Fundadora de la primera universidad

Fátima al-Fihri (800-880) fue una mujer musulmana nacida en Kairuán (Túnez), apodada Umm al-Banín, sus orígenes se remontan a los descendientes de Uqba bin Nafie al-Fihri, el fundador de la ciudad. Es una figura histórica inmortal en la memoria de la ciudad de Kairuán en Túnez, la ciudad de Fez en Marruecos y en la historia de estos dos países.

Fundó con su hermana Maryama al-Fihri la universidad de Al-Karaouine en Fez (Marruecos), en el año 859, que es considerada la universidad más antigua del mundo. Fátima murió al rededor del año 245 d.h. (desde la Hégira) y 878 d.c.

Su legado continúa hasta hoy ya que la universidad Al-Karaouine sigue siendo una institución importante actualmente.

Tachihante

Soy Layla, de Marruecos, y vivo en Madrid. Soy madre de Sahar.

Tengo una licenciatura en informática, me gusta leer novelas y escribir cuentos y artículos (sobre todo en árabe).

A una mujer: mi luz

Mujer de sueños y anhelos mujer de genio y estampa mujer de muy altos vuelos, mujer de limpia mirada.

Serás esposa y amante, unas veces desgarrada, otras, desconcertante y las más, apasionada

Serás madre sin recato, madre hasta las entrañas, de las que gritan: ¡lo mato! a quien a tu hijo daña.

Sólo podrás ser tan ardiente como mujer, madre y esposa, siendo personas diferentes o como tú, una diosa.

A una mujer: mi viento

Es como un ciclón que a su paso todo arrasa, pero no destruye, sólo pasa imponiendo su razón.

Es como un huracán que llega formando un muro, donde esconde su hogar para guardar a los suyos.

Es como un tifón que, en continuo movimiento, remueve en su corazón la mar de sus sentimientos.

Es como un tornado que sopla impetuoso para apartar de su lado lo que no le es animoso.

Cómo acercarme un poco, para explicar lo que siento al ser que me ha vuelto loco, si no es mujer, que es viento.

A una mujer: mi jardín

¿Con qué te lavas la cara, que huele a rosa y jazmín?

No, no tires la toalla con la que tu cuerpo secaste que quiero empaparme de ti. Porque tu olor es para mí un aromático perfume de romero y alhelí, de jacintos y azucenas, de dalias y azaleas, de violetas y verbenas, que convierten tu recuerdo en mi íntimo jardín.

¿Con qué te lavas la cara, que huele a rosa y jazmín?