LA DIETA CETOGÉNICA La dieta cetogénica está basada en la ingesta de escasa cantidad de hidratos de carbono. También se la denomina la “dieta de triglicéridos de cadena larga”. Provee 3 a 4 gramos de grasa por cada gramo de carbohidrato y proteína. Los alimentos fuentes de grasa de la dieta cetogénica son la mantequilla, la crema de leche o nata, mayonesa y aceites, que son alimentos extremadamente yin. Esto se hace para forzar el estado metabólico de un organismo, y lo que sucede a partir de aquí, no lo puede controlar nadie, porque un organismo no es una máquina, cuyo mecanismo funciona siempre con un mismo resultado. Esto se podría asegurar si los factores fuesen siempre los mismos. Pero a un organismo vivo no se le puede aplicar este patrón de funcionamiento, ya que la vida orgánica y los metabolismos tienen infinitas posibilidades que intervienen en su desarrollo y adaptación. Sabemos cómo surgen los síntomas en los pacientes y cómo cambian según se combinan los diferentes alimentos, la temperatura o, incluso el estado mental de cada uno. La vida es un misterio tan complejo que no podemos dar soluciones fijas a un tipo de respuestas metabólicas. El que lo intenta denota que desconoce la verdadera naturaleza de un organismo vivo, porque sus reacciones siempre están condicionadas por estar en permanente cambio y, si se desconoce lo que puede suceder, no se puede aplicar el “a ver que sale”, pues es una acción un tanto irresponsable. Por eso, no se pueden hacer previsiones de qué va a suceder cuando aplicamos este tipo de dieta, porque la química de un ser vivo está sujeta a la naturaleza o la conciencia o designio divino —como le queramos llamar—, más que a un funcionamiento mecanicista. Por eso, es tan complicada la
Medicina Tradicional China y contradictoria algunas veces, porque no hay leyes fijas.
Particularmente, es menos fiable la objetividad de los que estudian la química del cuerpo, a la hora de aplicar una dieta, que la idea de instaurar un equilibrio natural por el propio organismo, dejando que él se autogestione, según los principios de la propia naturaleza de cada uno. Estos conceptos se basan en la necesidad de conocer o entender cómo funciona un organismo y utilizar lo que sabemos. Se basan en lo mismo que pasa hoy día en el planeta: hay que limpiarlo para darle la oportunidad de que se autorregenere. Nosotros no tenemos el poder de curar a nadie, pero sí podemos propiciar un buen medio para que se dé el equilibrio. El motivo de esta exposición es por la pregunta de una amiga de ¿cómo se trata el cáncer con la dieta cetogénica?Una vez sabemos lo imprevisible que es la dieta cetogénica, ahora entendamos qué es el cáncer. Creo que el cáncer ya lo hemos comentado alguna vez, desde una visión holística, es un caos que se origina en un organismo al confluir varios factores desequilibrantes: alimentos o medicinas inadecuados, fallos en procesos fisiológicos, quizás -o casi seguro- temas emocionales, bloqueos energéticos, etc. Y lo que se necesita es llevar la luz de la comprensión para entender la vida de otra manera, y así poder empezar a limpiar y ayudar a modular las energías -que no son contempladas por la medicina convencional-, para que se pueda intentar instaurar el orden de la naturaleza o el orden del universo en nuestro propio cuerpo. Pero esto es solo una opinión muy particular, ya que cada uno debe tener la suya propia, y aunque yo crea que esta es la razón por la que se origina el cáncer, quizás otros tengan