La gruta 457

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La Gruta

Enero de 2015

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BOLETÍN del SANTUARIO NACIONAL de La Gruta de Lourdes Avda. de las Instrucciones 2223. MONTEVIDEO - Uruguay. Tel.: 2222 3532 grutadelourdes@interware.org www.umbrales.edu.uy

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Sínodo familia de los obispos sobre la

La nueva familia

de la

Jesús: Iglesia

Al llegar el día de Pentecostés, estaban todos reunidos en el mismo lugar. De pronto, vino del cielo un ruido, semejante a una fuerte ráfaga de viento, que resonó en toda la casa donde se encontraban. Entonces vieron aparecer unas lenguas como de fuego, que descendieron por separado sobre cada uno de ellos. Todos quedaron llenos del Espíritu Santo, y comenzaron a hablar en distintas lenguas, según el Espíritu les permitía expresarse. Había en Jerusalén judíos piadosos, venidos de todas las naciones del mundo. Al oírse este ruido, se congregó la multitud y se llenó de asombro, porque cada uno los oía hablar en su propia lengua...

Hechos 2,1-11

La Gruta n.457

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Actualidad

“Nunca más esclavos, Pino Puglisi: mártir de la mafia sino hermanos” Este es el lema de la Jornada Mundial de Oración por la Paz 2015, Jornada que se celebra cada primero de año con intenciones distintas desde 1968.

Hay hoy 30 millones de personas que viven en estado de esclavitud. El Papa habla de trabajadoras y trabajadores, inclusive menores, explotados en todos los sectores desde el trabajo doméstico a la agricultura, de la industria a la minería. Habla de emigrantes despojados de sus bienes en viajes dramáticos y que una vez llegados a destino son detenidos, en condiciones inhumanas. De los que se ven obligados a la clandestinidad y en consecuencia usados para un trabajo esclavo. De personas obligadas a ejercer la prostitución, menores y mayores; son esclavas y esclavos sexuales. Hay mujeres obligadas a casarse o vendidas para matrimonio o entregadas en sucesión a un familiar después de la muerte de su marido. El Papa piensa también en niños y adultos que son víctimas del tráfico y la comercialización para la extracción de órganos. En los niños reclutados para la guerra, para actividades ilegales como la producción o venta de drogas, en los secuestrados por grupos terroristas. El Papa denuncia el hecho de que la persona humana sea tratada como objeto para usar y mercantilizar. Detecta como causas la falta de acceso a la educación y las inexistentes oportunidades de trabajo. Esto sucede cuando en el centro de un sistema económico-político está el dinero y no la persona humana; estos crímenes son posibles por la 2

complicidad de amplios sectores de la sociedad y del Estado donde reina la corrupción. A las denuncias el Papa añade un profundo agradecimiento a las organizaciones que luchan para la asistencia a las víctimas, su rehabilitación y reinserción en la sociedad. Sin embargo afirma que esto no es suficiente. Hace falta por parte de las autoridades prevención, protección de las víctimas, persecución judicial contra los responsables, una legislación actualizada y cooperación internacional. El Papa recuerda después la historia de santa sudanesa Josefina Bakhita (+1947) canonizada en 2000, secuestrada y vendida cuando tenía 9 años. Llegó a ser “hija libre de Dios” y consagrarse como religiosa al servicio de los más pobres; “es un testigo ejemplar de esperanza”, dice el Papa. A continuación pide a todos examinarse seriamente antes de adquirir productos que con probabilidad hayan sido realizados mediante explotación humana y dejar de hacer la vista gorda frente a casos reconocidos. En un encuentro en el Vaticano entre musulmanes, judíos, budistas, hindúes y cristianos, se puso como meta para Iglesias, empresas y gobiernos el año 2020 para la abolición total de esta plaga “crimen de lesa humanidad”. Se ha propuesto el 8 de febrero, fiesta de Josefina Bakhita, como Día Mundial de Oración contra la trata de personas.


