misma moneda a Sebastián. Yo me encargaré de que se arrepienta de todo lo que me hizo… -23 de marzo de 2021 • La terapia de hoy estuvo muy interesante- dice mi paciente Esteban- gracias por escucharme Paula. • Es mi trabajo, te veo la siguiente semana. - le respondo con una sonrisa. Después de sufrir el aborto hace dos años, me fui del departamento de Sebastián a vivir con mi mejor amiga durante unos meses hasta conseguir algo propio. Él simplemente no podía verme a la cara y respondía a todo lo que le decía con monosílabos. Todo fue de bien a excelente en poco tiempo. Me gradué de la universidad 6 meses después y al instante me ofrecieron un trabajo. Conseguí salir adelante yo sola y comprémi propio departamento. Podría decir que estoy viviendo la vida que siempre soñé. Además, me gusta el trabajo que tengo ahora. Hace unos 5 meses me encontraba trabajando en un colegio como psicóloga, pero decidí que era

Advertisement

momento de salir de ahí y abrí mi propio consultorio, donde trato casos de violencia intrafamiliar y abortos. Al hablar con cada uno de mis pacientes, siento que voy sanando poco a poco, aunque hay una espina que sigue ahí… No todo ha sido color de rosa durante estos dos años, el sentimiento de odio hacia Sebastián me ha ido persiguiendo día tras día y la verdad, no me molesta ya que he encontrado una forma de utilizarlo a mi favor. Durante el último año empecé a investigar sobre su nueva vida, se encuentra trabajando en una empresa muy prestigiosa y está con una modelo muy hermosa, no es novedad, Sebastián siempre ha tenido buen gusto con las mujeres para presumirlas como trofeo ante los demás. También me enteré que ahora se encuentra viviendo en Valencia, a unos 10 minutos de donde yo vivo debido a que su empresa lo envió a la sucursal que tienen aquí. Lastimosamente, su novia no vino con él porque al parecer, tiene trabajo que hacer en Madrid. Él no sabe que me encuentro viviendo aquí, es más, no sabe nada de mí desde la última vez que nos vimos. Tuve que cambiar de número de teléfono para que no me llamara todos los días y como no teníamos el mismo círculo de amigos no encontraba una forma de contactarme. Así que esa es una gran ventaja a mi favor, yo sé todo de él, controló cada uno de sus pasos y el piensa que desaparecí de la faz de la tierra. Mi plan es un poco complejo, pero lo he estado planeando de principio a fin durante todo este tiempo para que todo salga bien y no haya ni un solo error. Todo se basa en una sola cosa: Acabar con la vida de Sebastián. ¡No! No me refiero a matarlo con mis propias manos, existen métodos más efectivos que harán que él solito piense que su única opción será acabar con su vida, yo solo le daré un pequeño empujón, o varios. Hoy empieza la primera fase de todo este plan, al que lo denominaremos “ Congeladas”. Descanse en paz vida de lujos y excesos. • -Hola Sebastián, bienvenido a tu pesadilla de la que probablemente, no podrás despertar. - Hago click en “enviar”. El primer paso de toda esta venganza, es generar miedo en la víctima. El ser humano tiene una mente muy imaginativa que con un solo mensaje puede crear mil escenarios o situaciones en ella. • ¿Quién eres? ¿De qué estás hablando? - responde Sebastián después de unos minutos. • Soy alguien que quiere jugar contigo.

• ¿Qué clase de juego? y porque conmigo, ni siquiera sé quién eres… • Claro que lo sabes, cuando termine el juego recordarás quién soy, además hay una gran recompensa si logras ganar, nada más ni nada menos que un millón de dólares. • ¿Y cómo sé que lo que dices es verdad? • He hecho una transferencia de mil dólares a tu cuenta, puedes revisar si quieres. Tarda unos minutos en escribir y luego responde: • La he revisado, acepto. Y así, es como mordió el anzuelo y cavó su propia tumba… Sebastián siempre ha sido un hombre que se deja llevar por el dinero y las apariencias. Es alguien muy ingenuo; cuando estábamos juntos fue estafado por una llamada telefónica donde le habían dicho que debía hacer una inversión de 100 dólares y recibirá 1000, obviamente fue una mentira y yo recibí una cachetada por su furia. Al parecer, no ha aprendido nada. • Entonces… ¿En qué consiste el juego? - pregunta Sebastián. • Es simple, te haré una adivinanza cada semana, si la respondes correctamente te irá acercando a encontrar mi identidad y podrás ganar, pero si no es así, irás perdiendo poco a poco las cosas que amas en tu vida. - contesto. • ¿Cuál es la primera adivinanza? No vayas tan rápido Sebastián, para jugar este juego tendrás que hacer algo por mí. • ¿Qué cosa? • Deberás firmar el documento que ahora mismo debe estar en tu casa, es solo para verificar que todo esto es legal. • Está bien, los firmaré y se los enviaré con el chico que está aquí. En realidad, esos documentos son para verificar que ahora todas las cuentas bancarias y posesiones de Sebastián me pertenece, por eso siempre digo que es importante leer las letras pequeñas, ahora Sebastián se ha quedado sin nada y él ni siquiera lo sabe. • Sebastián, tu primera adivinanza es: Golpeado estoy, vacío estoy, de tus manos pase y ahora libre soy ¿Quién soy? Tienes todo el día para encontrar la respuesta, si no lo haces perderás algo y tendrás dos oportunidades más para ganar. • Está bien, no parece tan difícil…

