Ese camino ahuecado en tan mal estado ayer me hizo recordar un sin número de situaciones que también tuvieron que ver con el gatillante del estrés, que me ha perturbado por bastante tiempo y que son posteriores. Ya con los tres acá pequeños todo transcurría en los vehículos, pues no sé si se quedaba dormido o si se hacía pero a veces lo desperté cuando conducía porque se iba hacía las banda de seguridad o simplemente a cruzar la vía de la panamericana hacia los vehículos que venían en sentido contrario eso ocurrió algunas veces. Cuando viajábamos hacia Buenos Aires en auto de noche pues le gustaba hacerlo a esas horas en caminos difíciles la vivencia me resultó a veces casi insufrible, en esa oportunidad había que salir de la carretera y entrar a un camino en mal estado, sin pavimentar, y de pronto en la oscuridad no se sabía dónde estábamos si llegaríamos nuevamente al camino principal porque no se veía nadie ningún vehículo por la hora, creo, todo era desconocido y si miraba hacia un lado se veía agua y si mirábamos hacia el otro también parecían dos lagos y el camino de por medio situación que podría decirse que tanto es eso, pero después de todas las experiencias anteriores no era tan inofensiva. Otro viaje este al norte, aunque no sin exponerse a diferentes cosas por ejemplo alojarse a 50 o menos metros del mar, salir y dejar a los niños solos, estresante pues nadie conocido, él iba a hacer un trabajo para su Magister a Arica yo enferma el doctor me dio permiso con anticoagulantes, algunas restricciones, viajábamos esta vez en bus, pero no se puede perder esa oportunidad y quedarse sola en casa, por los niños y por conocer, allá él conocía a un ex compañero y lo invitó a su casa esto era en Iquique así que se decidió ir en avión yo intenté aguantar el miedo pues yo tenía el temor de caer al mar, no fue fácil, llegado a casa del conocido fue bastante grato pues ellos se veían muy humanos no sentía esa sensación de estar acogida por otros por mucho tiempo y además como estaba enferma me vino bien. Otro viaje al norte esta vez más cerca La Serena de vuelta ir al parque Fray Andrés era todo un panorama, pero nada es perfecto y esta vez algo más desafiante, íbamos en auto un auto station