2014 Sínodo de los obispos sobre la familia La nueva familia de

Jesús: la Iglesia

Al llegar el día de Pentecostés, estaban todos reunidos en el mismo lugar. De pronto, vino del cielo un ruido, semejante a una fuerte ráfaga de viento, que resonó en toda la casa donde se encontraban. Entonces vieron aparecer unas lenguas como de fuego, que descendieron por separado sobre cada uno de ellos. Todos quedaron llenos del Espíritu Santo, y comenzaron a hablar en distintas lenguas, según el Espíritu les permitía expresarse. Había en Jerusalén judíos piadosos, venidos de todas las naciones del mundo. Al oírse este ruido, se congregó la multitud y se llenó de asombro, porque cada uno los oía hablar en su propia lengua. Con gran admiración y estupor decían: “¿Acaso estos hombres que hablan no son todos galileos? ¿Cómo es que cada uno de nosotros los oye en su propia lengua? Partos, medos y elamitas, los que habitamos en la Mesopotamia o en la misma Judea, en Capadocia, en el Ponto y en Asia Menor, en Frigia y Panfilia, en Egipto, en la Libia Cirenaica, los peregrinos de Roma, judíos y prosélitos, cretenses y árabes, todos los oímos proclamar en nuestras lenguas las maravillas de Dios”. Hechos 2,1-11

En el acontecimiento de Pentecostés rela* tado por los Hechos de los Apóstoles, se realiza, como en un signo para nosotros, el proyecto de Jesús: que todos los pueblos y todas las personas, los hijos de Dios, puedan encontrarse y entenderse, sin divisones y discordias. El servicio humilde, la centralidad de La Gruta n.457

los niños y de los pobres, la aceptación de los extranjeros como hermanos... todo lo que Jesús dijo e hizo apuntaba a la realización de este proyecto eclesial. Esta catequesis que San Lucas nos presenta en este texto, revela una manifestación de Dios a la humanidad: no es una crónica y en la lectura no podemos llenarnos de sensaciones que colman expectativas de algo mágico y poderoso. La llegada del Espíritu Santo es siempre sorprendente.

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El fuerte ruido, nos hace pensar en una llamada de atención que paraliza. En realidad es una señal de la manifestación de Dios: quienes lo escucharon sabían bien que Dios acompañaba su manifestación de esta forma.

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Cómo lenguas de fuego… no se trata de la imagen de un gran incendio. Se insiste en el término “lenguas”, como el idioma, el lenguaje, la herramienta con la cual nos entendemos. Se insiste no en la sensación visual, sino en el mensaje verdadero: “todos se entendían”.

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Preguntas ¿Piensas que entenderse con otros es muy difícil y es mejor no intentarlo? ¿Piensas que en tu familia parece que hablaran idiomas distintos? ¿Qué propuestas se te ocurren para mejorar? ¿Crees que confiar en el otro es un objetivo importante de la buena noticia de Jesús?

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Para entenderse unos a otros, se necesita la acción del Espíritu Santo. El poder entenderse, también en familia, es uno de los dones regalados por Dios a la humanidad: un don que se articula en la escucha, en el ponerse en lugar del otro, en saberlo recibir.

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punto de aislarnos porque nadie nos entiende ni tampoco nos interesa entender a los demás. Si pasa esto, estamos rechazando el don del Espíritu.

El saber recibir al otro implica estar dis* puesto a que siempre se puede aprender del otro, no caer en juicios fáciles que perjudican la comunicación. Cuando uno escucha, atiende, se deja cuestionar por el otro, se produce la maravilla de entender al que habla otro idioma. No se entiende aquí el idioma de otro país distinto: el idioma distinto lo habla quien no tuvo mi oportunidad de educación, quien, por distancia generacional, no entienden las expresiones modernas, quien no entiende el idioma a veces cerrado de los ritos, liturgia, credos, filosofías… que nos distancian y perdemos el entusiasmo de ese don maravilloso que es entenderse unos con otros.

