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DE LA CANTERA, AL AULA, A LA OBRA, AL LABORATORIO DE ENSAMBLE STUDIO


por Elena Tudela Rivadeneyra

La producción de Ensamble Studio juega con diferentes elementos, tanto estéticos como conceptuales, para dar lugar a proyectos singulares que proponen a la arquitectura no sólo como creación, sino como un descubrimiento.

Ensamble Studio, oficina de arquitectura fundada en el 2000 y dirigida por los arquitectos españoles Antón García-Abril y Débora Mesa, es referencia de una práctica arquitectónica que ha trascendido las nociones convencionales de la arquitectura. Entrelaza arte y tecnología de formas inusitadas. Los arquitectos se interesan en el ensamblaje de componentes, mientras ponen al centro los procesos, desde el diseño hasta la construcción, y no a los objetos y las formas. Sin embargo, en realidad la riqueza de su trabajo va mucho más allá del acoplamiento de componentes para abordar comportamientos de tipo sistémico en constante modelación. Esto es evidente en la facilidad con la que acogen la incertidumbre y las propiedades emergentes. Así, sus procesos aparentan anular la noción de error como falla, para asumirlo como una condición sine qua non al trabajar con contextos dinámicos y complejos de tipo natural.

La práctica de Ensamble Studio conjuga la construcción, la investigación y la docencia como fórmula para la experimentación, la innovación y el aprendizaje en tiempo y escala real. Su obra es poética no sólo en los resultados finales sino en los métodos para materializarlos. Uno de los aspectos más interesantes de Ensamble Studio es su incursión en la exploración espacial al vincular conceptos aparentemente contrapuestos: ligereza y pesadez, procesos industriales automatizados y de reconfiguración del paisaje, entre otros. Operan desde una perspectiva disruptiva al plantear la utilización de materiales no necesariamente locales sino fabricados en continentes distintos por razones de tiempos, conocimiento, tecnología, empleo y costos. Cuestionan el modelo arquitectónico tradicional de producción y consumo que distingue al diseñador del constructor: al cliente, el propietario y el ocupante, por ejemplo, operando en ocasiones sin cliente o convirtiéndose en ocupantes. Por otro lado, su relación con los materiales de construcción no proviene de catálogos sino de conocer su origen, y de ahí su preferencia por materiales de la tierra, pétreos o que aceleran y sintetizan procesos de tipo geológico.

Los proyectos de Ensamble Studio se podrían situar en un gradiente en cuyo extremo se pueden ubicar aquellos construidos in situ, con materiales naturales y resultados altamente desconocidos o inciertos. Éste es el caso de la La Trufa en Costa da Morte, Galicia (2010), uno de los proyectos más reconocidos y de impacto por la integración del paisaje, procesos basados en la impresión tridimensional y su resultado poético. También se sitúa aquí Ca’n Terra en Menorca (2020), una cantera que vuelven habitable con poca intervención, demostrando que la arquitectura no sólo se crea, sino que se descubre. Un ejemplo más es el Tippet Rise Art Center en Fishtail, Montana (2022), de morfologías y materiales de aspecto primitivo para entrar en simbiosis con el paisaje extraordinario del sitio.

Cuestionan el modelo arquitectónico tradicional de producción y consumo que distingue al diseñador del constructor; al cliente, el propietario y el ocupante […], operando en ocasiones sin cliente o convirtiéndose en ocupantes.
Ensamble Studio, La Trufa, Costa da Morte, 2010. Cortesía de Ensamble Studio.
Ensamble Studio, Tippet Rise Art Center. Fishtail, Montana , 2015. Cortesía de Ensamble Studio.
[…] la riqueza de su trabajo va mucho más allá del acoplamiento de componentes para abordar comportamientos de tipo sistémico en constante modelación.

Al otro extremo, se pueden reconocer proyectos construidos off site bajo procesos industrializados y prefabricados des-territorializados, para ser www.ensamble.info | Instagram @anton_ensamble re-territorializados y ensamblados posteriormente de manera rápida y precisa en el sitio. El proyecto más reconocido es la Casa Hemeroscopium, concluida en Madrid en 2008, en la que se prefabricaron y aprovecharon siete estructuras monumentales en una secuencia definida por un estudio de apoyos y fuerzas estructurales, generando una espacialidad doméstica rica y única. Entre los proyectos que se ubican en este lado del espectro de automatización está también Studio Valdés en Madrid, desarrollado en 2004, proyecto que le da un giro a un espacio industrial para convertirse en espacio museístico.

Ensamble Studio, Studio Valdés, Madrid , 2004. Fotografías © Roland Halbe. Cortesía de Roland Halbe Fotografie.

El trabajo de Antón García-Abril y Débora Mesa genera narrativas innovadoras de coproducción entre naturaleza y sociedad poco comunes y muy necesarias en la actualidad, además de suscitar preguntas nuevas que deberían informar el rumbo y rediseño de la arquitectura misma en el futuro.


www.ensamble.info | Instagram @anton_ensamble


Elena Tudela es licenciada en Arquitectura por la Facultad de Arquitectura de la UNAM y maestra en Arquitectura en Diseño Urbano por la Graduate School of Design de la Universidad de Harvard. Es candidata al Doctorado en Arquitectura por la UNAM, y profesora y tutora en la misma institución. Cofundó la Oficina de Resiliencia Urbana ORU, centrada en diseño urbano con énfasis en infraestructuras hídricas, paisaje y espacio público. Fue co-curadora del Pabellón de México en la 17a Muestra Internacional de Arquitectura de la Bienal de Venecia 2020-2021. En 2023 fue aceptada como académica de número en la Academia Nacional de Arquitectura Capítulo Valle de México.

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