24 de marzo del 2021. Todo está yendo a la perfección, veamos si Sebastián fue tan astuto y adivinó la respuesta. • Se te acabó el tiempo, dime la respuesta- digo a Sebastián a través de mensajes, por dónde nos hemos estado comunicando desde ayer. • Eres Diego- responde al instante. • -Has perdido tu primera adivinanza, atente a las consecuencias. Sebastián me había contado de Diego unos meses antes de que me fuera del departamento, es su hermano. Ellos vivían juntos, pero Diego bebía mucho y Sebastián se enojaba por ello por lo que lo echó de su casa y desde ahí no se habían vuelto a ver. Era obvio que iba a escoger su nombre. Cómo consecuencia de su equivocación haré algo que generará miedo en Sebastián. Después de que él respondió incorrectamente a la adivinanza, envié un archivo a su jefe en el que se ven cifras que delatan a Sebastián de haber hecho fraude en varias firmas y, por ende, había robado grandes cantidades de dinero. Ahora mismo él debe estar siendo demandado por la empresa y siendo despedido de su prestigioso trabajo del que tanto presumía. Y así fue… unas horas después, publicaron en el periódico digital que el señor Bass (Sebastián) había cometido fraude y podría estar enfrentando un juicio en el que estaban en juego 5 años de cárcel. Yo no hice nada malo, solo saqué a la luz la verdad. Adiós reputación y empleo soñado… • ¿Fuiste tú el que hizo que me despidieran?!- escribe Sebastián. • Te dije que verías consecuencias si te equivocas- respondo. • Ya no quiero seguir jugando este juego, no pensé que llegarías a ese extremo. • No puedes retroceder, te recuerdo que firmaste unos papeles en los que dicen que todo lo que tienes me pertenece, si dejas de jugar, te quedarás sin nadacontesto. • Estás loco… • Y tú siempre lo has estado. • Si ya no puedo abandonar el juego, ¿Qué adivinanza sigue? • Muy bien, tu segunda adivinanza es la siguiente: Gritos en la noche y risas en la mañana, eran dos, pero podían haber sido tres.

¿Quién soy? Espero tu respuesta. 25 de marzo del 2021. Pese a que estoy enfocada en esta venganza, no he dejado mi vida a un lado. Sigo dando terapia a mis pacientes, saliendo con mis amigos y conociendo a un chico que me ha llamado mucho la atención. Su nombre es Edward, él es diferente a Sebastián. Me trata bien, quiere a su familia y nunca me ha alzado la voz ni un poco, siento que podría enamorarme de él. Pero para hacerlo tengo que enterrar mi pasado y a Sebastián con el… • Buenos días Sebastián, tuviste toda la noche para pensar en tu respuesta. Dime, ¿Quién soy? • Fue muy difícil adivinar, pero se que esta vez acertaré. Eres Raquel, ahora entiendo porque haces todo esto, perdóname. Raquel fue la novia que Sebastián tuvo en su adolescencia, según sus amigos fue un amor muy explosivo, lleno de amor que poco a poco se fue convirtiendo en obsesión. Él no hablaba tanto de ella, solo decía que era una loca toxica y que por eso habían terminado su relación de varios años, pero no fue así. Ellos habían terminado porque Raquel había quedado embarazada y obviamente Sebastián no quería hacerse cargo del bebe por lo que la obligo a abortar. Supe todo eso porque me puse en contacto con Raquel hace unos meses, al parecer, ella pudo seguir con su vida y hacer como si esa etapa con Sebastián nunca hubiese pasado. • Muy cerca, pero no. Te queda una sola oportunidad, nos vemos mañana. • ¿Qué piensas hacer? • Tu solo espera, tu regalo por haber perdido llegará muy pronto. Al cabo de unas horas, Sebastián se había quedado sin novia, sin amigos y posiblemente, con unos padres que están decepcionados de él. Fue muy fácil, solo hackeé el celular de Sebastián y encontré mensajes en los que se evidenciaba infidelidades, mensajes donde hablaba mal de todos sus amigos con otros y, por si fuera poco, fotografías indecentes de su cuñada. Solo fue cuestión de enviarlas a sus conocidos y que las piezas encajaran... • ¿Por qué lo hiciste? ¡Me he quedado completamente solo! -escribe Sebastián. • Precisamente es eso lo que quería… • Pero ¿con que fin? - pregunta. • Con el fin de que te sientas como yo me sentí alguna vez: vacío. Mañana será el final de todo, veremos si eres tan inteligente como lo