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El saber entenderse es una forma de amar * al otro cuando deja de ser un mandamiento y se convierte en una acción del Espíritu Santo. Toda esa manifestación del Espíritu de Dios, bien recibida por los discípulos, se convierte en una salida hacia afuera para encontrarse con el otro, sin miedos de no poder entenderse. La familia cristiana no tiene miedo al otro, va a su encuentro, así como la Iglesia. Podríamos hacer el ejercicio de buscar en* tendernos cuando está difícil: dejémonos cuestionar por el que piensa distinto, por el que “habla de otra manera”, creyendo entonces que nos oxigena, nos renueva. Si mantenemos nuestro interior sin este ejercicio, podemos llegar a endurecernos tanto, al 4

T

Del Salmo 104

odos esperan de ti que les des la comida a su tiempo: se la das, y ellos la recogen; abres tu mano, y quedan saciados. Si escondes tu rostro, se espantan; si les quitas el aliento, expiran y vuelven al polvo. Si envías tu aliento, son creados, y renuevas la superficie de la tierra. ¡Gloria al Señor para siempre, alégrese el Señor por sus obras! Él mira, y la tierra se estremece; toca las montañas, y echan humo. Cantaré al Señor toda mi vida; mientras yo exista, celebraré a mi Dios: que mi canto le sea agradable, y yo me alegraré en el Señor... ¡Bendice al Señor, alma mía! ¡Aleluya! Amén.


2014 Sínodo de los obispos sobre la familia La Ig lesia: es la ffamilia amilia de J esús Iglesia: Jesús El documento final del Sínodo extraordinario sobre la familia, títula así su priemera parte que vamos a citar en estas páginas: La escucha: el contexto y los desafíos para la familia. Lo primero que debemos hacer, segun los obispos, es escuchar; antes de juzgar, escuchar: lo nuevo, lo problematico, lo positivo que se presenta a nuestra atención en tema de familia, puede ser un llamado de Dios. Necesitamos el don del Espíriru para escuchar y discernir lo que Dios nos dice.

El contexto sociocultural 5. Fieles a la enseñanza de Cristo, contemplamos la realidad de la familia actual en toda su complejidad, con sus luces y con sus sombras. Pensamos en los padres, en los abuelos, en los hermanos y en las hermanas, en los parientes cercanos y lejanos, y en ese vínculo entre dos familias que todo matrimonio teje... Hay que subrayar, ante todo, los aspectos positivos: una mayor libertad de expresión y un mejor reconocimiento de los derechos de la mujer y de los niños, por lo menos en algunas regiones. Por otra parte, sin embargo, hay que considerar también el peligro creciente constituido por un individualismo exasperado que desnaturaliza los lazos familiares y acaba considerando a cada miembro de la familia como una isla, haciendo que prevalezca, en determinados casos, la idea de un sujeto que se construye de acuerdo con sus propios deseos, considerados como un absoluto... 6. Una de las mayores pobrezas de la cultura actual es la soledad, fruto de la ausencia de Dios en la vida de las personas y de la fragilidad de las relaciones. Existe también una sensación general de impotencia ante una situación socioeconómica que a menudo acaba aplastando a las familias... Con frecuencia, las familias se sienten abandonadas por el desinterés y la poca atención que les prestan las instituLa Gruta n.457

ciones. Las consecuencias negativas desde el punto de vista de la organización social resultan evidentes: desde la crisis demográfica hasta las dificultades educativas, desde la dificultad para acoger la vida naciente hasta la percepción de la presencia de los ancianos como un peso y la difusión de un malestar afectivo que, en ocasiones, llega a la violencia... 7. En algunas sociedades aún está vigente la práctica de la poligamia, y en algunos ambientes tradicionales la costumbre del “matrimonio por etapas”. En otros ambientes, persiste la práctica de los matrimonios concertados. En los países en los que la presencia de la Iglesia católica es minoritaria, son numerosos los matrimonios mixtos y de disparidad de culto, con todas las dificultades que estos acarrean en relación con la configuración jurídica, con el bautismo y con la educación de los hijos y el respeto recíproco desde el punto de vista de la diversidad de la fe. En estos matrimonios puede darse el peligro del relativismo o de la indiferencia, pero también la posibilidad de favorecer el espíritu ecuménico y el diálogo interreligioso a través de una convivencia armoniosa de comunidades que habitan en el mismo lugar. En muchos ambientes -y no solo occidentales- se va extendiendo ampliamente la praxis de la convivencia que precede al matrimo5


nio, o incluso la de convivencias no encaminadas a adoptar la forma de un vínculo institucional. A ello se añade a menudo una legislación civil que pone en peligro el matrimonio y la familia... 8. Son muchos los niños que nacen fuera del matrimonio, particularmente en algunos países, y numerosos los que crecen después con uno solo de sus progenitores o en un ambiente familiar ampliado o reconstituido. Aumenta el número de divorcios, y no es raro el caso de decisiones determinadas únicamente por factores de carácter económico. A menudo los niños son objeto de disputa entre los padres, y los hijos son las verdaderas víctimas de los desgarros familiares. Los progenitores masculinos están a menudo ausentes, no solo por cuestiones económicas, mientras, por el contrario, se siente la necesidad de que asuman con más claridad su responsabilidad en relación con los hijos y con la familia. La dignidad de la mujer necesita aún ser defendida y fomentada. Y es que hoy, en muchos ambientes, ser mujer es objeto de discriminación, e incluso el don de la maternidad se penaliza con frecuencia, en vez de presentarse como valor. Tampoco cabe olvidar los fenómenos crecientes de violencia de los que las mujeres son víctimas... 9. Ante el contexto social que queda trazado, se detecta en muchas partes del mundo, en los individuos, una mayor necesidad de ocuparse de su propia persona, de conocerse interiormente, de vivir en mayor sintonía con sus propias emociones y con sus propios sentimientos, de buscar relaciones afectivas de calidad; tan justa aspiración puede abrir al deseo de comprometerse en la construcción de 6

relaciones de entrega y de reciprocidad creativas, responsabilizadoras y solidarias como las familiares. El peligro individualista y el riesgo de vivir en clave egoísta resultan considerables... 10. En el mundo actual no faltan tendencias culturales que parecen imponer una afectividad sin límites, de la que se quieren explorar todas las vertientes, incluso las más complejas. De hecho, la cuestión de la fragilidad afectiva es de gran actualidad: una afectividad narcisista, inestable y cambiante que no ayuda siempre a los individuos a alcanzar una madurez mayor. 11. En este contexto, la Iglesia siente la necesidad de decir una palabra de verdad y de esperanza. Hay que partir de la convicción de que el hombre procede de Dios y que, por consiguiente, una reflexión capaz de replantear las grandes preguntas sobre el significado del ser humano puede hallar un terreno fértil en las expectativas más profundas de la humanidad. Los grandes valores del matrimonio y de la familia cristiana se corresponden con la búsqueda que caracteriza a la existencia humana, incluso en un tiempo marcado por el individualismo y por el hedonismo. Es preciso acoger a las personas con su existencia concreta, saber sustentar su búsqueda, alentar el deseo de Dios y la voluntad de sentirse plenamente parte de la Iglesia incluso en quien ha experimentado el fracaso o se encuentra en las situaciones más diversas. El mensaje cristiano lleva siempre en sí la realidad y el dinamismo de la misericordia y de la verdad, que convergen en Cristo. Del Documento final del Sínodo extraordinario de los Obispos, Roma, octubre de 2014


Parábolas de HO YHOY

Cinco litros

“¿No me auxiliaría con unos cinco litros?” Muchas veces los problemas agudizan el ingenio. El noticiero de ayer advertía que este fin de semana no tendríamos suficiente abastecimiento de combustibles. La fecha es clave: fin de semana entre Navidad y primero de año. Nunca deberíamos estar sin combustible en estos días, peor en Uruguay, pleno verano y boom turístico. Es así como me acordé de lo que me pasó hace varios años en plena campaña, caminos impracticables y sin que el camión cisterna pudiera traer el combustible. Me quedé por el camino. De pronto una vieja camioneta asoma en la curva del camino. Me tranquilizo y espero. En el Impenetrable nadie deja a nadie por el camino. Siempre hay unos litros de nafta o, por lo menos, unos minutos de tiempo, combustible de la solidaridad, de la esperanza. Esa vez me salió redonda. “¿Tiene manguera?” me gritó al bajar. “¡Sí! Medio cortita, pero vemos!” “¿Así que esta vez le tocó a usted, padre?” “Es verdad. Ayer me salió un viaje medio largo y se me fueron unos litros”. La gente sabía que yo tenía unos pequeños tanques de 60 litros, pero las capillas estaban retiradas y las visitaba asiduamente. Hecha la operación ese buen vecino, que, como todos los campesinos, siempre están carburando sobre todo en épocas de lluvias, escupió ese gusto a gasoil que le había quedado en la boca y cuando le pregunté: “¿Cuánto es el gasto?” me largó uno de esos versículos que bien podrían estar en la Biblia: “¡Bueno padre! Vamos a comenzar la ‘cadena de la buena voluntad!’ Ni se lo cobro, ni se lo regalo. Cuando encuentre alguien por el camino, se lo devuelve pero no se lo regala. Le repite lo mismo. Si la cadena no se rompe, con esos cinco litros se hacen millones de kilómetros!” Me di cuenta que ese combustible fue el más fino, y el más duradero que conocí. Se extrae del fondo del corazón, por eso no se gasta, no se consume, depende solo de la temperatura del La Gruta n.457

corazón y ésta solo resiste si se enchufa en el corazón de Cristo. Pensándolo un poco se parece también al combustible de la Oración. Y fijándome bien lo encontré. El Padre Nuestro es un surtidor de este combustible… santificado sea tu nombre, venga tu reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo… El pan nuestro… perdona nuestras ofensas como nosotros perdonamos… y así también… el “no hagas a los demás lo que no te gusta que te hagan a ti…” Pensándolo bien: estamos tan endeudados con la familia, con los albañiles, con los lecheros, los escritores, con todo el mundo, que si pensamos bien todas las veces que no ayudamos estamos robando. Hasta el idioma que usamos nos pone en deuda. Es por eso que cuando “devolvía la nafta” a otro, me preocupaba de decirle que no le cobraba pero que no se la regalaba, porque no era mia y que la tenía que regalar al primero que la precisara con el mismo “versículo” bíblico. “¡Ni te la vendo ni te la regalo, te la presto para que la prestes, y a condición que la devuelvas”. Y así son las parábolas de Jesús que nos presta unos talentos y va de viaje, pero a la vuelta nos llama a rendirle cuentas. ¡No regala nada! Sería ofender al Padre que nos hizo. Él sabe que nadie es inútil. Aún los enfermos con muchas incapacidades, está allí llamándonos la atención sobre cuánto recibimos y cuánto podemos hacer y cómo suplir las discapacidades de nuestro prójimo para que su vida sea más digna y llevadera… Ya que estamos a comienzo de un nuevo año, vamos a acomodarnos los lentes y mirar para adelante: ¿cuánta nafta me dio mi madre, mi abuela, mi maestra, mi enfermera?... y ¡cuánta desfachatez para decir: ¡yo no le debo nada a nadie! Rodolfo Bonci 7


Oración por la paz a los pies de La Gruta,

NOVENA Desde el lunes 2 de febrero hasta el 10 de febrero: Novena de preparación a la Fiesta de la Virgen. 7:00 hs. Adoración y Laudes. 17:30 hs. Rosario y Misa Lunes 2 y lunes 9 de febrero de 2015 a las 19 hs. en el despacho parroquial: formación de los voluntarios del día 11.

Señor Jesús, tú guías sabiamente la historia de tu Iglesia y de las naciones, escucha ahora nuestra súplica. Nuestros idiomas se confunden como antaño en la torre de Babel. Somos hijos de un mismo Padre que tú nos revelaste y no sabemos ser hermanos, y el odio siembra más miedo y más muerte. Danos la paz que promete tu Evangelio, aquella que el mundo no puede dar. Enséñanos a construirla como fruto de la Verdad y de la Justicia. Escucha la imploración de María Madre y envíanos tu Espíritu Santo, para reconciliar en una gran familia a los corazones y los pueblos. Venga a nosotros el Reino del Amor, y confírmanos en la certeza de que tú estás con nosotros hasta el fin de los tiempos.

Programa del día 11 de febrero:

Amén.

Feliz2015

Santas Misas en el Templo: 7:00; 9:00; 11:00; 16:00; 18:00; 19:00 hs. Santas Misas en La Gruta: 8:00; 10:00; 15:00; 17:00; 20:00 hs. 17:00 hs. Santa Misa para los enfermos, con el Obispo Daniel Sturla Bendiciones comunitarias en La Gruta: 9:15; 11:30; 12:30; 14:30; 19:00 hs. Rosario en La Gruta: 9:00; 12:00; 14:00; 16:00 hs. Adoración eucarística en el Templo: de 8:00 a 18:00 Celebración del sacramento de la Reconciliación: durante todo el día 8


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