presumes o en realidad, eres un ignorante que por más pistas que te doy no adivinas mi identidad. • Pruébame- responde y al instante se desconecta del chat. 26 de marzo del 2021. Intenté denunciarlo varias veces, pero nunca tuve las pruebas suficientes para que me creyeran o quizás, nunca tuve las agallas. Se que vengarse no es lo correcto, pero siento que de esa forma voy a dejar todo atrás como lo dije anteriormente. • Buenos días Sebastián, ¿Estás listo para la última adivinanza que determinará el rumbo de tu vida? • Claro que sí - responde. • Suenas muy seguro, me agrada. • Nunca he estado más seguro que hoy- me empieza a asustar su respuesta. • Ok, tu adivinanza es 2 años oculto estuve, pero hasta el más indefenso tiene que salir algún día a la luz ¿Quién soy? Se tarda media hora en escribir hasta que responde: • Se la respuesta, pero para decirte la quiero verte en persona… • Las reglas del juego las pongo yo- respondo un poco nerviosa. • Pues le daré la vuelta a la moneda, Paula. - responde Sebastián y se desconecta del chat al instante. Cómo puede estar pasando esto, Sebastián no tenía forma alguna de descubrir quién era yo. Me encargué de todo, de utilizar un número de teléfono oculto y de darle pistas que no sean tan claras. Pero Sebastián es astuto y encontró la forma para descubrirme, no debo tener miedo, él ya no tiene control sobre mí. Después de una hora, llamo a Sebastián: • Vaya, vaya, hasta que te dignas en dar la cara, o al menos la voz- dice Sebastián al momento de contestar la llamada. • Cállate, te recuerdo que, aunque sepas quién soy, todo tu dinero me pertenecele respondo con un tono frío, aunque por dentro estoy muriéndome del miedo. • ¿Acaso no te llegó un correo? Ahora tu cuenta del banco me pertenece a mí, estamos a mano. Al instante qué dice eso, reviso mi email y efectivamente, Sebastián ha hackeado una de mis cuentas y me ha quitado todos mis ahorros. • Eres un demonio, ¿no te basto con lo que me hiciste hace años? • Tu empezaste todo esto Paula, ¿creíste que yo no iba a hacer nada? ¿Creíste que yo era tan incrédulo para no sospechar porque desapareciste

y nunca me denunciaste? • Paula, Paula, nunca aprendes… Yo siempre estoy un paso delante de ti. Supe que eras tú desde la segunda adivinanza, pero seguí con el juego porque me estaba encargando de destruir tu vida y para eso necesitaba evidencia. • ¿Qué hiciste Sebastián? - respondo casi gritando. • Entré a tu departamento cuando me di cuenta de lo que estabas haciendo y puse una cámara en la que se ve todos los delitos que cometiste en este tiempo. Es solo cuestión de mostrárselo a la policía y que te hundas en la cárcel, o en un psiquiátrico…-responde riéndose. • No te creerán. • ¿Quieres probarlo? ¿Cómo sabes que no lo hice ya? • Porque aún me amas. No hagas nada, te devolveré tu dinero y te dejaré en paz, pero no hagas nada- respondo casi llorando. • Extrañaba que me ruegues, pero no te sirve de nada hacerlo, la policía está en camino. Y una última cosa: Nunca te amé. Es una basura, no sé porque me enamoré de él. No puede estar pasando esto. Se supone que era una venganza para él, se supone que él era el que tenía que salir arruinado y ahora soy yo la que se va a quedar sin nada. En menos de dos minutos llega la policía y derrumba la puerta. No tuve tiempo de borrar toda la evidencia, por lo que encuentran todo lo que me puede incriminar. Al parecer, el juego ha terminado. 6 meses después… Cómo era de suponerse, me enviaron a la cárcel y me dieron 1 año de sentencia. Sebastián tampoco salió ileso ya que al infringir en mi propiedad estaba cometiendo un delito, por lo que le dieron 5 meses de cárcel. Sin embargo, cuando salió no dudo ni un segundo en ir a visitarme y restregarme en la cara lo fácil que fue recuperar toda su vida. En todo este tiempo pude analizar mis errores y me di cuenta que Sebastián siempre estuvo detrás de mí como una sombra, el mismo se encargó de contármelo. Resulta que era amigo de uno de mis pacientes, quien se encargaba de pasarle información sobre mí y así es como me tenía en su mira. Él siempre supo cada paso que daba, a cada lugar que iba y se aprendió mi rutina. Pero esta historia no termina aquí, aunque lo parezca. Tengo seis meses más para continuar planeando una nueva venganza, sin errores, sin trampas. Un nuevo juego en el que no pueda hundirme porque, al fin y al

cabo, no me queda nada. Un jaque mate al hombre que arruinó mi vida dos veces.

Fin.

This article is from: